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La afectividad humana y el arte de amar y ser amado. Sesenta ideas para reflexionar


    La afectividad humana y el arte de amar y ser amado. Sesenta Ideas para reflexionar – Monografias.com

    Sesenta Ideas para reflexionar

    Todo lo que es humano, terreno, tiene un fin; solo lo divino es eterno. Y estas monografías, aunque apelando muchas veces para los niveles espirituales, cósmicos, divinos, es apenas una obra humana, terrena. Por lo tanto, tiene un fin y este fin está llegando.

    Todo lo que el autor tenía para decir, fue dicho en las monografías anteriores. Para cerrar, reproducimos algunas ideas sobre el tema que nos parecieron más significativas, sugestivas o fascinantes. Tal vez sea interesante colocar en tarjetas, aquellas que encuentre como más interesantes, para así poderlas guardar en el bolsillo o la cartera, de modo a consultarlos en el momento apropiado, meditando profundamente sobre su contenido.

    • 1. Amar y ser amado. He aquí el más maravilloso sueño que el ser humano guarda en el rincón más íntimo de su corazón.

    • 2. El amor humano es una maravillosa vibración que hace unir con un sello irrompible el corazón de un hombre y el corazón de una mujer. Ese sello irrompible protege un flujo espléndido de mano doble, envolviendo cálidos efluvios de un corazón para el otro. Se trata de una simple, pero fulgurante experiencia: amar y ser amado.

    • 3. En la medida en que lea este texto y haga las aplicaciones indicadas, y en la medida que sea perseverante y pleno de fe, de esperanza y de confianza en los resultados, irá pasando gradualmente, de las tinieblas afectivas para el mundo de la luz, donde podrá formar un bellísimo ramillete con las rosas de los sueños y con los claveles de la realidad, con los lirios de la ternura y con las orquídeas de los besos. Así, su corazón se abrirá como una fruta madura y sabrosa, esparciendo su espléndido aroma por los campos y atrayendo para si aquella persona que usted ama.

    • 4. El objetivo divino acerca de su presencia aquí en la Tierra, sólo pude ser uno: el Ser Supremo lo creó para que usted sea feliz, para que ame y sea amado, para que expanda su gloria por los confines del planeta, para que usted sea su manifestación en el mundo material. Y esto acontece con todas y cada una de las personas.

    • 5. ¿Es realmente posible amar y ser amado? Es posible sí, si usted se armoniza con el Señor del amor, de la luz y de la armonía, si usted fuga de las tinieblas, si usted se niega a comer del banquete envenenado del señor del odio y del resentimiento, si usted perdona a quien lo haya ofendido o perjudicado.

    • 6. Este texto intenta estimular un cambio de actitudes mentales, dejando de ver en el sexo – por ejemplo – una cosa pecaminosa, sucia o vergonzosa, o sea: él pretende llevar el lector (y la lectora) a tener una visión más amplia, más bonita, más armoniosa y más amorosa sobre la vida. Alcanzando este punto, las ondas recién formadas desbordarán las orillas del río de la vida, humedeciendo suavemente todo el ambiente y haciendo crecer en la cálida tierra, la rosa del amor pleno, la orquídea de la seguridad afectiva, los claveles de la ternura, los crisantemos de la alegría y los lirios del sexo satisfecho.

    • 7. El sexo debe ser el compañero inseparable y emocionante del amor, con el cual se integra en un cuadro maravilloso, en un jardín luminoso de flores y rocío, en un océano donde el agua y la vida, se entrelazan formando una realidad única.

    • 8. El amor y el sexo son como las plantas y la tierra, como el cielo y las estrellas, como un hombre y una mujer, mirándose con fascinación, abrazándose apasionadamente y amándose amorosamente.

    • 9. Dios creó la pareja humana, hombre y mujer, para que viviesen juntos, para que se amasen, para que experimentasen una pequeña muestra de su Reino, para que aprendiesen a derramar amor y alegría sobre la tierra.

    • 10. Cada sentimiento amoroso que brota de nuestro corazón es una bendición para el mundo, pues él entra en la corriente de la vida que nos afecta a todos. Así devolvemos alguna cosa al Creador, que coloca permanentemente en circulación su dádiva divina, el Amor, que permite al mundo subsistir, a pesar de todo. Seamos, pues, auxiliares de Él y derramemos perfumados cántaros de amor y fe, de armonía y paz, de luz y alegría por las sendas de la vida. Así haciendo, pasaremos a ser eslabones de la cadena cósmica. Y toda ella, vibra de Amor. Y quien se impregna con su fragancia, alcanza la meta, la deslumbrante meta del amor correspondido.

