Fue examinada integralmente la influencia del uso intensivo y continuado que presentan los suelos en cada uno de los niveles altimétricos que conforman la sección; los cuales de acuerdo a Hernández et. al (1999), fueron clasificados como Ferralítico Rojo Lixiviados (véanse descripciones en Anexo). La escasa protección que ofrecen los cultivos varios y temporales, propician el surgimiento de la erosión por impacto y el enérgico escurrimiento (areal y encauzado), durante cada episodio de gran intensidad en conformidad con el desarrollo y mantenimiento de las pendientes (Obsérvese UME "Canalete". Anexo 3.2.)
A diferencia de la Sección I – I el comportamiento espacial de las propiedades de los suelos (Tabla 3.3.), muestra un notable déficit de las fracciones menores a 0,002 mm tanto vertical como longitudinalmente, en correspondencia con las formas del micro relieve y dinámica de la erosión, mucho más enérgica en este sector.
En efecto, en el Perfil C 4 (Moderadamente erosionado). ubicado en el tercio superior de la sección, sobre la superficie de planación más antigua y elevada del territorio (obsérvese Sección II – II), destinada casi permanentemente a cultivos alternantes (fundamentalmente tabaco, maíz y yuca), resultó evidente el desprendimiento y migración areal de pequeñas partículas (Tabla 3.3.), cuyo ritmo mantiene relación directa con los valores diferenciados de la lluvia y el escurrimiento areal, como con la intensidad y dirección de las labores de preparación de suelos a favor de la pendiente general, originando un notable descenso secuencial y diferenciado del solum, especialmente el cercano a la superficie (nivel de 0 – 10 cm.), mostrando bajos porcentajes de las fracciones menores a 0,002 mm con 45,87 %, que incluso se mantienen hasta al nivel de los horizontes A + B 0-50 cm con valores promedios de 53,73 % , resultados similares obtuvieron Roose (1981); Ballif (1990) y Amézquita et al.(2004).
Asimismo subsuperficialmente al nivel de 0 – 40 cm. se advierte para todo el transepto un horizonte o capa compactada (Tabla 3.3), que debe influir tanto en los movimientos internos del suelo, provocando el lavado lateral de las arcillas, como dificultar la percolación profunda de las aguas en el perfil, condición que ha sido examinada por Orellana y Moreno (2001); Orellana; et. al. (2006) y Crespo et. al. (2006).
Tabla 3.3 Comportamiento de algunas de las propiedades físicas de los suelos por efecto de la erosión Unidad morfoedafológica I "Canalete". Sección II – II.
Esta intensa degradación representada por el perfil C4 (Moderadamente erosionado), ha sido consecuencia de la intensidad de los sistemas empleados en la unidad, según las normas para el laboreo de los diferentes cultivos, orientada por el Ministerio de la Agricultura, que producen transformaciones en el estado estructural de estos suelos, lo cual ha recibido diferentes denominaciones; entre ellas: "perfil cultural" Henin et.al. (1972); "degradación irreversible" Orellana y Moreno (2001); "formación agrogénica de los suelos" Shishov et.al (2004) y Tonkonogov y Guerasimova (2005).
En este contexto, una de las propiedades físicas más desfavorablemente afectadas, es la compactación, directamente condicionada por la densidad aparente e influida por la erosión, este comportamiento se incrementa con la profundidad y fundamentalmente al nivel de 0 – 20 cm. sobre todo en los perfiles C4 (Moderadamente erosionado) y C5 (Moderadamente erosionado), con valores que se corresponden con los suelos ya compactados (densidad del suelo = 1,30 Mg.m -3 ), según la apreciación cualitativa propuesta por Kachinski, citada por Kaurichev et.al. (1984).
No obstante cuando los sistemas tradicionales de preparación de los cultivos, crean condiciones de mullimiento superficial (nivel 0 – 20 cm.), que coexistan con un estado de sequedad del suelo, las erosión eólica también puede manifestarse. Algunos investigadores, principalmente Chepil (1950 y 1951), han determinado que el grado de erodabilidad varía con la raíz cuadrada de la densidad aparente.
