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Desarrollo Postembrionario y Parámetros de Tabla de Vida de Typhlodromus pyri Scheuten, Cydnodromus californicus y Brevipalpus chilensis Baker

Partes: 1, 2

    Publicación original: Agric. Téc.. [online]. jun. 2005, vol.65, no.2 [citado 22 Octubre 2006], p.147-156. Disponible en la World Wide Web: <>.

    ISSN 0365-2807 – Reproducción autorizada por: Revista Agricultura Técnica,

    ABSTRACT: Life table parameters and the effect of feeding predator mites Typhlodromus pyri Scheuten and Cydnodromus californicus (McGregor) with different development stages of phytophagous mite Brevipalpus chilensis Baker was studied at laboratory conditions of 25 ± 2ºC, 60 ± 5% RH and 16:8 h (L:D). Life table parameters including net reproductive rate (Ro), finite rate of increase (λ), intrinsic rate of increase (rm) and mean generation time (T) of T. pyri, C. californicus, and B. chilensis were studied. Postembryonic development and oviposition rate of T. pyri and C. californicus were evaluated on response to food diet that included eggs, immature and adult stages of B. chilensis It was possible to determine the influence that each food type had on the oviposition rate of T. pyri and C. californicus by evaluating the amount of eggs laid. The effect of each food type on the post embryonic development was evaluated by measurements of developmental time. Mated females of T. pyri had a higher net reproductive rate and intrinsic rate of increase than C. californicus. T. pyri and C. californicus larvae reached adult stage only when fed with eggs or motile immature stages of B. chilensis. Mated females of T. pyri consumed on average 15.7 eggs and 19.38 immature motile stages. Mated females of C. californicus consumed on average 28.53 eggs and 18.5 immature motile stages. The potential use of T. pyri and C. californicus to regulate populations of B. chilensis is discussed.

    Key words: phytoseiid mites, phytophagous mites, biological control, consumption.

    RESUMEN: Los parámetros de tabla de vida y la interacción alimenticia de los ácaros depredadores Typhlodromus pyri Scheuten y Cydnodromus californicus (McGregor) con el ácaro fitófago Brevipalpus chilensis Baker, fue estudiada en condiciones de laboratorio a 25 ± 2ºC con una humedad relativa de 60 ± 5 % y con un fotoperíodo de 16:8 h (L:O). Fueron evaluados los parámetros de vida: tasa neta de reproducción (Ro), tasa intrínseca finita de crecimiento (λ ), tasa de crecimiento (rm) y tiempo generacional (T) de T. pyri, C. californicus y B. chilensis. La influencia alimenticia de los estados de desarrollo de huevo, móviles inmaduros y adultos de B. chilensis, fue evaluada sobre el desarrollo post embrionario de T. pyri y C. californicus. El estudio permitió conocer el consumo e influencia de cada uno de los alimentos sobre la tasa de ovipostura de T. pyri y C. californicus. Las larvas de T. pyri y C. californicus alcanzaron el estado adulto sólo cuando fueron alimentadas con huevos y estados inmaduros móviles de B. chilensis. Los parámetros de vida; tasa neta de reproducción y tasa intrínseca de crecimiento fueron más altos para T. pyri. Las hembras apareadas de T. pyri consumieron diariamente un promedio de 15,7 huevos y 19,38 inmaduros móviles. Las hembras apareadas de C. californicus registraron un consumo promedio diario de 28,53 huevos y 18,5 inmaduros móviles. Se analiza el uso potencial de T. pyri y C. californicus como reguladores de las poblaciones de B. chilensis.

    Palabras clave: ácaros fitoseidos, ácaros fitófagos, control biológico, consumo.

    INTRODUCCIÓN

    Los ácaros de la familia Phytoseiidae han sido ampliamente estudiados, debido a su alta efectividad como agentes de control biológico de ácaros fitófagos, por su capacidad de adaptación y sobrevivencia a diferentes tipos de alimentos disponibles en los agroecosistemas (Luh y Croft, 2001). La capacidad de adaptación es una característica típica de cada especie de ácaro fitoseido, encontrándose desde especies generalistas a especializadas. Esta diversidad hace necesario conocer los hábitos alimenticios así como su capacidad de regulación de la especie fitófaga, antes de recomendarlos para su utilización en los programas de control biológico de ácaros fitófagos (Croft et al., 1998b; Ragusa et al., 2000). Varios estudios corroboran esta necesidad; es así como trabajos de bionomía y distribución, indican que algunos fitoseidos prefieren alimentarse de ácaros tetraníquidos (Muma, 1971), otros de eriófidos (McMurtry y Scriven 1965; Muma, 1971), y un grupo importante son facultativos consumiendo polen, ácaros, esporas de hongos, exudaciones e instares de insectos (Muma, 1971; Croft et al., 1998a; Ragusa et al., 2000).

    Esto confirma la necesidad de otorgar estabilidad a la diversidad agroecológica, para dar sustentabilidad al desarrollo de las poblaciones de fitoseidos, proporcionándoles así una fuente alternativa de alimentación y refugio, lo que permite constituir un reservorio de depredadores para la regulación de las poblaciones fuera y dentro de los cultivos. Conociendo la capacidad de control y reproducción de los fitoseidos se pueden implementar estrategias de control biológico de ácaros en forma segura y económicamente viable (McMurtry y Croft, 1997; Croft et al., 1998b, c).

