Los acontecimientos económicos, políticos, sociales, tecnológicos y científicos que se están gestando a nivel mundial repercuten en la vida laboral, social y escolar del hombre.
La escuela como parte de la sociedad debe estar a tono con estos cambios que le exigen redimensionar su papel; de tal forma que se hace necesario transformar su manera de concebir la educación, es decir, la escuela hoy en día debe ser capaz de formar de manera integral al individuo para que este a su vez se enfrente con éxito a los avances de la ciencia y la tecnología.
En la escuela las tecnologías de la información y la comunicación han sido introducidas a la práctica educativa, no obstante, esto no significa que los problemas de enseñanza y aprendizaje estén solucionados tal como lo señala Herrero, E. (2006) que si no se fundamentan pedagógicamente se usarán como un simple elemento más de la modernidad.
De igual forma es indispensable que se vinculen con los valores sociales, al respecto Zilberstein opina "aprender a usar las tecnologías y usarlas para aprender a aprender, pero también para aprender a sentir, es decir, que la información y la tecnología, no pueden aislar al ser humano, ni quitarle lo más preciado que son sus sentimientos y valores sociales adquiridos" (Zilberstein, J. 2002:26).
La figura del profesor es indispensable en este proceso de transición del proceso de enseñanza aprendizaje, tal como lo plantea Valdés, N, "cualquier intento de cambios en la educación tendrá que contar en primer lugar con el maestro, es él quién hará realidad, en las relaciones directas con los estudiantes dentro o fuera de las aulas las intenciones que se sigan en las políticas educativas, o, por el contrario, quien las obstaculice a través de sus prácticas" (Valdés, N. 2005:4).
Esto es difícil de lograr si el o los docentes adolecen de una preparación didáctica y pedagógica adecuada.
Los docentes son los principales protagonistas del proceso de enseñanza aprendizaje y también los responsables inmediatos de la calidad de la enseñanza, en conjunto con los estudiantes.
Un profesor con escasa preparación pedagógica y didáctica difícilmente puede garantizar una enseñanza de calidad y como consecuencia preparará estudiantes con escasas posibilidades de desarrollar un pensamiento teórico. (Silvestre, M. 2005).
Al respecto, la Declaración Mundial sobre la Educación Superior realizada el 9 de octubre de 1998 en París Francia, sugiere una enérgica política de formación del personal y apunta "se deberían establecer directrices claras sobre los docentes de la educación superior, que deberían ocuparse sobre todo, hoy en día, de enseñar a sus alumnos a aprender y a tomar iniciativas, y no a ser, únicamente pozos de ciencia" (UNESCO, 2005:11).
La formación del personal tal como lo sugiere la UNESCO no solo es aplicable a los docentes de educación superior sino también a los de todos los niveles, pues esto redundaría en un mejor aprendizaje por parte de los estudiantes.
De igual forma J. Delors (1997) enfatiza que "la educación durante toda la vida se presenta como una de las llaves de acceso al siglo XXI" (J, Delors 1997:16).
Para enfrentar los avances de la ciencia y la tecnología de cara al siglo XXI es necesario tener profesores capacitados tanto didáctica como pedagógicamente.
En México a los únicos que se les prepara para ejercer la docencia es a los normalistas, quienes al egresar atienden el nivel de primaria.
En el nivel correspondiente a la secundaria no existen escuelas que formen a profesores, sin embargo, últimamente se han creado instituciones (Centro de Actualización del Magisterio) que funcionan de manera semiescolarizada y son los que se encargan de capacitar a los profesores de este nivel.
En el estado de Guerrero no existen escuelas para la formación del profesorado de Nivel Medio Superior, ello ha repercutido en la calidad del proceso de enseñanza-aprendizaje, debido a ello los docentes que laboran en este nivel carecen de formación pedagógica.
La Universidad Autónoma de Guerrero contrata personal con estas características, no obstante, ha establecido ciertos criterios y requisitos para la contratación del personal académico. Los requisitos para ejercer la docencia en nivel medio superior de acuerdo a la Legislación Universitaria capitulo VI, artículo 12 son: poseer titulo de licenciatura para el nivel medio superior, el artículo 13 establece que el único medio para ingresar como personal académico es realizar examen de oposición, el artículo 19 hace alusión a los aspectos de evaluación del examen de oposición que son: meritos curriculares, experiencia en docencia, investigación, vinculación y gestión académica, obras publicadas, práctica docente ante grupo. (Legislación Universitaria de la Universidad Autónoma de Guerrero, 2001).
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