- Biografía de María Teresa
- Retratos de María Teresa
- Retratos de Maya
- Cabezas
- Figuras biomórficas
- Mujeres sentadas
- Telones
- Otras pinturas
- Fuentes
Biografía de María Teresa
1934. Cuando Olga, esposa de Picasso, fue informada por un amigo que su marido tenía una amante y que esperaba un hijo de ella, inmediatamente dejó a Picasso y se trasladó al sur de Francia con su hijo Paulo.
1935. El 5 de septiembre nació la hija de María Teresa y Picasso en Juan les Pins en el sur de Francia, y fue llamada María de la Concepción.
1936. Su relación con María Teresa terminó cuando Picasso, se enamoró y la reemplazó por su siguiente modelo y amante, Dora Maar. En una de sus tardes en los Cafés de Saint Germain, Eluard le presentó a una muchacha de pelo negro y hermosos ojos verdes. Lo hizo a petición del propio Picasso, quien se interesó por aquella joven de rostro delicado, serio e intranquilo, iluminado por sus ojos.
– Picasso necesitaba una vez más, el cambio. Aunque había luchado tanto por verse a escondidas con Marie-Thérèse, y la tenía ya en su casa, empezó a fatigarle nuevamente la vida hogareña, los lloros de su hijita, la rutina cotidiana. Ni ella ni Maya podían calmar sus angustias ante la guerra civil española. Necesitado de paz, mandó con su madre a aquella mujer que tanta devoción le había tenido y, aunque siguió viéndola de cuando en cuando, regresó al ambiente bohemio con sus amigos surrealistas, Paul Eluard y su nueva mujer Nush, que había sustituido a Gala.
– María Teresa con Maya se trasladó a Le Tremblay-sur-Mauldre, a 25 kilómetros de Versailles , a donde Picasso iba algunos días de la semana a visitarlas y a jugar con su hija.
1938. Maya también modeló para algunas de las pinturas de su padre, como en Maya con muñeca. Maya le inspiró varios de los más tiernos retratos al malagueño.
1955. Murió Olga en París. Picasso nunca le concedió el divorcio para evitar la división de su patrimonio, aunque vivieron separados desde 1934.
1977. Murió María Teresa ahorcándose, el 20 de octubre, cuatro años después de la muerte de Picasso. Fue amante y modelo de Pablo Picasso desde 1927 hasta 1935, y la madre de su hija, Maya Widmaier Picasso.
Retratos de María Teresa
María Teresa acodada. 1939 Óleo sobre lienzo, 65 x46 cm.
María Teresa con guirnalda. 1937 Óleo sobre lienzo
María Teresa con boina verde
María Teresa sentada con sombrero. 1937 Óleo sobre lienzo, 46 x38 cm.
María Teresa con boina roja y abrigo de piel. 1937 Óleo sobre lienzo, 61 x46 cm.
María Teresa con sombrero rojo
María Teresa con sombrero sentada. 1937 Óleo sobre lienzo, 100 x81 cm.
Retratos de Maya
Maya con muñeca. 1938 Óleo sobre lienzo, 75 x60 cm.
Maya con barco. 1938 Óleo sobre lienzo, 61 x46 cm.
Maya con niño y caballo.
Maya con juguete y sombrero
Maya con delantal y barquito
Niña con corona y barco. 1939, Óleo sobre lienzo
Cabezas
Mujer con birrete rojo. 1934
Cabeza de fauno. 1937-38 Óleo sobre lienzo, 55 x46 cm.
Cabeza de fauno. 1937-38 Óleo sobre lienzo, 76 x56 cm.
Figuras biomórficas
Mujer dormida 1932 Tras la fase marcadamente clasicista de principios de la década de 1920, en la que Picasso experimentó con las formas tradicionales de la imagen y con los temas clásicos, a partir de 1926 se observa en su obra una tendencia absolutamente nueva. La equilibrada belleza de sus figuras sufre una metamorfosis y evoluciona gradualmente hasta dar lugar a cuerpos monstruosos, deformes y fragmentarios como los que aparecen en la serie Bañistas de verano de 1927, para cuya corporalidad Picasso recurrió a dos modos de representación diferentes. Por un lado pintó cuadros en los cuales los cuerpos parecen incrustarse en la superficie, como si las diferentes partes no perteneciesen a un todo plástico y orgánico, sino que se alinean sucesivamente. Por otra parte, Picasso desarrolló formas marcadamente plásticas, las cuales, sin embargo, se unían en un todo desproporcionado y hasta muy deformado en muchos casos.Esta tendencia, observable también en la escultura picassiana se une en la pintura con una materialidad extraordinariamente sugestiva que produce la impresión de una suave sensualidad, aunque en otros casos simula una materia dura, como piedras o huesos. Picasso experimenta en el cuerpo y, además de integrar en su representación ideas analíticas relacionadas con su estructura interna, trata de expresar- y aquí radica el carácter específicamente surrealista de sus cuadros de aquella época-sensaciones, deseos u ¡y proyecciones vinculadas al cuerpo femenino, y, sobre todo, a su irradiación sexual,
Mujer en sillón rojo. Óleo sobre lienzo 130,2 cm x 97 cm, Musée Picasso. Es muy difícil reconocer una figura humana en Mujer en sillón rojo (Femme au fauteuil rouge); sólo la composición, la agrupación de un sillón con varias figuras amorfas dispuestas encima, permite asociar la obra con un retrato. No obstante, en el contexto de los esbozos. Dibujos, esculturas y cuadros de Pablo Picasso de la misma época Mujer en sillón rojo no sólo explica como parte de un proceso de evolución estilística en la obra del artista centrado en el tema de las relaciones recíprocas entre la pintura y escultura, sino que constituye el punto final de una serie de retratos de Marie- Thérèse Walter realizada por el pintor en el espacio de pocos días.
