Los compresores herméticos (situación mundial y en Venezuela)

1. Evolución del compresor hermético
3. El compresor hermético, objeto de estudio en esta tesis
4. Aplicación, selección y evaluación técnica
5. Evaluación de literatura
6. Aplicación, selección y evaluación técnica de los compresores herméticos
7. Condiciones de ensayo de evaluación de compresores
8. Caracterización de los compresores importados por el país
9. Herramientas de modelación
10. Conclusiones

En Venezuela se cuenta según el último censo (2001), con 4.363.022 de neveras domésticas en 5.423.288 de hogares[[1]], de una gran variedad de modelos y marcas, las cuales dado que los fabricantes estandarizan su producción, muchas veces no están diseñadas para las condiciones de uso que acá existen, solo tomando en cuenta las temperaturas promedio estaciónales de gran parte de nuestro territorio contra las temperaturas que según las normas internacionales, se toman por parte de los fabricantes como temperaturas ambiente de trabajo, es inmediato darse cuenta que la exergía en nuestras condiciones es mayor, por lo que la energía real que el compresor aporta al refrigerante usado, es menor de la prevista, lo cual significa índices de eficiencia no adecuados a las condiciones de explotación locales, con el subsiguiente desperdicio energético.

El consumo residencial promedio de energía eléctrica en Venezuela [[2]] está por el orden del 24% del consumo total nacional. La distribución de consumo promedio por vivienda muestra que 34% corresponde solamente al uso del refrigerador, el resto a los otros electrodomésticos [[3]]. Por lo que el consumo promedio nacional, por concepto de refrigeración doméstica de alimentos, consecuentemente compresores herméticos, se encuentra por el orden de 8,16% del consumo total energético, cifra 2,16% por encima del 6% de los países más avanzados.

La energía bruta total producida en el 2004[[4]], según CAVEINEL, CADAFE, está por el orden de 96,8 TeraWatios-hora/año, significa un consumo por concepto de refrigeración doméstica de 7,898 TeraWatios-hora/año (7,899×109 kW-h/a), admitiendo una tarifa promedio nacional de 60 Bs/kWh en el 2004 el Sector de consumo de refrigeración doméstica Venezolana, el recurso en ese mismo año debió facturar una cantidad en el orden de 4,74×1011 Bs, o 474.000 millones de Bs (237 millones de US$), si se lograse llegar al promedio de 6% de consumo por refrigeración doméstica, el consumidor obtendría un ahorro de recursos de 10.238 millones de Bs. Con otro ángulo, también puede afirmarse que un volumen tal (7.898MWh/a) equivale a casi la generación promedio anual de Macagua II o de Caruachi (cada una de ellas con capacidad instalada de 2.400 MW y una generación firme en promedio anual de 10.800 GWh/año). De ello es inferible otra conclusión, conocida la inversión en la presa Caruachi, que está en el orden de 2.500 millones de US$, es válido afirmar que el 2,16% de exceso de consumo (170,59MWh/a), representa una desinversión anual de 108.000 millones de Bs. (54 millones de US$).

Puede consecuentemente entenderse la trascendencia económica de la adecuada  estimación de los coeficientes de operación de los sistemas de refrigeración domésticos usados en nuestro país, sin embargo, a pesar de la importancia que reviste, no se ha encontrado un ordenamiento, programa o estudio minucioso de selección y evaluación de los equipos importados para uso en refrigeración doméstica, resultando muy probablemente que los índices de desperdicio energético producidos (ni siquiera por el buen o mal uso local de los sistemas de baja presión en refrigeración), sean originados por factores exógenos de diseño y fabricación de los bienes que se consumen en el área del frío en nuestro país, situación que debe ser tomada en cuenta a muy corto plazo a fin de instrumentar los necesarios correctivos en beneficio de nuestra sociedad.

Evolución del compresor hermético

Diversos estudios sobre de la evolución de la producción de frio se han realizado, enfocando áreas como el avance de la termodinámica y la refrigeración[[5]], la evolución de las máquinas refrigerantes[[6]], el desarrollo de los refrigerantes[[7]]. En una cronología de refrigeración y aire acondicionado, puede apreciarse como a finales del siglo XIX y al origen del siglo XX, la evolución no fue apreciable. Entre la década de los 40 a 60 se hicieron aportes tecnológicos, básicamente incrementando la velocidad del compresor y mejorando el diseño de las válvulas. A principios de 1970, la crisis de energía induce al mejoramiento de la eficiencia. El primer sistema de vapor – compresión fue inventado por Oliver Evans (1755-1819), que publicó una descripción teórica de una máquina de vapor – compresión cerrada en 1805, pero renunció a sus derechos a la invención. En 1834 Jacob Perkins (1766-1849) obtuvo una patente inglesa en el diseño de Evans, que fue usado para desarrollar la primera máquina de hacer hielo.Las primeras máquinas de compresión para la refrigeración fueron desarrolladas entre 1860-1875.