- Desarrollo
- Breve antecedente histórico de los plaguicidas
- Plaguicidas químicos
- Grupos o familias de plaguicidas y daños que causan a las personas, animales y al medio ambiente
- Otros plaguicidas
- Los plaguicidas químicos y la contaminación ambiental
- Características del insecticida natural FAPIL
- Bibliografia
Efectos sobre los seres humanos y el medio ambiente
INTRODUCCIÓN.
Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida, el hombre, ahora tomamos conciencia de este problema cuando es casi tarde para impedirlo.
Es necesario señalar que las sociedades de consumo son los responsables fundamentales de la atroz destrucción del medio ambiente.Ellas nacieron de las antiguas metrópolis coloniales y de políticas imperiales que a su vez engendraron el atraso y la pobreza que hoy agotan a la mayoría de la humanidad.
Los bosques desaparecen, los desiertos se extienden, miles de millones de toneladas de tierra fértil van a parar cada año al mar.Numerosas especies se extinguen.
Utilícese toda la ciencia necesaria para el desarrollo sostenido sin contaminación. Páguese la deuda ecológica y no la deuda externa.
Desaparezca el hambre y no el hombre.
Estas palabras de nuestro Comandante en jefe Fidel Castro, el doce de junio de mil novecientos noventa y dos, en la Conferencia sobre el medio ambiente y desarrollo.
Nos llevan a reflexionar sobre la situación ambiental y como debemos poner nuestro granito de arena en la batalla por salvar el medio ambiente y la salud del hombre.
Los cambios producidos en la Filosofía de las empresas en el mundo, según la cual la sastifacción de los deseos del cliente son la justificación económica y social de su existencia, repercuten en la economía del País y la producción de sus empresas.
El interés de este trabajo es analizar la problemática relacionada con los plaguicidas químicos y demostrar las ventajas del producto insecticida natural FAPIL,como un aporte de nuestra Universidad al desarrollo de la ciencia y al cuidado del medio ambiente, la salud humana y los problemas que crean a la sociedad.
Este trabajo llevó años de ardua labor científica, cambiando métodos de trabajo establecidos que resultaban muy costosos sobre todo en M.LC.
Además hemos cumplido el reto social de obtener un producto completamente natural y ecológico, cumpliendo la tarea de poner la ciencia a favor de la humanidad.
DESARROLLO.
Por primera vez en la historia del mundo todo ser humano está ahora sujeto al contacto con peligrosos productos químicos , desde su nacimiento hasta su muerte, el uso de plaguicidas sintéticos ha sido tan ampliamente distribuidos a través del mundo animado e inanimado que se encuentra virtualmente en todas partes , se han hallado residuos de esos productos en la mayoría de los sistemas fluviales importantes e incluso en corrientes subterráneas que fluyen desconocidas a lo largo de la tierra, donde pueden haber sido aplicados una decena de años antes , en el cuerpo de pescados , pájaros , reptiles , animales salvajes y domésticos.
Todo ello se ha producido a causa de la súbita aparición y del prodigioso crecimiento de una industria de fabricación de materias sintéticas con propiedades insecticidas.
Como un solo ejemplo queremos señalar que la producción de plaguicidas en EE.UU. asciende de 124 250 000 lbs en 1947 a 637 666 000 lbs en 1960, en el año 2000 la producción sobrepasa lo 4 000 000 000 de lbs y el valor de esta producción sobrepasa los DOS BILLONES DE DÓLARES. Si el hombre no frena la carrera de los destructores del medio ambiente. La primavera silenciosa nos envolverá a todos.
BREVE ANTECEDENTE HISTÓRICO DE LOS PLAGUICIDAS.
Desde los inicios de la civilización el hombre ha luchado continuamente para mejorar sus condiciones de vida, en su afán de producir las provisiones necesarias de alimentos, ha combatido los estragos ocasionados por plagas de insectos y por las enfermedades de las cosechas.
El marchitamiento de los sembrados mencionados por el profeta AMOS , 760 A.N.E.se debió al mismo añablu del cereal que todavía produce enormes perdidas .El padre de la Botánica THEOFRASTO, 300 A.N.E., describió muchas enfermedades de las plantas conocidas actualmente, como las quemaduras, pudriciones, roñas y royas.
También hay varias referencias en el antiguo testamento a las plagas en Egipto de las que la langosta fue el causante principal, aun en la época actual las nubes de espesas langostas destruyen comarcas enteras, en el cercano oriente y en África, ocasionando grandes perdidas de alimentos.
Entre las plagas que inhiben el crecimiento de las cosechas, las de insectos y de hongos, así
Como las malas hierbas, son las más importantes y la idea de combatirlas con productos químicos no es del todo nueva.
Al azufre (S) se le conocía como preventivo de diferentes enfermedades y se empleaba para combatir los insectos antes del año 1000 A.N.E.
Su uso como fumigante, fue mencionado por HOMERO, PLINIO 79D.N.E., recomendaba usar Arsénico (As) como insecticida y en el siglo XVI los chinos ya aplicaban cantidades moderadas de compuestos de Arsénico (As) con este fin.
Algunas evidencias fácil conservadas en rocas, indican que los agentes que originan las enfermedades en las plantas son anteriores a la aparición del hombre sobre la faz de la tierra.
Los relatos de calamidades como la destrucción de cultivos por tizones, cenicellas y plagas predominan en los primeros registros escritos, hay muchas de estas referencias en la Biblia, donde las plagas y enfermedades son vistas como un castigo de Dios, por los pecados cometidos por los hombres.
Aunque ello no sea muy consistente con el concepto cristiano del Dios bondadoso, tal idea perduró durante varias centurias como lo comprueban las crónicas escritas en Hungría durante los siglos XI y XIII, cuando las siembras de cereal fueron destruidas por enfermedades. Los desastres que no se atribuían a la ira de Dios, se consideraban como obra de los espíritus malignos, las brujas y los duendes o diablillos, todos ellos enemigos de las fuerzas benéficas en el mundo.
Hasta el siglo XVIII, se culpaban a estas fuerzas demoníacas de los estragos causados en la agricultura por plagas de insectos y enfermedad
En las plantas, por consiguiente en los tratados antiguos de agricultura abundan las recetas mágicas para controlar dichas plagas y enfermedades.
No fue sino hasta mediados del siglo XIX que comenzaron a aplicarse sistemáticamente los métodos científicos en el control de plagas agrícolas.
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