La Estatua a Satán: La Reseña Psicoanalista del Banquero, Político y Economista?
Enviado por Felix Larocca
El Ángel Caído del Cielo. Parque del Retiro, Madrid. (Ricardo Bellver 1845-1924)
Es la única estatua del mundo dedicada al diablo y está en plena vista en Parque de El Retiro. El Ángel Caído fue erigido en 1874 por iniciativa del duque Fernán Núñez.
Haciendo oídos sordos a las protestas de la sociedad madrileña de la época, que estaba escandalizada ante la idea de levantar un monumento a Satanás, el osado duque donó la cantidad de 11,000 duros para llevar a cabo el proyecto. De nada sirvieron las maniobras de los sectores más reacios a su realización. Sólo unos meses después, el 23 de octubre de ese mismo año, la estatua del Ángel Caído fue desvelada.
El conjunto artístico, que es una cita obligada para todo turista que pasa por la capital de España, tomó su nombre de una escultura que representaba la caída de Luzbel. Su autor, Ricardo Bellver, fue premiado por esta misma obra en la Exposición Nacional de 1878.
Es la estatua, en la capital de la Madre Patria, dedicada a nuestros buitres barbudos…
Nuestros países, gracias a los políticos, viven en la bancarrota, nuestros banqueros, sin escrúpulos continúan saqueando nuestros recursos, mientras que son asistidos por el político y el economista.
¿Es éste un fenómeno natural que se explica de algún modo coherente?
¿Por qué tantos países, tantos bancos, tantos políticos y tantos banqueros emergen simultáneamente en tiempo y espacio, para hacer los mismos escamoteos en regiones muy distantes entre ellas?
La Naturaleza y la Historia, nos dicen que sí. Que la emergencia simultánea de este fenómeno, en tantos lugares, nos indica que estamos en medio de un cambio paradigmático y aún benéfico en la dirección futura de los países afectados.
¿Por qué tantos hombres caerían, como Lucifer lo hiciera, sin pensar en las consecuencias penosas de sus comportamientos?
Y, más importante aún: ¿Por qué Dios o la Naturaleza, dejaron que esto pasara?
¿Fue la Naturaleza que medió los eventos, o fue la estructura psicológica de los hombres (y mujeres) mismos que los propiciara?
La respuesta es simple: Fueron ambas.
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