Fundamentos de la filosofía peruana
(Declaración)
Filosofía pendular, es lo que se debería llamar aquí, por su fiel (Como punto de equilibrio eufemístico) en el saber de una existencia centrifuga, como lo es el pensamiento occidental, que nos hace buscar una verdad entre el sístole del conocimiento interno, ajustado y profundo, con la contraparte de la acción tan atomizada e incontrolable en muchas de sus partes, y todo ello en un sentido holístico alrededor del ser supremo, el hombre, que sin este concepto tan claro, y la convicción de ser lo mas importante, se relegaría a la negación.
Esto como corolario a lo que he podido interpretar desde el punto de vista occidentalizado impuesto a la fuerza, en nuestra sangre, lengua y organización social. Pero otro lado, la contraparte y diástole filosófica, de la posición oriental, cuyos principios también tratan de penetrar nuestras conciencias, a su llegada a nuestras comarcas en la última centuria que feneció con la hegemonía del pensamiento europeo aquí, me obliga a poner también en tapete esta otra filosofía.
Y me atrevería a llamarle la Filosofía dimensional, porque la preponderancia también de la existencia centrípeta en el fiel (como eufemismo también) se transforma más que en un punto de partida, del pensamiento oriental, en una puerta dimensional absorbente, que nos hace buscar introspectivamente en la profundidad del mismo ser individual y en gesto implosivo, la verdad y el amor. Al mismo tiempo, este punto es el umbral que nos une al universo microcósmico, en donde nos diluimos en una expansión integradora y natural, hasta ser parte del universo mismo.
Me estoy dirigiendo con esta presentación a los patrones específicos a seguir, por nuestra posición estructural social peruana, que de ninguna manera, considero igual o diferente a la de otras culturas ,empero, expongo sus posiciones, a mi mejor e imparcial modo de ver y sin miramientos de ningún tipo aquí ,porque estas observaciones teóricas obedecen a experiencias adquiridas y ,como no también heredadas por toda una sociedad no reconocida como de patrones sicosociales independientes, me refiero al grupo social, que siendo aquí y ahora, una gran mayoría no son considerados como tal aun, ni han sido vistos así nunca por nadie ,ni siquiera por aquellos que se han atrevido a catalogar los grupos humanos como si estuvieran repartidos entre tan solo dos tipos de filosofías , para apreciar su sentimiento e interpretación de la vida.
Obviaron sin duda preguntar cual es el significado de la existencia para los individuos que aquí no se adaptaron a su modo de pensar y que se recluyeron con sus vivencias internas al mundo subterráneo de la clandestinidad filosófica, desde una cosmovisión peruana propia, que los estudiosos aquí no han considerado jamás, tan solo porque no están considerados en sus textos, como una agrupación social de pensamiento e interpretación de la vida, diferente a aquellas que están catalogadas, estudiadas, separadas y hasta archivadas, entre una clase de seres con valores determinados, y valorados por su ciencia organizativa, como perteneciente a una de las dos únicas clases de pensamiento director, que pretenden que existe en filosofía, y que son precisamente aquellas de las que hemos hablado al inicio de esta declaración .
Pienso también, que debemos convenir todos aquí, que el conocimiento se obtiene tan solo de dos maneras, primero por la propia experiencia, en nuestra realidad social de interacción sistémica., y en segunda instancia por las experiencias ajenas que nos describan otros.
Pienso también que la filosofía oriental, se debe dejar para la practica de los orientales, que a ellos les sirve muy bien, y la occidental para los occidentales, es decir a lo Estados Unidos, Europa y otros de su pensamiento homogéneo.
