Descargar

La yernocracia (página 2)


Partes: 1, 2

Otro ejemplo en ese libro de la sabiduría universal es la historia de Jacob y su suegro. Para que ingresara en la familia Jacob tuvo que trabajar para su suegro, que lo estafó, y seguía haciéndole trabajar para que tuviera la mujer que quería. Con el tiempo, también hubo dudas entre yerno y suegro a respecto de sus propiedades, siendo que, después tuvieron que separarse para evitar quejas más grandes.

En los ejemplos dados arriba se demuestra que privilegiar en lo privado a los que son parientes es una costumbre bastante antigua. Además, se sabe que en los tiempos ancestrales entre el público y el privado no había grandes diferencias.

Al otro lado, está también la historia de Daniel y de sus amigos, que fueron llevados cautivos a la Babilonia y sirvieron al rey de allá, porque fueron probados y aprobados por su capacidad, inteligencia e integridad. Acá no se llevo en cuenta las características familiares o de amistades, sino sus atributos para ejercer los cargos que se les disponían.

"Más paraguayo que la mandioca" – una visión de la yernocracia paraguaya por Anibal Romero

Aníbal Romero[6] trata la yernocracia casi exclusivamente por la óptica de su ocurrencia en el territorio paraguayo. Habla este autor de sus orígenes en esta patria por la conexión y complicidad entre los españoles invasores y los caciques y sus pajes.

La protección social que se crea, según el autor, es justificada por el hecho de que se unieron las familias de los españoles y de los nativos. De esa manera se crea un enmarañado de relaciones sociales que justifica el ascenso social. Hay una protección familiar, según Aníbal Romero.

Este autor también habla de lo que llama "braguetazo", o sea, el ascenso social por medio de composiciones familiares, para no decirlo con palabras vulgares, por medio de arreglos entre las parejas y sus familias.

Aparte de eso, el referido autor habla de esa costumbre en la sociedad contemporánea de Paraguay, y lo pone entre los que quieren estar siempre en las columnas sociales, estas personas a quienes les importa más la apariencia que el contenido. La futilidad de estas personas sigue siendo su característica más notable.

Como se dijo antes, la visión de ese autor es un tanto prejuiciosa en lo que dice respecto a los paraguayos, una vez que esa práctica es difundida también en otros países. La yernocracia no es un producto típico y exclusivo de la cultura paraguaya, no se podría comparar con la mandioca, que es un importante símbolo de Paraguay.

La yernocracia según Leopoldo Alas Clarín

El escritor y periodista español, Leopoldo Alas Clarín[7], también trata del tema de la yernocracia, probando más una vez que no es una exclusividad de nuestra Patria. Incluso apunta el referido autor que el origen de la palabra "nepotismo", en buen latín, viene de nieto, pero con el tiempo se volvió a los sobrinos, con el latín vulgar.

Apunta ese escritor que el nepotismo, en sus orígenes, llega a ser una demostración del amor filial.

En un cuento del Libro "El Señor y los demás", titulado "Yernocracia" lleno de belleza poética y buena escrita, habla, aunque metafóricamente, de este tema, poniéndola como una consecuencia un tanto natural del hecho de que un padre quiera a sus hijas. Un padre quiere ver dichosa a la hija, y si ella elige una persona, el padre automáticamente lo adopta y lo quiere proteger también a su yerno, que sería el siguiente responsable por la protección de la hija.

En un dado momento de su cuento, el personaje de Marco Aurelio dice:

"Nuestra hipocresía social no consiente la filiocracia franca, y después del nepotismo, que era o un disfraz de la filiocracia o un disfraz del egoísmo, aparece la yernocracia… que es el gobierno de la hija, matriz sublime del amor paternal."

De una o de otra manera se puede intuir en ese texto la importancia de la relación íntima entre padre e hija, que lleva algunos psicólogos incluso a sugerir una naturaleza sexual. Pero por los límites impuestos a ese trabajo no se ingresará en ese aspecto.

El tema en la obra de Helio Vera

El escritor paraguayo Helio Vera, fallecido hace rato, también ha tratado del tema en su libro "En busca del hueso perdido (tratado de paraguayología)[8].

En su pesquisa, bajo el tema "Pioneros del Braguetazo" Helio Vera se pone a discutir sobre el surgimiento histórico de esa práctica a la cual la llama de institución nacional.

 "Los pioneros de esta venerable institución nacional fueron nada menos que los yernos de don Domingo Martínez de Irala, en pleno siglo XVI: Gonzalo de Mendoza, uno de ellos, fue nombrado Lugarteniente General. Francisco Ortiz de Vergara y Alonso Riquelme de Guzmán, Alcalde Mayor y Alguacil Mayor, respectivamente."

