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Adulto mayor, hijos y nietos: una relación necesaria (página 3)


Partes: 1, 2, 3

Adulta mayor 4: Ya no sé quién soy, antes tomaba decisiones, pero ahora mi hija me las comunica, ya que ella decide. A veces discutimos.

Adulto mayor 5: Conmigo no cuentan para nada.

Comunicación: Es común encontrar que los gerontes traten de transmitir experiencias y conocimientos de forma clara y directa pero según perciben, la recepción por parte de las otras generaciones no es la mejor lo que conduce a discusiones en el seno familiar. Otras veces ocurre lo contrario, los hijos y nietos expresan opiniones y criterios diferentes al del adulto mayor que estos no comprenden, lo que supone existe una barrera generacional que limita la comunicación.

Test de relaciones familiares

Afectividad: Los adultos mayores 1 y 2 consideran que aunque se expresen opiniones opuestas el ambiente afectivo predomina en la familia; la demostración verbal o física de afecto se hace más evidente de abuelo a nieto o viceversa.

Adulta mayor3 y 4: Refieren pocas expresiones de afecto en su familia.

Adulto mayor 5: Percibe rechazo de su hijo, no de su nieto.

A veces se encuentra una actitud de entrega y sacrificio hacia los miembros de la familia que se evidencia cuando los gerontes tienen problemas de salud.

El tiempo para dedicarse a la familia es poco pues al decir de nuestros adultos mayores los más jóvenes tienen una vida muy agitada y casi no los pueden atender.

Armonía: Generalmente el adulto mayor percibe que sus intereses y necesidades no son tenidas en cuenta por el resto de la familia, la vejez es  vista como una etapa difícil en la que existe poca comprensión y consideración de la familia.

Adulto mayor 1: Me siento bien, mis hijos casi siempre cuentan conmigo y tratamos de que exista armonía.

Adulta mayor 2: A veces los más jóvenes no se dan cuenta de lo que deseamos. A nuestra edad necesitamos un ambiente tranquilo y agradable y que nos comprendan.

Adulta mayor 3: La vejez es triste, nosotros necesitamos paz y tranquilidad y muchas veces no la tenemos por eso quisiera escapar de mi casa cuando hay bulla.

Adulta mayor 4: Antes discutía, ahora estoy cansada y entonces trato de adaptarme, necesito tranquilidad.

Adulto mayor 5: Yo no cuento para nada, aquí cada cual hace lo que entiende.

Cohesión: Existe una tendencia a considerar las relaciones familiares armónicas, aunque en los reportes verbales se expresa la existencia de algunas contradicciones al tomar decisiones importantes en el hogar; sintiéndose muchas veces el adulto mayor fuera de contexto; y sin fusión emocional con la familia.

Adulta mayor 4: Ya no sé quien soy.

Comunicación: El diálogo se usa a veces para resolver los problemas familiares; pero las opiniones mas escuchadas son las del adulto medio, pues consideran tener la razón o al menos el vínculo social y económico necesario para resolver determinadas situaciones. Se considera la pareja como la persona con quien fluye mejor la comunicación pues son más escuchados y comprendidos por esta.

Agrupadas en esta categoría se señalan expresiones como:

Adulto mayor 1: Con mi familia converso, ellos me escuchan aunque a veces no opinemos igual.

Adulta mayor 2: Ellos no me comprenden, últimamente conversan conmigo pero no de todos los temas, a veces me regañan porque creen que los quiero gobernar.

Adulta mayor 3: Mis hijas y nietas a veces dicen que estoy loca y vieja y se ríen de mí porque no las escucho bien. No me comprenden.

Adulta mayor 4: Cuando quiero conversar un problema, mi hija me dice: "déjame refrescar". Mi hija y yo chocamos a veces,  me regaña como si fuera una niña. 

Adulto mayor 5: Con mi hija que vive en La Habana sí converso, pero mi hijo y yo no nos hablamos casi.

Rol: De forma general cada miembro de la familia tiene sus responsabilidades que cumple casi siempre; según criterio del adulto mayor. Al realizar entrevistas nos percatamos que existe cierta sobrecarga de roles a la adulta media en cuanto a las tareas domésticas y que el geronte se ocupa más de las actividades relacionadas con sus nietos, aún cuando el rol del abuelo; se encuentra permeado en esta etapa por las contradicciones entre ambas generaciones (adulto mayor – adolescente). 

Análisis de los resultados por técnicas según percepción de  los  Hijos del Adulto Mayor.

Dibujo de la Familia:

Afectividad: En las familias 1, 2, 3 y 4 es dibujado en primer lugar el adulto mayor muy cerca de su pareja, lo que indica son reconocidos por los hijos como parte importante y respetada dentro del núcleo familiar. En la familia 5 se excluye al adulto mayor por las malas relaciones existentes entre este y su hijo. Los hijos expresan afecto hacia sus padres: pero al igual que en el dibujo familiar los colocan juntos y lejos de ellos; lo que denota un distanciamiento emocional Los hijos y algunas dificultades en la comunicación que al decir de estos sujetos se da por la desigual manera de ver el mundo en cada generación.

Solos se aprecia rechazo en la familia número 5; en el resto hay afecto y respeto pero no alianza para la realización de actividades.   

Generalmente los adultos medios se ubican cerca de su esposo; hermanos o hijos; reflejando un vínculo físico y emocional más estrecho con estas generaciones.

Armonía: Los dibujos de los hijos 1,2,3,4 expresan un ambiente emocional tranquilo y afectivo, pero  existe una tendencia a mostrar independencia entre sus intereses y necesidades y los del adulto mayor, al cual colocan distante y en reportes verbales lo conciben solo realizando actividades domésticas.

Cohesión: La realización de actividades conjuntas no está presente en las representaciones gráficas de los hijos 1, 3, 4, 5; lo que supone los mayores realizan actividades de forma independiente del resto de la familia.

Comunicación: Las  representaciones  gráficas  y verbales de las hijas hace evidente la existencia de una mayor comunicación entre las mayores y su pareja, los cuales colocan unidos aunque no residan en el hogar de forma permanente (Familia 2).

En otros casos dibujan a la pareja ayudándose.

Rol: Las adultas son pintadas por sus hijas realizando una actividad doméstica.

A continuación las verbalizaciones y dibujos de los adultos medios:

Hija 1: Mis padres, mi hija y yo; todos nos llevamos bien.

Hija 2: Todos viendo televisión; es el único momento de armonía.

Hija 3: Mi papá cocinando y mi mamá mirándolo, siempre están juntos; luego mis hermanos y los muchachos.

