Capítulo 4:
Estudie a su hijo
Nuestros hijos, a parte de ser unas inocentes criaturas de Dios, son las personas más espontáneas que existen sobre la faz de la tierra, y sin duda alguna, cuando ellos están en peligro, nosotros podemos preverlo, si tan solo le ponemos mas cuidado a lo que ellos nos revelan en silencio.
Cuando los niños están cerca de otras personas, ellos tienen reacciones muy distintas, ante cada una de ellas, dependiendo del tipo de acercamiento que tengan con esas mismas personas.
Es vital, que estudiemos sus comportamientos cuando están con cada una de ellas, y esto podría revelarnos algunas verdades, si los miramos con una óptica mas adecuada, la cual sería, la prevención de que no estén siendo incitados a caer en el abuso sexual.
Todos los adultos tienen maneras distintas de interactuar con los niños, y todos le producen sensaciones, y sentimientos distintos a ellos, veamos algunos ejemplos:
Los niños pueden sentir por algunos adultos:
– Rabia, molestia y odio,
– Mucho temor, y desconfianza,
– Emoción, y deseo de estar con esa persona,
– Desinterés,
– Inspiración, etc.
Si estudiamos como se comportan nuestros niños con los adultos, podríamos inferir muchas cosas, y sacar ciertas hipótesis, para comprobar si estamos en lo cierto, es bueno sentarse con sus hijos y preguntarles algunas cosas.
¿Cómo te sientes con tal persona? ¿Por qué?
¿Te gusta estar con tal persona? ¿Por qué?
¿Tienes miedo a alguien? ¿Por qué?
¿Qué te atrae de esta persona?
¿Le tienes rabia a tal persona? ¿Por qué?
¿Te gusta demasiado estar con tal persona? ¿Por qué?
Aunque estas preguntas pareciesen inocentes, la respuesta del niño puede ponerlo a uno en alerta. Pregúntele siempre a su hijo como se siente con las demás personas, no importa quien sea, si es familiar, amigo, maestro, vecino, no importa, siempre pregúntele como lo hacen sentir, y enséñelo a tener confianza en usted
Capítulo 5:
Comportamiento de sus hijos
Los niños cuando están empezando a experimentar ciertas cosas anormales, que tienen que ver con la sexualidad, de pronto comienzan a cambiar la conducta, sus hábitos, y sus estados de ánimo, muchas veces los padres perciben estos cambios, pero no los relacionan con posibles síntomas de estar siendo victimas de ciertos ataques sexuales por parte de otros adultos, jóvenes o adolescentes, que los están incitando a tener situaciones sexuales con ellos. Por ello, y por muchas otras razones, siempre es útil de que usted estudie los cambios de conducta de sus hijos.
Cuidado con los siguientes síntomas:
– Su hijo le hace caricias extrañas a cualquier otro integrante de la familia,
– Su hijo de pronto pierde el apetito o el sueño constantemente,
– Su hijo se comporta con mucho miedo, y temor,
– Su hijo, empieza a alejarse del resto de la familia,
– Su hijo se la pasa muy callado,
– Su hijo empieza a tener mucha hiperactividad,
– Su hijo se nota muy deprimido,
– Su hijo comienza a dejar de comunicarse con ustedes y casi no habla,
– Su hijo comienza aportarse muy mal en la escuela,
– Su hijo baja su rendimiento escolar, etc.
Todos estos cambios y muchos más, son muy específicos, y necesarios de estudiarlos, apenas se note estos cambios de conducta.
Capítulo 6:
Personas que debe alejar de sus hijos
Hay algunas personas que no deberían estar cerca de sus hijos, porque sus conductas son las menos apropiadas, para que sus hijos se desarrollen junto a ellos, y posiblemente, puedan estar frente al peligro si están cerca de sus hijos.
– Personas con dependencia del alcohol, o drogas de cualquier tipo,
– Personas que le gustan estar viendo constantemente películas, revistas, y videos de pornografías,
– Personas que no pueden ver al sexo opuesto, si no la miran con morbo, y sadismo.
– Personas que tienen conductas sexuales moralmente inaceptadas. Etc.
– Personas que se han visto involucradas en actividades tales como, mirando escondido a alguien mientras se viste, hace el amor o se baña, etc.
– Personas que se han visto acariciando a animales, adolescentes o a niños, de una manera extraña.
