- Desarrollo
- Clasificación de los métodos instrumentales
- Espectroscopía de emisión atómica
- Conclusiones
- Referencias Bibliográficas
Introducción
En diferentes ramas de las llamadas Ciencias Aplicadas, las determinaciones de la cantidad de un elemento o sustancia, son de gran importancia. En la industria metalúrgica cotidianamente se caracteriza una amplia gama de aceros y materiales, empleados en la producción y las investigaciones. La determinación cuantitativa de los elementos químicos en estos materiales resulta de interés vital, para encausar las investigaciones que se llevan a cabo en la búsqueda de nuevos materiales.
La Química Analítica es la ciencia que, con la ayuda de métodos químicos y físicos, permite determinar el contenido de elementos químicos de una muestra, tanto de modo cualitativo, como cuantitativo. Aún cuando no se considere así, el análisis químico es parte de la vida diaria, pues todo lo que se produce o consume, de algún modo ha sido analizado. En el desarrollo de está ciencia, las primeras determinaciones cuantitativas se basaron en la determinación directa de la masa de las muestras (Ayres, 1981; Harris, 2001).
Los métodos analíticos se pueden clasificar:
Métodos químicos o clásicos (se basan en reacciones químicas ó propiedades del analito). Se incluyen la gravimetría, la volumetría y los métodos de análisis cualitativo clásico.
Métodos instrumentales, basados en propiedades químico-físicas. La clasificación de los métodos instrumentales se realiza en base a la propiedad que se mide (espectroscópicos, electroanalíticos, térmicos, etc.).
Métodos de separación. Se incluyen en este grupo los métodos cuya finalidad es la separación de compuestos para eliminar las interferencias y facilitar la medición.
Los métodos químicos han sido utilizados tradicionalmente, ya que no requieren instrumentos muy complejos (tan sólo pipetas, buretas, matraces, balanzas, entre otros). Mientras que los métodos fisicoquímicos, requieren un instrumental más sofisticado, tal como equipos de espectroscopía, cromatografía, cristalografía, etc. (Alonso, 1990; Kellner, 2004).
Desarrollo
En la actualidad existe una gran variedad de métodos de análisis físico-químicos, los cuales están basados en la medida de una propiedad cuya magnitud depende de la masa, como la absorción de la luz u otra forma de energía radiante. En ellos, la cantidad de luz absorbida por la muestra es proporcional a la concentración de átomos, moléculas o iones que componen el material analizado. Puede realizarse la medición de otra propiedad que no dependa de la masa, como la densidad o dureza (Ayres, 1981; Alvarez, 1999).
Estos métodos son referidos en la literatura como métodos instrumentales (requieren el empleo de equipamiento especializado). Se basan en la interacción energía-materia. Su desarrollo ha sido relativamente reciente, bien por el desconocimiento de los fenómenos en los que están basados o a la no disponibilidad de equipos de medición apropiados (Catasús, 1995; Skoog, 2000).
Autores como Bermejo (Bermejo, 1990) y Hernández (Hernández, 2002), refieren que el desarrollo y aplicación de los métodos instrumentales, se deben a su mayor rapidez, sensibilidad, selectividad y frecuentemente a la simplicidad del análisis. Permite, además, la determinación simultánea de varios elementos a partir de una sola pesada y disolución de la muestra.
Estos métodos son fundamentalmente empleados en la determinación de componentes minoritarios o trazas, manteniendo su primacía los métodos clásicos (volumetría y gravimetría) en la determinación de componentes mayoritarios (Blanco, 1990; Rouessac, 2003).
Para poder aplicar el análisis instrumental de manera más eficaz en la solución de un problema, es necesario comprender las relaciones fundamentales que existen entre las especies químicas y las propiedades físico-químicas que desarrollan. También se debe conocer el alcance, las ventajas y limitaciones de la medida de esa propiedad (Delahay, 1970; Skoog, 2005).
Clasificación de los métodos instrumentales
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