Ferrocarriles argentinos

2. Prólogo
3. Introducción
4. Estado y Políticas de Estado
5. Presentación del problema
6. La contraparte ? Las empresas concesionarias
7. Encuestas a los usuarios
8. Políticas de Estado actuales
9. Perspectivas y conclusión
10. Bibliografía

1- Prólogo

Nosotros proponemos centrarnos en el problema de la disconformidad de los usuarios con el servicio brindado por las empresas ferroviarias privatizadas. Al explicarlo iremos desglosando y exponiendo los distintos factores causantes del constante y progresivo empeoramiento del sistema.

Para comenzar haremos una breve reseña histórica presentando los orígenes del conflicto.

2- Introducción

2.1- Reseña histórica

El 12 de Febrero de 1947, se firma el convenio de compra de los ferrocarriles que pasaron a manos Argentinas, después de estar 90 años en poder de empresas Británicas. El precio global pagado por todos los bienes fue de $ 2.482.500.000 m/n, el equivalente a 150.000.000 de libras Esterlinas. El gobierno Argentino se comprometió a pagar esa suma tomando a su cargo todos los gastos que ocasionaba esa operación, además del pago de los expertos de ambas partes. También se comprometía a mantener en sus puestos, al personal de las empresas Británicas. El acto se realizó en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, con la presencia del presidente Domingo Perón, ministros, secretarios y jefes de las fuerzas Armadas. La compra había originado una polémica sobre los valores pagados habían quienes afirmaban que los ferrocarriles no valían ni 1.000.000.000 de pesos Argentinos. La suma acordada había provocado gran satisfacción en Londres. El 1 de marzo de 1948, en un acto realizado en retiro, se anuncia la toma de posesión de los ferrocarriles. Y durante la Presidencia del Dr. Carlos Saúl Menem, (1989-1999) se privatizaron, nuevamente pasaron a estar en manos extranjeras.

En 1989, cuando se puso en marcha el proceso privatizador de los trenes, la empresa Ferrocarriles Argentinos contaba con 34.000 kilómetros de vías y 95.000 puestos de trabajo. El gobierno de Carlos Menem lanzaba una campaña prometiendo que con el dinero ahorrado por los costos ferroviarios, de un millón de pesos diarios, el Estado podría construir hospitales, escuelas y caminos. Finalmente, en 1990 se firmó un Memorandum de Entendimiento con el Banco Mundial en el cual se terminó de armar el plan definitivo de privatización bajo el sistema de concesiones. Actualmente el ferrocarril privatizado del gobierno actual gasta un millón y medio de pesos por día, se paso a tener 8.000 puestos de trabajo y 7.000 Kilómetros de vías.