Hija 4: Cada cual está haciendo lo que le gusta. Mamá, conversando, es lo que más hace.

Hijo 5: A mi papá no lo pinto porque aunque me duele no lo considero de mi familia. Dibujo a mi esposa, hijos y nieta.  

Circulo Familiar: Las hijas 1, 2, 3, y 4 incluyen al adulto mayor dentro del círculo, junto a los restantes miembros de la familia. El adulto mayor 5 excluye nuevamente a su padre.

Las hijas expresan afecto hacia sus padres pero al igual que en el Dibujo Familiar los colocan juntos y separados de ellos, lo que denota cierto distanciamiento emocional y algunas dificultades comunicativas. Se aprecia un sentimiento de aceptación y respeto. Solo en la familia 5 se evidencia rechazo.

Test de Percepción de las relaciones familiares: Las hijas coinciden con los padres al considerar la familia 1 y 2 como funcional, las familias  3 y 4  moderadamente funcional y la  5 disfuncional.

Afectividad: En las familias 1, 2, 3,4; según percepción de la generación intermedia, predomina un clima afectivo y todas las hijas refieren sentir cariño por sus madres. Las hijas 1,2 reconocen que la balanza se inclina a favor de los hijos cuando se trata de demostrarlo física o verbalmente .Las hijas 3 y 4 consideran que la demostración de afecto no es una costumbre familiar y el hijo 5 percibe rechazo de su progenitor, lo cual hace reciproco al expresar sus sentimientos hacia él.

Hija 1: Yo, quiero a mis padres.

Hija 2: Antes era más cariñosa con mi mamá, pensándolo bien ahora me doy cuenta que beso y acaricio más a mis hijos.

Hija 3: Nunca hemos sido de los que se dan muchos besos y abrazos, aunque nos queremos.

Hija 4: Quiero a mi mamá, pero nunca hemos sido muy apegadas.

Hijo 5: Nunca he recibido un beso de mi padre, creo que no me quiere.

Armonía: Las hijas plantean que muchas veces hay armonía en el hogar y que los intereses y necesidades de cada miembro de la familia son respetados por todos pero al realizar la entrevista retest constatamos que con frecuencia ellas toman decisiones y realizan tareas manteniendo al margen al geronte e incluso afectando su independencia y necesidades.

Cohesión: Los hijos quieren y respetan a sus padres (1, 2, 3) pero consideran que ya sus opiniones con relación a diferentes temas han perdido valor, por ende no se les tiene en cuenta para tomar decisiones importantes, fundamentalmente en lo relacionado con los nietos. Muchos adultos hacen referencia a la diferencia generacional como barrera para poder desempeñar juntos diferentes actividades; el geronte es considerado con limitaciones y en ocasiones incapaz para el desempeño de diferentes roles y la toma de decisiones.

Hija 1: Siempre le comunico a mis padres lo que pretendo hacer o modificar en la casa; y ellos aceptan.

Hija 2: Después que estuvo enferma le damos menos participación en las actividades del hogar, no queremos darle participaciones pero también es porque ella es muy dominante y autoritaria y nos atormenta.

Hija 3: Tomamos decisiones en conjunto, pero muchas veces tenemos que hacerle entender a mi mamá que sus ideas están "viejas", que ahora es diferente sobretodo cuando se trata de las muchachitas.

Hija 4: Generalmente yo decido, aunque siempre digo a mi mamá lo que quiero hacer.

Hijo 5: Yo tomo las decisiones.

Comunicación: Generalmente los hijos plantean que son capaces de expresar a sus padres ideas y opiniones de forma clara y precisa pero esto no ocurre con todos los temas; la sexualidad, los conflictos matrimoniales y con los hijos no son problemática a debatir libremente en el seno familiar; muchas veces por respeto, otras por falta de confianza, y en el caso de los adolescentes porque con frecuencia terminan discutiendo ya que los adultos mayores, tienden a inclinar la balanza a favor del nieto. Las siguientes expresiones así lo avalan:

"No tengo mucha confianza para hablar con mamá sobre mi intimidad".

 "Los problemas con mi esposo son nuestros; mis padres muchas veces no   entienden nuestra relación".

 "No tengo que darle participación sobre mis problemas, esos los resuelvo yo".

 "Nuestras discusiones son por la niña; ya que mi mamá siempre la protege y me quita la razón".

 "Me trata como si fuera niña, por eso muchas veces me molesto y no le hago caso". 

Test de relaciones familiares:

Afectividad: Los resultados en esta categoría coinciden con los obtenidos en el Test de percepción de relaciones familiares en cuanto a existencia y manifestación de afecto.

Armonía: En  las primeras cuatro familias, las hijas consideran que las decisiones familiares, a veces son tomadas en colectivo y que cuando se excluye al mayor es porque: "opina diferente", "quiere imponer su criterio", "para no darle preocupaciones", "a su edad ya no debe".

Cohesión: Existe unión familiar al enfrentar situaciones relacionadas con el adulto mayor, según criterio de los hijos, aun en la familia 5, a pesar de su disfuncionabilidad. El apoyo y cuidados al mayor se hacen evidentes siempre que es necesario.

Comunicación: En las familias 1, 2, 3, 4 frecuentemente se usa el diálogo para resolver los problemas familiares, las hijas sienten confianza para pedir información o aclaraciones a sus padres o  madres, pero reiteran existen temas y decisiones donde no se involucra al mayor.

Se escuchan los consejos y opiniones del geronte, pero en ocasiones hay divergencia de criterios y algunas insatisfacciones por la forma autoritaria o sobreprotectora de tratarlos. Generalmente las hijas refieren tener poco tiempo para dedicarles a sus mayores.

A continuación algunas referencias:

Hija 1: Con mi papa converso, pero no de todos los temas.

Hija 2: Conversamos mucho, a veces no estamos de acuerdo, yo la respeto, pero a veces me molesto porque me trata como niña y ya tengo 40 años.

Hija 3: A veces no le hago caso porque cree que soy una niña.

Hija 4: Casi no tengo tiempo para conversar, tengo mucho que hacer.

Hijo 5: No hablamos casi nunca, nos ignoramos.

Rol: Las hijas vinculan a sus padres con la realización de algunas actividades domésticas y/o relacionadas con el cuidado de los nietos. Las actividades sociales son limitadas en todos los casos; lo que se acepta como norma en esta etapa de la vida, cuando se refieren a otras actividades solamente vinculan al mayor con ver el televisor o ir de compras.

El adulto mayor 5 es considerado por su hijo como pasivo y dada las malas relaciones comunicativas se excluye su participación e las tareas del hogar.

