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José Martí, juegos y deportes

Enviado por Ramón Guerra Díaz


Partes: 1, 2

    1. Resumen
    2. El deporte en le periodismo martiano
    3. Un análisis lúdico del artículo "Un juego nuevo y otros viejos"
    4. Notas
    5. Bibliografía

    Resumen

    José Martí realizó una destacada labor como corresponsal de diversos diarios hispanoamericanos en Nueva York, cubriendo diversos tópicos de la vida en los Estados Unidos y del mundo en esa época. Los temas del deporte, el juego y la recreación fueron también tratados por él, no solo por curiosidad informativa, sino con el análisis objetivo y desprejuiciado que caracterizó su prosa periodística durante su vida, este trabajo resume en apretada síntesis una faceta interesante y poco estudiada de su quehacer como cronista.

    Introducción

    Hasta ahora cuando hablamos de la relación de José Martí con el tema deportivo se ha visto como una curiosidad dentro de su literatura periodística el acercamiento a la actividad del músculo en su época, pero prácticamente no se profundiza en sus aportaciones teóricas en cuanto a la interpretación dentro de los ideales olímpicos clásicos, no deteniéndose sólo en ellos, sino yendo más allá al analizar la práctica de los ejercicios físicos y los deportes en otras sociedades; desarrollando un conjunto de pensamientos, dispersos en sus escritos sobre estos temas, que nos permiten adelantar la idea de que por la seriedad del tratamiento temático, la novedad de los mismos para su época y posterior, además de lo recurrente del tema en su periodismo, José Martí puede ser considerado uno de los precursores más importantes del movimiento olímpico en el mundo y del deporte que hoy desarrolla Cuba.

    A partir de un acucioso estudio de los textos martianos nace este conjunto de escritos e ideas que tiene como centro la valoración de las opiniones y análisis de nuestro Apóstol que abordan de un modo especial las actividades lúdicas del hombre, principalmente las referidas a los deportes, los juegos, la ejercitación física y la recreación, tal vez las más estudiadas y practicada formas de la lúdica.

    El deporte en le periodismo martiano

    El tema del deporte dentro del periodismo martiano es uno de los aspectos más interesantes y menos conocidos del quehacer periodístico de José Martí. En sus crónicas para la prensa latinoamericana y otras publicaciones en español de la ciudad de Nueva York, en las décadas de los ochenta y noventa del siglo XIX, aparecen sus comentarios sobre las actividades y espectáculos deportivos que ocupan por esos años grandes espacios en la prensa de los Estados Unidos.

    La atracción que tienen estas actividades dentro del pueblo hace que los temas deportivos sean muy demandados y rentables para los periódicos de ese país. Se publican a toda página grandes titulares sobre los resultados de los juegos de béisbol, las peleas de boxeo, las carreras de premio, el resultado en los hipódromos, las competencias de fútbol americano, muy populares en las universidades, y las regatas de remo y vela. Allí se describe en detalles las acciones de la actividad del músculo, muchas de ellas llenas del morbo de la violencia y la falta total de orientación en cuanto a la nobleza e importancia de estas prácticas para el mejoramiento humano. Se compite por dinero y por él se somete al hombre a brutales esfuerzos físicos y humillaciones que no dejarán de ser condenadas por José Martí.

    En este mismo período el deporte noble y limpio, trata de abrirse paso. En Europa Pierre de Coubertin hace ingentes esfuerzos por hacer renacer el espíritu olímpico y promover la ejercitación física y la práctica deportiva como elementos humanizadores y conformadores de salud mental y física. Sus ideales de poner el deporte al servicio del engrandecimiento humano, poco a poco ganan adeptos en el continente europeo y en pocos años se organiza el Comité Olímpico Internacional cuya finalidad era restaurar los Juegos Olímpicos griegos como suprema cita de la juventud mundial en pos de alcanzar ideales elevados de fraternidad, amistad y amor manteniendo un cuerpo sano capaz de servir de base a una mente sana y desarrollada.

    José Martí debió conocer de estos esfuerzos, su sed de información y la cobertura de prensa que estaba recibiendo esta gestión del Coubertin, hacen posible esta eventualidad, pero sus actividades políticas en pro de la independencia de Cuba, hicieron postergable las ideas que él pudiera tener sobre el asunto, aunque quedan sus atinados razonamientos sobre la actividad física como necesidad para la salud humana.

    Sus valoraciones sobre el deporte y las actividades físicas las dirigió en dos sentidos: Por un lado las críticas que hace al deporte rentado, embrutecedor del atleta y del público y por otro sus hermosas palabras para describir acciones físicas del deporte y los elogios para los ejercicios como fuente de salud.

    Fiel a su costumbre, en sus crónicas no se limita a reseñar y comentar aspectos del deporte, sino que también señala las manchas de estos espectáculos, auspiciados por inescrupulosos apostadores, en el caso del boxeo y las carreras de premio, o por prestigiosas universidades, clubes y ligas, como en el fútbol americano, las regatas y el béisbol en los que el afán de sobresalir y la rivalidad enconada de grupos lleva hasta el fanatismo en el impulso a veces sobrehumano por ganar a toda costa.

    Los deportes citados por José Martí en sus crónicas y artículos, van desde el boxeo, o por decirlo mejor, la variante de pugilato a puño descubierto y prácticamente sin reglas ni protección, practicada por aquellos años; las carreras de premio, que eran maratones de varios días con sus noches ininterrumpido, pactadas a una determinada cantidad de millas, por una bolsa de dinero; el béisbol, deporte que apasionaba a los norteamericanos y que ya en esta época era un rentable negocio; el fútbol americano, deporte de ruda ejercitación que va muy bien al carácter del norteamericano; el patinaje artístico sobre hielo, del cual elogia la sutil belleza; las regatas de remo y vela, deportes de jóvenes universitarios empeñados en porfías de honor; el polo, deporte de élite que no dejó de llamar su atención y otras muchas referencias a la práctica de los ejercicios físicos y entretenimientos.

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