- Patogénesis de las infecciones del tracto respiratorio inferior (TRI)
- Etiología de las infecciones del TRI
- Colección de muestras del TRI
- Valor del frotis por Gram en secreciones del TRI
- Procesamiento de las muestras del TRI
- Evaluación del cultivo bacteriano en infecciones del TRI
- Infecciones del TRI en pacientes inmunocomprometidos
- Bibliografía de interés
Introducción
"El cultivo de especimenes del tracto respiratorio inferior, puede resultar en el mayor esfuerzo innecesario que cualquier otro tipo de muestra"
Raymond Bartlett, M.D
Medical Microbiology : Quality Cost and Clinical Relevance.
1974, Edit. John Wiley & Son, New York.
Las palabras del Dr. Bartlett son tan ciertas hoy como hace tres décadas. Las enormes dificultades de obtener muestras representativas del sitio de la infección, los problemas de contaminación de las muestras, la determinación segura del agente infeccioso responsable del proceso, el valor de éstas muestras en el diagnóstico de las enfermedades respiratorias e incluso el valor de la antibioticoterapia en su control, son solo algunos de los aspectos que en mi opinión, hacen del estudio de las muestras del tracto respiratorio inferior ( TRI ), la de mayor dificultad con la que se enfrenta el microbiólogo.
Las infecciones del TRI son una de las más importantes causas de morbi-mortalidad, particularmente en niños y ancianos en el mundo. En éste sentido, la pneumonía es la principal causa de infecciones en la comunidad y la tercera causa de enfermedades nosocomiales, detrás de las infecciones urinarias y de heridas.
Debido a las características especiales de estos especimenes, se hace obligante una estandarización de los procesos diagnósticos, tal que la información generada por el laboratorio, constituya un elemento que aporte una utilidad clínica apropiada. Por lo anterior, ofrecemos a la consideración de los colegas de la microbiología el presente trabajo que pretende llenar éste cometido.
Lic. Eric Caballero J
Patogénesis de las infecciones del tracto respiratorio inferior (TRI)
Las dificultades en el aislamiento del agente etiológico de las infecciones del TRI, son un reflejo de la extraordinariamente abundante y variada flora normal de la cavidad orofaríngea. Esta cavidad puede tener un conteo de 10 ¹º a 10 ¹² UFC/ml. Son éstos microorganismos precisamente los principales responsables de la mayoría de las infecciones del TRI. Es por ello que los protocolos terapéuticos deben estar dirigidos a combatir la infección y no la colonización o la contaminación.
Para muchos de los agentes de las neumonías purulentas, la colonización del tracto respiratorio superior es seguida por la migración de los microorganismos a través de la capa mucociliar de los bronquios hacia los pulmones. La aspiración del contenido orofaríngeo, desempeña un papel importante en la patogenia de diversos tipos de neumonía. Ayudados por la gravedad y con frecuencia por la pérdida por parte del huésped de algún mecanismo protector no específico, los microorganismos alcanzan el tejido pulmonar donde se multiplican y atraen a las células efectoras. El conjunto de restos celulares y líquido contribuye a la pérdida de la función pulmonar y en consecuencia a la patología. Los agentes con cápsulas formadas por polisacáridos como Pneumococos, Klebsiella, Haemophilus, ciertos S. aureus y Criptococos , parecen ser más capaces de evadir la fagocitosis y, por lo tanto, de causar neumonía en pacientes sin una inmunidad humoral adecuada que se manifieste a través de anticuerpos específicos.
La aspiración de la flora colonizante dentro de los alveolos, es el principal mecanismo que inicia el proceso de la infección neumónica. Por lo general, antes de la aspiración, se observan cambios en la flora bacteriana menos benigna, a especies más invasivas o resistentes a los antibióticos, como ocurre con el S. pneumoniae o las Enterobacteriáceas. Hay consenso en afirmar que cualquiera invasión del árbol pulmonar, depende del balance entre los factores de virulencia, el tamaño del inóculo, de la especie aspirada, el estado del sistema inmune y la función respiratoria del paciente.
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