Empero nosotros, somos de otra ralea intima aquí, y claro que aceptamos saber y conocer lo que ellos piensan, tal vez podamos aprender algo, de los que piensan y viven en esas realidades existenciales de oriente y occidente, eso nos sirve, claro que si., y aunque ellos dividieron el mundo del pensamiento con brújulas y mapas, es claro que se olvidaron, de que este nuevo mundo tan hermético en sus dioses, y pensamientos, que el oscurantismo persiguió y destrozó., este nuevo mundo (para ellos) que solo anexaron a sus posesiones físicas, sin considerar que en este mundo, tenemos nuestras propias reglas de afirmación de existencia., nosotros pensamos diferente, vivimos si en un mundo diferente, somos diferentes, tenemos otras aspiraciones y deseos, porque tenemos una cosmovisión diferente. Por eso es que nuestra gente originaria se replegó con su cuerpo y su pensamiento al Perú profundo, lejos de la influencia religiosa, organizativa y de valores, que nunca quisimos adoptar como nuestros. El tiempo transcurrió sin medirse con nuestro pensamiento, pero tampoco se le opuso. El hombre andino, prosigue con sus principios filosóficos originarios y ha bajado ahora a la costa, y a los asentamientos humanos que llevan el ritmo de la vida nacional, conviven en armonía inteligente, pero su tesoro filosófico se mantiene incólume. Mantienen sus aspiraciones y realizan sus deseos.
Cuando me refiero a las aspiraciones y deseos del hombre y de la sociedad, no lo hago aquí para dar una idea, o mi idea de cuestiones éticas, no, lo hago simplemente para especificar su lugar dentro de un esquema filosófico propio peruano .,y que abarca por cierto a una gran agrupación humana en esta región continental, al margen de las fronteras y banderas., pero para eso les dejo a ellos fijar su posición. Aclaro que las necesidades individuales o grupales nos determinan nuestras aspiraciones y deseos. Esto es normalmente aceptado por ambas filosofías, a las que hice mención atrás, como extrañas a nuestra realidad nacional originaria, pero que sin embargo nos sirven, claro didácticamente, para expresar conceptos y pareceres lógicamente.
Ahora, bien sabemos que si una necesidad se presenta, tenemos que solucionarla, y esto, no será solo porque lo queremos, lo deseamos, o quizá lo necesitamos, para resolver algún asunto espiritual o físico, no., lo tenemos que resolver simplemente, porque esa aspiración o deseo obedece a una necesidad, y esta es producto de una carencia, o quizá, exigencia de continuismo para preservar algo establecido, y que nos garantiza nuestra identificación y nuestra existencia. Así nuestros deseos pudieran ser estrictamente animales, como por ejemplo, el comer, el dormir, el tener sexo. Todo ello tiene su razón de se, sea por necesidad de supervivencia instintiva e irracional, sea por apetitos desmedidos superando nuestra voluntad. Mas adelante tendremos deseos de compañía empáticas, fraternales, de relaciones sociales, de alianzas tal vez., y esto obedece a la necesidad de proteger al grupo, del cual de alguna manera dependemos sentimentalmente, o a la necesidad de ser parte de el, hasta de ser protegidos por el grupo social., por ultimo, tendremos los deseos de experimentar una relación diferente e imposible esto nos hace buscar algo diferente e incomprendido, quizá con otra entidad superior a la humana, que pretendemos existe, y cuya existencia se explica, por entre los acontecimientos que no podemos explicar, lo mágico, lo divino, Dios.
El conocimiento y la aplicación de estos principios para alcanzar nuestra realización como seres humanos en ambas culturas es la culminación de la interpretación de nuestra existencia, sin importar el camino seguido, es encontrarse e inmortalizarse, ambas filosofías conocidas, estudiadas, catalogadas, y separadas, nos llevan por el camino de la trascendencia espiritual, necesaria para sentirnos superiores a los otros seres.
