que después hay trabajo.
yo quiero el día domingo
fuera de mi calendario,
para toda la semana,
vivirla siempre soñando.
Mi razón
No entiendo, pero me gusta,
esta manera
de ir contra lo normal.
Me extraña y no me asusta,
ir contra la corriente sin saber nadar.
Es dulce como la miel,
el comer limón con sal.
Es grato como la muerte,
saber que no se va a ganar,
y aun cayendo tomar impulso,
para volverte a levantar.
Es loco, pero más cuerdo,
ir en busca de la verdad,
la busco y no la encuentro,
¡que felicidad!
Si dicen blanco,
yo digo negro,
algún partido hay que tomar,
si fueran todos igual de buenos,
no habría felicidad.
con el mismo patrón de todos,
a mi no me van a cortar,
porque es algo exquisito,
no parecerse a los demás.
Porque yo pienso que no todo esta escrito,
y aquí estoy yo, para agregar.
Por error
Un día hasta mí,
volando llegó,
quizá por estar aqui,
quizás por error,
un hada gris,
del plateado mejor,
con el cielo por mirada,
y de aspecto feroz;
me juró que me amaba,
y me arrancó el corazón,
me mató con sus besos,
reviví con su amor,
me imagino que eso,
es simplemente un error,
porque las mujeres de este tiempo,
ya no creen en el amor.
hadas que vuelan muy bajo,
no las perdona Dios,
porque, un pequeño ser humano,
no merece nada mejor,
más vale pájaro en mano,
que cien volando sobre un perdedor,
y el hada que cayo en mis manos,
es la misma que quería yo,
un alma del diablo,
con los poderes de Dios,
que sepa que la amo,
sin guardarme rencor,
que sepa odiarme,
demostrándome amor.
Un día hasta mí,
quizás por error,
fui un poco feliz,
y aún yo lo soy.
Estar enamorado
Estar enamorado es tener todo,
teniendo nada,
es tener nada,
teniendo todo.
es amar sin saber si se es amado;
es amar temiendo ser rechazado,
es sentir el corazón fuera del pecho
es soñar que duermes con ella
en el mismo lecho;
es sentir su sangre corriendo en tus venas,
y sentir que la tuya corre por las de ella.
es mirar el cielo y ver caer las estrellas
cuando vez su cara y esta llorando ella,
es pasar por su casa y al no verla,
lanzar un grito: ¡me muero por ella!
La mujer de la calle
Hoy he visto a la mujer de la calle
la he visto hoy y no sabia lo que hace
pero la vi tan libre y tan sincera
que mi corazón creció y se fue con ella
La vi vistiendo ropa insinuante
la vi ocultarse con la luna menguante
y en ese momento en que la amaba
no pregunté que hacia antes
He visto calles que corren adelante
he visto cuartos que suelen achicarse
me he visto en el espejo
y quiero ser otra vez gigante
mujer de la calle, mujer caminante
mujer que eres niña fingiendo de grande
niña que es mujer
mujer vacilante
ayer fui el señor
de una mujer de la calle
y no me cobró
porque la amé como nadie.
Así ha de ser
Que tenga el cuerpo perfecto.
Que tenga los ojos azules.
Que tenga los senos redondos.
Que tenga en las sienes dos tules.
Que tenga sonrisa de virgen.
Que tenga rizado el cabello.
que sea de mi lugar de origen.
que tenga un vestido muy bello.
Que me quiera desde hoy.
caminando y distraído.
Que me quiera desde hoy.
Que tengo el corazón partido.
Mujer, rosa y espina.
Las mujeres son como las rosas:
todas son muy hermosas.
Pero mientras gozas, dándole una caricia fina,
bajas la mano ¡ay! una maldita espina.
Su aroma y su forma es muy hermosa,
si es rosa es de las rojas,
si es mujer es de las más preciosas.
Pero cuando tratas de besarla otra vez…
¡Sientes de nuevo una espina
atravesando tu piel!
Es de hierro
La necia neblina que con su helada empaña
no es ni será más fuerte que mi alma,
ni la ola del mar más picado,
brinca más que la víscera,
de mi izquierdo costado,
la más fuerte de las montañas,
ni el árbol mejor plantado,
son más firmes ni mejor parados,
que el ideal que en mi frente se ha formado.
Campanas y clarines ha sonado,
pero ninguno ha mencionado y alterado,
tanto como mi voz ha construido y destrozado,
porque lo que se ha forjado del hierro,
nacido y creado del hierro quedó forjado.