Análisis de los resultados por técnicas según percepción de los nietos.

Dibujo de la Familia: Los adolescentes 1, 2, 3, 4 incluyen a sus abuelos dentro del dibujo, colocándolos cerca de su pareja al igual que lo hacen las otras generaciones. El adolescente 5 lo excluye debido a los conflictos familiares existentes. Generalmente se coloca a los miembros de la familia realizando actividades de forma independiente y en un ambiente emocional favorable.

Loa adolescentes se ubican junto a sus padres pues según refieren existe mayor vínculo emocional y comunicativo con estos.

A continuación la descripción de dibujos y reportes verbales:

Adolescente 1: Ubica primeramente a su abuelo haciendo los mandados, luego su abuela, mamá y ella conversando.

Adolescente 2: Dibuja a cada miembro de la familia realizando una actividad en el hogar, su abuela viendo televisor  "pues ahora está enferma y debemos cuidarla".

Adolescente 3: Dibuja cada miembro de la familia realizando una actividad doméstica. Sus abuelos,  juntos uno cocinando y la otra fregando, "ellos se llevan muy bien, siempre están juntos".

Adolescente 4: El adolescente jugando trompo cerca de su madre la cual está lavando, luego su abuela cocinando y el abuelo pelando boniatos "Mi abuelo ayuda a mí abuela en la cocina", "cada cual hace lo de siempre ".

Adolescente 5: Dibuja a sus padres, hermana y abuela materna que no reside en el hogar. Excluye al abuelo y expresa que existe poca relación entre ellos.

Círculo Familiar: Los adolescentes 1, 2, 3, 4 ubican al adulto mayor dentro del círculo cerca de su pareja, pues lo consideran como miembro de la familia al cual quieren y respetan; ellos se colocan más cercanos a los padres y hermanos al igual que en el dibujo "Mi familia y yo". El adolescente 5 excluye nuevamente al mayor.

Test de percepción de las relaciones familiares:

Los adolescentes coinciden con sus abuelos y padres al considerar las familias 1 y 2 como funcionales, las familias 3 y 4 moderadamente funcional y la familia 5 disfuncional.

Afectividad: Los adolescentes 1 y 2  refieren querer  a sus abuelos y expresarles este sentimiento a través de besos, caricias y gestos, lo que es reciprocado  por los adultos mayores. Los adolescentes 3 y 4 plantean que existe un vínculo afectivo con sus abuelos pero menos demostrado verbal y físicamente. El adolescente 5 considera que nunca ha recibido una manifestación de afecto por parte de su abuelo y por tanto el hace lo mismo "yo creo que no me quiere ".

Armonía: Según la adolescente 1 en su hogar predomina la armonía y generalmente los intereses de cada generación son respetados por el resto de la familia, pues "su abuelo acepta sus gustos pero con moderación". En el caso de 2, 3 y 4  refieren que en ocasiones, el ambiente armónico se rompe por contradicciones entre los adultos mayores y ellos debido a las diferencias en cuanto a gustos de programación televisiva, música, moda y  otros.

El adolescente 5 considera que en su hogar predomina la desarmonía y la agresividad verbal, principalmente entre su abuelo y papá y que en muchas ocasiones el abuelo vota  "a sus amigos porque hacen bulla".

Cohesión: Todos los adolescentes señalan que las decisiones son tomadas por los adultos medios aunque en las familias 1, 2, 3, y 4 se informa y en ocasiones se pide opinión al adulto mayor, y a ellos. Aunque se hace un intento de búsqueda de soluciones conjuntas al final prevalece el criterio de madres y/o padres.

Ante situaciones de salud o algún problema relacionado con el adulto mayor toda la familia se une para ayudar al mismo, incluso hasta en la familia 5.

Test de relaciones familiares:

Afectividad: Los adolescente 1, 2, 3, y 4 perciben que aunque las opiniones entre los miembros de la familias sean opuestas el ambiente afectivo predomina, siendo en los adolescentes 1 y 2  muy manifiesto este sentimiento y en la 3 y 4  en menos medida. Ocurre todo lo contrario en la familia 5 a criterio de este adolescente.

Para 1 y 2  sus abuelos son capaces de llamarles la atención con delicadeza y ternura lo que no ocurre así en la relación de los restantes abuelos y nietos los cuales expresan:

Adolescente 3: Mi abuela pelea mucho, sobre todo cuando no está de acuerdo con algo que yo hago.

Adolescente 4: Mi abuela me regaña mucho, considera que mi mamá me tiene muy añoñado.

Adolescente 5: Mi abuelo muchas veces está bravo y en vez de conversar, pelea.

Armonía: En este caso los resultados coinciden con el Test de Percepción de Relaciones Familiares.

Cohesión: Al igual que en el Test de Percepción de las Relaciones Familiares, los adolescentes 1, 2, 3, y 4 consideran que la toma de decisiones es realizada por la generación intermedia, aunque en ocasiones se escuchan los criterios del adulto mayor, en la familia 5 se excluye al adulto mayor en la toma de decisiones.

Comunicación: Los adolescentes 1, 2, 3, y 4  señalan que las opiniones y criterios de cada uno de los miembros de la familia son discutidos muchas veces en colectivo. A veces existen contradicciones entre el adulto mayor y sus hijos por temas relacionados con el manejo de los nietos; y entre el adulto mayor y los nietos por diferencias de opiniones, o por actitudes dominantes o sobreprotectoras de los abuelos que a veces son rechazadas por el adolescente.

A continuación algunas  verbalizaciones:

Adolescente 1: Mi abuelo y yo nos llevamos bien, muchas veces le pido opinión para tomar decisiones, pues los mayores tienen la experiencia, pero a veces me sobreprotege mucho.

Adolescente 2: Tengo confianza con mi abuela, muchas veces me entiende. Algunos temas me dan pena conversarlos con ella.

Adolescente 3: Mi abuela me regaña y me molesto, aunque reconozco que muchas veces tiene la razón. Nos llevamos bien, yo converso mucho con ella.

Adolescente 4: A veces le pido opinión a mi abuela porque me escucha y me aconseja, en otras ocasiones discutimos porque me regaña mucho.

Estos adolescentes ven a sus abuelas como las personas "que las han cuidado y cuidan"  y  "que se ocupan de muchas de sus cosas porque los padres están trabajando y no se encuentran en el hogar para ayudarlos a preparar la merienda, el almuerzo, y en otras casos la jaba para la beca".

En el caso del adolescente 5 la comunicación abuelo – nieto se dificulta, este último es percibido como alguien distante.