    • 11. El amor es un fruto espiritual que crece en el jardín Divino. El amor hombre-mujer está impregnado de dulces hechizos, de suaves arrullos, de fascinantes promesas, de bellísimas auroras y de perfumadas flores. Él es una dádiva divina; quien lo siente en toda su plenitud, percibe claramente que su Fuente está más allá de nuestro cuerpo limitado, en los dominios del Señor.

    • 12. El Creador nos hizo hombre y mujer "y vio que esto era bueno". O sea, Él bendice toda unión genuina, auténtica, surgida del fondo de dos corazones hermanados por la gracia del amor. Y esa unión genuina representa, a nivel humano, terreno, físico, el Amor Divino de altísima frecuencia vibratoria; viene a ser como una embajadora del Ser Supremo que habita el mundo divino, en este mundo material.

    • 13. Si realmente lo que usted desea es la compañía sublime del amor, si quiere sentir sus caricias fascinantes, si quiere respirar su aroma celestial, derribe todas las barreras, abra las puertas de su alma y las ventanas de su corazón al aire puro, límpido, perfumado. Y tome una decisión. La decisión de su vida. Decida en forma inapelable y definitiva, que va a ¡amar y ser amado! Como los pájaros del cielo y los lirios del campo, a los cuales el Creador alimenta, su alma y su corazón serán nutridos por un nuevo soplo de vida.

    • 14. "Amar es un arte, así como vivir es un arte. Sin embargo, para dominar un arte, no debe existir nada más importante que él" (Erich Fromm).

    • 15. Si usted quiere alcanzar el sueño dorado de amar y ser amado, no debe preocuparse acerca de como hacer para ser amado. Su única preocupación debe ser desarrollar su capacidad de amar. Siendo capaz de amar, por la ley cósmica de Causa y Efecto, será amado.

    • 16. El amor genuino es como una lámpara incandescente. Sólo cuando los dos polos opuestos de la electricidad entran en contacto, es que la chispa salta y se produce el fulgurante fenómeno de la iluminación. Un polo es el hombre, el otro la mujer. Esto está en la naturaleza de las cosas. Hay una centella mágica en esta unión de los opuestos; lo incompleto se completa, las tinieblas se impregnan de luz y el cielo azul se satura de estrellas.

    • 17. Cada día, usted puede contribuir con un hilo, en el tejido sutil de su ligación afectiva, hasta transformarse en una cadena indestructible. O sea, cada día que pasa, usted puede convertirse en una persona más tierna, más amorosa, más armónica y así estará más cerca de la imagen ideal que su pareja tiene de usted (o su futura pareja tendrá). Haciendo de esta manera, su corazón pasará a ser un foco irradiante de paz interior, un horno llameante de amor humano, un ramillete de bellas y espléndidas flores, un canto de alegría, una sinfonía de buena voluntad. Será una gota del Océano Cósmico, derramando su perfume en la Tierra, iluminando el corazón escogido, con suaves arrullos de esperanza en un futuro fascinante.

    • 18. Quien procura el camino oculto para el monte de la realización afectiva, debe estar conciente de que hay una Luz Cósmica iluminando aquella senda. Procure la luz y llegará a la meta soñada.

    • 19. La primera tarea de la persona que procura la felicidad es transformarse en un foco deslumbrante de luz y amor, convirtiéndose de esa forma en un auxiliar cósmico en la redención de la humanidad. De este modo, el Creador lo condecorará con un efluvio glorioso e inefable, encaminándolo en dirección a su sueño más querido: la realización afectiva.

    • 20. Quien da amor, recibe Amor. Es el Amor Cósmico, transmutado en las necesidades humanas. Por lo tanto, si usted irradia amor, si lo derrama en el ambiente, si lo disuelve en la corriente de la vida, el Creador lo iluminará con su potente Luz, impregnando su vida con un cálido y deslumbrante rayo que lo acompañará amorosamente para siempre. Y si le estaba faltando el amor humano, usted lo encontrará, escondido en una mano suave que acariciará la suya, oculto en una mirada que le promete el paraíso, iluminando una sonrisa que abrirá para usted las ventanas del amor correspondido.

