- Introducción
- Bonos
- Clasificación de los bonos
- Riesgos asociados a un bono
- Retiro de Bonos
- Bonos amortizables
- Valor del Bono
- La TIR de un Bono
- La TMAR de un Bono
- Yield
- Maduración de un bono
- Cómo invertir en bonos
- Conclusiones
- Ejercicios
Introducción
Antes de entrar a definir los diferentes tipos de bonos que hay, definamos primero que es un bono. Un bono es una obligación financiera contraída por el inversionista; otra definición para un bono es un certificado de deuda, osea una promesa de pago futura documentada en un papel y que determina el monto, plazo, moneda y secuencia de pagos.
Cuando un inversionista compra un bono, le esta prestando su dinero ya sea a un gobierno, a un ente territorial, a una agencia del estado, a una corporación o compañía, o simplemente al prestamista. En retorno a este préstamo el emisor promete pagarle al inversionista unos intereses durante la vida del bono para que el capital sea reinvertido a dicha tasa cuando llega a la maduración o vencimiento.
Muchos de los asesores financieros recomiendan a los inversionistas tener un portafolio diversificado constituido en bonos, acciones y fondos entre otros. Debido a que los bonos tienen un flujo predecible de dinero y se conoce el valor de este al final( lo que le van a entregar al inversionista al final de la inversión), mucha gente invierte en ellos para preservar el capital e incrementarlo o recibir ingresos por intereses, además las personas que buscan ahorrar para el futuro de sus hijos, su educación , para estrenar casa, para incrementar el valor de su pensión u otra cantidad de razones que tengan un objetivo financiero, invertir en bonos puede ayudarlo a conseguir sus objetivos.
Hay muchas variables que considerar para tomar la decisión de invertir en determinado tipo de bonos: su maduración, contratos, pago de los intereses, calidad del crédito, la tasa de interés, precio, yield , tasas tributarias e impuestos, etc. Todos estos puntos ayudan a un inversionista a determinar el tipo de bono que puede colmar sus expectativas y el grado de inversión que se desea obtener de acuerdo con los objetivos buscados.
Bonos
Un bono es esencia un documento a largo plazo, dado a quien presta el dinero por quien toma el préstamo, en el que se estipulan los términos del reembolso y otras condiciones. A cambio del dinero que recibe en préstamo la corporación se compromete a rembolsar dicha cantidad más intereses sobre la misma a una tasa especificada. Además la corporación puede hipotecar algunos de sus activos haciéndose efectiva dicha hipoteca en caso de que deje de pagar los intereses o el capital de acuerdo a lo prometido.
A través de este mecanismo el tenedor de bonos tiene una inversión más estable y segura que la del tenedor de acciones comunes o preferentes. Puesto que los bonos meramente representan endeudamiento de la corporación, los tenedores no tienen voz en los asuntos del negocio, siempre y cuando se les paguen sus intereses y por supuesto tampoco tienen derecho a participación alguna de las utilidades.
Los bonos se emiten con un valor monetario determinado cada uno, conociéndose este valor como el valor nominal o valor a la par del bono. Esta cantidad es la que se debe rembolsar a quien otorgó el préstamo al término de un período de tiempo especificado. Una vez que se ha reembolsado el valor nominal se dice que el bono se ha retirado o redimido.
La tasa de interés fijada en el bono se conoce como tasa del bono y los intereses devengados periódicamente se obtienen multiplicando el valor nominal por la tasa periódica del interés del bono.
Los intereses se pueden pagar en cualquiera de dos formas:
El nombre de propietario de bonos registrados se registra en los libros de la corporación y los intereses se le mandan al propietario a su vencimiento sin que haya acción alguna por parte del mismo.
Bonos con cupones: estos tienen adheridos tantos cupones como pagos vayan a hacerse hasta la completa amortización del bono. En las fechas estimadas para pagos de intereses, el tenedor del bono arranca el cupón correspondiente y por lo general, lo pueden hacer efectivo en cualquier banco. Por consiguiente un bono registrado no requiere acción alguna por parte del tenedor pero no se puede transferir tan fácilmente a otro propietario, como el bono con cupones.
