Taxonomía bacteriana
Indice1. Introducción. 2. Clasificación filogenética bacteriana 3. Caracterización de especies 4. Denominación de especies 5. Planteamiento jerárquico de la taxonomía 6. Nuevos planteamientos de la taxonomía bacteriana 7. Conclusión
Cuando los seres humanos tienen que tratar con un gran número de objetos diferentes pertenecientes a una sola categoría es imperativo algún método de agrupación sistemática o clasificación para ordenarlos y catalogarlos. Estos es cierto cuando los objetos en cuestión son naturales, como los elementos químicos, minerales, las estrellas y organismos vivos, o cuando se trata de objetos fabricados por el hombre como los libros.
En la mayoría de los casos no importan los criterios seguidos al establecer los sistemas o clasificación siempre que se cumplan dos condiciones: los criterios han de poderse determinar fácilmente y las categorías que se establezcan han de excluirse mutuamente.
Los organismos vivos también pueden clasificarse de acuerdos con criterios puramente artificiales. Sin embargo, durante los siglos XVII y XVIII, cuando se desarrolló es estudio de la estructura vegetal y animal, poco a poco se hizo aparente que las plantas y animales pertenecen a una variedad de tipos o modelos, cada uno de los cuales posee una gran cantidad de características estructurales comunes que no son necesariamente apreciables de un modo inmediato cuando se realiza un examen superficial. Cuando un gran número de organismos presenta analogías múltiples, conforme a un modelo estructural común es porque pertenecen a un tronco evolutivo único y tienen entre sí relaciones genéticas más i}íntimas que las que lo unen a tras plantas o animales constituidos de acuerdo con un modelo distinto.
La apreciación de este hecho hizo que la clasificación biológica dejase de ser una operación arbitraria y se convirtiera en el arte de agrupar los organismos vivos según la manera que expresada mejor el grado de sus relaciones evolutivas. Una clasificación basada en estos principios es lo que se llama sistema natural o filogenético. Las formas más estrechamente relacionadas se ordenan como especies de un mismo género; los grupos relacionados algo menos íntimamente, como géneros de una misma familia; los que lo hacen más distantemente, como familias del mismo orden y así sucesivamente.
2. Clasificación filogenética bacteriana
La ciencia de clasificación de los seres vivos recibe el nombre de taxonomía y atiende a dos aspectos:
- Identificar y describir de la manera más completa posible, las unidades taxonómicas básicas, las especies.
- Desarrollar un sistema para ordenar y catalogar estas unidades
Taxonomía: (taxis = orden, rango). Es la rama de la biología que se ocupa de la clasificación de los seres vivos.
Las especies como unidades de clasificación Una especie constituye un grupo de individuos (o poblaciones clonales, en el caso de los microorganismos) que presentan un grado elevado de semejanza fenotípica, siendo, al mismo tiempo, claramente diferenciable de los integrantes de otros conjuntos del mismo tipo general.
Cada conjunto de individuos muestra un cierto grado de diversidad fenotípica interna a causa de la variación genética. Por lo tanto, es la capacidad de apreciación científica la que permite decir que grado de similitud fenotípica pueden justificar el dividir un determinado conjunto en dos o más especies, o dicho de otra forma, que grado de diversidad interna es admisible dentro de una especie. Las opiniones sobre esta cuestión son muy distintas, de ahí que los propios taxonómos clasifican en términos generales en dos grupos: < los unificadores> que fijan límites amplios a cada especie y <los disgregadores> que distinguen unas especies de otras por motivos más sutiles
3. Caracterización de las especies
De un modo ideal, las especies deberían caracterizarse basándose en la descripción completa de sus fenotipos o incluso de sus genotipos. La práctica taxonómica no llega a estos ideales ya que en la mayor parte de los grupos de seres vivos la descripción del fenotipo es fragmentaria y la caracterización del genotipo es incompleta.
Los caracteres fenotípicos de más fácil determinación son los estructurales y anatómicos que pueden observarse directamente. La clasificación de las bacterias constituye una excepción dada su extrema simplicidad estructural, esto hace que se disponga de un rasgo demasiado reducido de caracteres para poder hacer una caracterización adecuada.
