Repercusión en la certeza diagnóstica de los errores médicos durante el examen físico

2. Introducción
3. Objetivos
4. Material y método
5. Discusión de los resultados
6. Conclusiones
7. Recomendaciones
8. Referencias bibliográficas
9. Anexos

Resumen

En los últimos tiempos se han venido deteriorando cada vez más las habilidades para el examen físico, este deterioro es universal. Durante el examen físico debemos tener presente que si para el médico el interrogatorio es lo más importante, para el paciente lo que más valor tiene es que lo examinen y no perdona al médico que no lo hace. Se realizó un estudio descriptivo con el objetivo de analizar los errores durante el examen físico y su relación con la certeza diagnostica mediante la observación de 75 médicos de la especialidad de Medicina Interna del Hospital Militar Central Dr. Carlos J. Finlay. Los tres errores más frecuentemente observados durante el examen físico fueron: no explora expectativas al examinar, error al examen físico por omisión de acápite y desorden al examen físico representado entre el 52% y 32%, pero en ninguno de los errores se halló diferencia estadísticamente significativa entre los grupos de certeza diagnóstica, no obstante debemos evitar el error médico durante esta etapa del método clínico.

Introducción

Pudiera pensarse que es más eficiente el examen físico que el interrogatorio pues en menos tiempo permite obtener datos más confiables, pero este elemento de confiabilidad depende de quién examine. Los datos del examen físico aportan información de tipo transversal, es decir, a diferencia del interrogatorio, para ver la evolución de un signo al examinar, son necesarios varios encuentros con el enfermo y con un solo interrogatorio, se puede hacer un análisis retrospectivo sobre un síntoma.

Estar conscientes de estas diferencias permite darles a los hallazgos obtenidos por el examen físico el justo valor que tienen para el diagnóstico y recordamos que primero se interroga y la hipótesis diagnóstica creada con los datos así obtenidos, guía el examen físico y hace que el médico profundice en determinados aspectos.

El examen físico sólo se aprende a hacerlo de forma adecuada, practicándolo innumerables veces en los enfermos o en los sanos; y el que aprende necesita una guía y la retroalimentación de un experto, tanto para la semiotécnica como para la semiografía. El semiodiagnóstico puede entonces buscarse en los libros.

En los últimos tiempos se han venido deteriorando cada vez más las habilidades para el examen físico, este deterioro es universal y está analizado en varios trabajos (1-2). Las causas son variadas y complejas. En primer lugar, la subvaloración injustificada de la clínica, otra razón es el desarrollo de las especialidades que han hecho escasos en las salas de Medicina Interna de los hospitales docentes de pregrado algunos tipos de pacientes, en especial los que presentan valvulopatías y otros con afecciones neurológicas.

Los requisitos de un buen examen físico son (3):

• 1. Hacerlo solo después de haberlo interrogado, porque la anamnesis guía el examen.

• 2. Disponer de un mínimo de condiciones adecuadas en cuanto al local, camilla, sabana e iluminación.

• 3. Privacidad.

• 4. Respetar el pudor del enfermo.

• 5. No examinar por encima de las ropas.

• 6. Tener una sistemática del conjunto y de los aparatos y aplicarla.

• 7. Si al momento del examen ya se tiene el diagnóstico (por ejemplo, hipertensión arterial), buscar todos los datos físicos que pueda dar dicha enfermedad (tensión arterial, latido de la punta, soplos cardiacos, pulsos periféricos, nefromegalias, soplos abdominales y lumbares, etc), y no un examen mecánico, como si se tratara de una bronquitis.

• 8. Efectuar bien cada maniobra (semiotecnia depurada).

• 9. Definir con claridad cuando un signo es equívoco o dudoso y consignarlo así.

Al evaluar la calidad del examen se pueden detectar en sentido general, errores relacionados con el completamiento del examen, errores relacionados con la técnica del examen y errores de tipo ético con importante matiz afectivo. Siendo un poco más específicos, mediante el análisis lógico del examen físico y de la literatura, se pueden agrupar los siguientes tipos de errores al examinar enfermos:

• Por omisión.