Clasificación de los bonos
Los bonos se pueden clasificar de muchas formas. Probablemente uno de los mejores métodos y al mismo tiempo uno de los más sencillos sea el de clasificarlos de acuerdo a la garantía que los respalda. Conforme a eso tenemos las siguientes clasificaciones:
Bonos hipotecarios: Como garantía por el dinero tomado en préstamo, la corporación hipoteca a favor del acreedor algunos de sus activos en forma de una escritura de fideicomiso. El título de la propiedad nunca pasa a manos de los tenedores de bonos a menos que la corporación deje de hacer los pagos indicados en el bono. En caso de incumplimiento, los tenedores de bonos, a través de acciones legales apropiadas, pueden entrar en posesión de la propiedad hipotecada y venderla para obtener el dinero prestado y los intereses acumulados.
Bonos colaterales: en este tipo de bono la garantía es alguna forma de colateral comercial reconocido, como las acciones o los bonos de una corporación subsidiaria bien establecida. Por consiguiente, la garantía de estos bonos es esencialmente una segunda hipoteca sobre ciertos activos de la subsidiaria. Por tanto el comprador debe buscar su garantía en la subsidiaria, a menos que los bonos contengan cláusulas otorgando derechos adicionales sobre la compañía matriz en caso de incumplimiento.
Bonos Municipales: Su atractivo para los inversionistas reside en su característica de estar libres de impuesto sobre la renta. Por lo tanto la tasa de interés pagada por la entidad gubernamental es usualmente baja. Los bonos municipales pueden ser bonos de obligación general o bonos de rentas públicas. Los de obligación general se emiten contra los ingresos que recibirá por concepto de impuestos la entidad gubernamental que emitió los bonos y están respaldados por el tributario del emisor. Los bonos de rentas públicas se emiten contra las rentas generadas por el proyecto financiado.
Obligaciones: Estas son en realidad documentos a largo plazo, ya que no tienen garantías que las respalden, excepto una promesa de pago. Por lo general, son emitidos por grandes corporaciones cuyos estados financieros son tan sanos y tan acreditados que el público inversionista está dispuesto a comprar dichos valores. A veces los emiten corporaciones que tienen mucha necesidad de capital.
Riesgos asociados a un bono
Dentro del riesgo asociado a un bono podemos distinguir fundamentalmente entre:
Riesgo de mercado; que varíe el precio del bono por variación en los tipos de interés.
Riesgo de crédito; posibilidad de que el emisor del bono no pueda/quiera (en caso de repudio) hacer frente a sus pagos derivados de dichos instrumentos de renta fija.
Riesgo de default; el riesgo de incumplimiento del emisor.
Riesgo moneda o riesgo de recibir los pagos de amortización y renta en la moneda pactada o el tipo de cambio que afecte la rentabilidad de la inversión.
Riesgo de liquidez o riesgo de que las posibilidades de vender el bono (o transferir a un tercero los derechos sobre la amortización y renta del bono antes de su vencimiento) sean limitadas.
Riesgo de inflación o riesgo de que la inflación erosione el rendimiento final de la inversión.
Riesgo de reinversión o el riesgo de variación de la tasa de interés a la cual podremos reinvertir el dinero que cobremos por renta o por amortización durante la vigencia del bono.
Riesgo tasa de interés o riesgo de que cambios en las condiciones generales de la economía impacten en el precio del bono en el mercado.
Retiro de Bonos
Los bonos son una deuda y los intereses que hay que pagar sobre ellos representan un costo para el negocio. La corporación tiene que pensar en el día en que se vencerán los bonos y en que deberán rembolsar su inversión a los tenedores de ellos.
Si el negocio es próspero y las condiciones generales del mercado son buenas al vencimiento de los bonos, la corporación podrá estar en posibilidades de colocar una nueva emisión de bonos y de utilizar el producto para pagar a los tenedores de la anterior emisión. Si las condiciones son adecuadas, la nueva emisión puede especificar una menor tasa de interés que la de los primeros bonos. En este caso la corporación conserva el mismo capital a menor costo.