    • 21. ¿Usted ya no está sintiendo en este momento, el frescor del rocío matinal en su corazón y viendo como un bando de pájaros celestiales levantó vuelo en su dirección? ¿No siente el efluvio de las flores impregnar el aire con fragancias suaves y perfumadas? ¿No palpita en su corazón el murmullo de las fuentes escondidas? ¿No acaricia su piel la alegre brisa, llena de sonidos leves y susurros apagados?

    • 22. Las mencionadas y fascinantes sensaciones que llegan como relámpagos en momentos imprevistos, son un –aviso previo de que el carro de Eros (o Cupido), dios del amor está siendo preparado en sus ocultos escondrijos. Continúe irradiando amor y buena voluntad; ellos serán como estrellas de Belén intangibles que guiarán el regio personaje hasta su presencia. Purifíquese pues, eliminando todo rastro de negativismo que eventualmente sobreviva en usted. Haga de su corazón un templo del Dios Vivo. ¡Ame… y será amado!

    • 23. Si usted está procurando el pájaro sagrado del amor correspondido, entone un himno a la fe. Ella es el combustible que le permitirá llegar a la espléndida mansión llamada Felicidad. Tenga fe en la vida, tenga fe en el amor, tenga fe en el alma humana, tenga fe en el Creador, tenga fe en lo que es bueno, constructivo, elevado, altruista. Sea un canal de luz para sus hermanos humanos. ¡Ame… y será amado!

    • 24. Oración: Mi corazón está impregnado de una fe maravillosa. Creo en el amor, en mi capacidad de amar y en la inefable alegría de ser amado.

    • 25. De la misma manera que el rosal espera con serenidad la llegada del tiempo propicio, en el cual los brotes emergen, las hojas cubren alegremente los troncos, el aire se impregna de efluvios, las flores perfuman el ambiente con su aroma y la tierra estalla de vida y alegría, también el ser humano debe esperar con confianza – hecha la siembra correcta – que lleguen los resultados deseados, o sea la gracia concedida, en la forma de la magnífica realidad de amar y ser amado.

    • 26. El amor es una bendición cósmica. Armonícese con el Creador, irradie altruismo y sentimientos elevados. Sea un canal de su manifestación en la Tierra. Aumente sus frecuencias vibratorias, vuelva más sutiles sus energías. Así el amor será suyo, pero no un amor cualquiera, cargado de conflictos y sí el amor resplandeciente, que sólo ilumina a los seres más evolucionados. Como usted puede serlo, si realmente lo desea.

    • 27. Identifíquese con su Yo Interior, su Ser "Crístico", y él lo guiará hasta el lugar deslumbrante donde se encuentra a su espera una florcita, de apariencia modesta, pero que cuando la toma en sus manos, le transmite un frescor tierno, aterciopelado, así como un aroma delicioso y sobre todo, una sensación envolvente de magia y plenitud. Es la flor del amor, del amor auténtico, del amor genuino, del amor realizado, del amor correspondido. Del amor entre un hombre y una mujer.

    • 28. Agradezca al Creador todos los privilegios maravillosos que recibe, irradie su amor para el medio ambiente que lo rodea, exhale paz y armonía. Sea un canal terreno para las fuerzas cósmicas intangibles, bañe su cuerpo y su alma en la alegría de vivir, de darse, de donar sus magníficas potencialidades. Al comportarse de esta manera, usted se sintoniza con el Amor Divino, usted desarrolla las enseñanzas del Maestro, usted evoluciona espiritualmente, usted recorre la Senda Sagrada.

    • 29. Es claro que en aquel contexto, usted habrá creado cimientos extremadamente sólidos, y le será fácil – si así lo desea – construir un nido fascinante, en el cual podrá alojar en su compañía aquella persona maravillosa que estaba a su espera. Y los dos formarán una pareja inseparable, que tocará la sinfonía de amar y ser amado, con una maestría inigualable. Y usted lo habrá merecido.

