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La ética la he estado buscando en el aula, y ¡no la he encontrado!

Enviado por armando barraza


  1. Resumen
  2. Introducción
  3. Bibliografía

Resumen

El autor nos hace una atenta invitación a todos y cada uno de nosotros, para ir al maravilloso mundo que es la Ética (Del lat. Ethicus, recto, conforme a la moral). Y moral (Del lat. Morallis, ciencia que trata del bien en general, y de las acciones humanas en orden a su bondad o malicia). Y esta se relaciona con el hombre, en esta ocasión, nos enfocaremos directamente en el estudiantado y profesorado en al ámbito educativo a nivel superior, y nuestra meta es tratar de llegar a una educación educativa de alta calidad tanto presencial como a distancia, con diferentes reflexiones, analíticas, con un enfoque literato-didáctico, con la gran ayuda de los grandes historiadores pedagogos, filósofos, pensadores e historiadores. Vamos a iniciar procesos a través de acrósticos, de mapas mentales, mapas conceptuales, de la historia, con coraje, con entusiasmo, con asombro, con cariño, con valentía, con interés, con mucho amor y sueños, para poder llegar a la meta que es la cima. Hoy en día, me es muy difícil ver con claridad la ética en la universidad, en los pasillos, y en el aula, creo que si vale la pena luchar por rescatar la ética, sabemos que nuestras creencias, costumbres y aptitudes tan arraigados que n os han hecho tanto daño, para poder llegar a tener una educación de alta calidad a nivel superior presencial y a distancia. Las ideas y pensamientos del autor están integrados con los grandes pedagogos, filósofos, científicos e investigadores, etcétera, etc.

Palabras claves.

Ética- valores.

Sabiduría-inteligencia.

Creencias-costumbres.

Introducción

Hoy en día, no es fácil vivir con la Ética, puesto que sobreabunda la arrogancia, el altivez, la soberbia y todo esto nos induce a una crisis somática, cuerpo, mente y cognitivo a tal grado que el hombre cada día quiere ser más poderoso, y el dinero mal ganado, nos ha llevado a actuar en este pleno S. XXI como si fueranos unas personas no pensantes, como si nomas estuviera trabajando los dos cerebros.( que son el cerebro reptiliano y el cerebro mamífero), y dejamos atrás; a un lado, como si estuviera sumergido el cerebro humano (donde radican los dos hemisferios tanto el derecho como el izquierdo)ahí está la sapiencia, la luz, la inteligencia, el discernimiento ,la cordura, la prudencia, la mansedumbre, el dominio propio, la capacidad de decir un *no* cuando hay que decir no, y un *si* cuando hay que decir si, la templanza, la paciencia, los valores, el amor puro, y un cerebro limpio y un corazón sincero, ahí radica la verdadera amistad es decir cuando podemos decir tu si eres mi *amigo*(a)etcétera, etc.

En este momento viene a mi mente: a Hipócrates, a Esculapio, a Heráclito de Éfeso, a Sócrates, a Platón, a Aristóteles, a Caprio, a. Vasconcelos, a Vygotsky, a Piaget, a Novak, a Ausubel, a Morín, y a Rita Levi Montalcini, etcétera, etc., Ahora bien viene un fragmento de la *Carta de Esculapio para su hijo* (martes 23 de diciembre de 2008) fragmento extraído del Internet

Te verás solo en tus tristezas, solo en tus estudios. La conciencia de aliviar males te sostendrá en tus fatigas, pero dudarás si es acertado hacer que sigan viviendo hombres atacados por un mal incurable, niños enfermizos que ninguna probabilidad tienes de ser felices.

Este fragmento nos habla que todo aquel (lla) quiera ser médico va a pasar por este proceso tan amargo, vamos a llorar en nuestro silencio, en nuestras soledades, por ser insuficientes, incapaces de poder vencer a la muerte misma, nos vamos a sentir pero que un gusano, que no sabemos nada, que sufrimos, y seremos unos ignorantes, ineptos, incompetentes y hasta mediocres respecto en el saber. Aquí la ética es fundamental, es un pilar de nuestra existencia, y me pregunto: ¿Qué nos está pasando? ¿Por que actuamos como si no existiera la ética? Tanto el estudiante como el profesor (a) en el aula, no se aplica la ética, o como si se aplicara, y es como se dice parece que *existen cortinas de humo* ¿Por qué nos hemos olvidado de la Ética? De la rectitud, se servir, de comunicarnos.

