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La mujer a la calle

Enviado por Víctor Godoi Millán


Partes: 1, 2

  1. Introducción
  2. Marco conceptual
  3. Marco referencial
  4. Presentación de datos
  5. Análisis
  6. Bibliografía

Introducción

El trabajo propuesto surge de una observación y seguimiento a los procesos de participación de la mujer en conflictos ambientales en la zona sur de Chile (Caso celulosa– Celco). Un naciente movimiento que se define como ciudadano, retoma como uno de los elementos de aglutinación, valores asociados a la maternidad por una parte y por otra encumbra en sus niveles de dirigencia a mujeres profesionales que asumen debates técnicos o científicos. La presencia de la mujer en este caso se amplìa en los niveles de trabajo de comisiones o en las listas de correos via internet.

Por otro lado, las organizaciones de mujeres se han sumado a redes de apoyo en función del tema ambiental como sucede con la "Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas-Anamuri" que convocó a la marcha nacional del 9 d e julio pasado, o la red de mujeres de Valdivia (ver foto).

De esta manera es pertinente preguntarse acerca de las características que adquiere la perspectiva de género en medio de un movimiento social, cuando es por un lado intervenido con un discurso desde las mujeres y por otro lado reproduce una serie de afirmaciones (ejemplos de citas) que reproducen una dimensión maternal del género, asociado a la madre tierra y a la responsabilidad que asumen las mujeres en el movimiento como aglutinadoras y luchadoras justo cuando no hay un estado que ampare o una figura masculina que lo reemplace. Es el argumento discutido en el Seminario de Género y Política como la presencia de la mujer en casi todo conflicto o crisis en que el orden debe ser repuesto por la única reserva de la sociedad que no persigue intereses individuales.

El análisis de este trabajo consistiría en este sentido en una codificación de los contenidos que se pueden revisar en los diálogos electrónicos, asistencia a asambleas y entrevistas algunas actoras relevantes (2). Tal análisis permitiría una redimensión de la relación entre género y movimiento para temáticas actuales.

La perspectiva teórica supondría llegar a un establecimiento de la noción de sujeto para tal escenario en que la mujer se mueve desde una perspectiva situada, en una permanente dicotomía entre la identidad de género y la desconstrucción crítica del mismo, como explica Nelly Richard en Crítica Feminista y Problemática del Sujeto: nuevos desafíos. (NIHILISMO Y CRÍTICA, ET CETERA Nº4 2000)

Marco conceptual

II.1.- 3 Distinciones fundamentales para una perspectiva de género Haraway define su cyborgs como un "híbrido de máquina y organismo, una criatura de realidad social y también de ficción" (Haraway, 1991:253). La realidad social compartida existe en tanto es cambiante y es ficción constante. Esta ha sido nuestra construcción política más trascendental según Haraway, a saber, una sociedad pos política. Las tres rupturas esenciales que observa y que le permiten formular ciencia política, las instala en las fronteras que han permitido a la modernidad sostenerse.

En primer lugar la frontera entre lo animal y lo humano, que a fines del siglo pasado se ve asimilada como una unión más que separación. La dimensión animal, ya no es relegada de la experiencia humana o social. Lo que se fundó sobre la separación naturalezacultura se ve aquí resignificada por los movimientos pro defensa de los animales, por quienes los defienden como parte del entorno social. Son un reconocimiento de la relación dice Haraway, no un ataque a la unicidad humana. Son una superación o adelgazamiento de la frontera animal, somos en ese nivel animalidad humana. Es el espacio en que el cyborg se ve mitificado, es quien formula los cruces, "señalan apretados acoplamientos inquietantes y placenteros" (Haraway, 1991:257).

En segundo lugar la frontera violada es la de los organismos configurados anteriormente animales-humanos y las máquinas. En este caso la separación se veía a partir de la dualidad entre materialismo e idealismo. El gobierno de las máquinas nos dejaba tranquila pues no lograban configurarse por sí solas. Sus bytes sólo se explicaban mediante el mecanismo, o sea, la mecánica, no la autonomía. Sin embargo, el fin de siglo trae la ambigüedad, lo natural y lo artificial se tienden a unir. Nos vemos cada vez enfrentados a la determinación hacia la tecnología. Una especie de pulsión que nos lleva a mejorarla pues sin ella las labores más simples parecen incompletas. La tecnología está en voz de Haraway "inquietamente vivas y, nosotros, aterradoramente inertes". (Haraway, 1991:258).

La determinación tecnológica es entonces algo distinto a un fantasma que ronda nuestra humanidad. Es un espacio para la lucha ideológica nuevamente abierto al replanteamiento de las condiciones que hicieron posible la dualidad y que se ven cuestionadas. Maquinas y organismos son textos que escriben y leen el mundo, es el proceso de textualización que defiende la autora.

Partes: 1, 2
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