    • 30. "El casamiento debe ser tratado de la misma forma que cuidábamos, de niños, a nuestras hogueras. Tenemos que saber encender el fuego y después mantenerlo, procurando hacer que dé llamas vivas y después brasas ardientes. Tenemos que saber lanzar en ellos las astillas que lo hacen cantar, las hojas de pino que lo hacen chispear, las ramas de romero que hacen del aire un bálsamo. Es necesario saber reavivar el fuego, desplazar oportunamente los leños, aumentar el combustible. Inclusive es preciso saber contemplarlo y mostrarse, ante su vista, propicio a los sueños" (Maurice Messegué).

    • 31. Únase a la Verdad, a la luz, liberte su inmensa potencialidad de amor que guarda en su corazón (a veces sin saber). Ilumine su ambiente con una bellísima y suave irradiación. Así haciendo, estará sembrando, en los jardines del Creador, el glorioso árbol con el cual hace tanto tiempo sueña. Cuide de él, vigílelo, ámelo y a su debido tiempo sus ramas estarán cargadas de frutos sabrosos, deliciosos, impregnados del suave aroma de la manzana. Y será su derecho cósmico comer el fruto del árbol sagrado, sin que la serpiente entre en el medio. Un ángel verdadero dejará caer en sus manos la fruta, exactamente a punto y usted sólo deberá morder la piel suave e insinuante para entrar finalmente en el Paraíso del amor correspondido.

    • 32. Bebamos de las fuentes sagradas y descubramos que, a pesar de las preocupaciones constantes y pesadas del mundo moderno, hay una calma pradera en nuestro interior. Debemos aprender que sólo cuando nos instalamos completamente en ella, es que recibiremos en abundancia, las magníficas dádivas del Creador, entre los cuales está la reluciente corona de la realización afectiva.

    • 33. Si usted liga la idea de amor a emociones y sensaciones maravillosas, a la vida estallando en un botón de rosa, a la alegría de una espléndida mañana primaveral, mojada de rocío, a una mirada tierna y amorosa con la que usted sueña, a la piel suave y tersa de un cierto cuerpo humano, a una sonrisa cargada de promesas, a una caricia que habla más alto que el Cantar de los Cantares, habrá conducido el sagrado carruaje del amor hasta su puerta. Abra pues sus brazos y estreche contra su pecho el regio (o la regia visitante) y alójelo en su corazón durante el resto de su vida.

    • 34. Usted debe transformar su necesidad de amar y ser amado en una donación al mundo, o sea en el centro de su corazón, deberá substituir el deseo egoísta de poseer una persona capaz de amarlo y hacerlo feliz, por el deseo altruista de asociarse afectivamente con ella para que – entre los dos – sea creado un nuevo punto focal de luz y amor.

    • 35. A través de la deliciosa experiencia del amor humano, el Creador abrió la puerta más simple, más directa, para que el hombre penetrase en su Reino. Y quien percibió, aunque haya sido sólo un vislumbre rapidísimo, la belleza de aquel Reino, no lo cambiará por nada, encima o debajo de la Tierra.

    • 36. Para atraer la persona que lo hará feliz y usted a ella, precisará irradiar una luz especial, un aura, un sentimiento, una fuerza genuinamente positiva, cuyo núcleo se localiza en el centro de su corazón. Y ese centro sólo saldrá a la luz, si todas las impurezas que lo cubren fueran lavadas, eliminadas, suprimidas. Y no existe mejor detergente que la oración profunda, con total autenticidad y confianza. Ore y visualice pues y que el Creador lo bendiga.

    • 37. La gracia del amor pleno, de sentirse amando y siendo amado, de vivir en una ventana del cielo, es concedida apenas a aquellos que se supieron preparar, purificando sus mentes y sus corazones, y no vacilaron ni un poco en lanzar a la corriente de la Vida que circula en el Universo, lo mejor de sus energías, de su luz interior, de su amor. Ellos merecen porque no retuvieron en forma egoísta sus tesoros espirituales y sí los compartieron con la humanidad sufriente. Sea pues, uno de ellos; sea una verdadera flor, exhalando su fragante aroma para el aire y recibiendo de él, el vital oxigeno, impregnado de amor.

    • 38. Viva amor, sueñe amor, piense amor, sienta amor. Usted es un mensajero cósmico del amor, por lo tanto deberá idealizar, escribir y derramar su mensaje por todos los confines de la Tierra. De esta manera, atraerá energía cósmica en su dirección y ésta se manifestará en la forma física de una persona que reúne todas las condiciones para ser su pareja adecuada.

