– Desconecte los aparatos eléctricos desde la clavija, nunca jale el cable. Es importante mantener en buen estado tanto la clavija como el enchufe.
Refrigerador:
– Colóquelo en un lugar con espacio para permitir la circulación de aire.
– Instálelo en un lugar fuera del alcance de los rayos solares y del calor de la estufa.
– Compruebe que los empaques de la puerta estén en buen estado y en su lugar, para asegurar que cierre herméticamente.
– Gradúe la temperatura, colocando el termostato entre los números 2 y 3; en clima caluroso, entre los números 3 y 4. Así logrará el enfriamiento adecuado.
– Use un termómetro de carátula en el interior para verificar la temperatura. En el compartimiento de comida fresca debe estar entre los 3 y los 5° C y en el congelador en -15° C.
– El refrigerador es uno de los aparatos que consume más energía en el hogar.usarlo adecuadamente ahorra energía y reduce gastos.
Si tiene un congelador para almacenado a largo plazo, la temperatura deberá ser de -18° C.
– Verifique que el termostato esté en perfectas condiciones y que los ciclos se completen.
– No guarde los alimentos en el refrigerador mientras estén calientes.
– Tape bien los líquidos para evitar evaporaciones y la formación de hielo en el congelador.
– Para permitir la circulación del aire, no amontone charolas.
– Abra las puertas sólo cuando sea necesario y ciérrelas de inmediato para evitar que entre el aire caliente y se salga el frío.
– Descongele el refrigerador y limpie con un paño húmedo el cochambre que se acumula en la parte posterior por lo menos cada dos meses.
– Limpie los tubos del condensador ubicados en la parte posterior o inferior del aparato por lo menos dos veces al año.
– Recuerde darle mantenimiento periódico para prevenir fugas.
Si va a comprar un refrigerador nuevo, compare precios, capacidad y consumo de energía. Revise la etiqueta de eficiencia energética, que significa que ese aparato cumple con las normas oficiales. Recuerde que los de deshielo automático consumen 30% más de electricidad y eso redunda en mayores gastos.
Plancha
– Revise la superficie de la plancha para que esté siempre tersa y limpia; así se transmitirá el calor de manera uniforme.
– Planche de preferencia durante el día.
– Rocíe la ropa ligeramente sin humedecerla demasiado.
– Planche primero la ropa que requiere menos calor y continúe con la que necesite más, a medida que la plancha se calienta. Desconéctela poco antes de terminar para aprovechar la temperatura acumulada.
– Trate de planchar la mayor cantidad de ropa en una sola sesión. Conectar muchas veces la plancha gasta más energía que mantenerla encendida pro un rato.
La plancha es otro de los aparatos que consume mucha energía, utilizarla de manera ordenada y programada ahorra energía y reduce los gastos.
Lavadora
La lavadora nos facilita la vida.
Usémosla de acuerdo con su capacidad y posibilidades para lograr el ahorro de energía y la reducción de gastos.
– Llene la lavadora con la carga de ropa apropiada de acuerdo con su capacidad. Si se pone menos ropa se gastará mucha agua y electricidad; si se sobrecarga, la ropa quedará mal lavada.
– Utilice sólo el detergente necesario; el exceso produce mucha espuma y hace trabajar al motor más de lo conveniente.
– Remoje las prendas antes de lavarlas para evitar un doble lavado.
– Disminuya las sesiones de lavado por semana.
– Utilice la secadora de ropa sólo cuando sea indispensable; aproveche el Sol para secar la ropa y eliminar bacterias.
Televisión
– Encienda la televisión sólo cuando realmente quiera ver un programa.
– Reúna a todos los miembros de la familia ante un mismo aparato televisor, cuando quieran ver el mismo programa.
– Mantenga bajos los niveles de iluminación en el lugar donde vea la televisión, así evitará los reflejos y ahorrará energía.