Nos hemos olvidado de tener misericordia, de la honestidad, de sonreír, de ayudar al prójimo. ¿Por qué? Nos hemos desintegrados, fragmentados, nos hemos hecho más perezosos mentalmente, físicamente y somáticamente, más apáticos, más conformistas, más aislados.

Nos ha gustado que nos gobiernen los cerebros (el reptiliano y el mamífero) ¿Por qué? Si tenemos todas las herramientas necesarias para llegar hasta la cima, tenemos más de cien mil millones de neuronas, para poder elaborar red de redes sinápticas respecto a la lectura, a la escritura, a la reflexión analítica e critica, para la intelectualidad, etcétera, etc.

Me vuelvo a preguntar ¿por qué? El hombre a través de la su historia, se ha dejado manipular por el sistema reptilico y el sistema límbico, y la Ética, no ha estado en todo su esplendor ante el individuo, la misma sociedad. Hoy en día reina la violencia, la soberbia, la arrogancia, la altivez, la vanidad, la imprudencia, el desamor y todo aquello que le antaña al hombre. ¿Hacia donde vamos? ¡No lo sé! ¿Qué es lo que tenemos que hacer? En primer lugar hay que reflexionar, pero una reflexión profunda analítica e critica por unos minutos, y preguntarnos: ¿Por qué nos está pasando estas cosas? ¿Qué nos está pasando? Si tenemos todas las herramientas didácticas, todas las facultades mentales, físicas y somáticas para poder iniciar los procesos que sea necesarios, para poder educar al cerebro, a la menta y a nuestro cuerpo.

Entonces por qué no, iniciamos, necesitamos tener fe, pero esa fe, que nos invita a trabajar, a accionar, a movernos, a dejar a un lado la resistencia al movimiento, a unificar la teoría con la práctica, a ser oidores y hacedores. Me pregunto y les pregunto lectores, profesores, estudiantes, ¿se podrá? Podremos llegar a hasta la cima, o seguiremos en la sima. Que lamentable seria, que sigamos en la sima, y no querer salir de esa brecha, de esa caída, y no querer levantarse para iniciar el caminar con un solo propósito de llegar hasta la cima.

Haciendo un alto, me pongo a reflexionar, y en los once años que llevo como profesor a nivel licenciatura, he detectado, y percibido que los estudiantes cursan con tres cambios de personalidad, por ejemplo al iniciar el semestre están muy calladitos, tranquilos, observando cualquier movimiento que hace el profesor, y van pasando varias semanas, y se quieren hacerse amigos del maestro(a), y algunos siguen continúan sin hablar, como que llevan una doble personalidad, y al prefinal de semestre empiezan a cambiar, ellos son otros, es decir nada en su memoria esta solamente el numero , es decir nada más pasar, ha , y quieren su diez.

Y, yo, percibo que no les interesa aprender, reflexionar, entender, comprender y discernir, no quieren ligar la enseñanza con el aprendizaje.

Mis interrogantes son, ¿Dónde hemos deja a la Ética? ¿Por qué, no, somos sinceros? ¿Por qué para todo nos justificamos? Y me vuelvo a preguntar: ¿Dónde está la ética? ¿Por qué todo lo separamos, lo fragmentamos?, y lo más triste es que no, lo ligamos, lo que me interesa a mí, como estudiante ¿acaso nada más me interesa pasar la asignatura? Sin importar si aprendí, si integre la enseñanza con el aprendizaje.

¿Por qué? seguimos de: perezosos, apáticos, comodines, conformistas, deshonestos, enfermizos, y de no estudiar, de no reflexionar, de no ser analíticos, y me vuelvo a preguntar: ¿Que nos pasa? Y no me puedo contestar, ¡la verdad no lo sé!

