- 1. ¿Estoy mal? ¿Cuándo acudir al psicólogo?
- 2. ¿Qué es la salud mental?
- 3. ¿Cuándo acudir al psicólogo?
"El 90% de lo que sabemos sobre el cerebro humano lo hemos aprendido en la última década"
Desde la infancia, nos ha llamado la atención la grandeza e inmensidad del Universo. Vivir la experiencia de contemplar las estrellas en una noche despejada, aparte de ser un espectáculo estético inigualable, es una magnífica cura de humildad. Sin embargo, es sorprendente la escasez de datos de los que realmente disponemos sobre el Cosmos. Así, siempre nos ha intrigado la idea de los "agujeros negros". ¿En qué consistían? ¿Por qué se denominaban "negros"? ¿Se podría quedar alguien atrapado y entrar en una situación de "no retorno"?
La misma sensación la hemos experimentado cuando nos relacionamos con las personas a través del asesoramiento psicológico. Intentar comprender al ser humano es una tarea apasionante. Tras una serie de años en contacto directo con "el alma que sufre", no nos dejamos de sorprender con las miserias y grandezas de las personas y permanentemente se intuyen y vislumbran zonas o "agujeros negros" a los que resulta difícil acceder. Igualmente, nos interpela la pobreza de conocimientos para explicar esos procesos cognitivos. No en vano, durante siglos todo lo relacionado con la salud mental ha estado rodeado de un cierto misterio o halo enigmático. No es raro que incluso hoy en día sea campo abonado para todo tipo de supersticiones y "pócimas mágicas" de supuestos videntes o gurús que se presentan como salvadores para solucionar cualquier problema que tenga que ver con lo que popularmente se describe como "estar mal de los nervios".
Salvando las distancias, podríamos establecer algunas comparaciones entre los "agujeros negros" del universo y la mente humana. Según los científicos un "agujero negro" es una región del espacio–tiempo de la cual ni siquiera la luz puede escapar debido a la enorme intensidad de su gravedad. ¿Qué podríamos resaltar respecto a ambos "agujeros negros"?
Presentan una impresionante capacidad para retener toda la materia contenida en su interior. Muchos conflictos psicológicos cobran tal fuerza e intensidad que consumen todas las energías de la persona que los sufre.
No son fáciles de observar desde el exterior. Son "tan negros" que no pueden captarse a simple vista o con un telescopio, y sólo se pueden "sentir" los efectos gravitacionales producidos por su enorme masa. No hay áreas orgánicas o físicas en la que podamos ubicar los trastornos mentales, pero si somos conscientes de sus consecuencias. Quizá no dispongamos actualmente de la tecnología adecuada.
A su vez, absorben cualquier objeto con masa que caiga en su campo gravitacional. Las personas con problemas psicológicos están tan ensimismadas que hacen que todo gire a su alrededor y pueden "succionar" como "vampiros emocionales" a todos aquellos con los que se relacionan.
Manifiestan una gran dificultad para poder emitir la luz. Los sujetos que piden ayuda psicológica tienen graves problemas para expresarse y salir fuera de sí.
En el interior de un agujero negro el espacio y el tiempo desaparecen. El reloj se detiene y las leyes de la naturaleza no rigen. Hay individuos que viven "atrapados en historias personales". Así, algo que ha ocurrido hace muchos años puede seguir actuando en el presente.
1. ¿ESTOY MAL? ¿CUÁNDO ACUDIR AL PSICÓLOGO?
"La mayoría de los hombres llevan sus vidas en callada desesperación."H. D. Thoreau
Para bien –sobre todo de los profesionales de la salud mental– o para mal, la Psicología está de moda. Hoy más que nunca determinados términos propios del entorno psicológico han pasado a ser de uso general: "Antonio tiene una crisis de ansiedad", "Isabel está atravesando una depresión", "Los Pérez van a un psicólogo para ver si salvan su relación de pareja", "Pedro acude a un grupo de terapia"…
¿Qué nos pasa? ¿Nos sentimos débiles y por tanto más necesitados de ayudas externas? o quizá, ¿gracias a un mayor nivel cultural, hemos descubierto nuevos procedimientos para madurar y afrontar mejor las situaciones adversas de la vida? No es raro que dentro de un contexto cultural de profundas tradiciones religiosas, algunos, en tono irónico, describan la situación como si la disminución del uso del confesionario haya sido proporcional al aumento de las consultas psicológicas.
El tema no es superfluo o para tomarlo a broma. Somos uno de los países con mayor nivel de consumo de psicofármacos. ¿Estamos tan mal psicológicamente? Si es así, ¿cuándo deberíamos acudir a un profesional de la salud mental?
1.1. ¿QUÉ HAY QUE ENTENDER POR ALTERACIÓN PSICOLÓGICA?
"Una definición de la ‘locura’ sería querer repetir el mismo comportamiento una y otra vez y esperar resultados distintos."
Página siguiente |