El 14 de enero de 1932 creó el primer cuadro de su joven amada, que aparece graciosamente sentada en un sillón con la cabeza hacia atrás. Picasso construyó su retrato, que le sirvió de base para pintar el 26 de enero una obra de carácter totalmente distinto, que puede considerarse, a su vez, el anteproyecto de Mujer en un sillón rojo, utilizando suaves líneas decorativas dispuestas en el lienzo a modo de ornamento. El pintor transformó las diversas partes del cuerpo de la joven mujer – cabezas, brazos, cuello, pecho y vientre -en elementos abstractos y plásticos que, reflejando la estructura básica del anterior retrato, se acoplan en un esqueleto extraño.
Mujer sentada en sillón rojo. 1932 Óleo sobre lienzo, 130 x97 cm.
Mujer sentada en un sillón gris (1939). Picasso utiliza este tema -mujer sentada en un sillón- como modelo para realizar numerosos retratos femeninos. En este se observa las influencias de los trabajos realizados para el "Guernica", la deformación excesiva de la cara con formas redondeadas y la conformación del cuerpo en masas de color rectangulares. La influencia de la Guerra Civil Española es evidente en estos trabajos donde la expresividad de los rostros es dramática.
Madre con niño muerto (1937). Otro estudio para el Guernica. Se observa que de los primeros estudios al resultado final existe una gran diferencia. Estos trabajos previos son mucho más complicados, con más líneas, más planos e incluso con color. El motivo de esta simplificación es la adaptación de un cuadro -los distintos estudios- a un "cartel" de grandes dimensiones, donde el detalle pasaría desapercibido.
La nadadora (1934). Ya se ven las nuevas formas expresivas que Picasso adoptará en el "Guernica". Realmente su diseño se basará en estos trabajos anteriores. Una mezcla de cubismo, figuras retorcidas, luces… un estilo fundamentalmente expresivo, ideal para transmitir ideas y emociones.
Mujeres sentadas
Mujer sentada con libro sobre las piernas. 1932 Óleo sobre lienzo, 130 x97 cm.
Mujer desnuda en un sillón rojo. 1932 Óleo sobre lienzo, 130 x97 cm.
Mujer sentada dormida. 1932 Óleo sobre lienzo, 130 x98 cm.
Musa inspirando a una pintora desnuda París, 1935 Óleo sobre lienzo, 130 x162 cm.
Musa inspirando una pintora vestida París, 1935 Óleo sobre lienzo, 130 x195 cm.
Mujer con gallo. 1938 Óleo sobre lienzo, 131 x80 cm
Telones
Sirenas jugando. 1932 Óleo sobre lienzo, 97 x130 cm.
Torero descabezado por el toro y caballo espantado. 1933 Óleo sobre lienzo, 31 x40 cm.
Escultor contemplando su estatua. 1933 Óleo sobre lienzo, 39 x49 cm.
Estudio para el telón de "14 Juillet" de Romain Roland. 1936 Aguada, pluma y tinta china sobre papel, 44 x54 cm.
Minotauro y yegua muerta delante de una gruta y niña. 1936 Aguada, pluma y tinta china sobre papel, 50 x65 cm.
Fauno, caballo y pájaro. 1936 Aguada, pluma y tinta china sobre papel, 44 x54 cm.
Otras pinturas
Corrida de toros (1934)
Gato devorando pájaro (1): Creada en 1938.
Gato devorando pájaro (2): Es otro ejemplo de obra que, por su fuerza interna, deja un cruento testimonio de la guerra, la barbarie y el sufrimiento. Fue realizada en 1939, cuando Picasso se encontraba afectado por los acontecimientos bélicos en España y por el inminente estallido de la II Guerra Mundial.
Fuentes
http://ellassinpicasso.blogspot.com/2013/03/marie-therese-walter-biografia.html
http://www.glits.mx/blog/art/la-musa-de-picasso-marie-therese-walter
www.google.com.co
Enviado por:
Rafael Bolívar Grimaldos