– Use el reloj programador (sleep, timer); de esta manera el aparato se apagará cuando usted lo decida.
– Encienda el televisor sólo cuando esté dispuesto a ver algún programa; así logrará ahorrar energía y reducir gastos.
Licuadora
La licuadora, ese aparato que tanto usamos en la preparación cotidiana de los alimentos, también nos permite ahorrar energía y reducir gastos.
– Revise que las aspas siempre tengan filo y no estén rotas.
– Evite el triturado de piezas enteras o semillas y especies en seco, ya que se fuerza el motor.
– Muela de preferencia todas las porciones que se van a necesitar de una sola vez, en lugar de hacerlo por partes.
– Revise minuciosamente el buen funcionamiento del aparato y mantenga limpios sus componentes.
El ahorro de gas en la cocina
– Mantenga cerrados los pilotos de la estufa y enciéndalos sólo mientras esté cocinando.
– Forre con papel aluminio las hornillas de la estufa para que el calor se refleje hacia arriba.
– Cierre la llave del gas inmediatamente después de usarla.
– Utilice ollas y sartenes de diámetro igual o ligeramente mayor que el de la hornilla y con el fondo totalmente plano.
– Utilice de preferencia la olla de presión; por lo general los alimentos se cuecen más rápidamente de este modo.
– Tape bien las ollas; así no se desperdicia el calor.
– Use poca agua cuando cocine en baño María para que el calor pase más rápidamente.
-Saque con anticipación, del congelador los alimentos que preparará. Así evitará consumir energía para descongelarlos.
-Utilice el horno sólo cuando tenga que preparar o calentar mucha comida. Se gasta menos energía cuando se usan las hornillas.
– Apague el horno un poco antes de que los platillos estén listos. Éste conservará suficiente calor para terminar la cocción de los alimentos.
– Controle el tiempo para hornear cada platillo y abra el horno el menor tiempo y lo menos posible para que no se salga el calor.
– Prepare comida fría por lo menos una vez a la semana.
El ahorro de gas en el calentador
El calentador permite cotidianamente el ahorro de energía y la reducción de gastos.
– Instale el calentador lo más cerca posible del lugar donde se usa el agua.
– Utilice preferentemente calentadores de paso que sólo se encienden cuando es preciso.
– Ajuste la temperatura al nivel mínimo necesario.
– Revise que no haya fugas de gas ni de agua para evitar peligros y gastos innecesarios.
– Cierre la llave del gas por la noche o cuando no se utilice, sobre todo al salir de vacaciones.
– Utilice agua fría cuando la caliente no sea indispensable.
– Trate de que los miembros de la familia se bañen uno después de otro; esto permitirá encender sólo una vez el calentador.
APARATOS DE CLIMATIZACIÓN
Hay tres aparatos que pueden brindarle comodidad durante la época de calor: el ventilador, el aire lavado o cooler (humidificador de ambiente) y el aire acondicionado.
Ventilador
En clima cálido seco, utilice aire lavado o cooler en lugar de aire acondicionado; es más económico y consume menos energía.
– Conserve las aspas limpias.
– Vigile la instalación de los ventiladores de techo: una instalación inadecuada puede resultar peligrosa y además consumir mayor cantidad de energía eléctrica.
Aire lavado o cooler
– Límpielo a fondo y píntelo correctamente cada vez que lo requiera, con el fin de evitar la posible oxidación.
– Revise periódicamente los cables y cambie los que estén dañados.
– Engrase las partes mecánicas del motor y chumaceras.
– Revise el funcionamiento adecuado de bandas, poleas y bombas de agua.
– Nivele el equipo.
– Reemplace la paja o espen de las paredes.
– Coloque el equipo en lugares sombreados.
– Revise que no haya obstrucciones a las corrientes de aire, tanto interiores como exteriores.
Para refrescar el clima use los aparatos adecuados conforme a sus necesidades.
Ahorre energía y disminuya sus gastos.
