- Concepto
- Riesgos
- Barreras
- Cercas
- Resguardo superior
- Muros o murallas
- Garitas o torres de observación
- Barreras perimétricas
- Grados de restricción
- Áreas restringidas
- Fuentes de información
Concepto
La protección física de instalaciones consiste en la aplicación de diversas medidas que se diseñan y se adoptan para preservar a una instalación incluyendo los bienes, materiales, documentos y personas que en ella se encuentran. Esta preservación está orientada con el propósito de evitar la destrucción total o parcial de la instalación, la intromisión de personas no autorizadas, la fuga de informaciones o documentos de vital interés, pérdida de objetos o materiales por efectos de robos y hurtos, acciones de sabotaje, etc. Estas acciones pueden ser conducidas por agentes de inteligencia enemiga, ladrones, espías, personal descontento, elementos subversivos, etc.
La destrucción total o parcial de una instalación o ciertos daños o pérdidas que en ella puedan ocurrir, también pueden ser causadas por efectos de la acción de elementos naturales. Es decir, pueden ocurrir como consecuencia de un terremoto, una inundación, un incendio, un huracán, un sismo, etc.
Riesgos
Son condiciones o actos que pueden poner en peligro la seguridad o integridad física de una instalación incluyendo las personas y efectos materiales que en ella se encuentran. Al materializarse estos riesgos pueden producirse daños o pérdidas de materiales, equipos, documentos y cualquier otro aspecto de interés para la organización.
Los Riesgos a los cuales está expuesta una instalación se pueden clasificar en Riesgos Naturales y Riesgos Artificiales.
a) RIESGOS NATURALES: Son condiciones que al materializarse, pueden poner en peligro la seguridad e integridad física de una instalación incluyendo las personas, bienes y efectos materiales que en ella se encuentran, causando daños y pérdidas como consecuencia de los efectos producidos por elementos o fenómenos naturales tales como: terremotos, huracanes, condiciones extremas de frío o calor, etc.
b) RIESGOS ARTIFICIALES: Son actos que al ejecutarse pueden poner en peligro la seguridad e integridad física de una instalación incluyendo las personas, bienes y efectos materiales que en ella se encuentran, causando daños y pérdidas como consecuencia de los efectos producidos por la acción directa del hombre, tales como: sabotajes, robos, hurtos, espionaje, disturbios civiles, actividades subversivas, incendios provocados (sabotaje), etc. En esta clasificación de riesgos podríamos incluir aquellas situaciones que se originan de la negligencia, omisión, descuido, falta de mantenimiento, etc. Ocasionadas involuntariamente por el hombre así como el incumplimiento de las medidas de protección de manera efectiva por parte de los miembros que integran la fuerza de guardia, constituyéndose en deficiencias de seguridad por ende vulnerabilidad que permiten aumentar las posibilidades de riesgos.
Barreras
Son elementos naturales o artificiales que se emplean como medidas de protección física para resguardar instalaciones o determinadas áreas impidiendo o retardando de manera general la entrada de intrusos que tengan básicamente la intención de causar daños o sustraer cualquier material, documento o información de importancia para la instalación; comprometiendo así su seguridad.
En la mayoría de los casos las barreras solo cumplen la función de retardar el acceso, de intrusos a un área o instalación permitiendo que la fuerza de guardia pueda actuar a tiempo para detectar y aprender al intruso.
Las barreras solamente impiden el acceso de intrusos en aquellos casos cuando los mismos no disponen de los recursos y entrenamiento necesario para traspasar estos obstáculos.
