El outsourcing y su vinculación con la gestión estatal

Enviado por Jose Luis Cortes

Resúmen

A partir de la segunda mitad del siglo XX el comercio ha sufrido una acelerada evolución, no sólo respecto de los volúmenes de bienes y servicios que se transan en el mercado, o con relación a la globalización y caída de las fronteras naturales pos período de la guerra fría, sino además por la fuerte competencia por obtener el mayor porcentaje posible del mercado demandante. Todo lo anterior ha motivado que las empresas desarrollen estrategias destinadas a desarrollar mejores niveles de gestión, reducir sus gastos directos y generar economías a escalas que les permitan competir con sus pares y, como resultado, mantener su presencia en el mercado. Las empresas que no enfrentan estos nuevos escenarios de súper competencias y de consumidores cada vez más demandantes y conscientes de sus derechos individuales, naturalmente van derecho al fracaso. ¿Qué mecanismos o instrumentos, o qué estrategias emplean las empresas en esta constante lucha por la supervivencia en el mundo de los negocios? Son múltiples. Uno de éstos, el denominado Outsourcing, forma parte de lo que los eruditos llaman la reingeniería, esto es, la revisión fundamental y el rediseño radical de los procesos de negocio para lograr mejoras espectaculares en medidas críticas y contemporáneas de desempeño como el costo, la calidad de servicio y la velocidad de los procesos. Lo que persigue la reingeniería de las instituciones en general es, enfrentadas al paradigma de los cambios, adaptarlas de tal modo que éstas estén en condiciones de satisfacer eficiente y eficazmente las nuevas y mayores demandas de los consumidores o usuarios, de acuerdo a las siempre cambiantes realidades del mercado. Pero también la reingeniería supone que estas instituciones adopten nuevas y frescas formas de hacer negocios (nuevas operaciones mercantiles, como el factoring, el franchising, el engineering, etc) y modernas formas de gestión internas, como serían el outsourcing y el benchmarking. Estas dos herramientas de la reingeniería constituyen, al decir de los expertos, "astutas" alternativas de las empresas para ser más competitivas y exitosas en el mercado global de hoy. Desde una perspectiva histórica, después de la Segunda Guerra Mundial, las empresas trataron de concentrar en sí mismas la mayor cantidad posible de actividades, para no tener que depender de proveedores externos. Sin embargo, esta estrategia fue haciéndose obsoleta con el desarrollo de la tecnología, pues nunca los departamentos podían mantenerse tan actualizados y competitivos como lo hacían las agencias independientes especializadas en un área específica. Fue así como en los años 70 surgió el boom de las agencias consultoras y del Outsourcing. Las empresas empezaron a encontrar más fácil contratar a un consultor externo experto en un área, que tener que mantener y desarrollar ese departamento internamente. No solo les permitía disminuir los costos sino que la calidad ofrecida por los asesores expertos les resultaba mejor. (En formato PDF)

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Enviado por Jose Luis Cortes