El nuevo éxodo será una actualización de la lucha divina, pues el primero había sido la lucha de YHWH contra el caos.
Interpreta a Is 51, 12-16 como una purificación de la ideología de Israel, pues este busca un Dios poderoso que aniquila a sus enemigos, que permita descubrir a un Dios que ama y que por encima de todo quiere otorgar una nueva existencia al pueblo elegido. Así YHWH se presenta como el Señor que trasciende cielo y tierra, pero lo hace sin recurrir a la mitología de una lucha divina. El núcleo esencial del nuevo éxodo es: Yo soy tu Dios y tú eres mi pueblo; es el cambio de la imagen de un YHWH-guerrero a una de YHWH-Consolador; un pastor que cuida de su pueblo; el shalom irrumpe en Sión transformando el mundo. Argumenta esta idea con Is 52,9; 52,10.
Según nuestro exegeta, el mensaje del profeta está en abierta antítesis con la tradición el primer éxodo, ya que el nuevo éxodo no será huida de unos prisioneros o esclavos, sino una procesión pacífica y festiva.
A la tercera parte dedica mucho menos espacio, sigue con la exégesis en la línea del nuevo éxodo interpretando Is 51,4 como la creación del nuevo Israel "en el desierto" de sus sufrimientos que será la encarnación de la Torá para todos los pueblos. Lee a Is 60,1- 62,7 como reelaboración de Is 40-55. Los pueblos que en otros tiempos acosaron a Israel con espadas y lanzas trabajan ahora como campesinos y viñadores para el pueblo de Dios (60, 10.14; 61,4-5)
La nueva Jerusalén es el lugar donde YHWH hará brotar la justicia para que los pueblos contemplen y digan: ¡Así es Dios!, aunque esto sea solo una visión profética, el mismo YHWH se ha propuesto hacerlo realidad, así leemos en Is 62,1-2. Hace una crítica de la tradición y/o de la redacción afirmando que en la última etapa de la redacción del siglo III a.C., se recurre de nuevo a la tradición del éxodo para esbozar una celebración escatológica en la que el Dios del éxodo se manifestará como rey bueno del Sinaí-Sión; relee Is 24,23; 25,6-8 a la luz de Ex 19; 24 para unir los temas de la gloria de YHWH en el monte Sinaí y la visión del banquete de los ancianos en el monte.
Según esto, el juicio de YHWH que recae sobre todos los pueblos del mundo como presupuesto de la universalidad de la salvación , no será la aniquilación , sino el reconocimiento de YHWH y la conversión. La revelación de YHWH como Dios del éxodo, (…) se propone establecer una alianza de paz con todos los pueblos mediante el ejemplo vivo de Israel.
1) SIMIAN- YOFRE[2]
El autor ofrece una visión distinta sobre el DtIs; difiere de los que atribuyen al mismo el pretendido tema del "nuevo éxodo", por lo tanto, está en posición opuesta a E. Zenger. Para ello recurre al estudio de la imaginería y el vocabulario de los textos, lo que arrojó un resultado negativo, es decir, el "nuevo éxodo" no sería el tema tradicionalmente pretendido. Esto lo realiza en otro artículo[3]de manera que el presente artículo es la continuación del anterior.
De entrada Simian-Yofre afirma que el tema del nuevo éxodo no tiene la importancia que frecuentemente le es atribuida y se pregunta si habrá otra imaginería y teología detrás de dichos textos. Intenta responder a la pregunta organizando el artículo en dos partes, más un esquema de las expresiones más peculiares y los textos a los cuales remiten, que sirve como punto de partida.
En la primera parte desarrolla el horizonte teológico-literario del DtIs analizando los temas más frecuentes, a saber: el enemigo, el héroe, la lucha, y la abundancia. Para ello ofrece un análisis literario detallado de los temas/palabras en su etimología hebrea, su conexión con mensajes de otros profetas y el resto del Antiguo Testamento. También rastrea en otros textos bíblicos el sentido teológico de los mismos, a esto llama el horizonte teológico de los motivos/temas detectados. Esto es posible porque es legítimo hablar de asociación de motivos, aunque los textos analizados parezcan independientes entre sí y provengan de diferentes medios.
En la segunda parte desarrolla la teodicea del Deuteroisaías sosteniendo que detrás de las múltiples insinuaciones del texto (…) se encuentra una problemática homogénea y desarrollada. El DtIs ha enfrentado una situación compleja, delicada, difícil; pues si vive en la época del exilio y el primer post-exilio –la mejor hipótesis según nuestro autor- se vio en la necesidad de apoyar al pueblo desalentado, derrotado, desanimado y en duda, que busca consuelo. De ahí que es más fácil tener ánimo cuando todo es futuro. El único mensaje y/o argumento convincente en esta situación es que "YHWH puede actuar"! por lo tanto, "creo en la providencia", "YHWH está con nosotros"
La teodicea del DtIs recurre a todos los argumentos conocido por Israel hasta ese entonces:
YHWH es más fuerte que las potencias cósmicas, divinizadas o desacralizadas
YHWH es un Dios activo, fuerte y poderoso, que no duerme, revestido de poder, un guerrero que viene en ayuda de su pueblo
YHWH saca a la batalla su propio ejército a favor de los suyos que manifiesta su poder en tierra de aridez o frente a las corrientes de aguas poderosas
YHWH es un Dios generoso, que da con abundancia
YHWH es pastor de su pueblo.
