- Gringo Viejo: Análisis macroestructural
- La identidad
- La enunciación en Gringo Viejo
- Obras de Carlos Fuentes
- El Boom Hispanoamericano
- Concepto
- Origen
- Características
- Realismo mágico
- Bibliografía
Introducción
En el presente trabajo se analiza la obra "Gringo viejo" desde dos perspectivas: un análisis macroestructural y un análisis superestructural.
La primera línea de análisis supone el desarrollo de los temas que componen esta obra, no como un resumen de éstos, sino estableciendo de qué manera son abordados los mismos, teniendo en cuenta principalmente lo simbólico, es decir qué puede interpretarse a demás de lo dicho (connotación) en cada enunciado.
También se tendrá en cuenta el simbolismo de cada personaje, a qué se deben sus nombres, que asociaciones corresponde a cada uno de ellos, etc.
La segunda línea de análisis corresponde a la ENUNCIACIÓN del discurso a lo largo de la obra, ya sea desde lo referente a deícticos, modalizadores, subjetivemas, uso de los tiempos verbales, adverbios, discurso referido, etc. ó desde lo que hace a un texto literario como discurso ficcional, connotativo, plurívoco, polisémico, autorreferencial e intertextual.
Cualquiera sea el punto de análisis, se presentarán ejemplos que lo justifiquen.
Al finalizar el análisis de esta obra se expondrá una reseña acerca del autor y el movimiento literario de ese contexto histórico-social.
Gringo Viejo: Análisis macroestructural
La novela "Gringo viejo" presenta, desde un punto de vista macroestructural, una extensa variedad temática, aunque el tema capital de la obra es, en sí mismo, LA MUERTE; a partir de ésta, se desprenden otras categorías como LA REVOLUCIÓN, LA IDENTIDAD, LA FRONTERA, LA TIERRA, LA PALABRA, EL PODER, EL ORGULLO, LA FIGURA DEL PADRE, EL HOMBRE, LA MUJER, LOS DOS MUNDOS, EL PAÍS, etc.
LA MUERTE: El capítulo II comienza con una frase concreta sobre este tema:
"- El Gringo viejo vino a México a morirse".
El retrato ficcional de Ambroise Beirce – Gringo viejo- ha cruzado la frontera entre su país de origen (EE.UU) para buscarse una muerte digna ya que enfermarse o caerse por una escalera sería patético para él.
El personaje reafirma su intención en el capítulo VIII, donde inicia un tiroteo contra Los Federales, enemigos de Pancho Villa, del cual sale ileso: "– No es muy difícil ser valiente cuando no se tiene miedo a la muerte"; o por ejemplo, lo que pronuncia en un diálogo con Harriet Winslow: "– Ser un gringo en México, eso es eutanasia".
El tema de la muerte, como hemos dicho, se relaciona con otros, uno de ellos es La Revolución Mexicana.
En este contexto se hallan el Gringo viejo y Harriet Winslow como dos espectadores de una barbarie, intentando comprender de qué se trata La Revolución:
"[.]: La revolución es una gran familia, todos andamos juntos, lo importante es seguir adelante, yo dependo de Villa como si fuera mi padre y dependo de ustedes como si fueran mi familia: todo puede esperar, menos ganar esta guerra"
"– No sé si el gringo y la señorita Harriet se dieron cuenta de que la revolución era ese remolino que arrancó a los hombres y a las mujeres de sus raíces y los mandó volando, lejos de su polvo quieto y de sus viejos cementerios y de sus pueblecitos recoletos – dijo el coronel Frutos García mirando hacia las aguas veloces y turbias del Río Bravo del Norte".
Ese remolino es el que cambia todo de lugar, los sentimientos, las ideas, los destinos, etc.; la definición que nos da Frutos García de la revolución es concisa, irrefutable, y también lo es el modo en que lo dice: "arrancar de las raíces".
Un ejemplo de lo dicho es el del capítulo XIII:
"Pero habían hombres nuevos, inseguros del suelo que pisaban. Eran los prisioneros que ahora se habían pasado a las fuerzas de Villa, contentos de llegar a una población y de hacerse de nuevos amigos".
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