"Las hormigas obreras de la especie favorecían a sus parientes cuando cuidaban los huevos y larvas, lo que los investigadores entendieron como un tipo de capacidad de discriminación".
De acuerdo a Richard Dawkins, el "nepotismo animal" no es una innovación reciente para las especies. En su libro The Selfish Gene, Dawkins explica de modo persuasivo que, en el proceso de pasar nuestros genes a generaciones futuras, uno favorece (si es que no puede pasar los propios) proveer oportunidades a familiares cercanos (cuyos genes se comparten) para de este modo lograr una reproducción vicaria.
El nepotismo, también confiere deberes especiales a miembros de la propia familia, suministrando un surtidor de aliados leales: "La sangre, o la linfa, pesa más que el agua".
Porque nuestros países son pobres y porque nuestros políticos se enriquecen (mucho más de lo "aceptable"), el nepotismo se considera pecaminoso y reprochable para los eclesiásticos, los funcionarios públicos y los militares — ostentadores conspicuos de riquezas mal habidas.
Riquezas que a la vez son compartidas con un número exagerado de sus parientes y favoritos —- Lo que resulta no ser nuevo, aunque sea un mal previsible —- ya que pudo haberse evitado, si los políticos fueran capaces de servirle al, en lugar de, servirse del pueblo.
En los Estados Unidos, democracia igualitaria, los casos de nepotismo son tan frecuentes, que hoy se habla sin resquemores de "dinastías políticas" de las que existen notables y actuales ejemplos, Adams, Kennedys, Bush y Clintons entre ellos.
Quizás sea verdad el dicho que se atribuye a George Orwell: "Para el ser humano ordinario, el amor significa muy poca cosa si es que no significa asimismo el amor de algunas personas por encima de otras".
En los campos de la teoría moderna de la evolución, es muy claro que el nepotismo está cementado en nuestra naturaleza biológica de un modo intrínseco.
Es la argamasa que provee cohesión — no solamente a sociedades de insectos, sino a otros animales y (a través de la historia) a nuestro género humano. Interpolando los conocimientos provistos por las disciplinas de la biología, antropología, la historia, y las teorías políticas y sociales, nosotros encontramos por doquiera evidencias de la práctica del nepotismo.
En sus orígenes sociales se encuentra en tribus primitivas, clanes, en reinos feudales, y en toda sociedad humana. Éstas incluyen los chinos, los griegos, los romanos, la Europa del Renacimiento y de las edades antiguas, asimismo como en las sociedades democráticas y capitalistas por los últimos doscientos años; con una representación robusta en los EE.UU.
Rodrigo de Borja (Borgia). Papa Alejandro VI (1492-1503)
Entre los más egregios de los nepotistas se cuentan: Abrahán en la Biblia, Pericles, Julio César, Carlos Magno, Napoleón Bonaparte y Benjamín Franklin; y familias tales como los Borgias, los Rothschild, los Adams, los Roosevelt, los Kennedy y (ahora) los Bush y los Clinton.
No importa como nos desagrade y con que reservaciones éticas lo acogemos. El nepotismo universal hay que verlo, no como otra "Cosa del Loco" (así llamaron los ecuatorianos a su ex-presidente desacreditado, Abdala Bucaram [1996-97]), sino como una esencia innata del ser humano que tiene su origen en algunas de nuestras pequeñeces morales.
Y… si las hormigas lo practican — eso lo justifica…
Bibliografía
Hannonen, M. and Sundstrom, L: Worker Nepotism among Polygynous Ants. Nature 421(6926):910 2003
Maxwell-Stewart, P. G: Chronicle of the Popes (1997) T&H NY
Cloulas, I: The Borgias (1989) University of Chicago
Machiavelli, N: The Prince (2003) Bantam NY
Dawkins, R: The Selfish Gene (2006) Oxford USA
Dr. Félix E. F. Larocca
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