Descargar

Antropogénesis según Steiner


Partes: 1, 2, 3

    1. El origen y desarrollo  de las Razas Humanas
    2. El desarrollo del 4º Principio
    3. La institucionalización en el hombre de su alma individual
    4. La vuelta a la tierra tras el pralaya planetario
    5. Los Espíritus raciales y los Elohim, Espíritus de la Forma
    6. Las Jerarquías Espirituales y los Dhyani Choans
    7. Los Rayos de influencia de los Elohim y de los Logos planetarios
    8. Las líneas raciales y los Espíritus de la Raza
    9. El desarrollo final de las Razas Atlantes

    El origen y desarrollo  de las Razas Humanas

             Siendo como han sido numerosos los estudios e investigaciones esotéricas sobre el origen y desarrollo de las razas humanas a lo largo de la historia de nuestro planeta, y contando como hemos de hacerlo con las distintas interpretaciones de las diversas tradiciones religiosas y espirituales, además de las distintas investigaciones tanto científicas como antropológicas conocidas en los ámbitos técnicos, es evidente a estas alturas que son muchos los puntos que todavía quedan sumidos en la clave del misterio, y por tanto sujetos a todo tipo de presunciones e hipótesis.

             Partiendo de los estudios y tratados que en tal sentido nos han legado los principales autores teosóficos que han investigado sobre el tema, como son en primer lugar Helena P. Blavatsky en su enciclopédica "Doctrina Secreta", y en su misma estela de influencia teósofos como Annie Besant y Leadbeater, William Judge o A. Sinnet, y hasta posteriormente las incursiones sobre el tema intercaladas en los textos de Alice Bailey, nos encontramos con interpretaciones a veces diversas sobre algunos temas, que obviamente han quedado en el enigma de lo incógnito y arcano, y ha sido en su momento Rudolf Steiner quien ha venido a introducir, como resultado de sus propias investigaciones, toda una serie de novedades y particularidades, que, sin apartarse radicalmente o de manera esencial de la línea interpretativa general adelantada inicialmente por la Sra. Blavatsky, clarifica algunos puntos de particular interés que trataremos de referir sucintamente en este artículo.

     

     

             Así como hay un acuerdo generalizado indubitado acerca del origen común e indistinto de todas las Mónadas humanas, ha habido diferentes posiciones acerca del origen  de la diversidad y distinción de las razas, así como de la interpretación causal de los rayos y características diversificadas que han dado lugar en su momento al nacimiento y desarrollo tanto de los diferentes pueblos, civilizaciones, culturas y naciones, con sus peculiares y propios rasgos distintivos. Y Steiner, haciendo uso de los dones de clarividencia propios de su graduación iniciática y de su misión esotérica, pudo introducirse en las esferas correspondientes a las cadenas y manvántaras previos al nuestro que clarificasen tales misterios en buena medida, y extrayendo esos conocimientos ocultos de los llamados Archivos Akhásicos, nos los ha transmitido fundamentalmente a través de las miles de conferencias que prodigó a lo largo de su existencia.

    El desarrollo del 4º Principio

             La misión esencial de la Tierra, decía en tal sentido Steiner, es sin duda el desarrollo del 4º Principio Humano: el Ego, el cuerpo mental inferior, es decir el Yo separativo o Kama Manas, y ello como resultado del desenvolvimiento previo en Cadenas y Manvántaras anteriores de los tres Principios básicos que conforman la estructura fundamental del ser humano. De manera que en la primera Cadena o Manvántara, correspondiente al antiguo Saturno, se desarrollaron los fundamentos del cuerpo físico en su fase mineral, en el segundo Manvantara, llamado del Sol, se consolidaron los fundamentos del cuerpo etérico del hombre y su fase vegetal, y en el tercero, el de la vieja Luna, se desarrolló el tercer principio o cuerpo astral del hombre, en su vivencia animal.

            

    Partes: 1, 2, 3
    Página siguiente