Régimen Constitucional del Municipio en Bolivia (1994 – 2004)

Nociones sobre la formación del municipio (comuna)

La Comuna o Municipio, tiene sus antecedentes históricos en los tiempos más remotos del desarrollo de la humanidad, ya que en la época primitiva las agrupaciones humanas conformadas a través de la horda, la gens y la tribu, éstas tenían un carácter esencialmente nómada, vale decir que acostumbraban trasladarse de un punto a otro, viéndose determinados por las urgencias y necesidades de caza y pesca, así como el pastoreo de rebaños, siendo por tanto sus viviendas sumamente eventuales y transitorias; así por ejemplo se construían cabañas simples de troncos y hojas, o tiendas particulares con pieles de animales, de modo que eran fácilmente desmontables para el traslado inmediato, que en ese tiempo era constante.

Sin embargo, aún en éste tipo de agrupaciones transitorias y numerosas, surgieron una serie de relaciones de vecindad impulsadas principalmente por la necesidad del intercambio de productos y servicios, así como el requerimiento de condiciones mínimas de salud para todos, educación, alimentación, recursos de subsistencia, higiene común de los miembros de la colectividad, y otros que fueren necesarios. De ahí que cuando posteriormente las sociedades humanas se hicieron sedentarias, tendieron a organizarse en un espacio geográfico determinado, estableciendo su territorio y límites, asentándose en el lugar con la construcción de viviendas que tenían mayor estabilidad que las antiguas cabañas y tiendas, por lo que las relaciones de vecindad entre los habitantes del lugar (que se convirtió en aldea, villa o ciudad) también se fueron acentuando en la medida del incremento de las necesidades comunes, dado que los mismos habitantes sintieron la urgencia de la implementación de una serie de servicios de carácter público e inmediato.

Por tanto, éstas relaciones de vecindad y la necesidad común de servicios públicos para la satisfacción de demandas generales sobre el aprovisionamiento de alimentos, la ubicación adecuada de las viviendas, la comodidad y amplitud de las edificaciones, la organización de calles y/o plazas en las aldeas, villas o ciudades, determinaron la formación de organismos e instituciones de gobierno que de forma inmediata y con un alcance local, se ocupen exclusivamente de atender todos estos aspectos, dando lugar así a la formación de la comuna o municipio. Por consiguiente, se puede definir a la comuna o municipio como aquella agrupación humana formada por la asociación de numerosas familias establecidas en un determinado lugar geográfico, y que se unen o vinculan por el requerimiento de la satisfacción inmediata de necesidades imprescindibles surgidas de las relaciones de vecindad, mismas que son producto de ciertas urgencias a ser atendidas impostergablemente dentro de la vivencia humana colectiva[1]

Breves antecedentes históricos del municipio

Las relaciones de vecindad, siempre existieron entre los grupos humanos que se fueron conformando desde épocas muy antiguas, dado que el hombre nunca existió como ente único y aislado, y por su parte la comuna o municipio como institución clara y perfectamente determinada, apareció en determinadas épocas históricas.

Así por ejemplo en Grecia, no se advierte la existencia de la municipalidad como tal, porque en ésa época el Estado se encontraba reducido al ámbito de la ciudad o "polis griega", por lo que las necesidades emergentes de las relaciones de vecindad de los habitantes del territorio estatal, eran atendidas y satisfechas precisamente por esa entidad política, no habiéndose detectado la necesidad de un municipio, como entidad local distinta del Estado.

Por otro lado en Roma sucedía algo similar, dado que la población se desenvolvía como "civitas" pura, es decir como una ciudad-Estado, por lo que las necesidades de vecindad, a pesar de las ardientes luchas entre patricios y plebeyos, eran posibles de satisfacer dentro de esa ciudad-Estado, es decir por la "civitas", no siendo necesaria la existencia del municipio, mismo que recién hizo su aparición cuando se produjo el crecimiento poblacional y la absorción de las regiones inmediatas, en donde existían también una serie de ciudades-Estados, que políticamente tenían que ser unificadas por Roma, dando lugar a un enorme crecimiento y expansión territorial. De ahí que en Roma, entre los funcionarios que pertenecían al Estado, y que debían atender las necesidades de esa entidad colectiva en constante crecimiento, existían algunos funcionarios especiales denominados "ediles", cuya atribución esencial era precisamente atender el cuidado local de la ciudad que gobernaban, así como la provisión de alimentos y los artículos indispensables para la vida de los habitantes de la "civitas", siendo dichos funcionarios el origen de la institución municipal actual.