El timpanismo ocurre frecuentemente durante la transición desde dietas altas en forraje a dietas altas en concentrados.
Diferentes especies microbianas predominan durante la digestión.
Si se desea evitar el timpanismo, el transpaso de una dieta de forraje y luego a grano debe transcurrir sin cambios bruscos, de ese modo las poblaciones microbianas se ajustaran y estabilizaran al nuevo sustrato.
Uno de los sistemas mas comunes para lograr un resultado exitoso es proveer al ganado de una dieta mixta (30 a 40 % forraje y de 50 a 60 % de grano de cereal cuando ingresan al feedlot y mantener esta dieta por 7 0 10 días.
Si la acidosis y el timpanismo permanecen ausentes, la cantidad de forraje en la dieta puede ser reducida en un 10 % cada 4 días hasta que se alcance el nivel de grano deseado con adecuado procesamiento y prudente manejo de el comedero, la transición de la dieta "alto –forraje" a "alto- grano" puede ser alcanzando en solo 10 días…
Los ionóforos inhiben el crecimiento de la mayoría de las bacterias Gram +. La (monensina) ionóforo reduce la severidad del timpanismo en el feedlot y son altamente recomendados. A su vez, exciten otros ionóforos pero la potencia varia salinomicina, lasalocid.
Pero en prevención del timpanismo es más efectiva la monensina que la salinomicina. El ganado comúnmente exhibe un consumo de materia seca diario, menor cuando se los alimenta con dietas conteniendo monensina que con salinomicina.
Esta disminución del consumo de carbohidratos rápidamente fermentecibles puede explicar parcialmente la diferencia en la incidencia de timpanismo entre animales recibiendo estos ionóforos.
La monensina, también tiene acción para disminuir la variabilidad en el consumo de materia seca…
Este cambio en el comportamiento ingestivo puede contribuir a reducir la presencia de timpanismo en ganado de feedlot alimentado con dietas suplementadas con ionóforo.
Han sido promovidas Mezclas minerales comerciales como preventivas del timpanismo, pero solo fueron parcialmente efectivas en el control del timpanismo de las pasturas. La adición de un 4% de sal (ClNa) a las dietas de feedlot ha demostrado alguna eficacia como preventiva, posiblemente porque actúa disminuyendo el consumo de materia seca y acelerando la tasa de pasaje de líquidos del rumen (aumento de la tasa de dilución).
Desafortunadamente la performance animal se encuentra deprimida cuando son alimentados con dietas con alto contenido de sal. La inclusión de aceite mineral (vaselina líquida) al 4 a 8% de la dieta base materia seca reduce la incidencia de timpanismo en el ganado de feedlot, pero el uso de grasa animal es generalmente inefectiva. El aceite de soja actúa como agravante, aumentando el número de casos observados. La levadura de cerveza cuando es incluida en dietas de feedlot, reduce la incidencia de acidosis ya que es un promotor de la utilización de lactato en el rumen, su costo es aún elevado.
Los granos de cereales son el ingrediente principal en las dietas del ganado de feedlot en la Argentina; las raciones de terminación constan típicamente en 90 % de granos y 10% de forraje expresado como materia seca.
Básicamente son reconocidos dos tipos de timpanismo:
1- meteorismo o timpanismo gaseoso.
2- Meteorismo o timpanismo espumoso.
El primero es mayormente asociado a obstrucción de esófago o cardias. Procesamientos incompletos o masticación deficiente de ciertos alimentos (Ej. Papas o batatas enteras) pueden causar obstrucciones que evitan el paso del gas a través del esófago. Ganado con neumonía crónica severa también puede desarrollar timpanismo gaseoso debido a daño del nervio vago y severa disminución de la motilidad ruminal. Inflamaciones y abscesos en tórax y abdomen pueden conducir a meteorismo gaseoso por compresión del esófago, alteraciones de la pared del retículo y alteración de la función sensitiva de la pared del rumen. La disminución de la motilidad ruminal como resultado de acidosis ruminal o hipocalcemia pueden también inducir al timpanismo gaseoso. La forma crónica de meteorismo gaseoso está frecuentemente asociada a una permanente deficiencia en el reflejo de eructación y el animal debe ser apartado para su sacrificio. Los fenómenos patológicos que paralizan el rumen (intoxicación con ácido cianhídrico por consumo de sorgos o gramillas, acidosis ruminal aguda también causan timpanismo por estar ausente el mecanismo eructativo. Es de rápida aparición y alta mortalidad, pero no es el tipo más frecuente en los feedlots.
En el caso del segundo, El 90% de los casos presentados en los feedlots responde a este tipo. En estado de salud el gas en el rumen forma burbujas que ascienden en el medio líquido y se unen para formar un depósito gaseoso libre en el saco dorsal del rumen. El contenido del rumen se encuentra normalmente, estratificado y las partículas del alimento parcialmente digeridas se encuentran en el líquido ruminal perfectamente identificables y separadas del gas. En contraste, el contenido ruminal de animales afectados de meteorismo espumoso se presenta como una masa de partículas de alimento, líquido ruminal y gas atrapado en burbujas. En el timpanismo espumoso de animales en pastoreo, los componentes de la planta aparecen como los principales responsables de la producción de espuma; en animales de feedlot, los agentes productores de la espuma parecen ser principalmente de origen microbiano. No todos los animales con rumen espumoso presentarán timpanismo, pero la espuma en animales que sí presentan timpanismo es extremadamente persistente y a veces ocupa todo el espacio disponible del retículo-rumen. Cuando el cardias es cubierto por espuma, la eructación es inhibida y la acumulación de gas en el rumen puede incrementar la presión intraruminal a valores muy altos. El meteorismo en el feedlot ocurre en hacienda que es alimentada con dietas que contienen más de 50% de granos y es observado con mayor frecuencia cuando se producen cambios en la dieta a mayores concentraciones de grano durante el período de adaptación. Es frecuente encontrar más cantidad de casos durante la época de mayor calor, esto podría estar asociado a las fluctuaciones en el consumo producidas por las altas temperaturas
Autor:
Jorgelina Gimenez
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