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Historia de una hija de desaparecidos y de búsquedas? (página 2)


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Durante largo tiempo, los abuelos paternos de Clara, con quienes se crió, la protegieron de toda esa Historia, de su propia Historia y de todo ese dolor.

Pero a los 18 años rompió esa especie de isla de protección que le habían formado sus abuelos y quiso saber quiénes habían sido sus padres.

Clara Petrakos tiene una licenciatura en Ingeniería Química, un marido, dos hijos, y una casa en Martínez.

Desde hace un tiempo junta datos para saber dónde y con quiénes puede estar Victoria. Y desde hace un par de años decidió usar como recurso de búsqueda Internet y en especial los e-mail, y además figura en la página Web de "Nunca Más".

Clara colocó en su e-mail varias fotos, dos de sus padres (María Eloísa Castellini y Constantino Petrakos 1976), otra propia en la cual dice "soy Clara y te busco", y un recuadro sin imagen y con un signo de interrogación en el centro y con la inscripción "El 29 de abril cumplís años".

Clara tiene la esperanza de que haciendo circular su foto y la de sus padres, Victoria pueda reconocer el parecido y animarse a resolver su pasado.

Cuando piensa en su hermana siempre busca a alguien parecido a sus padres o a ella.

No es algo que haga frecuentemente, pero cuando va por la calle, en tren o en colectivo, a veces mira a alguien y dice: ¿será?, se parece bastante… No lo puede evitar, después no la encara, pero se hace mucho la cabeza.

Algunas veces se pone a pensar si no vivirán a pocas cuadras de distancia ¿y si alguna vez no se han cruzado?

Comenta que es muy positiva, que tiene muchas esperanzas de encontrar a su hermana.

Clara relata que el 11 de noviembre de 1976, al mediodía -Clara tenía nueve meses-, Eloísa fue secuestrada a la salida de "El Palomo en libertad", el jardín de infantes donde trabajaba.

La subieron en un auto y la llevaron a su domicilio; allí estaba María Alejandra Castellini, hermana de Eloísa, cuidando a Clara. En ese entonces, Eloísa tenía veintiún años, y cuatro meses de embarazo.

Llegó a las ocho de la noche a su casa con lastimaduras y señales de haber sido torturada. La tuvieron encerrada, esperando, el grupo de tareas quería que llegara Constantino para llevárselos a ambos, y mientras tanto mientras hacían tiempo se dedicaron a romper todo y saquear la casa.

Fueron diez horas… durante todo ese tiempo Eloísa no quiso acercarse a su beba. No pudo hacerle una caricia, no pudo despedirse de su hija, temía que si los militares veían que Clara era su hija se la llevaran también.

Clara hace años que intenta reconstruir el nacimiento de Victoria.

Fue encontrando piezas. Y éstas decían que Eloísa, su madre, fue llevada al Pozo de Banfield: allí, según testimonios de mujeres sobrevivientes, cinco meses más tarde dio a luz.

Un detenido y sobreviviente (Gustavo Caraballo) escuchó el parto y le contó a Clara que, como esa noche el médico de Banfield, Jorge Bergés, no estaba, fueron a secuestrar a un médico para que atendiera a su madre y lo liberaron a la mañana siguiente. Clara busca, aun hoy, a ese médico.

También le dijeron que durante el parto sus compañeros de detención le daban ánimo a Eloísa y que fue asistida por una compañera de calabozo (Patricia Utchansky) que sabía algo de enfermería y cortó el cordón umbilical con un cuchillo de cocina que le dio un guardia.

Su hermana Victoria fue robada por un oficial minutos después de haber nacido. Clara estima, también por testimonios, que la fecha de nacimiento fue entre el 8 y el 12 de abril de 1977.

Adriana Calvo, otra detenida que luego fue liberada, le contestó a Clara que días después se encontró con Eloísa, la cual ya no tenía a su hija. Por relatos sabe que su madre pasaba las horas sacándose la leche para que no se acumulara y no doliera, aunque ese dolor, al lado del otro, era casi inexistente.

Después de la desaparición de sus padres Clara se fue a vivir con sus abuelos paternos en Salta, allí los Petrakos tenían un almacén, una vida de pueblo y una historia triste sobre las espaldas. Un "exilio interno".

Clara comenta: "Mis abuelos y mi padre estaban en dos mundos distintos, imagino que para ellos todo lo que pasó habrá sido un shock. Deben haber tenido mucho miedo. Y todo ese miedo, y ese no entender lo que pasaba, de alguna forma me lo transmitieron".

La historia de sus padres.

Constantino Petrakos llego de Grecia a los tres años, fue a vivir a Orán (Salta), y a los seis años fue enviado a un colegio pupilo en Buenos Aires, la ciudad donde luego estudio Geología y donde transcurrió buena parte del resto de su vida. Maria Eloisa, en cambio, era de Las Heras (provincia de Buenos Aires), tocaba deliciosamente el piano y estudiaba Agronomía.