Profundizándose en el tema, habla también del amiguismo, que en la cultura paraguaya es muy fuerte, al punto de decir:

"En cuanto al amigo, ya se sabe. El amiguismo es una relación que, en el Paraguay, tiene una fuerza y un ritual más cercanos a los de la maffia que a una simple relación entre personas que no están unidas por vínculos de sangre."

Así que se puede sentir que en Paraguay las vinculaciones de amistad y de parentesco son notadamente fuertes, son lazos que unen de una manera muy duradera y fiel a las personas.

Como es posible comprender del libro de Helio Vera, la yernocracia de Paraguay es más amplia que simples relaciones familiares, es algo que esta en toda la estructura de la sociedad, sea en lo público, sea en lo privado, comprendiendo así el nepotismo y las demás relaciones interpersonales.

La yernocracia en Testigo Falso de Mario Halley Mora

En su libro "Testigo Falso"[9], Mario Halley Mora cuenta una historia de un juez muy honesto, muy preocupado con la justicia, muy derecho, que tuvo su ascenso social al casarse con una mujer de clase más alta, de una tradicional familia de Paraguay.

Pasa en esa historia que un hijo de otra persona muy importante de la sociedad paraguaya se le ocurre matar una persona de clase baja, una pelea por una cosa tonta cualquiera.

Rápidamente se ponen sus amistades a arreglar lo posible para que el asesino no se vaya a la cárcel. Incluso la mujer del juez, que tiene pretensiones de ser importante en los clubes de beneficencia, se pone a defender el tipo, haciendo con que varias personas relacionadas con ese lío se vayan a su casa, para convencer al marido a ayudar al asesino, en cambio de los favores de los demás de la clase social a que pertenecen.

A la casa del juez se unen todos, la suegra – que es quien de hecho patrocina a la vida de su yerno y su hija – diputados, el abogado del asesino, otros amigos influyentes, todos intercediendo por él.

Llegan incluso a llamar al testigo – por eso el nombre del libro – que vio el crimen para ofrecerle soborno, aunque de una manera muy fina, para que no se anime a testimoniar contra el criminal.

Aunque el juez intente librarse de esa influencia mala de sus amigos y de su esposa, sufre mucha presión, por el hecho de que  suyo no tenga nada, todo lo que tiene viene del hecho de ser casado con una persona que tiene posesiones.

La literatura de Halley Mora sirve para ejemplificar una situación que ocurre en la realidad de nuestra Patria, el escritor pone su talento a servicio de algo todavía más grande, que es la crítica inteligente de las costumbres paraguayas.

ANÁLISIS DE LA YERNOCRACIA

Una vez que ya se haya analizado el tema de la yernocracia bajo los aspectos de su origen histórico y de su presencia en la literatura de una manera general, hay que evaluar los puntos positivos y negativos de esa "institución" paraguaya por así decir.

Puntos positivos

De los puntos positivos se puede decir que es una manera de demostrar fidelidad a los amigos y la familia, eligiéndose personas de confianza para estar cerca, sea para trabajar en empleos privados o públicos.

Muchas veces, un gerente o dueño de un negocio tiene que elegir personas en que pueda dejar a su cargo todo lo que posee. Lo mismo se debe decir en cargos públicos, Presidente y alcaldes tienen que estar rodeados de gente en que puedan confiar, gente que no les acuchille por las espaldas, o que no sirva a otro partido político o tenga intereses distintos de los suyos, que los pueda perjudicar.

Esa práctica, si se tiene que de ella sacar algo bueno, es que demuestra la caridad y el carácter bueno y ayudador de los paraguayos.

Puntos negativos

Bajo los puntos negativos se debe decir que una sociedad que permanece indefinidamente bajo la costumbre maléfica de la yernocracia y del nepotismo no crece.

La yernocracia presupone que la persona es elegida no por su capacidad, no porque sabe hacer las cosas, no porque sea buena en su trabajo, sino porque tiene relaciones familiares o de amistad con alguien que sea importante de alguna manera.

El mérito no es evaluado en cuanto a la escoja de quien va a trabajar, o de quien va a ocupar algún puesto público. De esa manera, la calidad del trabajo tiende a ser baja, tiende a simplemente disminuir, una vez que no es eso lo que se busca, sino las vinculaciones personales que una persona venga a tener.

De una manera general deteriora la calidad del trabajo y pone gente discapacitada para hacer trabajo que no sabe hacer, gastando así plata, tiempo y teniendo que contratar también gente capacitada para que arregle el trabajo mal hecho por los apaniguados de los jefes.