    En Chile se han reportadas 48 especies de ácaros fitoseidos asociados a plantas cultivadas o malezas; algunos han sido mencionados como un factor de regulación en las poblaciones de los ácaros fitófagos de importancia económica, tales como Tetranychus urticae Koch, T. cinnabarinus Boisduval, Panonychus ulmi Koch y P. citri McGregor (González y Schuster, 1962; Karg, 1965; Yoshida-Schaul y Chant, 1991; Ragusa et al., 2000; Ragusa, 2000; Ragusa y Vargas, 2002).

    El control biológico de Brevipalpus chilensis Baker (n.v. falsa arañita de la vid) es realizado principalmente por Neoseiulus chilenensis Dosse y Amblyseius fructicolus González y Schuster (González, 1989). Recientemente, ha sido informado el establecimiento de Typhlodromus pyri Scheuten, asociado a B. chilensis en viñedos de la zona de Cauquenes (Ragusa y Vargas, 2002). B. chilensis, es una plaga nativa de importancia cuarentenaria, que representa un grave problema económico en vid (Vitis vinifera L.), kiwi (Actinidia deliciosa (A. Chev.) Liang y Ferguson, cítricos (Citrus spp.) y uva vinífera (V. vinifera L.) (González, 1989). El daño directo producido por B. chilensis se manifiesta en una necrosis sobre las estructuras nuevas, afectando el tamaño de hojas y brotes; en ataques severos llegan a causar defoliación y muerte del área de la planta afectada. El daño indirecto es causado por su condición cuarentenaria en fruta destinada a exportación. El control de esta arañita actualmente se basa en la utilización exclusiva de acaricidas, sin considerar otras estrategias de Manejo Integrado de Plagas, tales como el control biológico, umbrales de población y técnicas de muestreo espacial (Vargas, 1988; Vargas y Rodríguez, 1990), aumentando los costos de los programas fitosanitarios, lo que representa en algunos casos hasta un 40% de ellos. Además, el uso intensivo y los pocos acaricidas registrados pueden resultar en una alta presión de selección sobre las poblaciones de B. chilensis, incrementando el riesgo de desarrollar resistencia.

    Neoseiulus californicus = Cydnodromus californicus (McGregor) se encuentra distribuido en las zonas del paleártico, neártico y neotropical (McMurtry y Croft, 1997). Generalmente está presente en cultivos bajos, árboles y vides. Los ácaros fitoseidos del género Neoseiulus se caracterizan por ser depredadores selectivos del Tipo II (Luh y Croft, 2001), prefiriendo ácaros fitófagos del género Tetranychus, específicamente aquellos que se encuentran asociados a altas densidades de producción de telas. Sin embargo, no existen antecedentes sobre parámetros de vida, hábitos alimenticios y de ovipostura C. californicus, asociados al consumo de ácaros de la especie B. chilensis.

    T. pyri está distribuido en zonas del paleártico y neártico, es clasificado entre los depredadores generalistas del Tipo III (Luh y Croft, 2001), los que se caracterizan por consumir preferentemente ácaros, insectos y polen. Ellos poseen un mayor potencial de incremento cuando son alimentados con ácaros eriófidos, que al ser alimentados con especies del género Tetranychus (McMurtry y Croft, 1997). La mayoría de las especies generalistas prefieren refugiarse en las nervaduras, vellosidades, depresiones o entre áreas protegidas de las hojas. T. pyri es la especie de su género más ampliamente distribuida en diferentes agroecosistemas y la más estudiada en sus diferentes aspectos bioecológicos. Investigaciones realizadas con T. pyri, en diferentes lugares del mundo, confirman que este depredador puede mantener al ácaro P. ulmi en niveles bajos (McMurtry y Croft, 1997). Asociaciones de ácaros de la familia Tenuipalpidae y el ácaro depredador Typhlodromus doreenae es mencionado en Australia, donde constituye un agente biorregulador sobre las poblaciones del ácaro fitófago en vides (McMurtry y Croft, 1997). En Chile, T. pyri se encuentra establecido en viñedos del secano de la zona de Cauquenes (Ragusa y Vargas, 2002), donde es más abundante que C. californicus y ejerce una importante regulación de las poblaciones de B. chilensis.

    Estudios preliminares de laboratorio han demostrado que T. pyri tiene un gran potencial de consumo sobre B. chilensis y además posee una alta capacidad reproductiva. Sin embargo, a la fecha no han sido reportados antecedentes sobre los parámetros de vida, capacidad de consumo de T. pyri y C. californicus sobre ácaros de la especie B. chilensis.

    Los objetivos de este trabajo fueron estudiar el desarrollo postembrionario y los parámetros de vida de los ácaros depredadores T. pyri, C. californicus y el ácaro fitófago B. chilensis. Además, determinar la capacidad de consumo de los ácaros depredadores T. pyri y C. californicus sobre diferentes estados de desarrollo de B. chilensis.

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