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La formación del eje ético-político pedagógico del personal docente en la Universidad de Venezuela


Partes: 1, 2

    El siguiente trabajo pretende llevar a cabo una reflexión teórica sobre el papel que deben asumir los docentes y las docentes universitarios en su desempeño educativo, bajo una perspectiva ética y pedagógica de la docencia basada en la formación de valores, como apoyos esenciales para el aprendizaje en convivencia y la formación del hombre para la vida.

    Las transformaciones sociales el siglo XXI afloran nuevas esperanzas pero también temores no escapando de ello los sistemas de educación superior de América Latina, posibilitando acceso al sistema educativo a países nunca antes imaginados, pero que también muchos países son excluidos donde el conocimiento es cada vez más mediado por el mercado, siendo preciso un profundo sentido de la realidad para no disminuir las posibilidades de cambio con un gran sentido de compromiso social.

    Estos cambios se orientan hacia el otorgamiento de una mayor importancia y contextualización de los saberes generados, el mundo de hoy reclama nuevas formas de enfrentar la complejidad en la cual se desarrollan los acontecimientos científicos y la de producción de conocimientos.

    Es tan importante una educación de calidad que responda a las exigencias de lo público, donde se produzcan conocimientos y se formen profesionales que sean capaces de contribuir a la dignificación de las condiciones de la vida de todos los sectores de la sociedad. Las universidades son espacios propicios de la mano con las comunidades de realizar un aprendizaje basado en el descubrimiento del otro, de una mejor convivencia, donde se promuevan normas sociales con demandas éticas.

    Santana (2000) señala; "la ética debe ser entendida como un aspecto social, necesaria y común a todo colectivo, que se proyecta a través de un sentido de ciudadanía y civismo."

    La función de la universidad en cada país demanda nuevos estilos en el ejercicio del oficio universitario debe prevalecer una búsqueda permanente a dar respuestas a los problemas que se suscitan en su entorno, que permita el nacimiento de una cultura de cambio enmarcada en la ética como guía en sus funciones académicas.

    En Venezuela se están dando cambios que van desde lo político, económico, social, cultural y educativo, este último con una marcada huella colonizadora, donde prevaleció y todavía existen vestigios de la colonia, la cual permitía la participación de la clase elitesca en los espacios escolares en todos sus niveles, mientras la gran mayoría era excluida del sistema educativo.

    El Sistema Educativo, instauró una cultura académica donde se le dio arraigo a la adquisición de conocimientos alejados al sentir colectivo, mayor importancia a la instrucción que a la formación integral del ciudadano, saberes con poca o nada de pertinencia social, docentes ajustados a diseños curriculares que no permiten atender la amplia gama de habilidades intereses y motivaciones de una población estudiantil.

    La universidad debe innovar y los cambios hacia los cuales se está perfilando el Sistema Educativo de Venezuela, son asumidos de una manera responsable con la aprobación de la Carta Magna desde mil novecientos noventa y nueva (1999), donde se refunda la República, y la educación viene a conformar uno de los procesos fundamentales para garantizar los fines del Estado, además de establecerse como valores superiores del ordenamiento jurídico del Estado y de su actuación, la libertad, la igualdad, la justicia y la ética pública, entre otros. La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), demanda,"la educación debe ser integral de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades para acceder a ella."

    La educación superior debe responder a estos preceptos constitucionales, pues se sientan las bases para una apertura hacia los sectores sociales que por distintas razones no tenían acceso a la educación, también supone un cambio de los métodos de enseñanza, de currículos, de sistemas de evaluación, de mayor participación, conciencia colectiva y un sentido ético en los modos de actuación de todos y cada uno de los que hacen vida en los espacios académicos.

    La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) establece, "el Estado está obligado a garantizar el cumplimiento de los principios éticos y legales, en las actividades relacionadas con la investigación científica, humanística y tecnológica."

    Los nuevos desafíos que enfrentan las casas de estudios superiores deben ser replanteados, definiendo nuevos enfoques que logren dar respuesta acertadas a los problemas de la sociedad, formando docentes que respondan a los requerimientos sociales, académicos, científicos y un alto sentido ético pedagógico, para ayudar a la mejor calidad de la educación, en términos de ética, valores y la participación de la vida en convivencia.

    La propuesta de cambio en el sistema Educativo Venezolano, no es capricho sino que obedece a una necesidad social que por muchos años debía ser saldada, a pesar de los esfuerzos hechos en educación, a través del incremento de infraestructura, financiamiento a las actividades académicas, cambios en los diseños curriculares, entre otros; no se han logrado los resultados de calidad esperados tanto en lo cuantitativo como en lo cualitativo del producto que está en proceso, que no es más que el profesional egresado.

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