Cuando la amistad o el parentesco son más importantes que la capacidad no se puede suponer que haya desarrollo, pues tiene la tendencia de proteger a los que no tienen capacidad, así no hay como una empresa o una oficina pública puedan generar buenos resultados.

En la yernocracia se hace una elección: la amistad o el parentesco son más importantes que la evolución del estado de cosas. No se piensa en el crecimiento, no se lo busca. Consecuentemente no habrá desarrollo.

CONCLUSIÓN

Como conclusión de este trabajo es bueno, una vez más, repetir que la yernocracia no es un fenómeno únicamente paraguayo, sino que un fenómeno que ocurre en muchas partes, pero que tiene un tono bastante fuerte en nuestro País.

No se debe ser totalitario al rechazar esa costumbre. Muchas veces, las relaciones de confianza son importantes para que se elija una persona, pero eso debe restringirse a las funciones en que la confianza sea imprescindible, no en cualquier caso.

Los ministros, los ayudantes directos de los políticos de más alto grado, los subsecretarios, esos sí se puede decir que sean seleccionados con una más grande descripción por él que tiene el poder. Lo mismo se diga de los asesores directos de los dueños de empresas o gerentes. Los demás cargos han de ser ocupados por gente que demuestre aptitud para ejercer esas funciones.

Aparte de eso, mismo en los cargos de confianza, se debe buscar un mínimo de capacidad para que el ejercicio del cargo. Por ejemplo, para que uno sea asesor de confianza de un juez, debe, por lo menos, ser graduado en Derecho. El asesor de prensa del Presidente de la Nación, por ejemplo, debe ser graduado en Periodismo, Relaciones Públicas, Marketing y Publicidad, o en algún área cercana.

Para los cargos que no sea intrínseca la relación de confianza, lo mejor es que se haga un sistema de elección basado en pruebas que puedan averiguar la capacidad de los concurrentes, haciendo larga competencia, para que, con más opciones, se pueda elegir lo que sea lo mejor para la empresa o para la Nación o para la Municipalidad, que sea.

De este modo, no se pretende demonizar ese dato cultural paraguayo, sino que adecuarlo a las exigencias de las reglas democráticas, como ocurre en otras partes del mundo.

Como se dijo, hay que analizar los casos en que sea necesaria la relación de confianza, optimizándola con el máximo posible de caracteres objetivos para que no se desvíe la finalidad, que es la confianza, para algo sucio, que es el cambio de favores, la corrupción y otros desaciertos que solo llevan a bancarrota de la sociedad y del progreso.

BIBLIOGRAFÍA

1.       http://dictionary.reverso.net/spanish-english/yernocracia

2.       http://es.wikisource.org/wiki/La_yernocracia

3.       http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/05813896599447228537857/p0000003.htm

4.       http://www.rae.es.

5.       MORA, Mario Halley. Testigo Falso y Un Rostro para Ana. Asunción: El Lector, 2006.

6.       Océano Práctico Diccionario de la Lengua Española y de Nombres Propios. Barcelona: MMVI Editorial Océano.

7.       ROMERO Sanabria, Aníbal: "Más paraguayo que la mandioca", Fundación "El Atelier", 1998.

 

 

 

 

 

Autor:

Andrea Geraci Yugovich

Mariel Romañach Zavala

Maria Liz Benitez

Monografía presentada en el Curso de Marketing y Publicidad, noveno semestre, como requisito parcial a la conclusión  de la materia de ética Profesional.

Universidad Americana de Ciudad del Este.

Profesor: Gustav Frieser

Ciudad Del Este – Alto Paraná

2008

[1] Tal palabra ya se nota en La Yernocracia del escritor español Leopoldo Clarín Alas, como se puede notar en: http://es.wikisource.org/wiki/La_yernocracia.

[2] Conferir en http://www.rae.es.

[3] Océano Práctico Diccionario de la Lengua Española y de Nombres Proprios. Barcelona: MMVI Editorial Océano.

[4] dictionary.reverso.net/spanish-english/yernocracia

[5] Conferir en http://www.rae.es.

[6] ROMERO Sanabria, Aníbal: "Más paraguayo que la mandioca", Fundación "El Atelier", 1998.

[7] Ese cuento se puede hallar en http://es.wikisource.org/wiki/La_yernocracia

[8] Este libro tan esencial de la cultura guaraní puede ser encontrado en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes para la siguiente dirección: http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/05813896599447228537857/p0000003.htm

[9] MORA, Mario Halley. Testigo Falso y Un Rostro para Ana. Asunción: El Lector, 2006.

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente