Resulta por momentos desconcertante intentar entender lo que implica la globalización. Si algo es claro es lo complejo del mundo actual, si se intenta explicar desde conceptos tales como lo global, la sociedad mundial, la traslocalización, la deslocalización, la globalidad. Más que explicar todos los anteriores, se pretende demostrar que si bien es cierto que los medios masivos de comunicación permiten acceder a voluminosas e instantáneas informaciones, también se esta lejos de entender las complejidad de relaciones que se manifiestan, cuando se enciende el televisor o la radio, se ingresa a la red o se compra un producto en el supermercado o tienda de barrio.
Inicialmente se puede indicar que la exploración europea del los siglos XIV y XV puso en el tapete la posibilidad de flanquear barreras naturales para poner en contacto a las personas, pero el no consentir que se podía compartir un tiempo y un espacio impidio entender las consecuencias de eventos a escala planetaria mutuamente conectados. Al respecto Held, D. (2007) indica que: "La globalización no es ninguna novedad. Ha habido muchas fases de globalización en los dos últimos milenios, entre los cuales se encuentran… la era de los descubrimientos y la expansión de los imperios." Sin embargo, es inevitable pensar en el trastorno sobre los imaginarios colectivos que causo en aquella época, el tener como hecho demostrado, que otras personas participaban de este devenir histórico que significa vivir en el planeta y por supuesto lo que eso podría significar en términos culturales, sociales, económicos, etc. ¿Qué tipo de predicciones harían estos hombres medievales sobre lo que le deparaba al mundo en el futuro (Nuestro presente)?
Actualmente es innegable que el desarrollo tecnológico obliga a compartir tiempos y espacios virtuales y físicos, llevando a desvirtuar imaginarios colectivos sobre las fronteras nacionales. Es así como ese estado que se consolida en el siglo XIX, el estado nación, el cual luego de disputas territoriales consolida sus fronteras, se deshace en la mente de sus habitantes. Para BecK, U. (1998: 29) la globalización se refiere a "los procesos en virtud de los cuales los Estados nacionales soberanos se entremezclan e imbrican mediante actores trasnacionales y sus respectivas probabilidades de poder, orientaciones identidades y entramados varios". Por supuesto, como dice Beck (1998:31) seria difícil entender esta transnacionalidad sin considerar su autopercepción a partir de dos elementos de gran importancia, los medios masivos de comunicación y el consumo. Aquí la información y su administración, tienen un papel protagónico cuando de comprender los complejos fenómenos que se desarrollan en un mundo se trata.
Estas intrincadas redes, hacen de lo transnacional, importante para entender de lo que se hace parte cuando se adquieren productos y servicios. Lo que se exhibe allí como objeto inanimado, en el estante de un supermercado o lo que se expone en un mensaje radial o televisivo, aunque parezca natural (ahistórico), realmente es un proceso definitivamente histórico, es decir hay un momento de inicio y un devenir que lo muestra como esta en el presente, que a su vez, permite hacer explicitas relaciones de poder. Así, consumir productos o mensajes propicia un valor, si se quiere, agregado y por supuesto, adquirirlo, legitima en cierta forma, una postura de los consumidores. Eso último puede ser leído como una postura radical, sin embargo, se pretende que se entienda lo radical desde el concepto de Freire (2002), como la postura crítica, que no puede dejar de señalar la forma como decisiones de quienes ostentan el poder, deben ser desveladas para su comprensión
Por tanto, las relaciones de dominadores y dominados, que permiten tener, cierto producto o servicio, hace parte de las informaciones que deberíamos conocer para tomar postura ante el consumo. ¿Qué permite a la Mac Donalds ser un milagro económico, inclusive en momentos de crisis mundial, reportando apertura de nuevas sedes y crecimiento de su capital? Entre otras, nunca informa como manipula gobiernos para permitir que en Estados Unidos, una porción de papas con gaseosa y hamburguesa tan solo cueste un dólar o dos. En este caso particular cabe citar a Apple, M. (2007: 144), cuando expresa lo que sucede en un país asiático en relación con una empresa la cual nunca es identificada como Mc Donald, pero que se deduce. Al respeto y refiriéndose a esta como la "corporación" dice:
"La corporación estuvo ansiosa de saltar, de la oportunidad de cambiar una gran parte de su producción de papa en Estados Unidos, a Asia. Debido a que muchos de los trabajadores agrícolas en Estados Unidos eran sindicalizados y estaban (como era dado) demandando un salario apropiado y a que el gobierno de esa nación asiática oficialmente arremetió contra los sindicatos de cualquier tipo, (y) el costo del cultivo de la papa sería más barato."
Que luego complementa diciendo:
"Además la tierra de esa llanura era perfecta para el uso de la reciente tecnología desarrollada para plantar y coger la cosecha con muchísimos menos trabajadores, Las maquinas reemplazaban a los seres humanos. Finalmente el gobierno se preocupo menos por las regulaciones ambientales. Por todo, está fue una linda ganga para el capital"
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