Método Pempenides de desarrollo interno del ser humano al ser divino
Enviado por Juan Martín González
CURSO PARA LA UNIFICACIÓN DEL CUERPO MENTE Y ESPÍRITU
INTRODUCCIÓN
El ser humano básicamente consta de un cuerpo físico rodeado de un cuerpo o huevo áurico.
El cuerpo físico contiene en sus células el llamado genoma humano o código genético heredado de nuestros antepasados.
Tanto el cuerpo físico (Genoma) como el campo áurico tienen genes y partículas puras e impuras, sanas y enfermas día y noche.
El cuerpo físico y el campo áurico se penetran por medio de los llamados chakras, iglesias o centros de conciencia.
El cuerpo áurico básicamente consta de siete planos o capas (días) cada una de las cuales se divide a su vez en siete subplanos.
Hay infinidad de tratados en todas las lenguas y culturas que desmenuzan y describen hasta la saciedad cada uno de los centros de conciencia y de los planos áuricos, así como de cada uno de los senderos del ÁRBOL DE LA VIDA.
Ahora bien, bajo mi punto de vista, lo verdaderamente importante, es saber que —-todo el trabajo de desarrollo estriba en Arrastrar al Cuerpo Físico Todos Los Planos Áuricos, lo cual hasta ahora ha sido una tarea tanto menos que imposible, siendo contadas las personas que lo han conseguido en toda la historia de la humanidad.
Sin embargo ahora, con la llegada de la Sexta Raza u Hombre Nuevo a la tierra, esto que hasta ahora parecía casi imposible se puede conseguir en un espacio de tiempo relativamente corto y casi sin esfuerzo, una vez conseguido esto, el ser humano, ahora divino, se hace prácticamente inmune a las enfermedades tanto físicas como mentales, pudiendo llegar a alcanzar una longevidad hasta ahora desconocida, y lo más importante, en total posesión de sus facultades.
La integración de energías ocurre de la forma siguiente:
Al arrastrar al físico el primer plano correspondiente a la Iglesia de éfeso, chacra raiz. Se integran las energías correspondientes al primer subplano de este plano Físico.
Al hacer lo mismo con el plano correspondiente a la iglesia de Esmirna, plano Astral. Se integran las energías correspondientes al primer subplano del plano Astral, más las del 2º subplano del plano Físico.
En el plano Mental, iglesia de Pérgamo. Se integran las del primer subplano del Mental, las del segundo del Astral y las del tercero del Físico.
En el cuarto, plano Búdico, iglesia de Tiatira. Se integran las energias del primer subplano de este cuarto plano, más las del segundo del Mental, tercero del Astral y cuarto del Físico.
En el quinto, plano Atmico, iglesia de Sardes. Se integran las energías del primer subplano de este quinto plano, más las del segundo del Búdico, tercero del Mental, cuarto del Astral y quinto del Físico.
En el Sexto, plano Monádico, iglesia de Filadelphia. Se integran las energías del primer subplano del Monádico, las del segundo del Atmico, tercero del Búdico, cuarto del Mental, quinto del Astral y sexto del Físico.
En el Séptimo, plano ADI, iglesia de Laodicea. Se integran las energías del primer subplano del plano Adi, del segundo subplano del Monádico, tercero del Atmico, cuarto del Búdico (momento en que se produce la primera crucifixión), quinto del Mental, sexto del Astral y séptimo del Físico.
Y así sucesivamente hasta llegar al séptimo subplano del plano ADI, donde ya tendremos integradas los 49 subplanos o puertas, a priori, la totalidad del desarrollo en el esquema Septenario que compone nuestro sistema Solar y por consiguiente nuestro planeta.
Pero, si casi siempre hay un pero, en esta época parece que es muy posible seguir el desarrollo ¿Hasta dónde? quién sabe, de momento en la segunda parte del Método Pempenideas se llega hasta la apertura de la décima puerta, ALEPH FINAL, subplano o día 82.
Todo esto y mucho más se puede conseguir, siempre y cuando ames la LUZ y LA VIDA y por consiguiente a tu Creador.
Llevo nueve días bajo el ARBOL DE LA VIDA, lo cual me ha permitido primero comprender como funciona el proceso de desarrollo por experiencia propia.
– Y segundo e igualmente importante desarrollar una serie de facultades, entre ellas HABER ACTIVADO la Séfira Kabalistica DAAT (EL VERBO), que te faculta para utilizar el HÁGASE DIVINO, tanto por medio de la PALABRA HABLADA como por medio de la PALABRA ESCRITA.
– Y es por medio de este HÁGASE por lo que podré transmitirles las energías necesarias para que puedan hacer este curso de desarrollo acelerado, por medio del cual alcanzan la VIDA, tendrán VIDA y la tendrán en abundancia.
Esta transmisión constará básicamente de lo siguiente:
" Activación de flujos energéticos:
§ De pierna a pierna.
§ De mano a mano
§ Trasero-Delantero
§ Cráneo sacral.
" Apertura del canal medular de la columna vertebral (KUNDALINI).
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