    • 39. El ser humano puede amar y ser feliz, sin tener ninguna religión, pero no sin estar ligado al Creador, simplemente porque Él es la fuente de donde fluye aquel amor y aquella felicidad. Y si la Fuente no existiese o sí la ignoramos, aquellos espléndidos frutos nunca podrán ser recogidos por nosotros.

    • 40. Envuélvase de forma activa en todo lo que tenga que ver con el amor verdadero, genuino, auténtico. Beba continuamente de él, hasta que se transmita en su propia sangre y hasta que se anide en su propio corazón.

    • 41. Oración: Antes de recibir es necesario dar. Yo deseo una fulgurante felicidad para todos los hombres y mujeres del mundo. Mi corazón es un cálido flujo de sentimientos bellos. Soy el río de la Vida, recorriendo los fértiles campos y en el seno de mis ondas, se anida suavemente el Amor. Y yo lo irradio generosamente, para mis semejantes.

    • 42. Oración: La Paz Divina difunde sobre mí su fragancia maravillosa, impregnando con ella todo mi cuerpo, mi mente y mi corazón. De este modo, me transformo en un espléndido foco de luz, serenidad, paz y buena voluntad, atrayendo de este modo, la adorada figura de Fulano (o Fulana) de Tal, con quien compartiré el resto de mi vida, con una relación profunda y armoniosa, llena de belleza y encanto.

    • 43. "La única cosa que usted debe a las otras personas es amor y él consiste en desear para los otros, aquello que usted desea para sí mismo: salud, felicidad y todas las bendiciones de la vida". (Joseph Murphy)

    • 44. Oración: Cada día que pasa, mis sentimientos florecen y se desarrollan como rosas fragantes, como ramas de uvas palpitantes en la parra, como frutos del boscaje salvaje, como nardos perfumados, como claveles bellísimos y como orquídeas fascinantes. Y esto ocurre por una causa simple, pero extraordinaria, única, deslumbrante: amo y soy amado.

    • 45. Oración: La energía cósmica que existe en el aire, en el agua, en el sol, en la tierra, en las plantas, en los animales y en los seres humanos, fluye para mí en forma maravillosa, como rayos amorosos que encienden mi corazón de fuego sagrado. Este fuego sagrado abraza a mi alma y a la de mi amado (o amada) y abrasa mi cuerpo y de él (o de ella), haciendo de los dos, una única y fascinante unidad de luz y amor.

    • 46. El amor es un resorte maravilloso, que el Ser Supremo creó para mover el mundo.

    • 47. Le deseamos el mayor de los éxitos en su tentativa de transformar su corazón en un foco purísimo de luz y esperanza. El dulce panal del amor correspondido, está a su alcance; la gracia de amar y ser amado, ya camina en su dirección; el brillante fulgor de la realización afectiva ya golpea su puerta. Que el Creador lo bendiga y lo reciba en su Altísimo Refugio.

    • 48. "Haced con que los otros gusten de si mismos un poco más, y yo te garantizo que ellos gustarán mucho de ti". (Lord Chesterfield)

    • 49. Amando y siendo amado, usted se proyecta como un verdadero átomo cósmico, transformándose en una réplica del propio Creador, proporcionando al mundo de los hombres su propia aura, repleta de energías positivas. Esto significa que, amando y siendo amado, usted coloca combustible cósmico en el motor oculto, en el engranaje secreto que mueve las energías del Universo.

    • 50. La mirada es un medio magnético de transmitir sentimientos. A través de ella, puede ser comunicada una pasión irresistible, un amor armonioso, una serenidad apaciguadora y muchas cosas más. Impregne su mirada con un amor sincero, derrámelo sobre su compañía real o potencial y sonríale. Usted habrá encendido una llama fascinante. Dé tiempo al tiempo y espere que ella se transforme en una envolvente llamarada que chamusque, queme e incendie los corazones de ustedes dos, abrazados por la ternura y abrasados por la incandescencia del amor.

