Un cambio trascendental en la didáctica a través del uso de procedimientos estimuladores
Enviado por Catalina Manrique
Introducción
Desde tiempos muy remotos el hombre se ha visto en la necesidad de comunicarse, de sociabilizarse en todos los ámbitos de su vida, ya sea en el familiar, en el laboral, de recreación, estudiantil, etc. sin embargo este proceso ha sido y seguirá siendo muy complejo pues lo que el hombre no ha comprendido es, que precisamente para que se de este cambio se requiere de propiciar el desarrollo de las habilidades en los niños y en los adolescentes mediante el uso de procedimientos estimuladores, para así poder formar personas que puedan pensar, sentir y actuar de manera independiente, que tengan la capacidad de resolver problemas dentro y fuera del aula .
La actividad humana hoy día exige cambios para poder cubrir sus necesidades, por tanto deben generarse espacios para poder cubrir las mismas y la escuela es el lugar idóneo en donde se pueden formar estudiantes desde otra perspectiva, en donde los procedimientos didácticos formen un complemento de los métodos de enseñanza para promover el análisis, la generalización, la búsqueda de las causas y consecuencias para poder, no solo interiorizar el conocimiento, sino también para lograr un intercambio de pensamiento, sentimientos y emociones logrando la formación de valores y actitudes que conllevará a la formación de la personalidad de los estudiantes.
El proceso enseñanza aprendizaje requiere de un gran compromiso, de una renovación didáctica en la forma en que el docente organiza y dirige sus clases, además de que se debe centrar este proceso en el alumno, propiciando el interés, la motivación y llevando un control de sus logros alcanzados en la adquisición de los conocimientos, habilidades y valores.
Hoy es una gran necesidad el ir en busca de una transformación en el proceso enseñanza-aprendizaje dentro de las instituciones, que rompa con los esquemas tradicionales que aún en la actualidad predominan en la práctica educativa.
No se debe dejar pasar por alto el papel importante que cumple el profesor al tratar de dar un giro trascendental en éste ámbito tan complicado, pero es necesario considerar muchos aspectos para lograr dicho objetivo; primeramente que los docentes nos reconozcamos como individuos que formamos parte de una organización que se relaciona entre sí, que tienen metas y objetivos comunes y que también debemos detenernos en el camino para reflexionar acerca de nuestro quehacer educativo, y sobre todo hacer conciencia de la encomienda principal que tenemos que es la de formar individuos de manera integral en una escuela de calidad.
Dentro del proceso educativo tanto el maestro como los alumnos son seres individuales y sociales que fungen como protagonistas de este proceso cuando entablan una relación dentro del aula, y es precisamente el maestro quien asume una gran responsabilidad ya que tiene en sus manos la definición de que tan efectivo puede ser el proceso enseñanza aprendizaje dependiendo de su preparación, el compromiso que tenga con su labor docente, además de las formas o medios que emplee para transmitir los contenidos pedagógicos.
El campo de acción de la didáctica rebasa la idea de que su misión es facilitar la transmisión de conocimientos, de manera fácil y rápida.
Hoy día se plantea una mayor reflexión y construcción de un concepto de realidad que permita plantearse una serie de interrogantes: ¿qué está pasando dentro de las aulas de los escolares? ¿Cómo se está desarrollando la relación entre el docente y el alumno? ¿Los docentes están posibilitando espacios para la discusión interactiva de los alumnos? ¿Se facilitan procesos motivacionales?, y el docente ¿está motivado para dar clase?
Facilitar la adquisición de los conocimientos es un proceso muy complejo y más aún para los profesores que tienen que planificar, organizar, y seleccionar cuidadosamente la información que manejan, pero sobre todo cuidar cuáles son los procedimientos que emplea para poder orientar y dirigir la actividad del alumno en el salón de clases, las herramientas que le permitirán formar un pensamiento divergente, que propicie la motivación, la creatividad, la autoexpresión y el interés en sus alumnos por adquirir su propio aprendizaje, como refiere el Dr. Mario R. Alemán es "ir más allá de la obligación de enseñar".
Por otra parte uno de los objetivos principales de la didáctica es enseñar a los alumnos a que se vuelvan autónomos, independientes, capaces de aprender a aprender, de poder ir más allá de lo externo del proceso, que puedan internalizar el conocimiento, además de que el docente promueva el análisis, la síntesis, la comparación, la generalización, la clasificación, la deducción, la demostración, la búsqueda de la esencia y de esta manera se forme a ciudadanos comprometidos consigo mismos, con su entorno y con la sociedad, este proceso nos lleva a la especialización de capacidades que se desarrollan en una forma más difícil de ejecutar traducido a las competencias para la vida a través de una didáctica desarrolladora.
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