Aire acondicionado
– Desconecte el aire acondicionado al salir de la habitación.
– Adecue la temperatura del aire acondicionado para dormir sin cobijas. Si dispone también de un ventilador, es aconsejable que al estar fría la habitación se apague el aire acondicionado y sólo se encienda el ventilador. De esta manera, la habitación se mantendrá fresca y no se gastará tanta energía.
– Lleve a cabo una limpieza general del equipo, quítele todo el polvo y el moho.
– Pinte la unidad para evitar su oxidación, si es necesario.
– Revise periódicamente si la unidad necesita gas refrigerante.
– Cuide que el motor, los alambrados y el termostato funcionen correctamente; en caso contrario, repárelos utilizando el accesorio adecuado.
– Limpie el filtro de aire cada 15 días. Los filtros sucios y los depósitos saturados de polvo provocan que el motor trabaje sobrecargado y reduzca su utilidad.
– Dé mantenimiento a todo el equipo cada año. Está comprobado que los aparatos de aire acondicionado que tienen 2 años o más sin mantenimiento consumen el doble de energía.
– En verano evite que los rayos solares caigan directamente sobre las ventanas
– Utilice toldos, aleros inclinados, persianas o cortinas con recubrimiento de aluminio, polarizado de vidrios o películas plásticas.
– Al comprar un equipo de aire acondicionado, verifique que tenga la capacidad necesaria y nunca superior a la que usted requiera.
LOS AISLAMIENTOS TÉRMICOS
Las comodidades que generan la calefacción y el aire acondicionado nos permiten que la vida sea agradable en el hogar. Además con los aislamientos térmicos ahorramos energía y reducimos gastos.
El aislamiento térmico permite ahorrar hasta 50% de la energía que se utiliza para la calefacción o el aire acondicionado. Para lograrlo, puede realizar lo siguiente:
– Mantenga puertas y ventanas cerradas. Ábralas sólo cuando sea indispensable renovar el aire: el mejor momento para renovarlo es cuando el aire exterior está fresco.
– Tape y selle todo tipo de hendiduras para asegurar que el aire acondicionado quede perfectamente aislado (cambie vidrios rotos, selle orificios por los cuales pueda escaparse el aire). Lograr un óptimo aislamiento térmico permite protegerse mejor del frío en la temporada invernal.
– Revise que todos los conductos estén debidamente aislados si el aire acondicionado es integral.
– Aísle la pared; esto generalmente requerirá 2/3 del espesor que se aplique al techo.
EL AHORRO DE ENERGÍA EN EL AUTOMÓVIL
– Afine el motor periódicamente; con ello se consume menos energía y se contribuye a disminuir la contaminación ambiental.
– Mantenga las llantas a presión normal.
– No acelere ni frene bruscamente.
– Caliente el motor menos de un minuto.
– No llene el tanque de gasolina hasta que se derrame.
– Evite llevar artículos innecesarios dentro del automóvil.
– Procure utilizar su automóvil lo menos posible. Se recomienda viajar en forma colectiva, planear por escrito tanto la ruta diaria, como las compras y efectuarlas una vez a la semana o quincenalmente.
– Al comprar un auto nuevo compare el consumo de gasolina de los diferentes modelos y tome en cuenta este factor antes de decidirse por alguno.
– Trasladarse de un lugar a otro es necesario, no así el hacerlo siempre en auto. Si es posible camine, si no, utilice de preferencia el transporte colectivo.
Bibliografía
1.- BUSTAMANTE Waldo, USO EFICIENTE DE LA ENERGÍA EN EL HOGAR, ED Mujeres tecnologías, 1997.
2,- INCHAUSTEGUI VARGAS, Juan, ENERGIA, ED San Marcos, 1994
3.- http:/www3.rincondelvago.com/apuntes/documento.php?00001386
4.- http://www.monografias.com/trabajos/fuentesener/fuentesener.shtml
Autor:
Carmen Pastora
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