Descargar

Periodismo 3.0, la socialización de la información

Enviado por Juan Varela

Partes: 1, 2

    1. El asalto a la información
    2. El nuevo periodismo socializa su voz
    3. Nanoaudiencias en crecimiento
    4. La perfección tecnológica del periodismo cívico
    5. La información es una conversación
    6. Blogosfera y política

    Los ciudadanos se han apropiado de la información a través de los medios sociales. La crisis de la credibilidad de la prensa tradicional, el cuestionamiento de la objetividad y la aparición de herramientas digitales accesibles a todos convierten el periodismo en una conversación de la que los ciudadanos más activos no quieren estar ausentes.

    El asalto a la información

    Incomunicación. Desconcierto. Sospechas. Falta de información. El 12 de marzo, un día después del mayor atentado de la historia de España, miles de ciudadanos salieron a las calles en duelo y para exigir "¿Quién ha sido?". El dolor y el desconcierto se tornó en preguntas a los gobernantes, quienes hicieron un intento desesperado por controlar la opinión pública para favorecer sus intereses electorales.

    La falta de respuestas, la confusión y los mensajes contradictorios o manipuladores estallaron la víspera electoral, 13 de marzo. Teléfonos móviles de toda España recibieron mensajes convocando a manifestaciones frente a las sedes del Partido Popular exigiendo la verdad. Fue el primer desafío espontáneo a la información oficial que usaba las nuevas tecnologías.

    La famosa consigna "¡Pásalo!" en los mensajes electrónicos es parte ya de la historia de los movimientos cívicos de la nueva era. El emergente activismo social en la red se estaba consolidando desde tiempo antes (la crisis ecológica del Prestige, la oposición a la guerra, la contestación a algunas políticas del gobierno de José María Aznar) como un fenómeno capaz de influir en la opinión pública ¡Hay motivo!. Pero con el atentado islamista en Madrid adquirió naturaleza propia.

    Internet rebosaba de mensajes, informaciones, consignas y llamamientos a la movilización. Algunos medios siguieron en directo la movilización y se convirtieron, conscientemente o a su pesar, en agentes de la protesta. Fue la presentación en sociedad de los medios sociales, las muchedumbres inteligentes smart mobs y el poder de agitación de los superusuarios (ciberciudadanos consumidores intensivos de medios y expertos usuarios de la tecnología). Los medios tradicionales y la política formal fueron superados por las nuevas formas de activismo cívico en red.

    Se entiende por medios tradicionales los medios de comunicación social o medios de masas. Medios dirigidos a audiencias amplias que emiten mensajes seleccionados, ordenados y jerarquizados por profe-sionales y editores, y donde la capacidad de la audiencia para crear, intervenir o modificar el mensaje es limitada y dependiente de la voluntad de quienes controlan el medio.

    El 13 de marzo estalló la primera gran revuelta de la Política 3.0 en España.

    Entonces los weblogs, agitadores y promotores de la inquietud y la movilización, hicieron su entrada oficial en la vida pública. Aparecieron ante los medios, la política y los ciudadanos como lo habían hecho antes entre las ruinas de las Torres Gemelas, el 11S de 2001 y luego con la invasión de Irak, cuando los warlogs se convirtieron en una fuente informativa alternativa para miles de ciudadanos de todo el mundo.

    7 de julio de 2005. Londres sufre el peor ataque terrorista que recuerda. Decenas de muertos y heridos. Los grandes medios hacen desde el primer momento un llamamiento a los ciudadanos para que cuenten sus historias, envíen sus fotos y vídeos desde sus teléfonos móviles a la BBC, The Guardian o el Times [1].

    Frente a lo que sucedió del 11 al 14 de marzo en España, esta vez los medios tradicionales no dejaron a los ciudadanos al margen. Los grandes diarios canalizaron a través de sus páginas y sus ediciones digitales el dolor, la frustración y las preguntas.

    Partes: 1, 2
    Página siguiente