Rol: Los adolescentes 1, 2, 3, y 4 vinculan a las abuelas con la realización de actividades domésticas o referidas al cuidado de ellos o sus hermanos, en ningún caso señalan su participación en actividades sociales que denoten la posibilidad de  desarrollo en otras esferas. El adulto mayor número 5 mantiene  un rol pasivo a criterio de su nieto.

Interpretación de las principales  regularidades  encontradas en la relación familia – tercera edad desde la percepción de los adultos mayores:

En nuestra investigación sobre la percepción de la relación familia-tercera edad, aparecen una serie de contradicciones y necesidades propias del adulto mayor que estimulan a su estudio como etapa de desarrollo humano y no como etapa de involución o final; cuyas características están determinadas por los perjuicios, la cultura, la situación social, económica y familiar en que viven y el propio desarrollo individual del geronte.

En el presente informe realizamos una interpretación de los significados puestos de manifiesto por el adulto mayor y que actúan como determinantes familiares de su desarrollo psicológico.

El contenido de las expresiones verbales y escritas de nuestros mayores evidencia que la relación con su familia ocupa un lugar relevante en esta etapa de la vida aún en el caso del adulto 5, que reside en una familia disfuncional y presenta  marcadas contradicciones con su hijo pero considera a la familia como "algo importante ", deseando que las relaciones sean diferentes; percibe rechazo y se siente aislado  añorando con tristeza la esposa fallecida recientemente.

El resto de los gerontes perciben que son queridos por su familia y  aunque las expresiones de afecto se manifiestan más entre ellos y sus nietos no dejan de reconocer que el apoyo emocional de su cónyuge e hijos es muy importante para ellos. Refieren que su familia manifiesta una actitud de entrega y sacrifico cuando requieren de cuidados, especialmente por problemas de salud; esto reafirma lo planteado en  INSERSO (1995), "cuando las personas mayores necesitan apoyo social y  cuidado lo reciben por lo general en este orden: del cónyuge, de los hijos y de otros familiares". (25)

Aunque no realizamos un estudio de pareja en los resultados se evidencia la referencia a ella y la influencia de la viudez. Sobre todo cuando la vivencia el hombre mayor; lo que coincide con el planteamiento de Teresa Orosa (2003), de que "en nuestro país es característica la autoayuda de la pareja y hasta hoy en día el matrimonio de adultos mayores funciona bajo el precepto cultural de hasta que la muerte nos separe ". (7)

Los adultos consideran que a pesar de las contradicciones existentes por las diferencias generacionales existen lazos de afecto entre ellos y sus hijos (Solidaridad afectiva, Rossi y Rossi 1992). Las limitaciones al respecto se originan según ellos en el poco tiempo del que disponen sus hijos para dedicarles, al estar muy ocupados con las tareas del trabajo, el hogar y sus propios hijos. (24)

Los adultos mayores 3, 4 y 5 reconocen que en sus familias no se acostumbra a expresar el amor, cuestión que podemos asociar con insuficiencias en el cumplimiento de la función afectiva desde la génesis familiar.

Todos los adultos coinciden al considerar que existe cohesión en su familia al enfrentar diferentes situaciones, especialmente las relacionadas con sus problemas de salud, lo que se evidencia en las expresiones  antes descritas. Se quejan de que muchas veces son excluidos para la toma de decisiones importantes en el hogar, atribuyendo este rol a las generaciones intermedias pues tienen el poder económico y/o social con el que ellos muchas veces ya no cuentan. Sentimientos de soledad, aislamiento, disminución de la autoestima y de la autoridad, emergen de estos planteamientos: "me sacaron de la familia ", "ya no se quien soy ", "conmigo cuentan pocas veces ", "los jóvenes deciden ",  "me enferman las discusiones ". Estas expresiones fueron acompañadas de las miradas húmedas de nuestros gerontes.

Según Orosa (2003), el "anciano de hoy se queja de su falta de autoridad, de acuerdo con el paradigma de autoridad que observó de sus abuelos. No comprende las bondades de una autoridad compartida en el seno de su hogar para el desarrollo de sus otros miembros ". (7)

Las razones económicas se encuentran atravesando las relaciones de poder desde el punto de vista psicológico, lo queda plasmado  cuando dicen "a veces tengo opiniones y gustos diferentes pero al final mi hija es la que decide pues es la que paga", " mi hija toma las decisiones porque cuenta con los recursos ,a mí me informan ".

La tendencia que se asume por los hijos y los ancianos es que ahora el mayor pasa a ser objeto de cuidado, como dicen algunos ancianos "ahora soy como la hija", "me tratan como una niña", esto no es aceptado fácilmente por nuestros gerontes, sin embargo, a pesar de su insatisfacción, los propios adultos mayores son portadores de prejuicios acerca de su imposibilidad de continuar aportando a algo que no sea la familia y no son conscientes de sus propias necesidades de desarrollo personal; consideran la vejez  como etapa "difícil" , "triste", "final", en la que muchas veces no son respetados por el resto de la familia, sus intereses y necesidades: "A veces no se dan cuenta de lo que necesitamos", "Necesitamos paz, tranquilidad", "Quisiera escapar cuando hay bulla ", "Me consideran loca porque no estoy de acuerdo con sus bailes y músicas, necesito tranquilidad ", "A nuestra edad necesitamos un ambiente agradable y que nos comprendan". La armonía familiar se  quiebra en ocasiones, por estas razones, al igual que cuando se producen pequeñas discusiones entre el  adulto mayor, hijos y nietos por la diferente concepción del mundo existente entre ellos.

El adulto mayor expresa su necesidad de aconsejar y trasmitir experiencia al resto de las generaciones entrando en contradicción con estas, pues según perciben, los otros creen que el mayor: "los quieren gobernar", "es dominante", "es antiguo", "o está loco". La diferencia intergeneracional en cuanto a opiniones, criterios, gustos, preferencias, el  estilo educativo al manejar a los nietos, el insuficiente tiempo para dedicar al adulto mayor, actúan como barreras que dificultan la comunicación entre padres e hijos y en algunos casos entre abuelos y nietos. Se aprecia un reclamo del adulto mayor de ser escuchados y comprendidos por el resto de las generaciones, lo que coincide con otras investigaciones realizadas en el país donde los gerontes expresan que "no son comprendidos por los más jóvenes, los cuales no tienen capacidad de escuchar y encuentran sus ideas anticuadas ". (27) 

Como afirma Orosa (2003), "la familia le ofrece al mayor, protección y razones de continuidad, porque le entrega a sus nietos, pero no hay comunicación adecuada entre los adultos en general". (7)