Por el contrario si las condiciones del negocio son malas al mismo tiempo de tener que refinanciarse, el mercado para los bonos podrá no ser favorable y resultará imposible colocar una nueva emisión o sólo habrá la posibilidad de hacerlo a una mayor tasa de interés. Esto puede convertirse en un serio problema para la corporación. Además existe el hecho de que los tenedores de bonos quieren estar seguros de que se está haciendo una provisión para que no exista duda de que se tendrán disponibles los fondos para retirar sus bonos.
En muchos casos las corporaciones apartan periódicamente sumas definidas, las cuales se acumulan, junto con los intereses que devengan, hasta formar el monto necesario para retirar los bonos a la fecha de su vencimiento. Puesto que es conveniente que estos depósitos periódicos sean de igual monto, el procedimiento de retiro se convierte en un fondo de amortización. Este método de retiro es uno de los más usados de esta clase de fondos.
Cuando se tiene establecido este procedimiento los tenedores de bonos saben que se está haciendo una provisión adecuada para salvaguardar su inversión.
Bonos amortizables
Dado que los bonos tienen que pagar una mayor tasa de interés que la que pueden producir los depósitos de un banco o las inversiones a corto plazo para formar un fondo de amortización, a la corporación le conviene retirar bonos siempre que tenga disponibles fondos excedentes. A través de este retiro de bonos, la corporación de hecho, está invirtiendo sus fondos de amortización en sus propios bonos.
Es obvio que, aun cuando la corporación generalmente le conviene retirar los bonos antes de su vencimiento, esto es algo que por lo general no desea el tenedor de bonos. Este no quiere renunciar, por supuesto, a un buen bono que le da un rendimiento satisfactorio.
En consecuencia, las corporaciones a menudo, emiten bonos amortizables. Los términos de estos bonos permiten específicamente que éstos se paguen antes de su vencimiento. En ciertas ocasiones son amortizables por lote y otras veces se especifica que los bonos que tengan ciertos números de serie se retirarán en fechas específicas.
Valor del Bono
El bono es un excelente ejemplo de valor comercial, siendo este el valor presente de los flujos futuros netos de efectivo que se esperan recibir a través de la posesión de una propiedad. Por consiguiente, el valor de un bono, en cualquier momento, es el valor presente de los pagos futuros que se recibirán. Apliquemos para un bono la siguiente simbología:
Z: valor nominal o a la par
C: valor de redención o de disposición (con frecuencia igual a Z)
r: la tasa de interés del bono por período.
N: el número de períodos antes de la redención.
i: la tasa de inversión por período.
Vn: valor del bono N períodos antes de la redención.
El propietario de un bono recibe 2 tipos de pagos. El primero consiste en la serie de pagos periódicos por intereses que recibirá en tanto no se retire el bono. Los pagos que recibirá por este concepto serán N, cada uno por la cantidad de Zr. Estos pagos constituyen una anualidad de N pagos. Adicionalmente, al retirarse o venderse el bono recibirá un pago único cuyo monto será igual a C. Puesto que el valor presente del bono es el valor presente de estos dos tipos de pagos a la tasa de inversión o de rendimiento, entonces:
Vn= C ( P/F, i%, N) + Zr ( P/A, i%, N).
La TIR de un Bono
La tasa interna de retorno de un bono (TIR). Es la tasa de interés que hace que la suma de los valores actuales de los cupones descontados a esa misma tasa iguale el precio del bono.
La TIR es aquella tasa que nos iguala el precio del bono a la actualización de sus flujos futuros, sin entrar en detalles muy técnicos, supone que dichos cobros los reinvertimos a ese mismo tipo, y no siempre es real porque lo rentabilizaremos a tasas mayores si los tipos suben o viceversa. TIR es una referencia a la rentabilidad, como IPC es a la inflación.