Por ello, los taxónomos bacterianos se vieron forzados a buscar otros tipos de propiedades, bioquímicas, fisiológicas, ecológicas, para añadir a las propiedades estructurales.
La clasificación de las bacterias se basa en atributos funcionales, la mayor parte de las bacterias sólo pueden identificarse por lo que hacen y no simplemente por su apariencia. Esto representa un problema adicional para el taxónomo bacteriano, el estudio de estas propiedades funcionales conlleva a la realización de experimentos, por lo tanto éste nunca podrá estar seguro de haber llevado a cabo los experimentos adecuados con fines taxonómicos: podría ocurrir que omitiera la realización de ciertos experimentos que indicaran la existencia de agrupamientos significativos dentro de una colección de cepas.
Sin embargo, está tomando auge una nueva alternativa que podría resolver pronto el problema, son las técnicas moleculares para la caracterización genotípica bacteriana, que proporcionan una posible base objetiva para la definición de especie bacteriana.
De acuerdo con la convención que establece el sistema binomial de nomenclatura, cada especie biológica lleva un nombre latinizado que consiste en dos palabras: la primera indica en grupo (género) a que pertenece la especie, y la segunda palabra indica la especie de ese género: por ejemplo, Escherichia coli, Escherichia (nombre genérico – género) y coli (nombre específico – especie).
En la ordenación taxonómica de un grupo biológico, las distintas especies se van agrupando sucesivamente en una serie de categorías de orden superior: género, familia, orden clase, y división (o phylum). Esta es la llamada ordenación jerárquica, porque cada categoría, en la serie descendente, agrupa un número cada vez mayor de unidades taxonómicas, basándose en un número cada vez menor de propiedades compartidas.
5. Planteamiento jerárquico de la taxonomía
El reconocimiento del hecho de la evolución biológicas añadió una nueva dimensión al concepto de la clasificación natural. Para los biólogos del siglo XVIII los agrupamientos basados en la tipología expresaban simplemente parecidos, sin embargo para los postdarwinianos, indicaron relaciones. En el siglo XIX el concepto de sistema natural cambió y pasó a ser el agrupamiento de los organismos en función de sus afinidades evolutivas.
"La jerarquía taxonómica, en algún sentido, llego a ser el reflejo de un árbol genealógico y la taxonomía adquirió de repente una nueva meta: la reestructuración de las jerarquías para acomodarlas a relaciones evolutivas".
Este sistema taxonómico recibe el nombre de clasificación filogenética
6. Nuevos planteamientos de la taxonomía bacteriana
El desarrollo de la biología molecular abrió posibilidades para la caracterización de los organismos, cosa que tiene gran impacto en la taxonomía bacteriana. Tiene particular interés ciertas técnicas que profundizan las propiedades genotípicas completando así las hasta ahora caracterizaciones exclusivamente fenotícas de estos organismos.
Se pueden realizar varios tipos de análisis sobre ácidos nucleicos aislados que proporcionan información acerca del genotipo: la determinación de la composición de bases del DNA, el estudio de la hibridación génica de ácidos nucleicos aislados de organismos diferentes y la secuenciación de ácidos nucleicos.
La necesidad de establecer un orden jerárquico de los organismos vivos, lleva al estudio de cada uno de los grupos y a la búsqueda de técnicas que permitan llevar a cabo una caracterización para poder establecer un orden jerárquico mas amplio y adecuado.
En el caso de las bacterias, como organismos simples que son en cuanto a su estructura morfológica, hoy, gracias a las herramientas que nos provee la biología molecular como así también la ingeniería genética está a nuestro alcance poder ampliar ese orden jerárquico utilizando las técnicas que nos permiten conocer y estudiar el genoma de estos organismos y de esta forma poder ordenarlos y clasificarlos de acuerdo a un criterio mucho más amplio y nosolamente limitarnos a ordenarlos por su morfología, fisiología y/o por estudios bioquímicos como por ejemplo, el metabolismo del organismo.
Autor:
Germán Luis Puigdomenech
Técnico Superior en Microbiología y Biotecnología Rosario – Pcia. Santa Fé Octubre de 2003.