La filosofía del hombre peruano es diferente a la de los movimientos filosóficos que van desde Lao Tse, Platón, hasta Russell, Gurdjieff o Tagore. Nosotros sencillamente no estamos en el catalogo filosófico social de esas culturas., nosotros pensamos diferente, porque somos diferentes, y aunque nos hayan llenado los textos de sus ideas, y nos hayan organizado social y políticamente al puro estilo occidental, con las falencias Nietzchenianas, o que nos hayan tocado también, con las nuevas tendencias orientales que a veces, decadentes también en partes, algunas se manifiestan solo faquires o bonzoicas., claro con claras excepciones como Lao Tse.
Todas estas tendencias empero, son ajenas a nuestra realidad metacardial que mantiene hasta ahora, dentro de nuestras raíces sociales, una filosofía de cosmovisión integrada a la tierra misma, de la que el hombre peruano es parte, física y espiritualmente en una integración filial.
El europeo se posesiona de su tierra, y de su ser, el busca realizarse en la comprensión del universo, que en el fondo desea manejar a su antojo. Busca a su dios en la grandeza del universo, y lo dimensiona tan inmenso como el, inmortal y eterno.
El Oriental se desliga del mundo y forma parte de un universo dual, el interno y el externo, se siente instrumento de dios, y lo busca en la naturaleza misma, en su interior, el quiere llegar a dios de otra manera, pero igual que el occidental, lo busca.
Ambas culturas buscan en el concepto del micro cosmos y el macro cosmos, y lo pretenden interpretar cómodamente desde casa, para buscar su lugar en un universo utópico.
El hombre peruano, no necesita buscar, el hombre peruano no desea comprender el universo, para buscar su lugar y su bienestar, el no desea llegar al ser supremo para realizarse.
El hombre de esta tierra, es tan solo parte de ella, y sabe que cuidando la naturaleza, y poniéndose al ritmo de ella es que se realiza, no busca ni la riqueza, ni el poder., sea esta o este, material o espiritual, no, el hombre peruano se realiza, a través de convertirse en el camino, solo desea continuar siendo parte de la tierra, en sentido físico y espiritual armónico. Por eso canta: Cuando muera que me entierren en tu suelo, y algún día bajo el cielo unas flores crecerán…será mi alma asomándose a la vida, desde mi tierra querida, para ver a mi volcán (Que aspiración, para mayor) o también esta que dice: Te daré la vida y cuando yo muera, me uniré en la tierra contigo Perú. Tal es nuestra filosofía.
Por eso no pienso yo, que los deseos o apetitos individuales sean malos o animales, no, por el contrario, pienso que se tienen que satisfacer por subsistencia, por instinto, por una real necesidad, entonces determinamos con razón que los deseos en si mismos no son malos, ni siquiera amorales, pero indudablemente los manejamos y contenemos, porque nuestra voluntad racional, aplasta al instinto. Para hacer esto tenemos que considerar siempre dentro de nuestro entendimiento, que si bien los deseos no son malos en si mismos, en muchas ocasiones si los son su poder, o las consecuencias reales de estos.
Debemos también convenir que en el campo de los deseos individuales., en una sociedad estos se tienen que subordinar a las necesidades del grupo, de la sociedad, lo que nos convierte en alguna forma en seres superiores civilizados.
Esta superioridad esta basada en el renunciamiento personal, en beneficio de un grupo humano que busca su trascendencia en la organización, la oportunidad de realización como sociedad, la equidad, la justicia, pero sobre todo por, el sacrificio voluntario y consciente, de pocos en beneficio de muchos. Melgar, su patria, su Silvia., Daniel A. Carrión su salud, su vida., Bolognesi y sus hijos, , ellos se martirizaron por un grupo mayor llamado Perú, legándonos su ejemplo.
Ellos sabían del significado de su acción, ellos supieron siempre que habría mas allá de sus vidas, algún grupo de su estirpe que interprete la filosofía de su acción, y en efecto estamos aquí para hacerlo, rescatando nuestra visión del mundo filosófico peruano.