Simian-Yofre afirma que liberándonos de la necesidad de interpretar los textos deuteroisaianos con las lentes de la hipótesis del "nuevo éxodo", aparece la riqueza de connotaciones y desaparecen no pocas dificultades exegéticas. De esta manera afirma aún más su explicación "alternativa" o liberada.
Concluye convencido de que el DtIs está dominado por la necesidad de convencer a su pueblo: ¡YHWH sigue siendo su Dios poderoso! Y en esto se ve el fundamento de posibilidad de toda consolación. Esta perspectiva unifica el texto. Se suma a la aceptación generalizada de que el libro en cuestión contiene la visión religiosa más universalista y abierta hacia el futuro de todo el AT.
Segunda Parte
¿Cuáles son las imágenes de Dios que se reflejan en Is 40-55?
Las "imágenes" de Dios que reflejan los textos son variadas. La misma formulación ya habla de esta realidad. Zenger reúne estas imágenes dentro de la iconografía del nuevo Dios del nuevo éxodo. Simian-Yofre hace algo distinto, presenta las imágenes liberándose del cuadro contextual del "nuevo éxodo".
Presentamos a continuación las variadas imágenes que presentan los textos; omitiremos las citas de los capítulos y versículos para brindar un panorama. Veamos que se nos aparece:
YHWH se presenta como Consolador, que tiene una mano poderosa, con gloria y palabra que permanece por siempre. Es un juez poderoso que sojuzga todo, que viene con el salario; es también el Pastor que trata con delicadeza a su rebaño. YHWH es tan grandioso que no tiene comparación. Está sentado sobre el orbe de la tierra, aniquila a los tiranos.
Es el Santo, Creador de la tierra, que no se cansa ni fatiga, de inteligencia insondable. Es el Primero y el Ultimo. Es el Dios de Israel, que está con su pueblo y le infunde valor; lo ayuda, es su Redentor, es nada más y nada menos que el Santo de Israel. Es YHWH un Dios que responde, que no desampara, solamente EL es Dios, el resto es Nada.
YHWH es que el que crea los cielos y da el aliento al pueblo; pero también es un Guerrero que sale con bravura y furor contra sus enemigos. Es el Salvador de Israel, es el Rey . Es un Dios justo que pronuncia palabra verdadera, ante quien se doblará toda rodilla y jurará toda lengua. Es el que anuncia las cosas que han de suceder y lleva a cabos todos sus planes. Es el Dios que vengará a Israel y nadie podrá impedirlo.
Es el Dios que se ocupa de la causa de su pueblo y de su trabajo. Es el que rescata a Israel y es leal. YHWH rescata a los pobres de su pueblo y se ha compadecido de ellos. No defrauda a los que esperan en El. YHWH Sebaot es su Nombre. Defensor de su pueblo. Va al frente y cierra la retaguardia de su pueblo. Es el Esposo de Israel, su hacedor; es el Dios de toda la tierra cuyo amor nunca pasará. Es el Santo que perdona a su pueblo y se compadece de él. YHWH es distinto del hombre, sus pensamientos no son los de los hombres.
Conclusión
Después de la lectura de los artículos que proponen distintas ópticas para leer al Dt Is; Zenger de tinte más "tradicional" con sus matices y Simian-Yofre que parece enmarcarse dentro de la crítica literaria y narratológica, intentamos esbozar algunas ideas. Si bien ninguno habla explícitamente de sus escuelas, la lectura entre líneas deja entrever a dos escuelas exegéticas.
Como se pudo apreciar, las distintas "imágenes" que recogimos de los textos son de una compleja riqueza, que van desde el Consolador hasta el Guerrero que grita con furor y bravura pasando por el Pastor y Rey de Israel que es único en Gloria y Poder, dueño de toda la tierra. Esta visión global o panorámica nos hace ver la posibilidad de leer estas imágenes tanto dentro de la matriz del "nuevo éxodo" como desde otras perspectivas como lo hace Simian-Yofre. Una cosa es clara: se trata del mismo y único Dios de Israel que crea algo nuevo y recrea la fe de su pueblo.
El trabajo fue bastante interesante y es una buena introducción para realizar lecturas más atentas de los textos proféticos, ya que nos ponen en evidencia la no simplicidad de la "imagen" de Dios que tenemos, hemos aprendido y quizás estamos enseñando a otros. Al ir a los textos, los resultados no son simplificaciones empobrecedoras sino complejas riquezas que invitan a ser descubiertas.
Autor:
Edgar Amado D. Toledo Ledezma, op
Presentado a: Dr. Gabriel Marcelo Nápole, op
Cuarto año
Buenos Aires
2008
PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATOLICA ARGENTINA
SANTA MARIA DE LOS BUENOS AIRES
FACULTAD DE TEOLOGIA
[1] ZENGER, E. El Dios del éxodo en el mensaje de los profetas. El ejemplo del libro de Isaías. Concilium 209 (1987) p.36,. A partir de aquí, se pondrá en cursiva las citas textuales del artículo mencionado
[2] SIMIAN-YOFRE, H. La teodicea del Deuteroisaías. Bíblica 62 (1981) pp. 55-72. Desde aquí en adelante pondremos en cursiva las citas textuales del artículo.
[3] Bíblica 61 (1980) 530-553, citado por el mismo autor
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