Historia de España. Parte I. Desde la prehistoria hasta la reconquista

1. Orden Cronológico
2. Los Primeros Pobladores
3. La España Romana y Visigoda
4. La Reconquista (S. VIII)
5. Siglo XV – Los Reyes Católicos Y La Unidad De España
6. El Imperio Universal de Carlos I (1416-1456)

Orden Cronológico:

Prehistoria: Anterior a la Escritura.

Antigua:

• – Cartagineses
• – Romanos (218 AC – 16 DC)
• – Visigodos

Media:

• Árabe
• Reconquista

Los Primeros Pobladores

Los Iberos:

Se instalaron en la península 800.000 anos AC en Atapuerca.

Los Iberos fueron resultado de la evolución de aquellas primitivas culturas prehistóricas de procedencia Libio-Africana; y por Iberos fueron reconocidos por los historiadores de la Grecia clásica los antiguos pobladores de la península, mezcla de individuos de distintas procedencias y culturas.

Los Celtas:

Pueblo de origen indo-europeo. Penetran en la península por los Pirineos a principios del primer milenio AC.

Ocupan: Cataluña, Valle del Ebro, Cantabria, Asturias y Galicia para descender por la costa portuguesa. En Levante y en Andalucía se mezclan con los Iberos, dando lugar al pueblo "celtibero", pero en Galicia y Portugal mantienen sus asentamientos.

Los pueblos que habitaban la península eran los Iberos, celtas y tartesios. Estos últimos tuvieron capital en Tartesos, lugar no identificado con claridad entre la desembocadura del río Guadalquivir y Huelva.

Los Fenicios:

Aparecen en nuestras costas a partir del 1.200 AC. Fundan Gadir, cerca de Cádiz. Son procedentes de Sidón (ciudad situada entre Tiro y Beirut). Fenicios (denominados por los griegos) significa "rojo púrpura"

En la península ibérica, Gadir llegó a ser un importante centro de comercio y de la ruta del estaño procedente de las minas del área nor-occidental. Las naves fenicias navegando por la costa atlántica, llegaron hasta Britania y Cornualles. Los fenicios se llevaban la plata a cambio de otras mercancías que los nativos apreciaban. Este preciado metal era también obtenido en el interior de África, desde donde era transportado hasta las colonias costeras y sobre todo a Cartago.

Los Griegos:

Aprovechando la decadencia fenicia y la expansión griega por el Mediterráneo, los griegos comenzaron a comerciar con Tartesos en el S. VII AC ; fundaron colonias en las costas de Iberia: Ampurias, Rosas, Mainaké, entre otras. Los enfrentamientos entre griegos y fenicios por el dominio del Mediterráneo, se mantuvieron hasta la expansión romano-cartaginesa.

Los Cartagineses:

Cartago fue fundada en el año 814 AC. La ciudad se desarrolló floreciente y pronto comenzó a extender sus dominios. En el año 654 AC los cartagineses fundan una colonia en Ibiza. Hacia el año 600 AC tratan de impedir que los griegos se establezcan en Marsella, pero pierden la batalla naval entablada con ese fin. En el año 550 AC toman parte de Sicilia a los Griegos e intentan sin éxito en el año 535 AC a pesar de las colonias fenicias en la isla, hacerse con Cerdeña. Sin embargo, mediante una alianza con los Etruscos (anteriores a los romanos), que dominaban la mitad norte de Italia asó como los griegos la sur y Sicilia (Magna Grecia), conquistaron la costa occidental de Córcega. En el año 500 AC los cartagineses arrasan Tartesos, poco después de ocupar Baleares. Amílcar Barca sometió algunos territorios ibéricos y Asdrúbal fundó Cartago Nova (Cartagena). Aníbal (hijo de Amílcar), llegó hasta el Ebro, conquistó Sagunto y desencadenó la segunda Guerra Púnica en el año 218 AC.

Los romanos pasaron a África y el General Publio Cornelio Escipión (Escipión el africano) derrotó a Aníbal. Las condiciones de la rendición fueron muy gravosas; tuvieron que renunciar a sus posesiones en Iberia, destruir su flota y pagar fuertes indemnizaciones. Aníbal se quitó la vida para evitar ser entregado a los romanos. Hubo una tercer Guerra Púnica que terminó con la total destrucción de Cartago.

1° Guerra Púnica: 264-241 (Amílcar Barca)

2° Guerra Púnica: 218-201 (Aníbal)

3° Guerra Púnica: 149-146

La España Romana y Visigoda

Los Romanos:

Con la conquista de Cartagena se inicia la dominación romana en la Península Ibérica. En el año 197 AC es dividida en dos provincias: Celtiberia y Lusitania, aunque esto no significa el total control de los territorios; pues los nativos no soportaban ni los impuestos a los pretores, ni los incumplimientos de los pactos alcanzados. Como ejemplo de esto último, Galva, en Lusitania reunió a gran número de lusitanos con la promesa de repartirles tierras de cultivo y, una vez reunidos, pasó a cuchillo a unos y vendió como esclavos al resto. Esto provocó la rebelión de Viriato (150 AC) que tras algunas victorias, terminó siendo traicionado y asesinado en el año 139 AC.

Hubo una nueva guerra, en la ciudad de Numancia (Soria) donde gran parte de numantinos se dieron muerte (133 AC).

Hubo también una serie de conflictos internos entre grupos romanos que terminó con el poder de Julio César.

En el año 29, la rebelión de cántabros y astures obliga a Augusto (sobrino de Julio César) a combatirlos personalmente, la rebelión es sofocada por Agripa (año 19) y se alcanza un nuevo período de Paz (Paz Augustea).

Augusto reorganizó el país y lo dividió en tres provincias: Lusitania, con capital en Mérida; Tarraconense, con capital en Tarragona y una senatorial, la Bética, con capital en Córdoba. Aunque los Valles de Guadalquivir y del Ebro quedaron fuertemente romanizados, no ocurrió lo mismo con el norte y noroeste (Gallaecia) que conservaron en gran medida sus costumbres. Un ejemplo fue la conservación vascuence en el País Vasco y del celta en Galicia. Aunque no hay una sola provincia en la que no se conserven señas y monumentos de la civilización romana.

Sociedad y Cultura:

Los romanos aplicaron en Hispania el mismo patrón colonizador que en el resto del imperio: calzadas, acueductos, fortificaciones, puentes, presas, faros y una nueva concepción de las viviendas privadas. Favorecieron el comercio y fomentaron la agricultura con la introducción de nuevas especies vegetales y nuevas técnicas de cultivo.

Las Invasiones (S. V) – Suevos, Vándalos y Alanos:

En plena decadencia del imperio romano (año 409), Hispania fue invadida por tribus bárbaras. Los Suevos ocuparon Galicia, los Alanos, Lusitania y los Vándalos se instalaron en la Bética, que recibió el nombre de "Vandalucía". Pocos años después llegaron los Visigodos (como aliados de los romanos).