Influencia de las hostilidades de 1895 – 1898 en la población espirituana
Enviado por Ernesto Alvarez
La guerra no es contra el español, sino contra la codicia e incapacidad de España. El hijo ha recibido de su padre español el primer consejo de altivez e independencia, el padre se ha despojado de las insignias de un empleo en las armas para que sus hijos no se tuviesen que ver un día frente a él: un español ilustre murió por cuba en el patíbulo: los españoles han muerto en la guerra al lado de los cubanos…
La guerra no se ha de hacer para el exterminio de los hombres buenos, sino para el triunfo necesario sobre los que se oponen a su dicha (…)
Introducción
En febrero de 1895 había estallado, la insurrección en Cuba, es decir la Guerra de Martí como lo calificaría el General Máximo Gómez Báez, Martí la había concebido como una Guerra rápida, a partir del estallido simultáneo de focos de acción por toda la Isla de Cuba, de tal forma que las acciones no se viesen encerradas en una región. Se trataba de asimilar las experiencias de la Guerra Grande y así evitar los errores cometidos. La realidad, sin embargo, fue muy diferente, la guerra se prolongó por tres años y la cual terminó como sabemos los cubanos de ayer y de hoy, con la Intervención norteamericana. Estos cayeron, confirmando el temor martiano, como una fuerza más sobre nuestras tierras de América. Para frustrar la total independencia de nuestro país como lo sonaría nuestro José Martí.
Desarrollo
No resulta fácil a más de dos siglos de los hechos ocurridos en nuestro país, establecer exactamente las cifras de civiles fallecidos en la contienda de 1895 a 1898.
La Guerra de 1895 a 1898 desarrollada en Cuba recrudeció la situación de la población urbana, el régimen colonial dejaría una huella imborrable en la población rural y urbana después de ser decretado y aplicado con fecha 1 de enero de 1897 en nuestro territorio el Bando de la Reconcentración por el entonces Capitán General Valeriano Weyler y Nicolau (Ver anexo I):
Bando
Don Valeriano Weyler y Nicolau, Marqués de Tenerife, Gobernador general, Capitán general y General en Jefe del Ejército de esta Isla.
Ordeno y Mando
Art.1. Sólo se permitirá las existencias y venta de efectos de ferretería y talabartería, ropas, víveres y medicinas en los poblados que tengan recinto fortificado.
Art.2. Queda prohibido en absoluto en las provincias de Pinar del Río, Matanzas y Habana que se extraigan dichos efectos, víveres, ropas y medicinas de los poblados, y para conducirlos de uno á otro de los señalados en el articulo anterior, será necesario obtener autorización de la Autoridad militar del punto de partida y dar conocimiento de su llegada á la del destino, quedando anulado todos los permisos concebidos hasta hoy.
Art.3. En el termino de ocho días, á contar desde la fecha de este bando, se cerrarán en las tres provincias mencionadas todas las tiendas de los poblados que no reúnan las condiciones señaladas en el artículo primero, debiendo dentro de este plazo solicitar los dueños de ellas la traslación de dichos efectos.
Art.4. Lo dispuesto en los artículos anteriores será aplicable á los ingenios y demás fincas, según tengan ó recinto fortificado.
Art.5. En las provincias de Santa Clara, Puerto Príncipe y Santiago de Cuba empezará á contarse el plazo señalado en el artículo tercero desde la fecha de la publicación de este bando, en los Gobiernos y Comandancias.
Art.6. Los infractores serán juzgadas y penados como auxiliares de la rebelión.
Cuartel general de Bayate, 1 de enero de 1897.
Valeriano Weyler.
La población campesina, además de ser victima de la reconcentración en la ciudad, fue utilizada como mano de obra en las construcciones defensivas así lo demuestra este legajo fechado 20 de febrero de 1898:
… se sirva disponer con toda urgencia se tapien todas las boca – calles de la población en el final de las mismas que dan al campo, á excepción de la salida por el puente de piedra situado junto al teatro pudiendo para dichos trabajos utilizar á los reconcentrados y á los que se reconcentren…1
Analizando datos estadísticos comparativos entre los años de 1893 – 1894, previos a la gesta independentista, y a los años 1897 – 1898, referentes a los nacimientos y defunciones, muestra cómo dejaron de nacer en nuestra ciudad en dos años por los efectos que estuvo sometido a una brutal y despiadado política de… A sangre, fuego y exterminio… (La reconcentración) 354 niños y murieron más de 2717 personas.
A continuación se muestra la siguiente Tabla Estadística Comparativa de los 1893 –1894 y 1897 – 1898 sobre nacimientos y defunciones en Sancti Spíritus. (2)
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