El comportamiento de las injurias auto-inflictas

Abstract

Until Armando Favazza pioneered in drawing attention to the phenomenon of self-mutilation, the field of psychiatry remained oblivious to its occurrence.

However, it was with the unleashing of the eating disorders epidemic during the sixth decade of the XX century when the phenomenon became widespread and gained further recognition, as bulimics in growing numbers became self mutilators along with a panoply of other impulsive behaviors. Today it seems as if a resurgence of self mutilation is in the offing with more cases being progressively reported.

At this point the phenomenology of self-mutilation remains unclear

Equally the etiology remains speculative, this author believing that the structural configuration of mimetic personalities with their projective identifications constitutes a decided factor in the adoption of this maladaptive solution to life"s demands by its victims.

In this article an analysis of this conduct is advanced and a case presentation is utilized, both serving the purpose of bolstering the author"s position to the understanding of the psychopathology of self mutilation.

"Soy gorda y fea": Para algunas mujeres este es el comienzo

Introducción

Siguiendo los preceptos establecidos por nuestro estimado colega Armando Favazza de la Universidad de Missouri Columbia, y atraídos por la singularidad del fenómeno de auto-mutilación, como con frecuencia se presenta en los adolescentes, en otros artículos hemos analizado la aparición de la auto-injuria (sin intención suicida) en sus aspectos psicológicos y transculturales, habiendo encontrado que éste se limita principalmente a la región geográfica que conocemos como "el mundo civilizado".

Asimismo creemos que dentro de ese "mundo civilizado" el comportamiento demuestra predilección por personalidades de constituciones miméticas.

Veamos de qué se trata el uso de la auto-injuria sin intento suicida

Desde los años sesentas del siglo pasado cuando se desató una epidemia de trastornos del comer (disorexias), se constató de manera anecdótica que las bulímicas eran personas impulsivas con tendencias a la auto-injuria — en la forma de cortes superficiales de la piel, especialmente, de la parte interna de los muslos — (preferiblemente para evitar detección), quemadas de encendedores y cigarrillos, haciéndolo como si quienes se dedicaban a estas prácticas derivaban placeres de las mismas.

Pero, por razones desconocidas, se ha constatado que la frecuencia de estos comportamientos, creídos desaparecidos, hoy continúa aumentando.

Esta última aserción ha sido documentada en estudios recientes que proponen que, desde el año 1997 al 2007, la frecuencia de estas conductas se ha duplicado.

Sin embargo, los científicos no están de acuerdo en el hecho de si es que estos comportamientos se están volviendo más prevalentes, o si es que los profesionales, estando más conscientes de su presencia, procuran reconocerlos y así, los detectan.

Define el ego

De todos modos, los datos son inconcluyentes ya que aún no se ha determinado, si es que la incidencia de estas actividades se ha incrementado luego de haberse nivelado, o si es que, sin haber aumentado en frecuencia, los profesionales los reportan con mayor repetición.

Sea como sea, definitivamente, la generalización de estas acciones, representa un tema de mucha importancia de salud pública.

Parasuicidio

Varios estudios recientes, han demostrado que cerca de un 17-28 por ciento de adolescentes y adultos jóvenes admiten que han practicado estas conductas en algún punto de sus vidas.

Los científicos están analizando este estilo de proceder (también conocido como para-suicida) tratando de contestar muchas preguntas, incluyendo las más importantes:

• ¿Por qué algunas personas se infligen daño y se causan dolor a sí mismas?

• ¿Existen individuos que están predispuestos a estos procedimientos auto-destructivos? y

• ¿Qué tipo de tratamiento es el mejor para ellos?

Personas que se apartan de lo común

Las consecuencias de estas actividades van mucho más allá del daño físico, solapando (como propuso Favazza en su obra clásica) entre ellas otras categorías diagnósticas:

Depresiones, ansiedades, psicosis, aislamiento social, trastornos del comer, problemas de auto-regulación — entre otras — incluyendo el riesgo ulterior acrecentado de intentar o de cometer suicidio.