Ellos sin duda alguna, en su mayoría tenían afectos, y asuntos personales por lo que tenían que vivir, porque esas cosas del mundo común y pasajero, claro que les provocaban deseos, como a cualquier mortal, si, pero ellos supieron encaminar sus esfuerzos en beneficio de la sociedad, sacrificando sus apetitos personales, por satisfacer también las necesidades, y deseos., aspiraciones justas de los suyos, un deber mayor les exigía el sacrificio que hicieron.
Conocemos que la voluntad del hombre se manifiesta por dos razones potentes: La primera, el amor abstracto, que se transforma en deberes y responsabilidad, que es el renunciamiento, y es el dar, es la riqueza del espíritu.
La segunda es el poder concreto, que se transforma en conquistas materiales centralizadas en posesiones, es querer recibir y apoderarse de todo. Así se mueven las voluntades de los hombres que creen que su mundo es realmente ese en donde viven, sin buscar otra opción…
Pero el quid del asunto esta en que nuestros hombres del Perú vieron otra realidad, muy diferente a aquellas que veían en otros grupos sociales, y a la de los textos., y ellos dieron al pueblo peruano, algo que estaba mas allá de sus vidas, ellos lo interpretaron así, creyeron que sus vidas, solo valían la pena vivirlas por una causa mayor, y que esta solo seria, la consecuencia o el fruto ,de perderlas allí donde se enfrentaron a la muerte, cada cual en su especialidad.
Sabían nuestros prohombres que tenían que dejar un mensaje a la posteridad, y que el mismo tendría que ser recogido por nosotros, para continuar en la lucha por la realización social, en que ellos participaron hasta su fin, con responsabilidad, con amor a su tierra y a su sociedad, a la que se sentían integrados física y espiritualmente, de tal manera que se dieron ellos mismos, para que trascienda.
Y nosotros tenemos que levantar sus banderas, para que su sacrificio no sea vano, esa es nuestra misión en la vida, si lo sabemos y lo interpretamos como es. Esa es la filosofía del peruano que sabe que su realidad nacional, es la suma de las realidades de todas las naciones que habitan su territorio y que encuentran conexas por antecedentes históricos, geográficos, sociales, religiosos, militares, etc.etc., toda una interacción social estructural y sistémica, que enlaza el pasado del grupo, con su presente y su futuro en una secuencia geosincronica de permanente transformación, aceptación, e interpretación de un mundo, que es diferente a aquellos en que nos han pretendido insertar, sin lograrlo, y de donde han venido los conceptos filosóficos, que precisamente definen culturalmente su posición, y también lo que nosotros no somos., y que de una manera indirecta, nos muestran, que somos precisamente diferentes, porque lo percibimos así en nuestro interior, y que es, lo que ellos niegan que existe, una cultura humana con su propia interpretación, con su propio entorno y una realidad diferente de vivir., y aun a pesar de que ya en el mundo se ha desatado una corriente estructuralista sistémica ,que como movimiento filosófico, deja en los archivos , al existencialismo que se mantuvo tanto tiempo como rey de los movimientos del pensamiento humano. Nos niegan, y rechazan nuestra existencia como estructura filosófica independiente a las ideologías del mundo establecido como director, en el mundo de ellos, nuestros permanentes detractores..
Pensamos diferente a ellos, existimos en un mundo diferente al de ellos., y solo somos ahora, como lo fuimos hace mil años, el puente natural e inteligente, que se reconoce existente, que no busca ser poseedor ni de lo creado, ni de la verdad, ni de tener alianzas con el creador., solo estamos, y somos parte de este mundo tangible, con los pies sobre el umbral de la tierra, y con la cabeza en el dintel, atizbando el cielo, somos parte del movimiento y la transformación, por eso nuestra posición es dinámica, como todo lo que existe, sea visible o invisible, y tratamos de buscar la comprensión de esto integrándonos naturalmente desde que entendimos lo que somos, parte de una estructura inteligente que tiene que tener una finalidad, la misma que no podemos comprender, porque escapa a nuestras capacidades actuales.
Autor:
Rolando Reyes Rocha