Los adultos expresan su necesidad de trasmitir experiencias, aconsejar, de reclamar lo que les pertenece, cuando están próximos a dejar de existir físicamente. Se  pone de manifiesto  además su necesidad de ""trascender o legar al otro""; estructura psicológica que actúa como reguladora del comportamiento en esta etapa. El adulto mayor ha desempeñado un importante papel en el cuidado y formación de los nietos y desde este rol constituye  un valioso recurso para la familia cubana como fue señalado en el marco teórico. Las adultas mayores han disminuido sus roles sociales e incluso domésticos, manteniendo las actividades relacionadas con el cuidado de los nietos; cuestión que es vivenciada como un cambio natural para estas mujeres, por una consideración propia del género. Esto fue constatado por nuestra observación y las expresiones verbales de las mayores. El adulto mayor 5 se siente con poca responsabilidad dentro del núcleo familiar desempeñando un rol pasivo y desde su posición de abuelo ocupa el estilo de figura distante descrito en los fundamentos teóricos.   En nuestro medio el rol de "Abuelidad" entra a sustituir de una forma u otra el rol de actividad socialmente útil y aunque este es muy valioso, consideramos que a veces se ignora al" hombre" o la  "mujer"; aunque no ignoremos al "abuelo" o la "abuela". Tanto es así que en ocasiones  al adulto se le dificulta su identidad con la edad, no solo como decíamos  por prejuicios sociales negativos, sino también por la fuerza del rol de abuelo.

Según Orosa (2003), "el anciano es recargado en su rol de Abuelidad o doméstico y en otros casos es totalmente aislado". La sociedad, la familia y el propio abuelo desconocen que es un individuo en desarrollo con necesidades propias de una edad que no proviene solamente de su rol de abuelo.

Interpretación de las principales  regularidades  encontradas en la relación familia-tercera edad desde la percepción de los hijos:

Para muchos adultos contemporáneos la adultez es "la época de mirar hacia atrás y contemplar los frutos de la vida, frutos que ha menudo se resumen al crecimiento de los hijos o los nietos, en ocasiones, a la ayuda material o espiritual de los padres ya ancianos,  y en el mejor de los casos a la realización personal o profesional". (Flebles Ejalde, (2004) (32)

Las hijas de las primeras cuatro familias manifiestan gráfica y verbalmente sus sentimientos de afecto, respeto y consideración hacia sus madres y padres a las cuales agradecen su existencia y apoyo lo que patentizan al decir "es mi guía", "la quiero mucho","lo respeto". Reconocen que con el paso del tiempo la transmisión de este cariño de forma física o verbal se ha visto permeada por las exigencias que para esta etapa de la vida y especialmente para las féminas se ven obligadas a cumplir: cuidado de los hijos, atención al esposo quehaceres del hogar y actividades laborales o sociales. Coincidimos con lo planteado por Orosa (2003) cuando señala: "los cuidadores de la generación intermedia se pueden sentir atrapados entre el cuidado que deben brindar a la generación de sus padres y a la de sus hijos; es lo que llaman la generación sándwich". "El cuidador que generalmente es la hija hembra puede estar desempeñando a la vez los roles de madre, hija, ama de casa, trabajadora, esposa". (7)

Representan al mayor  junto a su pareja como expresión del vínculo afectivo más estrecho que existe en esta generación, y aún cuando ellos se sitúan cerca lo hacen más unidos a sus hijos, esposo y/o hermanos.

En la familia 5 señalada por todos los miembros como disfuncional se evidencia un clima emocional negativo, con sentimientos hostiles hacia el progenitor, que tienen su génesis en los conflictos generados por ellos a lo largo de todo el desarrollo individual del hijo evidenciándose una preferencia hacia la hija  que no vive en el hogar. "Transmitir amor en la familia es algo básico para su funcionabilidad, si este no es percibido desde la infancia con dificultad logra aportarse en etapas posteriores".

La existencia de afecto y cariño entre los miembros de las familias 1, 2,.3 y.4 garantiza un ambiente armónico y equilibrado, alterado en ocasiones cuando no existe coincidencia de gustos y opiniones entre las diferentes generaciones.

En general los hijos aún  están  prejuiciados  por los criterios  culturales existentes sobre la vejez, a pesar de las influencias educativas actuales, no teniendo en cuenta las potencialidades creadoras, intereses y necesidades fundamentales de sus mayores. "La familia debe conocer lo que es esperable en un envejecimiento normal ya que esto facilita una convivencia armónica entre las distintas generaciones y posibilita la integración de las mismas,  creciendo y nutriéndose con el aporte de una visión diferente de la vida". (23).

Las hijas se señalan como principales proveedoras de apoyo económico, material y cuidados de sus adultos mayores cuando estos así lo requieren siendo capaces de relegar otras responsabilidades por atender a sus padres, expresando como motivaciones principales el afecto, el sentido de obligación o deber, el agradecimiento y las expectativas de reciprocidad; lo cual coincide con la literatura revisada. (7).

El hijo de la familia 5 refiere que a pesar de sus conflictos, el padre es apoyado y cuidado por la familia, aunque reconoce que el rol principal en este sentido es jugado por su esposa. Esto confirma lo planteado por Orosa (2003),  cuando señala que "la atención que los mayores reciben de la familia proviene de las féminas, ya sean las hijas o las nueras". (7)

Las decisiones en el hogar son tomadas por  la generación intermedia pues son los portadores de los recursos económicos y materiales necesarios para la solución de determinadas acciones. Considero que las trasformaciones económicas  y sociales por las que atraviesa la familia cubana actual, actúan como determinantes que influyen en la percepción de la relación familia-adulto mayor.

Los hijos opinan que sus padres ya no tiene la autonomía  necesaria, "el poder de decidir efectivamente", "deben ser cuidados o protegidos", razones que atribuyen para no hacerlos participe de algunas decisiones. Como se describe en el marco teórico  ocurre una inversión de roles que resulta difícil de asumir por los hijos en muchos casos y que en ocasiones no es bien percibida por los mayores generándose en ellos un sentimiento de malestar. Se expresa un reclamo de los hijos de hacer valer su independencia, responsabilidad y autodeterminación, cualidades personológicas que adquieren su máxima expresión en esta etapa de la vida y que en muchas ocasiones no son tenidas en cuenta por el adulto mayor. Las hijas verbalizan  "mi madre me quiere dominar", "no reconoce que soy adulta", "siempre me regaña, como si fuera niña ", "cree que todo lo hago mal". No existe comprensión por parte de los mayores del grado de madurez emocional y física alcanzado por sus hijas o hijos. Estas posiciones unidas al poco tiempo del cual disponen las hijas para dedicarse a conversar con sus padres dificulta a veces  la comunicación entre ellos. Aunque todas reconocen tener confianza con sus progenitores, no se habla libremente de temas como la sexualidad y problemas matrimoniales, lo que asociamos a prejuicios aún existentes de la cultura tradicional.