La porosidad total por su parte al nivel de la profundidad de 20 cm, se caracteriza para todo el transepto por volúmenes comprendidos entre 48,5 % para C4 y C5 (Moderadamente erosionado) y 51 % para el segmento de la microladera representado por C6 (Sin erosión aparente) (Tabla 3.3.), disminuyendo generalmente con la profundidad en oposición con el aumento de la densidad aparente, pero en conformidad con la disminución de la materia orgánica (Tabla 3.4.). La misma se evalúa de baja para todos los suelos de la sección; coincidiendo estos valores con los reportados por el Instituto de Suelos (1980), Klimes et al. (1980), Dirección Nacional de Suelos y Fertilizantes (1981), Cairo y Quintero (1994).
Tabla 3.4.Comportamiento de algunas las propiedades físico – químicas y químicas de los suelos por efecto de la erosión Unidad morfoedafológica I "Canalete". Sección II – II
3.2.3. Unidad morfoedafológica II. "Ceja del Río". Sección I – I
En la fase de diagnóstico erosivo se constató que el uso intensivo y continuado de los suelos con predominio casi permanente del cultivo del tabaco y otros temporales, favorece el desprendimiento y migración areal de las fracciones más finas a un ritmo directamente relacionado con las velocidades energéticas de las gotas de agua, originando un descenso secuencial del solum hacia las flexuras cóncavas del microrelieve las que actúan como niveles de bases locales para los productos de la erosión generados en superficies automórficas vecinas. No obstante y a diferencia de la UME "Canalete", esta unidad posee un ambiente de mayor estabilidad geomorfológica, pero caracterizada por las mismas prácticas de preparación de suelos, ausentes en general de toda de estrategia de conservación de suelos (Fig.3.6).
Fig.3.6. Efectos de la erosión en UME II. "Ceja del Río". Sección I – I
Influencia de la erosión en el comportamiento de las propiedades físicas
En el reconocimiento morfogenético se diferenciaron fenómenos que se desarrollan como consecuencia de la erosión. En este sentido, aún cuando las condiciones edafoclimáticas son muy semejantes respecto a la UME I "Canalete", el desarrollo y mantenimiento de las pendientes muestran una dinámica diferente, de acuerdo a la clasificación de elementos de pendientes propuesta por Troeh (1965) (Véase Sección I – I. UME "Ceja del Río").
De hecho, los perfiles C10 y C11 (Moderadamente erosionados) inscritos en una de las flexuras convexas del tercio superior de la macrovertiente y de menor estabilidad microgeomorfológica, denotan un comportamiento diferenciado en los resultados del análisis mecánico (Tabla 3.5.).
Tabla 3.5. Comportamiento de las propiedades físicas de los suelos por efecto de la erosión Unidad morfoedafológica II "Ceja Río". Sección I – I
Así, los perfiles C10 y C11 (Moderadamente erosionados) a la profundidad 30 cm. muestran un promedio de las fracciones más finas (<0,002 mm), de 49,49% y 49,88% respectivamente las más bajas para todo el transepto.
Sin embargo; en la medida que esta pendiente evoluciona hacia formas de mayor estabilidad morfogenética, donde la alteración profunda y la remoción difusa de las partículas, comienza a descender, se advierte, un progresivo aumento de estas mismas fracciones (iluviación), lo cual se expresa en el Perfil C12 (Sin erosión aparente), no solo en superficie sino en profundidad, lo cual es representativo para este sector de la unidad, a conclusiones similares arribaron Frómeta (1983); Durán y Salinas, (1986); Delgado (1987); Frómeta et. al. (2006) en otras coberturas ferralíticas.
Influencia de la erosión en el comportamiento de las propiedades físico – químicas y químicas.
En el análisis del comportamiento de las principales propiedades por efectos de la erosión (Tabla 3.6.), es posible apreciar ciertas diferencias. En efecto, en el sector de la vertiente representado por el perfil C10 (Moderadamente erosionado), el potasio se mantiene bajo en todo los perfiles el perfil con valores comprendidos entre 0,08 y 0,02 Cmol (+).Kg-1 al nivel del solum.