    • 51. Ternura, armonía, serenidad, no son atributos de los débiles, de los vencidos y sí de los fuertes, de los victoriosos. Ellos no precisan pelear para alcanzar la felicidad, la realización afectiva, el amor correspondido. Ellos están tan impregnados de energía cósmica, de esplendor divino, de luz celestial que, en lugar de querer absorber las débiles vibraciones de los otros, están dispuestos a proporcionarles sus irradiaciones de naturaleza elevada. Sea pues, un ángel de luz, de energía, de esplendor, esparciendo sus ondas por el mundo. Actuando de esta manera, no tenga dudas de que, si aún no alcanzó aquella luz, está llegando a la orilla, al umbral, al portal escondido del jardín que guarda la fragante flor llamada amar y el delicioso fruto denominado ser amado.

    • 52. Sea hombre o mujer, usted guarda en el rincón más íntimo de su corazón, un deseo fascinante, un lucero centelleante, una esperanza incandescente: crear con alguien del sexo opuesto, una maravillosa unidad de amor, una estupenda célula de armonía, una riquísima joya de alegría, una fulgurante llamarada de felicidad, un espléndido sentimiento de paz.

    • 53. El amor, con su magnífico cortejo de paz, armonía, alegría y felicidad ya está llegando para instalarse definitivamente en su corazón, porque usted se conscientizó de su misión cósmica, o sea: constituirse en un canal magnífico, por el cual circulan las portentosas energías cósmicas.

    • 54. Su expectativa electrizante, está avanzado velozmente para su cristalización; cada día que pasa, está más capacitado para su fascinante victoria; cada átomo de luz que se desprende de su corazón, es más un aviso de que usted es un canal cósmico por donde se expande una energía vibrante y sutil que el Ser Supremo envía a la Tierra. Y esa energía es Amor. Una centella de esa fulgurante luz se anidará en su corazón y le mostrará la alegre sonrisa, la suave mirada y la tierna caricia del amor correspondido.

    • 55. Usted está ahora atravesando los portales sagrados del adorable reino del amor correspondido, porque usted desenvolvió su capacidad de amar, o sea, porque usted merece. Y esto lo hace comprender, por experiencia propia, que la Justicia Cósmica existe.

    • 56. Encima de cualquier creencia, sobrevuela el Creador, el Ser Supremo, el Dios del Amor. Aquel que, a través de un ínfimo átomo de su Luz Divina, puede mudar su vida, desde la desesperación más negra, hasta las cumbres de mayor magnificencia y gloria.

    • 57. El esplendor de la aurora está llegando a su vida, el brillo magnético del emocionante vislumbre de amar y ser amado, está centelleando en el rincón más oculto de su corazón. Así, el sentimiento fascinante de la realización afectiva lo está iluminando con una espléndida irradiación. Estas maravillas están ocurriendo. porque usted aplicó las enseñanzas, porque usted se armonizó con las altísimas frecuencias cósmicas, porque usted comenzó a actuar en sintonía con ellas.

    • 58. La felicidad y la infelicidad no dependen de la casualidad, la suerte o el destino y sí de nuestros pensamientos, sentimientos y actitudes.

    • 59. La realización afectiva es su sueño secreto y glorioso. Para alcanzarla, deberá transformarse en un ángel, un querubín, en un serafín celestial, que lleva en su seno el mensaje cósmico del amor y lo difunde por la corriente energética de la Vida. Usted deberá adoptar la forma de un ruiseñor, de un picaflor, de una alondra, que en sus alas fulgurantes transportan el sagrado polen de la armonía, usted deberá transformarse en bellísima mariposa, en refulgente luciérnaga, en sutil libélula, que derrama por la Tierra toda la gracia, la paz y la alegría del Universo.

    • 60. En resumen: ¡Ame y será amado!

    Observación: Las Monografías de este Gran Tema (Afectividad Humana), deben ser consideradas como un estímulo, una inyección de luz y esperanza para las personas que sufren de problemas afectivos. El autor, dentro de sus posibilidades, está dispuesto a enviarles, de forma totalmente gratuita, el libro completo, titulado "El Arte de Amar y Ser Amado", a todos aquellos y aquellas, que demuestren interés en los mensajes ofrecidos, a través de comentarios simples, enviados directamente a: ,

    OBSERVACIÓN: La próxima y última monografía de esta serie, será dedicada exclusivamente al género femenino

     

     

    Autor:

    Prof. José A. Bonilla

    (Universidad de la República, Uruguay; Universidad Nacional de Tucumán, Argentina , Universidad Federal de Minas Gerais, Brasil)