- Introducción
- El problema
- Particularidades del problema
- La situación objeto
- Análisis de los comportamientos de los actores intervinientes en la situación previa
- Consecuencias de las decisiones adoptadas
- Necesidad de dar a conocer a la sociedad estos resultados
Un análisis de esta alternativa en la familia de hoy
Introducción
Variadas circunstancias presionan a la familia actual de las grandes ciudades, y provocan el desplazamiento de sus miembros ancianos a un Geriátrico, conllevando sentimientos de dolor, para todos los implicados. Analizamos en este contexto, posibles estrategias de conducta así como decisiones personales y grupales y sus consecuencias.
El problema
La familia actual se ve constreñida entre muchas presiones de diferente índole y calidad, con relación a las que enfrentaba la familia de antaño.
No sólo el paso del tiempo constituye un factor importante en este ámbito, sino el lugar de residencia. Son disímiles las formas y condiciones de vida en la ciudad y en el interior y aún más entre el entorno rural y el urbano.
Puntualmente me refiero a la familia de hoy en las grandes ciudades.
Pero, otra distinción se hace necesaria y es la que se refiere al nivel socioeconómico de la familia; pudiendo estimarse con diferencias de grado y a grandes rasgos, niveles socioeconómicos bajos, medios o altos.
Esta familia de la gran ciudad en sus niveles medio y alto, emprende una gesta de supervivencia entre algunas o muchas posibilidades económicas que le permiten acceder a un mundo con insospechables oportunidades de expresión y consumo. A ello se agregan múltiples exigencias: Por un lado existen crecientes complejidades tecnológicas cada vez más atractivas de consumo y por el otro, las devenidas del status y los roles sociales a los que la persona se ve constreñida.
En un hogar así conjugado, los adultos se ocupan de diversas cosas, pero principalmente, en ganar dinero. Los niños, también se ocupan en muchas cosas y un poco, al tiempo realmente libre. Los viejos, sobran.
Todos son presos de espacios determinados y cambiantes. Los adultos, jóvenes y niños pasan muchas horas institucionalizados y el viejo en casa, ocupado en nada o en casi nada.
Así es que por lo general, sobreviene un momento en que, aduciendo distintas razones, como falta de espacio físico, no contar con alguien en casa que pueda cuidarlo (pues por lo general tiene problemas de salud física y mental), o adjudicándole comportamientos torpes y generalmente complicando la vida de la familia, el viejo parte o es llevado al geriátrico.
Testigos de esta afirmación son los múltiples hogares geriátricos de distintas categorías, que se han constituido en " negocio" del momento para muchos.
Tal situación llevó a los ámbitos estatales a legislar y controlar al respecto, ya que en muchos de ellos es común observar el descuido con que tratan las reales necesidades de quienes allí, por lo general, concluyen sus vidas.
Quien trabaja en estas instituciones, conoce que el paso del anciano del seno familiar al geriátrico, es una situación sumamente dolorosa: Tanto para la familia que carga con culpas y remordimientos muchas veces insuperables en el tiempo, los cuales pueden traducirse en comportamientos de paulatino alejamiento hacia el viejo; como para este último, que con estupor, se ve despojado de sus afectos más entrañables, sus pertenencias y de " su lugar". Aquí, en su nuevo " lugar", pasa a ser sólo un " objeto", en una situación que vive como dramática, ante el desafecto y falta de contención real.
Evidentemente, el paso del hogar a la institución, conlleva un período previo donde suceden los hechos que lo motivan, e implica, en el caso de los familiares, decisiones que resultan paradojales por su implicancia afectiva y de vida. Por parte de la persona del viejo, también existen decisiones en este contexto; donde va presumiendo, temiendo consecuencias, sin poder frenar el final. Además, como está transitando un período de vida en el cual la rigidez y la falta de adaptación resultan más observables y con menos opciones que en años anteriores, procurará una sub.-adaptación buscando el menor dolor posible.
Particularidades del problema
No todos los gerontes que parten al Geriátrico, se encuentran en igualdad de condiciones psicofísicas. Cabe aclarar que existen casos en los cuales la enfermedad se adueña del cuerpo, con consecuentes y más o menos graves limitaciones corporales y mentales. Tales son los casos de los escleróticos avanzados, donde resulta difícil determinar el grado de conciencia sobre su propia situación.
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