No queda claro cuando y cómo se conocieron, pero si se sabe que, a los veinte años, Maria Eloisa tuvo a Clara.Nueve meses después, Eloisa desapareció y Constantino se fue del país, para desaparecer más tarde. De ese buen tiempo solo quedan fotografías.

En esa época nadie sabía de la existencia de Victoria, la familia se entero del nacimiento cuando, entrada la década del 80, la ex detenida Adriana Calvo les contó que Eloisa había dado a luz en cautiverio.

Sin embargo, toda la información le fue llegando a Clara, en cuenta gotas. Sus abuelos inclusive le pedían que si alguien le preguntaba por sus padres ella respondiera que murieron en un accidente.

Clara recién supo que tenía una hermana a los diez años. En ese momento (1986) hubo una causa judicial en la que fueron encontradas tres partidas de nacimiento formadas por Jorge Bergés, el médico que trabaja en el Pozo de Banfield, se pensó que una de esas tres chicas podría ser Victoria.

Más allá del episodio judicial, Clara no solía hablar con nadie sobre su historia. La primera vez que se animó fue en un recreo del colegio, a los diez años. Juntó fuerzas y le contó todo a una amiga, esa fue la primera vez que logró contarle a alguien que sus padres estaban desaparecidos, y que tenía una hermana que no sabia donde estaba.

Clara cambió cuando conoció a Pablo, su actual pareja. Ella siempre vivió con sus abuelos paternos hasta entrada la adolescencia, pero a los dieciséis su abuela murió y quedo cuidando a su abuelo, de noventa y tantos años. Ella se sentía bastante sola, hasta que conoció a Pablo y de algún modo ahí, cuando empezó a sentirse bien, necesitó también investigar su historia.

A los veintiún años, Clara inició la búsqueda oficialmente. Se acercó a la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo y se fue enterando de que había varios otros hermanos buscando chicos nacidos en cautiverio.

Ahí le entregaron material con distintos casos ya resueltos o sin resolver, empezó a leer y se dio cuenta que en los primeros pasos que se dieron, los casos que se resolvieron la familia tuvo una participación muy activa, así que se dijo, "Si quiero encontrar a mi hermana tengo que meterme en la búsqueda de verdad".

Sobre la mesa del living, apenas iluminadas por una luz tenue, están las únicas fotos que Clara tiene sobre su historia: en una esta su madre, Eloisa, dándole la teta con un gesto delicado y profundo. Hay otra de su padre, Constantino: un hombre de rasgos fuertes que mira la cámara con saco y corbata. Clara tiene las cejas de su padre. Unas cejas que ahora no enfatizan demasiado, que miran con un dolor tranquilo, suavizado por los años.

Teniendo en cuenta que el menosprecio y el desconocimiento de los Derechos del Hombre han originado actos de barbarie dolorosos para la conciencia de la humanidad; y que se ha proclamado como la aspiración más elevada del hombre, deberíamos generar el advenimiento de un mundo en que los seres humanos, liberados del temor y de la miseria, disfruten de la libertad de la palabra y de la libertad de creencias y por supuesto, también, saber quienes somos.

Agradecimiento a la colaboración de Clara Petrakos.

Bibliografía

CONADEP; Nunca más; Buenos Aires; Eudeba; 1984.

Duhalde Eduardo Luís; El Estado terrorista Argentino, quince años después, una mirada critica; Buenos Aires; Eudeba; 1999.

Izaguirre, Inés; "La Política de la memoria y la memoria de la política en Argentina" en Razón y Revolución; Nº 4; Buenos Aires; 1998; pp. 69-79.

Quiroga Hugo y Teach César (compiladores); A veinte años del golpe, con memoria democrática; Homo Sapiens; 1996.

Información sobre la búsqueda de Clara

http://www.causapopular.com.ar/article875.html

http://www.pagina12.com.ar/2000/00-09/00-09-11/pag12.htm

Sitios de Internet

http://www.abuelas.org.ar./

http://www.desaparecidos.org/familiares/

http://www.madresfundadoras.arg.ar/

http://www.nuncamas.org/

 

José Daniel Garcia

Argentina, Buenos Aires. Noviembre del 2007

ALUMNO DE SEGUNDO AÑO DE PROFESADO DE TERCER CICLO DE EGB Y DE LA EDUCACIÓN POLIMODAL

EN GEOGRAFÍA

CON TRAYECTO EN CIENCIAS SOCIALES

INSTITUTO SUPERIOR DE FORMACIÓN

DOCENTE Nº 34 "PROF. HÉCTOR J. MÉDICI"

EL PALOMAR –

PROVINCIA DE BUENOS AIRES

2007

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