Introducción
Con el presente trabajo se propone lograr una aproximación al mundo de los sueños, y, más específicamente, a su interpretación desde la perspectiva psicoanalítica establecida por Sigmund Freud.
El tema ha sido elegido debido a que desde la Antigüedad, la interpretación de los sueños ha cautivado la curiosidad de filósofos; pero se vio fuertemente enriquecida por los aportes que, desde la Psicología Profunda (o Psicoanálisis) hizo Freud, los cuales consagraron esta práctica como método curativo.
La interpretación de los sueños lleva a un mejor conocimiento del inconsciente, y, por lo tanto, a un mayor crecimiento personal.
A lo largo del trabajo se analizarán los siguientes aspectos: el hombre y el psicoanálisis; el inconsciente y sus formas de exteriorización; los sueños (la realización alucinada y desfigurada de un deseo reprimido, contenido latente y contenido manifiesto, el sueño como guardián del reposo, restos diurnos); y el trabajo de interpretación de los sueños (asociación libre, resistencia.)
Plan
El hombre y el psicoanálisis
El inconsciente y sus formas de exteriorización.
Los sueños:
La realización alucinada y desfigurada de un deseo reprimido.
Contenido latente y contenido manifiesto.
El sueño como guardián del reposo.
El trabajo del sueño.
Restos diurnos.
El trabajo de interpretación:
Asociación libre.
Resistencia.
Desarrollo
La palabra psicología proviene del griego psyche, que se puede traducir como "alma". Sin embargo, decir que la psicología es el estudio del alma, la ciencia que se ocupa de la investigación de los fenómenos psíquicos no es suficiente; y es aquí donde se produce una disparidad de opiniones.
La concepción que cada uno tenga del ser humano influye en la idea de la psicología y de cuál debe ser su objeto de estudio. Existen cinco conceptos diferentes: concepción mentalista; del "organismo vacío"; maquinista; otras formas de constructivismo; y psicoanalítica.
A lo largo del tiempo se han ido desarrollando nuevas escuelas psicológicas que se adecuan a determinado conflicto con distintas concepciones acerca del hombre y su conocimiento.
Según la perspectiva de Melanie Klein, el individuo es un ser que está constantemente en conflicto, ya que a lo largo de toda su vida debe superar impulsos o sentimientos que son nocivos para su desarrollo, para alcanzar la felicidad y el equilibrio entre el mundo intrapsíquico y el mundo externo.
Por otro lado, y de acuerdo a la Escuela Conductista, el hombre está determinado por el factor del medio que lo rodea, y esto produce estímulos que lo condicionan a determinados actos. El objeto de estudio de ésta es netamente la conducta observable de los individuos.
Analizando la teoría de los psicólogos de la Escuela Humanista, el hombre es psicológicamente distinto de los animales; es bueno desde su concepción y además cada uno posee una naturaleza específica que le permite elegir mientras adquiere conciencia sobre la diferencia entre lo "bueno y lo malo". Por ser cada hombre distinto a los demás, debe ser tratado y estudiado de forma particular. Se debe evitar el uso de conceptos preestablecidos, a través de los cuales se puede explicar o interpretar la conducta de un colectivo, pero cada individuo asimila sus experiencias de una manera típica y personal, ya que es autónomo y aprende según sus patrones.
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