Los mayores son considerados por las hijas como fuentes de apoyo y proveedoras de cuidados hacia sus nietos lo que coincide con la literatura revisada cuando señala: "las personas mayores no son solo receptoras de ayuda, sino que realizan toda una serie de aportaciones de carácter material, económico y afectivo a los miembros más jóvenes". (25).

En nuestro país existe una presencia y participación de los abuelos en la crianza de los nietos, muchas veces sobreinvolucrados en su función de reemplazo de los padres. (33).

El tema sobre la educación de los nietos resulta controversial entre abuelos e hijas señalando estas, que los mismos adoptan una actitud sobreprotectora o permisiva con los nietos y de crítica muchas veces a sus manejos educativos. El rol de abuelos es aceptado con agradecimiento por las hijas pero con cierta insatisfacción por los métodos  educativos del mayor. Al analizar la tipología del rol de abuelos citada en el contexto teórico, como tendencia la mayoría de estos pueden estar categorizados como progenitores sustitutos, cuestión que introduce disfunción de roles  cuando los padres reclaman ese lugar lo que coincide con lo encontrado por Orosa (2003),  (7).

Interpretación de las principales  regularidades  encontradas en la relación familia-tercera edad desde la percepción de los nietos:

Desde la mirada de los adolescentes investigados, la relación con sus abuelos está mediatizada por sentimientos de afecto, respeto y admiración en muchos casos, lo que afirman al expresar." Mi abuelo es como mi papá", "Mi abuela es como mi segunda madre" "Ella tiene la experiencia", "La quiero mucho". (1, 2, 3,4). De esta manera se reafirma la visión positiva de la vejez presente en muchas familias extensas, que señala Keith (1982) y considera a la persona mayor como "sabio, cargado de experiencia social, de alto status social, merecedor de respeto y con una clara influencia sobre los demás". (34)

Los abuelos maternos, con los que conviven  desde la infancia, son proveedores de amor, apoyo y cuidados para sus nietos, desempeñando el rol de  "progenitor sustituto" descrito  en el marco teórico.

Consideran nuestros adolescentes, al igual que las otras generaciones que en sus familias existe cohesión al enfrentar los problemas relacionados con el mayor; pero este se excluye a veces. Cuando de tomar decisiones se trata, este rol es asumido generalmente por sus padres, quienes tienen el poder económico, material y las posibilidades creativas para la búsqueda de soluciones.

Al enfrentar situaciones difíciles los adolescentes estudiados tienden a vincularse a sus madres, consideran que sus opiniones y criterios están más cercanos a los de ellos. En este sentido hay expresiones como: "Mi abuela no está a la moda ", "tiene ideas anticuadas", "a veces cree que debo ser como ella cuando tenía mi edad". Los adolescentes reconocen que sus  abuelos tienen la savia de la  vida, pero por las particularidades propias de su desarrollo psicológico se revelan muchas veces ante las intenciones de los adultos y expresan su necesidad de ser escuchados, comprendidos, y no recibir constantes regaños e imposiciones del adulto, cuestión que dificulta la comunicación entre ellos .En esta etapa varían las expectativas, pues el adolescente ya no ve al abuelo como la persona con la que puede jugar, divertirse, o recibir cuidados, ahora reclaman independencia y un ajuste del mayor a sus necesidades de desarrollo personal.

Los intereses y necesidades del mayor generalmente son obviados por los adolescentes, que al igual que sus progenitores aún están marcados por los perjuicios culturales sobre la vejez y  la situación económica y familiar que el mundo vive en este siglo. Se limita el espacio de las  mayores, a las tareas domésticas, fundamentalmente relacionadas con la cocina los mandados y el cuidado de los nietos. La imagen de la vejez se relaciona con estos comportamientos, sin tener en cuenta sus posibilidades de desarrollo social o personológico. Coincidimos con Orosa,  cuando refiere: "se reconoce al adulto mayor, pero no se le conoce". Muchas veces la naturaleza y el grado de relación entre nietos y abuelos están mediatizados por las actitudes y decisiones de los propios padres. Los adolescentes exponen comportamientos que a veces violan el espacio físico y la tranquilidad tan  codiciada por los gerontes; e incluso reconocen que a pesar del concepto elaborado de sus abuelas, en ocasiones son capaces de expresarse en forma irrespetuosa con ellas,  alterando la armonía familiar.

En el caso de la familia 5, percibida por el adolescente como disfuncional, prevalece un clima de rechazo y desafecto al adulto mayor, con desarmonía, desunión y dificultades comunicativas. Esto nos hace pensar como Espín (2003),  cuando plantea: "Los vínculos del anciano varían de una familia a otra en función de su historia anterior, la estructura de la familia como grupo y la personalidad de sus miembros entre otros factores."(22).

CONCLUSIONES

Los adultos mayores se consideran un miembro querido por su familia, pero con insatisfacciones en cuanto a la comunicación, el irrespeto de límite y la toma de decisiones. La familia constituye su lugar principal de referencia y es defendida  desde su posición como la llamada a mantener la armonía y la continuidad.

v El rol de abuelidad se encuentra sustituyendo al rol social; el mayor lo estima como necesario para su actividad vital, pero percibe contradicciones con hijos y nietos dadas por la diferente concepción del mundo, existente entre ellos.

v Los hijos sienten afecto hacia sus padres y perciben limitada su transmisión por la sobrecarga de roles asumida o porque no es una manifestación acostumbrada en la familia; refieren dificultades comunicativas, y excluyen al mayor de la toma de decisiones por razones psicológicas, económicas y/o sociales.

v Los nietos quieren, respetan y aprecian la experiencia del mayor, pero reclaman de este comprensión e independencia, razones que a veces afectan la comunicación y la armonía entre ambas generaciones.

v Los abuelos son considerados por hijos y  nietos como un recurso valioso para la familia pero con insatisfacciones en cuanto a su manejo educativo.

v La disfuncionalidad familiar influyen en la percepción que tienen los miembros de la familia en su relación con la tercera edad.

v En la relación familia – tercera edad, se evidencian dificultades en la comunicación, la armonía y la cohesión dadas por el no reconocimiento de las particularidades propias del desarrollo psicológico en cada etapa de la vida, y el no cumplimiento de las expectativas del "el otro", en cada generación.