Las barreras se pueden clasificar en Barreras Naturales y Barreras Artificiales.
a) BARRERAS NATURALES: Están representadas o constituidas por elementos naturales del terreno, tales como: montañas, ríos, acantilados, desiertos, etc. Normalmente las barreras naturales no constituyen una medida de protección eficiente por si sola, sino que generalmente necesitan el apoyo de barreras artificiales y humanas representadas por la fuerza de seguridad para causar un máximo efecto de disuasión sobre los intrusos que pretendan penetrar la instalación por entradas no autorizadas; es decir, cuando una instalación se apoya en un río como barrera natural para obtener protección física y el intruso dispone de los medios y el entrenamiento necesario para cruzar el río; una vez logrado este objetivo se le facilitaría el acceso a la instalación sino existen las barreras artificiales y humanas mencionadas anteriormente para apoyar el efecto de la barrera natural
b) BARRERAS ARTIFICIALES: Están representadas por elementos estructurales diseñados y construidos por el hombre para impedir o retardar la entrada de intrusos a una instalación o área determinada; tales como: cercas, murallas o muros, garitas o torres de observación, etc. En muchas ocasiones estas barreras pueden estar apoyadas de barreras animales como perros amaestrados o de algunos dispositivos de alarmas que permiten alertar a la fuerza de guardia cuando hay la presencia de intrusos o han violado las barreras.
Cercas
Las cercas constituyen barreras artificiales construidas formando estructuras metálicas que se emplean para retardar o impedir la entrada de intrusos, brindando a la vez protección física a una instalación o a un área determinada.
Normalmente existen tres (03) tipos de cercas, a saber:
Cerca eslabonada.
Cerca de alambre de púas.
Concertina.
A. CERCA ESLABONADA: Las cercas están diseñadas y construidas formando una malla o red de eslabones que se entrecruzan. Para la construcción de las mismas normalmente se utiliza el alambre de espesor Nº 11 o mas grueso. Su altura no debe ser menor de 2,15 mts; sin tomar en cuenta el resguardo superior. Los agujeros de la malla tendrán 25 cm2. En la parte superior deben llevar un borde de alambre torcido, bien estirado y fuertemente atado a postes rígidos de metal empotrados en hormigón. La cerca puede llegar a 5 cm; de distancia de un suelo duro o pavimento y en terreno suave puede llegar mas debajo de la superficie con una profundidad suficiente que permita compensar la protección con el terreno o arena movediza. Este tipo de cerca tienen la característica de ser las mas permanente, las mas usuales y reflejan mejor presencia.
B. CERCA DE ALAMBRE DE PUAS: Las cercas de este tipo normalmente se construyen con alambre de púas orriente, torcido y de doble hilo. Se puede emplear alambre de púas de espesor Nº 12, el cual tiene púas afiladas de cuatro puntas espaciadas con 10 cm de separación. La altura de la cerca no debe ser menor de 2,12 mts; sin tomar en cuenta el resguardo superior. Igualmente deberá estar sujetada firmemente a postes metálicos o de madera que no tengan mas de 1,80 mts de separación. La distancia entre hileras de alambre no debe exceder de 15 cm de separación. En aquellos casos donde la cerca también esta destinada a impedir la entrada de animales pequeños, la hilera inferior debe quedar a nivel del terreno para evitar que estos pasen por debajo del alambre, y la separación entre hileras será de 5 cm en la parte de abajo, aumentando gradualmente hacia la parte superior hasta alcanzar un máximo de 15 cm de separación entre hileras.
Este tipo de cerca actualmente no es usual en los conglomerados sitios industriales y en las ciudades, debido a que las púas representan un gran peligro cuando las cercas están al borde de las aceras, ya que podrían ocasionarle heridas a los peatones que en ningún momento tengan la intención de penetrar a la instalación por un lugar no autorizado, para ocasionar daños o sustraer cualquier material u objeto de su interés.
C. CERCA DE ALAMBRE DE PUAS: La cerca tipo concertina esta formada por rollos de alambre de púas de acero de alta resistencia y son prensados a intervalos formando un cilindro de 15 mts de largo y 90 cm de diámetro, que pesa 25 Kgr aproximadamente.
Este cilindro se puede colocar y usar rápidamente aprovechando su elasticidad. Para aumentar la altura de esta cerca de concertina será necesario colocar los cilindros que sean necesarios, uno encima del otro hasta alcanzar la altura deseada. Para ello también será necesario utilizar unos postes de metal o madera a lo largo de la cerca para sujetar los cilindros de alambre de púas.