Ni la noche tenebrosa y oscura,
sin un bendito rayo de luna,
pueda tapar en su penumbra,
este compuesto, recopilación hecha figura,
ni la pasión más baja y caliente,
ni el amor más puro existente,
puede con este río hecho torrente,
que va por el mundo apasionado y consciente,
de acabar con los males que le acechen.
Ni el más bello amanecer o atardecer,
ni la rosa que en el medio del mar logre crecer,
podrá ser tan puro e intocable,
o tan lejano e inalcanzable,
como este mundo utópico,
que llevo adentro y nadie puede creer,
que este mundo puede ser un tropico,
si se hace lo que se tiene que hacer.
No hay estrella,
ni en el cielo ni en bandera,
que represente la idea que representa,
el alma mía que vaga en pena.
no puede haber en el mundo,
que podría bien decirse, suburbio,
ni conflicto religión o guerra,
con tanta contenida fuerza,
como la que en mi corazón se revuelca,
se tuerce, sufre y esta que casi revienta,
por poner más estrellas en el cielo,
y acercar al hombre donde están ellas,
y despajes tranquilo y sin ninguna queja,
si no hay más que hacer, quizá me muera.
La felicidad buscada
Érase una vez,
un día sin querer,
cuando el día era más claro,
cuando la noche alumbraba,
vi correr por allí,
mi sombra desesperada,
supe entonces no estaba errado,
que ella era la felicidad buscada,
la quise agarrar entonces,
y siempre se me escapaba.
Me dijo un viejo, no sé,
de donde llegaba,
que el una vez el creyó,
también, que su sombra,
era lo que añoraba,
y descubrió sin querer,
que sin ir a buscarla,
ella iba siempre tras él,
sin querer entonces encontrarla.
Al final
Un día de estos,
un día cualquiera,
que yo no esté molesto,
y que tu aún me quieras,
iremos a la playa,
quizá iremos a pescar,
para cuando tú te vayas,
sepas como amar.
Un día de estos,
un día cualquiera,
que la luna este en el centro,
y alta la marea,
te diré, que linda fue la noche,
para ti la vez primera,
y aquel niño en aquel coche,
que lloro su madre muerta.
un día de estos, cualquiera,
me dirás que estoy muy loco,
que mejor es que me muera,
que te deje ya tranquila,
que deje mi dilema.
un día de estos,
un día cualquiera,
que ya yo este muy viejo,
que ya tú estés muy vieja,
caminaremos despacio,
hacia donde tu quieras,
amaneceremos tranquilos,
al fuego de una hoguera.
Un día de estos,
cualquiera.
Árbol
Por la semilla del fruto
que germina en mi ideal
por lo que distingue al mundo
entre lo real y lo irreal
se ha planteado de modo alguno
una batalla fatal
una guerra que hunde al mundo
entre lo que muere y lo inmortal
una lucha que difiere
de lo humano y lo moral
una bala que hiere
mandada del más allá
Por el tallo que florece
con espinas como zarzal
sube la savia que crece
dándole al fruto su verdad
y con la espina que pincha y sangra,
al que lo intente robar,
se amenaza a los seres del mundo
con ser castigados por el mal
Del fruto que carnoso desjuga
en los labios de quien
lo logre robar
tranquilo recibe su tortura
enredado en su zarzal
y la raíz se alimenta
de la sangre que por su espina
se vaya a derramar
dándole al fruto divino
un toque de maldad
Así es el árbol
que logro germinar
entre un odio tranquilo
hacia lo que se debe amar
en un amor tan pacífico
que casi no se puede notar
al entristecernos del mundo
y compadecernos de la humanidad
Vive
Vive ahora mortal
vive ahora
por que no hay más allá
hay quien esta donde no debe
y el que debe estar donde no está
y sin embargo
se debe vivir igual
vive ahora más y más
que mañana no puede llegar
vive ahora
pero vive ya
vive el día
como si fuera el final
que el mundo tenga un motivo
para poderte recordar
vive hermano, vive hijo
vive padre, vive amigo
vive amada, vive Dios
que por este motivo
estoy viviendo yo.
La noche que dormí con ella
La noche que dormí con ella
no fue noche, fue centella
el reverdecer del pasto
el nacimiento de un estrella
fue la noche más corta
que guardo en mi inconciencia
en ningún momento fue mía
en todo momento fui de ella
yo si sabia lo que hacia
ella seguir siendo lo que era
la noche que dormí con ella
rocé con mis manos
la llama que más quema
la que no se marca en la piel
pero en el alma se queda
hubo besos profundos
y caricias eternas
me parecieron segundos
ese vivir sin querellas
se que no es de este mundo
y no sé que hacer
para que me quiera.
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