RECOMENDACIONES

Continuar la presente línea investigativa y priorizar las investigaciones dirigidas al estudio de la relación familia-tercera edad desde la percepción de los diferentes miembros del hogar con muestras más amplias.

v  Realizar una labor de orientación psicológica dirigida hacia las oportunidades educativas relacionadas con las principales dificultades percibidas por los miembros de la familia en  su relación con el adulto mayor.

v  Proponer la inclusión del tema de las necesidades psicológicas del adulto mayor en la formación de los profesionales de las ciencias humanas.

v  Ofrecer preparación sistemática a los profesionales de la Atención Primaria de Salud con respecto a la importancia de una adecuada relación intergeneracional para el bienestar psicológico del adulto mayor.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Rocabruno JC. ""Teorías sobre el envejecimiento"", Conferencia del Centro Iberoamericano de la Tercera Edad. — La Habana; 1996.

Anexos

ANEXO # 2

Escala Psicoafectiva.

 

 

NOMBRE:

CONSIGNA:

A continuación le haré algunas preguntas sobre dificultades por las que atraviesan las personas en algún momento de su vida. La sinceridad con que usted responda ayudará a entender mejor su situación de salud.

Ante cada pregunta responda si esto le sucede:

                                     Siempre (s)

                                     Algunas veces (av)

                                     Nunca (n)

1-     Se siente ud. deprimido, triste, apesadumbrado, melancólico, (TRISTEZA).

2-     Siente ud. que su vida está vacía. (PESIMISMO).

3-     Ha pensado alguna vez en quitarse la vida. (IDEACION SUICIDA)

4-     Padece ud. de trastornos del sueño. (TRASTORNOS DEL SUEÑO).

5-     Se siente ud. alterado o nervioso por cosas sin importancia. (TRASTORNOS NERVIOSOS).

6-     Se siente ud. sin esperanza, inseguro de si mismo. (PERDIDA DE LA AUTOCONFIANZA).

7-     Se disgusta o irrita con mucha facilidad. (IRRITABILIDAD).

S                           AV                               N

2                             1                                  0

2                             1                                 0

2                             1                                 0

2                             1                                 0

2                             1                                 0

1                            0,5                              0

1                           0,5                               0                  

0-3 ptos. Sin Alteración psicoafectiva.

4-8 ptos. Posible alteración psicoafectiva.

9-14 ptos. Con alteración psicoafectiva.

ESCALA PSICOAFECTIVA HISTORICA CLINICA

  1. Muy afectada funcionabilidad.
  2. Afectada funcionabilidad.
  3. Sin afectación funcionabilidad.

ANEXO # 4.

Dibujo mi familia y yo.

TEST DE PERCEPCIÓN DE RELACIONES FAMILIARES.

A continuación les presentamos una serie de situaciones, que pueden ocurrir o no en su familia. Necesitamos que Ud. Clasifique y marque con u una X, su respuesta, según la frecuencia en que se presenten.

                                                                             Casi         Pocas           A          Muchas       Casi

                                                                             Nunca      Veces       Veces       Veces       Siempre 

1.     Se toman decisiones para cosas importantes

 de la  familia.                                                       ____         ____          ____        ____          ____

2.     En mi casa predomina la armonía.                 ____         ____          ____        ____          ____

3.     En mi casa cada uno cumple su

    responsabilidad.                                                   ____        ____          ____         ____          ____

4.     Las manifestaciones de cariño, forman

 parte de nuestra vida cotidiana                             ____         ____          ____         ____         ____

5.     Nos expresamos sin insinuaciones, de

 forma clara y directa.                                            ____         ____         ____          ____        ____

6.     Podemos aceptar los defectos de los demás

 y sobrellevarlos.                                                    ____         ____         ____          ____       ____

7.     Tomamos en consideración las experiencias

 de otras familias ante situaciones difíciles.           ____         ____        ____           ____       ____

8.     Cuando alguien de la familia tiene un

problema los demás lo ayudan.                              ____        ____         ____          ____       ____

9.     Se distribuyen las tareas de forma que nadie

 esté sobrecargado..                                                 ____       ____         ____           ____       ____

10.  Las costumbres familiares pueden modificarse

 ante determinadas situaciones.                               ____       ____         ____           ____       ____

11.  Podemos conversar diversos temas sin temor   ____       ____         ____           ____       ____

12.  Ante una situación familiar difícil somos

   capaces de buscar ayuda en otras personas.            ____       ____         ____           ____        ____

13.  Los intereses y necesidades de cada cual son

respetados por el núcleo  familiar.                             ____       ____         ____           ____        ____

14. Nos demostramos el cariño que nos tenemos .  ____        ____         ____           ____       ____

TEST DE RELACIONES FAMILIARES.

Sub. Test # 3: Dialogo de la Familia.

A continuación les presentamos una serie de situaciones, que pueden ocurrir o no en su familia. Necesitamos que Ud. Clasifique y marque con u una X, su respuesta, según la frecuencia en que se presenten.

                                                                                      Casi Nunca      Nunca      A Veces   Siempre  

1.      Las decisiones que tienen que ver con la

 familia las tomamos en grupo.                                           ____            ____          ____         ____

2.     Resolvemos nuestros problemas familiares

mediante el diálogo.                                                             ____            ____          ____         ____

3.     En mi familia cuando alguien necesita una

opinión, se  tiene confianza de pedirla a otro miembro.       ____            ____          ____         ____

4.     En mi familia hablamos con libertad acerca de

 política, religión, moral, problemas sociales etc..                ____            ____          ____         ____

5.     En mi familia cuando se tiene necesidad de

 información, aclaración u orientación, se siente

confianza para pedirla a  otro miembro de la familia.           ____             ____         ____         ____

6.     En mi familia podemos hablar de aquello que

es muy íntimo, personal o particular.                                    ____              ____        ____         ____

7.     En mi familia, una  vez analizados los detalles de

 un problema, todos estamos invitados a ofrecer

 proposiciones para su solución.                                            ____              ____        ____         ____

8.     En mi familia cada miembro ofrece sus opiniones,

 comentarios, consejos etc, para la educación del grupo.      ____              ____         ____        ____

9.     En mi familia podemos hablar de las cosas

desagradables pero necesarias.                                               ____              ____         ____        ____

10.  Comentar nuestros fracasos, frustraciones, logros

 y realizaciones es algo natural en nuestra familia.                ____              ____         ____       ____

11.  En mi familia podemos hablar aún de aquello en

 que estamos en desacuerdo (opiniones, convicciones

 particulares), sin perder la calma                                           ____             ____          ____       ____

12.  Los acontecimientos del día los comentamos

y/o analizamos en la familia                                                 ____               ____          ____       ____

TEST DE RELACIONES FAMILIARES.