La rentabilidad o TIR de un Bono nos viene por sus cupones y la diferencia del precio al que compramos y la amortización (100%). Lógicamente, un bono que cotiza por encima de par (100%) tendrá una rentabilidad inferior al cupón y al revés.
La TIR y la tasa efectiva son dos herramientas que deben utilizarse para tomar decisiones principalmente cuando tratamos de comprar y vender papeles en bolsa.
La TMAR de un Bono
La relación del bono con la tasa de interés es muy importante, como pasamos a demostrarlo:
El comportamiento del precio de un bono es contrario a la tasa de interés: si el precio baja la tasa sube y si el precio sube la tasa baja.
Si el plazo del bono aumenta, para una misma tasa de rendimiento anual le corresponde un precio del bono menor, o bien, para que el precio sea invariable cuando el bono estira su plazo, la tasa debe bajar. Para una misma tasa de interés, el precio baja si el plazo sube.
El movimiento del precio de un bono es al revés que el plazo para una misma tasa. El movimiento del precio de un bono se comporta de manera inversa a la tasa y al plazo. Esto último es así porque el «impacto» de la misma tasa anual se «potencia» por la simple acumulación de años: duplica en dos años, triplica en tres años, etc.
La sensibilidad del precio del bono frente a cambios en la tasa es creciente a medida que aumenta el plazo del bono. Sensibilidad y plazo guardan una relación directa.
Yield
Es el rendimiento que se obtendría de un bono, o de cualquier otro tipo de valor de renta fija, si se mantiene el bono hasta la fecha de maduración.
La tasa yield es la tasa de retorno que se obtiene del bono basado en el precio que se pago y el pago de intereses que se reciben. Hay básicamente dos tipos de yield para los bonos: yield ordinario y yield de maduración.
El yield ordinario: es el retorno anual del dinero pagado por el bono y se obtiene de dividir el pago de los intereses del bono y su precio de compra. Si por ejemplo usted compro un bono en $ 1.000 y los intereses son del 8 % ($ 80), el yield ordinario será de 8 % ($ 80 / $ 1.000); veamos otro ejemplo, si compró un bono a $ 900 y la tasa de interés es del 8 % ($ 80) entonces el yield ordinario será de 8.89 % ($ 80/$900).
El yield de la maduración: es más significativo, es el retorno total que se obtiene por tener el bono hasta su maduración. Permite comparar bonos con diferentes cupones y maduraciones e iguala todos los intereses que se reciben desde la compra más las ganancias o pérdidas.
Maduración de un bono
La maduración de un bono se refiere a la fecha en la cual el capital o principal será pagado. La maduración de los bonos maneja un rango entre un día a treinta años. Los rangos de maduración a menudo son descritos de la siguiente manera:
Corto plazo: maduración hasta los cinco años.
Plazo intermedio: maduración desde los cinco años hasta los doce años.
Largo plazo: maduración de doce años en adelante.
Cuando la maduración de un bono es una buena guía de cuanto tiempo el bono será extraordinario para el portafolio de un inversionista, ciertos bonos tienen estructuras que pueden cambiar substancialmente la vida esperada del inversionista. En estos contratos se pueden efectuar las llamadas provisiones, en las cuales permiten al emisor reembolsar cierto dinero al principal del inversionista a una fecha determinada.
Estas operaciones se usan cuando las tasas de interés han caído dramáticamente desde su emisión. Antes de invertir en un bono pregunte si hay una de ellas, y si la hay asegures de recibir el yield de provisiones y el yield a la maduración. Los bonos con provisiones de redención por lo general tienen un mayor retorno anual que compensan el riesgo del bono a ser llamado prontamente.
Cómo invertir en bonos
Hay muchas maneras de realizar una inversión en bonos. Las más comunes son comprar bonos individualmente y entrar a fondos de bonos. Hay una enorme cantidad de bonos para escoger y encontrar aquel que colme sus expectativas y sus necesidades. La mayoría de los bonos son negociados en el mercado sobre el mostrador u OTC y en cada una de las bolsas del mundo.
