Descargar

Al rescate de las ovejas heridas

Enviado por Omar Pérez


Partes: 1, 2, 3

  1. Notas del autor
  2. Prólogo
  3. Introducción
  4. Importancia del sanar las heridas en nuestro rebaño
  5. Razones para no dejar escapar una oveja de nuestro rebaño
  6. Consejos para los heridos
  7. En dependencia del tipo de problema es el tipo de solución
  8. Consejos para el consejero
  9. Consejos para el ofensor
  10. Conclusiones

Rom 12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

Notas del autor

Esto es un trabajo producto de una experiencia que tuve, experiencia lamentable que casi me hace tomar decisiones equivocadas. Entonces bombardeado de malas actitudes, busqué discernir lo correcto y lo incorrecto según lo que enseña la Biblia sobre dichos asuntos, un poco después quedó conformado parte de este estudio que como podrán ver se enfoca en denunciar algunos conceptos erróneos que nos obligan a practicar malas actitudes y así enseñarlas y hacerlas comunes en el pueblo de Dios. Quizás no se de el caso en su congregación, pero en todo caso es una alerta para todos. Algunos Pastores y líderes de mi zona leyeron y compartieron sus opiniones conmigo sobre el tema y creo que es importante que el pueblo de Dios en general conozca sobre lo delicado que es este asunto, donde todos casi sin excepción, nos hemos equivocado en algún momento hiriendo a personas o hermanos, sin darnos cuenta del mal que podemos acarrear. Disculparme si en varias ocasiones me refiero a las congregaciones o denominaciones como "Iglesias" es la costumbre en mi país disculpen cualquier error de concepto que pueda ocasionar, de lo demás me gustarían que cualquier recomendación me lo hagan llegar.

Antes de comenzar, quisiera que leyera con fe, esta oración para quitar toda barrera del enemigo.

Señor Jesús, gracias por ser nuestro salvador, gracias por que cada día nos renuevas con tu espíritu Santo, según nuestro corazón receptivo y nuestro deseo de crecer a tu semejanza. Te pido quites toda idea preconcebida y las barreras humanas de mi conciente, y sea tu Palabra la que me hable hoy, reprendo en tu nombre todo control del enemigo sobre mi mente, te la ofrezco preparada para escucharte y obedecerte, si hay algo que debas cambiar en mi y en mi Iglesia, hazlo. Prometo un corazón sensible a tus enseñanzas, me pongo en tus manos en este momento para que quites de mí lo que deba de ser quitado, tal como lo hiciste en el templo de Jerusalén, mas aún en mi cuerpo: templo de tu espíritu Santo.

En el Nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén

Col 3:10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,

Todas las citas son de la versión Reina Valera del 1960, a no ser que se indique lo contrario.

Prólogo

SALUDOS HERMANOS.

En estos tiempos, lamentablemente vemos hechos que no ayudan para nada el testimonio de la Iglesia: hermanos que se apartan de las congregaciones, heridos por otros hermanos ya sean pastores, líderes o nuevos convertidos. Murmuraciones entre hermanos, repercutiendo aún en otras denominaciones. Dudas y temores entre líderes. Chismes. Heridas profundas que tienden a apartar al convertido. Y lo más lamentable es que la Iglesia "el cuerpo de Cristo" está sufriendo en su propia carne las "lanzadas". Es por esto que con todo el respeto a la sabiduría y conocimiento de la palabra de muchos hombres de Dios, les expongo en este trabajo, como podemos enfrentar estas situaciones que entristece nuestro Espíritu Santo dándole terreno al verdadero enemigo, "el enemigo de Dios y del hombre".

Apo 3:18 Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas.

Introducción

Efe 4:23-24 y renovaos en el espíritu de vuestra mente, (24) y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.

Cuando dejamos ir una oveja herida, es una responsabilidad de nosotros (Jer 23:1) y más si somos los que le hemos ocasionado las heridas. Cuando cometemos estos pecados que repercuten tanto en otros y en la congregación, y no reconocemos nuestra responsabilidad arrepentidos dejamos abierta una brecha por donde Satanás entra en nuestros pensamientos, entonces nos atacan las ideas de que van a hablar de nuestras faltas y de lo que le hemos hecho, y tememos que contaminados por estas heridas y amargura nuestro testimonio se afecte, nos preocupamos entonces por todo aquel que escuche al hermano, deseando demasiado tarde tener el control, queremos explicar la situación y convencer de que no somos culpable, buscamos apoyo en oración nos sentimos amenazados no identificando el verdadero enemigo ni los verdaderos hechos responsables ,Nos preocupa que aquel que reciba al hermano llevado por la murmuración, se nos oponga y perder el control en otra relación de amistad.

Partes: 1, 2, 3
Página siguiente