Evo Morales, dos años antes, durante y dos años después de asumir el poder

2. Introducción
3. La hoja de coca símbolo de unidad para la lucha
4. Evo dos años después del triunfo en las urnas
5. Conclusiones

Resumen

Los auotres de este artículo se han inspirdado en la personalidad de Evo Morales por la modestia que lo caracteriza. Cuando se redactó la primera parte del presente trabajo en el 2005 faltaban dos años para las elecciones generales de Bolivia, pero no se conocía que figuraría como candidato en la misma; él tenía prestigio suficiente para donarle a cualquier candidato de la derecha, fuera quién fuera, porque representaba una causa justa en defensa del pueblo de Bolivia y en especial a los explotados, a los campesinos y a las capas más humildes de la sociedad.

Introducción

Evo gozaba del apoyo del pueblo, que lo veía como su líder, los querían y apoyaban por su gran autoridad moral ganada en la lucha, a la vanguardia de los campesinos, lo que lo hicieron el hombre más popular en Bolivia y el líder absoluto de la gran mayoría de los bolivianos. A esa popularidad y ese liderazgo él les hacía evasión, pues nunca practicó el triunfalismo, como arma para ganarse la confianza del pueblo, esta confianza se la ganó, en su duro batallar junto a ellos y enfrentándose a los explotadores, a los gobernantes corruptos, a los enemigos de los obreros, los campesinos y de todos los humildes.

Dos años antes de ganar las elecciones generales, escribí un artículo denominado la hoja de coca símbolo de unidad para la lucha en este caracterizaba la lucha llevada a cabo por Evo Morales y su humilde y revolucionario pueblo. Caracterizaba su grandeza moral, política, de dirigente y conductor que emergía y que ya era temido por el imperialismo que ya maniobraban para desaparecerlo físicamente al no poderlo comprar ni sobornar.

En esta época sólo se enfrentaban al imperialismo en América Cuba y Venezuela a los que no pudo doblegar, pero no concebían que otro país se liberara en lo que ellos consideraban su traspatio y que Estados Unidos de Norteamérica a través de la organización de Estados Americanos (OEA) había convertido a los países de la región en una comunidad de colonias de EEUU, como metrópoli.

Es en este difícil contexto histórico que surge la figura de Evo Morales y su heroica lucha al lado de su pueblo.

Dessarrollo

La hoja de coca símbolo de unidad para la lucha

Un joven líder cocalero, Evo Morales, estremeció a Bolívar preocupó al Gobierno de los Estados Unidos convencido de que el hambre y la miseria es la mejor arma para organizarse y resistir.

No los dicen los políticos. Ellos son casi ignorantes. cuando les conviene. Más de 7 mil investigaciones realizadas a escala mundial reafirman que consumir la hoja de coca es beneficioso para la salud humana. La universidad de Harvard, radicada en los propios Estados Unidos, expresa en un estudio minucioso, que es un alimento importante. Tal vez esto lo desconozcan los aymaras, que solamente saben que es buena para mitigar el hambre.

Bolivia es un pequeño país donde sus habitantes lloran cuando ven el mar. Su población sufre los impactos de una recesión que agudiza los problemas económicos disminuyendo los empleos y los salarios e incrementando los indicadores de pobreza a niveles que no parecen tener solución. En ese panorama complejo surge Evo Morales, Líder del Movimiento al Socialismo (MAS) que provocó un ascenso del movimiento indígena y popular en las elecciones presidenciales celebradas en el año 2002.

Sin utilizar encuestas, directores de campañas políticas y maquillistas para dar una imagen agradable a los televidentes, el Movimiento al Socialismo, estuvo a punto de ganar las elecciones en el país mediterráneo de América Latina, teniendo como principal oponente, al propagandista y embajador de Estados Unidos ante la paz, el señor Manuel Rocha, quién dijera sin ningún recato, que no quería a Evo como presidente de Bolivia. Tremenda herejía.

Evo Morales, nacido en Orinoco, comunidad indígena aymara, no tiene ojos azules, son negros. Su pelo no es rubio, es color azabache. No es blanco, es indio. Millonario en miseria acumulada desde los 12 años de edad cuando tenía que recorrer con su padre el altiplano para buscar alimento para su familia. No había dinero para estudiar.

Fue en la dictadura de García Mesa, cuando ocurre un hecho que le trazó el camino de su vida: a un compañero aymara lo acusaron de narcotraficante injustamente y lo quemaron vivo. Él no entendió. Pensaba entonces que los gobernantes y políticos estaban para proteger a la población. Decide entonces pelear contra la dictadura, el neoliberalismo, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial y se convierte en líder. Hasta la fecha no han podido vencerlo.