La concertina rara vez se usa en instalaciones en forma permanente debido a que no es agradable a la vista así como también estorba el mantenimiento del terreno. En algunas ocasiones es utilizada como un recurso temporal cuando se ha producido una brecha en el cercado normal o bien cuando es empleada como una barrera temporal, mientras se construyen las barreras permanentes o se adoptan otros sistemas o dispositivos de protección.
La altura de todas las cercas descritas anteriormente puede aumentar gradualmente y ello estará en función de acuerdo a la importancia de la instalación o el área que se pretende resguardar.
Resguardo superior
Las cercas verticales a simple vista parecen no presentar mayor dificultad para el intruso que tenga intenciones de traspasarla, es por ello que se requiere construirles una protección adicional en la parte superior, bien sea en cercas interiores o exteriores. Esta protección adicional esta representada por el resguardo superior, el cual esta formando por un salidizo de tres o cuatro hileras de alambre de púas que van sosteniendo por varios brazos metálicos espaciados a lo largo de la cerca orientados hacia arriba y hacia fuera de la instalación formando un ángulo de 45º. También debe abarcar la parte superior de las puertas que se encuentran a lo largo de la cerca.
Normalmente este resguardo superior tiene una altura de 40 a 50 cm por encima del borde superior de la cerca vertical.
El resguardo superior también puede ser construido por un salidizo doble de tal manera que sobresalga hacia el interior y el exterior de la instalación formando una "V".
En la actualidad existen diferentes modelos y tipos comerciales de resguardo superior utilizados en muros, rejas y cercas.
Existe un resguardo superior tipo concertina, el cual esta formado por cuchillas afiladas de acero inoxidable, las cuales son mas efectivas que el alambre de púas. Normalmente este tipo de resguardo superior se puede utilizar en cercas eslabonadas, techos, etc.
Muros o murallas
Los muros o murallas constituyen una barrera artificial construida en mampostería los cuales permiten, además de impedir o retardar la entrada de intrusos, evitar la observación directa hacia el interior de una instalación o área determinada.
Los muros o murallas no deben tener una altura menor de 2,15 mts de alto y se le puede colocar el resguardo superior construido de alambre de púas de la misma manera como se le coloca a una cerca eslabonada.
Un método optativo pero menos satisfactorio para impedir que el muro sea escalado, consiste en incrustar, en el borde superior, pedazos de vidrios rotos a todo lo largo del muro. Donde se use este método, la altura mínima del muro debe ser de 2,60 mts. En los muros también se puede utilizar el resguardo superior tipo concertina de cuchillas afiladas descrito anteriormente como también el resguardo superior formando por una base de concreto prefabricada con puntas afiladas de acero que van incrustadas en dicha base.
Garitas o torres de observación
Las garitas o torres de observación constituyen una barrera artificial utilizada como apoyo de otras barreras artificiales, que permiten aumentar el alcance visual durante las horas del día y en la noche con la luz artificial. En este tipo de barrera normalmente se combina una medida activa con una pasiva. La medida pasiva esta representada por la garita propiamente dicha y la medida activa esta representada por el miembro de la fuerza de guardia que presta vigilancia en la misma.
Cuando hay mucha neblina, oscurecimiento total u otras condiciones adversas de visibilidad, las garitas pierden gran parte de su efecto ya que se restringe el campo visual del vigilante. En este caso, la acción de vigilancia u observación se debe complementar con la observación directa en el terreno mediante patrullaje o puestos fijos de vigilancia.
Psicológicamente, por una parte, la simple altura de la garita y del observador produce un efecto enervante que tiende a debilitar la iniciativa y la acción de cualquier intruso debido al temor que pueda existir en él de ser descubierto por el vigilante que se encuentra en la garita. En cambio, por otra parte el aislamiento que normalmente tiene la garita o torre de observación, tiende a reducir la efectividad de la acción de vigilancia por parte de su ocupante debido al poco celo y preocupación que pueda poner de manifiesto durante las horas de vigilancia. El hombre tiende a descuidarse produciéndose una deficiencia y a la vez una vulnerabilidad de seguridad.