Es muy lamentable, y en mi, hay una tristeza, como si estuviera en ¡agonía! Porque no soy honesto, y no lo encuentro. El tenía la costumbre de traer consigo una lámpara en su mano y estaba encendida siempre de día y de noche. Y me hace recordar, que hoy en día, no encontramos a la Ética, ni en la casa, en la calle, ni en el aula, no la percibo. ¿Qué necesitamos para encontrarla? ¿Qué necesito yo? Para que yo la encuentre, o ¿acaso debe de venir la ética a mí?

Resumiendo:

Creo que necesito, y necesitamos todos y cada uno de nosotros leer a:

Is.11:2.

Y reposara sobre él,

El Espíritu de Jehová,

Espíritu de sabiduría e inteligencia,

Espíritu de poder y consejería,

Espíritu de conocimiento y temor a Jehová.

Y así tendremos amor, mansedumbre, ¡asombro! Justicia y por supuesto a la Ética.

¿Será acaso un sueño de su humilde servidor? Usted que dice lector(a) estudiante y maestro de los cuatro vientos. Y como dice el autor de este artículo:

*Sembremos en el desierto de los cuatro vientos, ha empezado a llover*

(Barraza).

Aquí el autor del pensamiento anterior, nos hace una atenta invitación, a que sembremos en el desierto, es decir que no, nos dejemos vencer con ningún obstáculo que se venga encima, en cualquier nivel, ya sea en casa, en el aula, en la sociedad, con los mismos estudiantes, con los profesores, que si tenemos caídas, tengamos la valentía, la osadía de levantarnos de esa caída. Que no hagamos caso a los chismes, a las quejas ajenas, a los comentarios que nada mas nos perjudican, a la pereza, a la apatía, al conformismo, a la des disciplina, a la no puntualidad. Y que no, nos dejemos vencer hay que sembrar la palabra que edifica, que fortalece, y que sea a los cuatro vientos, es decir a través del Internet, podemos publicar artículos, monografías, tesinas, proyectos científicos, tesis, acrósticos, mapas mentales, mapas conceptuales, ensayos literato-d didáctico, etcétera, etc.

No hay que olvidar a los grandes hombres ilustres, que de alguna manera u, otra nos han empujado a seguir adelante, entre ellos vamos a mencionar algunos: Heráclito de Éfeso, Los Vygotsky, Ausubel, Piaget, Presocráticos, Sócrates, Platón, Aristóteles, Eusculapio, Hipócrates, Tales de Milete, Leonardo Da Vinci, Miguel Ángelo, Carpio, Vasconcelos, Novak. Morín. Rita Levi Montalcini, etcétera, etc.

Y por ultimo dice la frase que ha empezado a llover, esto quiere decir, que ya empiezan verse los frutos, tarde o temprano, tiene que haber frutos, Hemos estado trabajando aproximadamente seis anos, y, ya empiezan a verse los primeros frutos.

Creo que estriba en no dejarse vencer, venga lo que venga, aunque exista estar vientos contra mareas, hay que estar luchando día tras día, digan lo que digan los demás, no hay que olvidar , que existió, existe y existirá la envidia, la soberbia, los complot, que existen los grupos pequeños, que se encasillan entre ellos mismos, para que nadie entre , que no permiten que otros avancen, que nada mas ellos quieren avanzar, todo lo fragmentan, lo separan, y, no luchan por ligar, por integrar, por agrupar, siempre con la simplicidad, la voracidad entre ellos mismos, y me pregunto ¿Dónde está la Ética? No la encuentro, no la veo, ni siquiera la percibo. Usted lector (a), estudiante y profesorado de los cuatro vientos ¿le pasa igual que a mí? O solamente a mí, nada más.

Bibliografía

Rodríguez Víctor Matías. (2005). Pedagogía integradora. México. Editorial trillas.

Sacristán J. Gimeno (2002). La pedagogía por objetivos. México. Editorial Morata.

Sejourné Laurette. (2003). Pensamiento y religión en el México antiguo. México. Editorial Fondo de Cultura Económica.

Vygotsky Lev. S. (2006). Pensamiento y lenguaje. México. Ediciones Quinto Sol.

 

 

Autor:

Armando Barraza Cuéllar

Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.

México.

Médico-docente.

Maestría en: Docencia Biomédica.

edu.red

Médico (docente- investigador y escritor) e literato-didáctico y pedagogo.