Por otra parte llama la atención que en el sector de la pendiente representado por el perfil C12 (Sin erosión aparente), los contenidos de calcio y magnesio son semejantes a los de los perfiles C11 (Moderadamente erosionado) y mayores en relación al segmento de la micro ladera representado por el perfil C10 (Moderadamente erosionado), lo cual pudiera atribuirse a la poca aplicación de enmiendas cálcicas, al uso intensivo a que históricamente ha estado sometida esta unidad (sucesión tabaco – maíz) y a la movilidad característica de estos elementos.
El comportamiento de forma general de las propiedades físico – químicas y químicas se asemeja a la de la UME I."Canalete" Sección I -I, fundamentalmente en el tercio medio – inferior, donde progresivamente la dinámica de los procesos erosivos es menor, al existir un ambiente de mayor estabilidad geomorfológica, resultado que coincide con los reportados por Izquierdo et. al. (1990), en ambientes de laderas.
Tabla 3.6. Comportamiento de algunas de las propiedades físico – químicas y químicas de los suelos por efecto de la erosión Unidad morfoedafológica I I "Ceja del Río" .Sección I – I
3.2.4. Unidad morfoedafológica II. "Ceja del Río" Sección II -I I
Durante los recorridos exploratorios pudo constatarse que a pesar de que los rasgos morfogénéticos que en general posee el paisaje, la sucesión histórica tabaco – maíz y otros cultivos temporales, han inducido los productos de la erosión los cuales en virtud a su tamaño, peso y forma han sido redistribuidos por el agroecosistema, por la acción conjunta y simultánea de dos procesos principales: erosión hídrica y remoción en masa con funciones definidas pero interrelacionadas, especialmente en aquellos sectores de laderas predominantemente convexas.
Fig.3.7. Efectos de la erosión en Unidad morfoedafológica II. "Ceja del Río" Sección II -I I
Influencia de la erosión en el comportamiento de las propiedades físicas
En el análisis del comportamiento de la composición mecánica (Tabla 3.7.), se advierte cierta estabilidad en el balance morfogénesis – pedogénesis en virtud del sector de la macroladera considerado, con independencia de la posición relativa que muestran los suelos en el transepto, lo cual pudiera estar asociado a una mayor atención de los agricultores a los problemas erosivos (de manera empírica), utilizando prácticas de conservación de suelos tales como barreras vivas dispuestas transversalmente a las máximas pendientes (Fig. 3.7.), que han contribuido a reducir el escurrimiento durante cada lluvia intensa.
Tabla 3.7. Comportamiento de las propiedades físicas de los suelos por efecto de la erosión Unidad morfoedafológica II "Ceja Río". Sección II – II
No obstante, en los tres perfiles y en correspondencia con los grados erosión, se evidencia cierta iluviación de las fracciones < 0,002 mm, siendo este proceso relevante en el perfil C13 (Moderadamente erosionado), hasta la profundidad de 40 cm. A mayores profundidades se advierte en todos los perfiles y con cierta independencia de los grados de erosión una proporción semejante en todos los suelos de la vertiente.
Asimismo los valores de la densidad del suelo (Tabla 3.7.) denotan igualmente poca diferencia, especialmente en el sector representado por el perfil C13 (Moderadamente erosionado) debido a una erosión más enérgica, donde la intensidad de las manipulaciones mecánicas, así como los métodos empleados tradicionalmente, según las normas para el laboreo de los diferentes cultivos orientada por el Ministerio de la Agricultura, producen transformaciones en el estado estructural de los suelos, originando lo que Henin et al. (1972), denominan perfil cultural. En correspondencia con esta morfodinámica, las categorías de erosión obtenidas, ratifican los criterios de Berezin y Gudima (1994); Orellana y Moreno (2001); Orellana; et al.(2006) y Crespo et al. (2006), acerca de que en condiciones de explotación intensiva, todos los suelos en uno u otro grado son afectados por un proceso de degradación física.
Autor:
José ReinaldoDíaz Rivera