Este tipo de personas, están revelando que están constantemente haciendo cosas moralmente rechazadas por la sociedad, sin ninguna vergüenza, y esto no le permite hacerse ver totalmente confiable para estar con un menor de edad. Puede ser factores de riesgos para nuestros hijos, porque pueden inducirlos a realizar actividades inapropiadas.
Capítulo 7:
Consejos para sus hijos
La prevención, no es solamente para los padres, sino que también debemos responsablemente darles directrices a nuestros hijos para que sepan como autoprotegerse, cuando no estamos presentes.
Veamos algunas medidas de seguridad que les podemos enseñar a nuestros hijos.
– Nunca aceptes montarte en el vehiculo de nadie, sin consentimiento de tus padres,
– No aceptes la entrada de ningún adulto en tu casa, si no está tu representante,
– No le aceptes obsequios, dinero, ni invitaciones a personas desconocidas, o bien sean conocidas, pero sin el consentimiento o presencia de tus padres,
– No permitas que te vean desnudo,
– No te quedes a solas con nadie, en algún lugar solitario,
– No le des mucha confianza a desconocidos,
– No les estés suministrando tus datos tales como Dirección donde vives, donde estudias, lugar donde te la pasas ni nada por el estilo, a ningún extraño, mucho menos lo publiques en internet.
– No te cites con desconocidos en ningún lugar,
– No aceptes invitaciones a lugares desconocidos,
– No vayas a ningún lugar sin que tus padres estén enterados,
– No les des mayor confianza a otros familiares, mas que a tus padres,
– Nunca dejes que toquen tus partes intimas,
– Nunca te quedes en un lugar si sientes temor de que te quieren hacer algo, esto puede ser un aviso.
Capítulo 8:
Alerta para chicas adolescentes
La precaución en la adolescente, es vital, las mujeres son blanco fáciles de los violadores y sobretodo cuando son jóvenes adolescentes, por ello es necesario de que a la chica, se les enseñe ciertas precauciones que son específicas de su edad:
– No te vistas insinuando tu cuerpo demasiado,
– No permitas que te besen a la fuerza, y si alguien lo hace busca ayuda rápido, puede que sea alguien que no sabe controlar sus impulsos, y la próxima vez puede obligarte a estar con el a las fuerzas.
– No te veas con nadie a escondidas de tus padres,
– No te vayas con tu novio a lugares solitarios, ni a su casa cuando no están los padres de el,
– No salgas con amigos a lugares donde puedan beber, hacer una fiesta solo de jóvenes en una casa, ir a discotecas, etc. Así es posible te puedan drogar, y abusar de ti, mientras estas bajo los efectos de las drogas, sin tu consentimiento.
– No pruebes bebidas alcohólicas, y menos si estas entre amistades, y y/o desconocidos.
– Cuando tengas amigos, que quieren tocarte de una manera sensual, sin ser nada tuyo, cuídate y aléjate de ellos. Te están deseando, y están buscando la manera de hacer algo contigo a obligadas, y sin tener ningún compromiso al respecto. No todos los amigos, son buenos amigos, algunos están planificando hacerte daño ocultamente.
Capítulo 9:
Hablar. Nunca es demasiado tarde o temprano
Nunca es demasiado tarde o demasiado temprano, para hablar estos temas entre la familia, la prevención, debe darse en cualquier lugar y circunstancias, es necesario de que como familia, se alimente la comunicación, y todos siempre aprendan a expresarse todo lo que les pase, y a comunicarse todo. Esta es una obligación mutua, es un deber de los padres hacia los hijos, y de los hijos hacia los padres.
La violación, no tiene edad para ser ejecutada, siempre hay que ser prevenido, sea niño, adolescentes, jóvenes o adultos, no hay sexo, ni edad para dejar de prevenirse.
La familia, es la mejor institución que existe para ayudar a prevenir el abuso al menor, de resto, todas las demás instituciones que trabajan para ello, son organismos competentes que requieren de la ayuda de todos los padres y representantes, para poder lograr su objetivo, nunca deje la prevención, en las manos de terceros, sea usted el primero en cuidar a sus hijos. El conocimiento, es la mejor herramienta que usted pueda tener, siempre oriéntese, infórmese y actualícese al respecto.
Autor:
Maria de los A. Pérez
Fecha publicación: 24/03/2009
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