Sub. Test # 4: Valoración de la Familia.

A continuación les presentamos una serie de situaciones, que pueden ocurrir o no en su familia. Necesitamos que Ud. Clasifique y marque con u una X, su respuesta, según la frecuencia en que se presenten.

                                                                                      Casi Nunca      Nunca      A Veces   Siempre  

1.      Los integrantes de  mi familia hemos aprendido

 a considerarnos miembros importantes y útiles a la

sociedad.                                                                             ____            ____          ____         ____

2.     En mi familia nos han enseñado a estar contentos

 con lo que somos.                                                              ____            ____          ____         ____

3.     Mi familia  a  pesar  de las adversidades, obstáculos

 y amenazas, se ha esforzado y salido adelante                  ____            ____          ____         ____

4.     La capacidad de expresar los sentimientos, es algo

 que hemos aprendido en  mi familia.                                 ____            ____          ____         ____

5.     En mi familia estamos convencidos que cada miembro

posee defectos y virtudes suficientes como para sentirnos

 todos bien.                                                                          ____             ____         ____         ____

6.     En mi familia nos sentimos todos bien cuando

 tenemos que dar respuesta a las preguntas de las

gentes.                                                                                  ____              ____        ____         ____

7.     En mi familia, cuando se trata de algo personal,

 cada u no habla y decide por si mismo.                              ____              ____        ____         ____

8.     En mi familia aunque todos estén ocupados y de

 prisa, siempre hay tiempo para escuchar los

argumentos de los otros                                                       ____              ____         ____        ____

9.     En mi familia la aceptación y consideración es

algo igual para todos.                                                           ____              ____         ____        ____

10.  En mi familia nos han enseñado a cuidarnos y

 valorarnos por nosotros mismos.                                         ____                ____         ____       ____

11.  La opinión de cualquiera  de los miembros de la

 familia es tomada en cuenta, y respetada para la

toma de decisiones.                                                               ____               ____          ____       ____

12.  La idea de que "tu puedes", "tu eres capaz",

se nos ha inculcado en nuestra familia.                                 ____               ____          ____       ____

TEST DE RELACIONES FAMILIARES.

Sub Test. # 1: Manifestaciones de Afecto en la Familia.

A continuación les presentamos una serie de situaciones, que pueden ocurrir o no en su familia. Necesitamos que Ud. Clasifique y marque con u una X, su respuesta, según la frecuencia en que se presenten.

                                                                                      Casi Nunca      Nunca      A Veces   Siempre  

1.      Aunque se expresen opiniones opuestas,

 el ambiente afectivo predomina en mi familia.                    ____            ____          ____         ____

2.     Las manifestaciones físicas de afecto (besos,

abrazos, palmadas), son parte natural de mi familia.          ____            ____          ____         ____

3.     Aunque la familia pase por situaciones difíciles,

el afecto y el calor humano, están siempre presentes.        ____            ____          ____         ____

4.     En mi familia nos expresamos afecto, mediante

 palabras cariñosas.                                                              ____            ____          ____         ____

5.     Una actitud de entrega y sacrificio del uno hacia

 el otro caracteriza a mi familia.                                          ____             ____         ____         ____

6.     Cuando se requiere disciplina o se llama la

atención, la delicadeza, la ternura y el afecto están

  presentes.                                                                             ____              ____        ____         ____

7.     En mi familia se expresa afecto mediante

 regalos (dulces, libros).                                                      ____              ____        ____         ____

8.     Mi familia dedica tiempo para pasar juntos y

 compartir momentos de grata compañía.                           ____              ____         ____        ____

9.     En mi familia se practica el reconocimiento

verbal, de acciones, atributos y virtudes de sus

 miembros.                                                                           ____                ____         ____        ____

10.  En mi familia los hechos afectuosos (regalos,

besos, caricias), se reciben con palabras afectuosas.           ____                ____         ____       ____

11.  En mi familia hay gozo y satisfacción cada

  semana y somos útiles a los demás.                                      ____               ____          ____       ____

12. En mi familia es fácil decir que, nos queremos.             ____               ____          ____       ____

TEST DE RELACIONES FAMILIARES.

Sub. Test # 2: La distribución de papales y roles  en la familia.

A continuación les presentamos una serie de situaciones, que pueden ocurrir o no en su familia. Necesitamos que Ud. Clasifique y marque con u una X, su respuesta, según la frecuencia en que se presenten.

                                                                                      Casi Nunca      Nunca      A Veces   Siempre  

1.      Ante el sufrimiento de un miembro de mi familia,

 todos lo sentimos y lo sobrellevamos.                               ____            ____          ____         ____

2.     En mi familia a cada uno de sus miembros se nos

 enseñó a tener bien clara nuestras responsabilidades.       ____            ____          ____         ____

3.     Nuestra familia  ha participado activamente en

 la creación de un equipo o grupo similar en la 

    comunidad.                                                                         ____            ____          ____         ____

4.     En mi familia siempre hay alguien que observa,

vigila y llama la atención e indica lo que es conveniente.  ____            ____          ____         ____

5.     En mi familia la responsabilidad económica de

alguna  manera está compartida.                                         ____             ____         ____         ____

6.     En mi familia hay un sistema de autoridad y

 dirección que todos respetamos.                                        ____              ____        ____         ____

7.     En mi familia hay quienes dan  ánimos a los que

 necesitan impulso, para salir adelante.                               ____              ____        ____         ____

8.     En mi familia cada uno asume la responsabilidad

 de sus actos, sin echar culpa a otro.                                   ____              ____         ____        ____

9.     En  mi familia en ausencia del líder constituido,

otro podría tomar su lugar , y la familia seguir adelante.    ____                ____         ____        ____

10.  Cuando las cosas se ponen triste, difíciles o

melancólicas, alguien de la familia introduce alegría,

 hace bromas y pone humor para mejorar la situación.        ____                ____         ____       ____

11.  E mi familia hay voluntarios cuando se necesita

 hacer cosas extras en el hogar.                                            ____               ____          ____       ____

12.  Hemos aprendido a poyarnos cuando las

 circunstancias así lo requieren.                                            ____               ____          ____       ____

Autoras:

M. Sc. Esperanza de la Caridad Hernández Pérez

SUM Camajuaní. Villa Clara. CUBA 

M. Sc. Nancy Nepomuceno Padilla

Facultad de Psicología. UCLV. Villa Clara. CUBA

Partes: 1, 2, 3
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