Barreras perimétricas
Las barreras perimétricas están constituidas por elementos naturales o artificiales que definen los límites físicos o el perímetro de una instalación o área protegida.
a. Crear un medio disuasivo físico o psicológico hacia aquellas personas que intenten o tengan la intención de penetrar a una instalación o área determinada, en forma no autorizada.
b. Demorar o retardar la penetración a una determinada área o instalación, ayudando así a los miembros de la fuerza de guardia a descubrir y aprender los intrusos.
c. Facilitar la utilización eficaz de la fuerza de guardia, logrando con ello una economía de esfuerzos en lo que se refiere al número de hombres a utilizar.
d. Canalizar la circulación de personas y vehículos a través de entradas o puertas de acceso que hayan sido autorizadas.
e. Delimitar áreas de estacionamiento y áreas restringidas ubicadas fuera o dentro de los edificios que conforman a la instalación.
f. Determinar los límites externas de toda instalación.
Dependiendo del grado de protección que se requiere en una instalación, se puede diseñar y construir cercas dobles separadas una de otra a una distancia prudencial, formando así una barrera perimétrica que garantiza un mayor grado de protección.
Grados de restricción
Es factible que en todas las áreas que conforman una instalación, exista un grado de importancia visual o estratégica y por lo tanto requerirá de un mismo grado de restricción y control, en lo que a protección se refiere. Sin embargo, en la mayoría de los casos es muy común que en las instalaciones existan áreas que por su importancia y por las actividades que en ellas se realizan y por los bienes materiales que allí se encuentran, requieren de la aplicación de diferentes medidas de protección y control. Esta situación existente en las instalaciones trae como consecuencia que se originen diferentes grados de restricción a la vez van a originar los diferentes tipos de áreas restringidas.
Áreas restringidas
Son aquellas áreas cuyo acceso y movimiento dentro de las mismas está sujeto a ciertas restricciones o medidas de control especial por razones de seguridad. Se establecen con el propósito de resguardar los bienes y materiales exclusivos o clasificados que allí se encuentran, así como proteger las actividades que, de vital importancia para la organización en ella se realizan.
Las áreas restringidas se clasifican en:
a) Área de exclusión
b) Área limitada
c) Área controlada
A) ÁREA DE EXCLUSIÓN: En un área restringida donde existe un interés de protección de tal magnitud e importancia que al ocurrir un acceso a esta área por parte de personas no autorizadas, equivaldría a un acceso a los intereses de seguridad que allí se quiere lograr o al mismo material que se encuentra en dicha área.
En este tipo de área es donde se establece el máximo grado de restricción.
También puede denominarse así a un área que contiene intereses de seguridad de tan vital importancia que la simple aproximación a la misma por parte de una persona no autorizada, representaría el acceso a los mismos intereses de seguridad o a los materiales y bienes que allí se encuentran.
Normalmente en estas áreas se manejan documentos e informaciones de vital importancia para la seguridad y defensa de un país o bien de vital importancia para una organización.
B) ÁREA LIMITADA: Es un área restringida donde existe un interés de protección, en la cual el movimiento no controlado de personas, permitirá el acceso a este interés de protección. Sin embargo, se puede evitar el acceso al material que allí se protege, mediante el uso de escoltas y otras medidas de control interno.
C) ÁREA CONTROLADA: Es un área restringida que normalmente está ubicada en un lugar adyacente a un área limitada y en donde las medidas de control para el acceso a la misma son menos limitadas; es especial para el Personal Autorizado cuyo movimiento necesariamente no es controlado, debido a que esta área no provee el acceso a los intereses de protección ni a los materiales documentos e informaciones que existen y se manejan en las áreas limitadas y de exclusión.
Sin embargo, por el hecho de ser un área restringida, esta sujeta a ciertas medidas de seguridad.
Fuentes de información
Guía de Estudio elaborada por el Lic. Juan Haroldo Zamora, Experto en Seguridad y Protección Física de Instalaciones, VENEZUELA.
Autor:
Edgar Tovar