Si planea invertir en un bono primario, su asesor le explicará los pasos a seguir y los riesgos que tiene ese bono y sus términos y condiciones. Si quiere comprar o vender un bono en el mercado secundario muchos corredores mantienen una lista de bonos con diferentes características que le pueden interesar.
Cada firma cobra una comisión por las operaciones en bolsa, estas comisiones son establecidas por cada firma y pueden variar de acuerdo al monto de la transacción, el tipo de bono y la cantidad de negocios que uno le de a la firma.
Los fondos de bonos ofrecen una selección y un manejo profesional del portafolio y le permiten al inversionista diversificar el riesgo de su inversión. Estos fondos no tienen una fecha específica de maduración de la inversión debido a las condiciones del mercado y la compra venta de bonos para establecer el portafolio y como resultado de estas operaciones el valor de los fondos fluctuara diariamente mostrando el valor d los bonos del portafolio.
Existen varias técnicas que como inversionista puede tomar en cuenta para lograr sus objetivos y cumplir sus metas. La diversificación del portafolio:La diversificación le puede brindar cierto grado de seguridad a su portafolio en la manera en que si una parte de su portafolio esta bajando su rentabilidad la otra parte puede estar incrementándola logrando mantener un equilibrio.
- Escalando: Esto es comprar bonos de varias maduraciones. Al comprar bonos de diferente maduración, se esta reduciendo la sensibilidad del portafolio ante riesgos en las tasas de interés.
- Barbell: Esta estrategia envuelve invertir en bonos de mayor maduración para limitar el riesgo ante fluctuación en los precios. A diferencia de la estrategia escalando, los bonos tendrán maduraciones en los dos extremos, largo plazo y corto plazo.
- Bond Swap: La venta de un título y la compra de otro ya sea para cambiar maduración, tasa u otros objetivos dentro del portafolio.
Conclusiones
Como vimos, un bono no es más que un préstamo. Es un préstamo otorgado a una empresa o gobierno con el dinero de uno o varios prestamistas. El «emisor» del bono (la empresa o gobierno que recibe el préstamo) adquiere el compromiso de pagar a sus «inversores» una tasa de interés por prestarle el dinero (compensación por posponer la posibilidad de un consumo presente) y a rembolsar el valor nominal del bono a su vencimiento.
En términos generales, cada préstamo o «emisión» de un bono tiene ciertas y particulares condiciones detalladas en el momento de la emisión. Estas condiciones son: el valor nominal del bono, su tasa de interés o cupón, el período de pago de intereses del bono y su fecha de vencimiento.
A los propietarios de bonos se les conoce con el nombre de "tenedores" o "bonistas". Algunas emisiones de bonos llevan incorporadas opciones que permiten amortizaciones anticipadas, conversión en acciones o en otros activos financieros, etc.
El precio de un bono se calcula al actualizar los flujos de pago de ese bono. Esa actualización se hace mediante el descuento financiero (en capitalización simple o compuesta, según el vencimiento) de dichos flujos, y un tipo de interés. A medida que aumente el tipo de interés de descuento (esto es, en cierta medida, el riesgo asociado a ese bono), disminuirá el precio y viceversa.
El precio que se paga por u bono esta basado en un conjunto de variables, incluyendo tasas de interés, oferta y demanda, calidad del crédito, maduración e impuestos. Los bonos recién emitidos por lo general se transan a un precio muy cerca de su valor facial (al que salió al mercado). Los bonos en el mercado secundario fluctúan respecto a los cambios en las tasas de interés (recordemos que la relación entre precio y tasas es inversa).
Ejercicios
Autor:
Marcantonio, Patricia
Serrano, Alexander
Stevens, Adolfo
Profesor:
Ing. Andrés Blanco
Enviado por:
Iván José Turmero Astros
Universidad Nacional Experimental Politécnica
"Antonio José de Sucre"
Vicerrectorado Puerto Ordaz
Departamento de Ingeniería Industrial
Ingeniería Económica
PUERTO ORDAZ, MAYO DE 2009