Desarrollo:
Actualmente se acepta que, en las sociedades económicamente desarrolladas y tecnológicamente avanzadas, el conocimiento constituye un pilar básico en la creación de ventaja competitiva.
Tanto en el ámbito académico como en el de gestión empresarial, es cada vez más frecuente encontrar alusiones al término Sociedad del Conocimiento, para hacer referencia a un estadio de desarrollo de la sociedad, caracterizado por la rapidez de los cambios y la importancia fundamental de la tecnología, y en el que la generación de riqueza y bienestar se entienden estrechamente vinculados a las inversiones en innovación y, muy especialmente, a la generación de conocimiento.
Existen investigadores que identifican 4 categorías en la composición de los activos intangibles:
En la era industrial existían procesos para lograr esta valorización, procesos que actualmente no son aplicables, puesto que el desarrollo ha ido descontando a uno tras otro. Actualmente la empresa es un conjunto de recursos capacidades que conforman las fortalezas y ventajas de cada entidad.
Las empresas que compitan en el mundo de los negocios de alta tecnología incurren en gastos crecientes de I+D, RRHH especializados en habilidades específicas que son frecuentemente difíciles de identificar y valorar en un momento el tiempo como activos individuales, ejemplo las marcas.
Las empresas siempre han gestionado los recursos intangibles, no es algo nuevo. La novedad es el intento de ponderarlos y registrarlos contablemente, podría decirse que es más difícil medirlos y contabilizarlos que trabajar con ellos.
Entonces nos preguntamos:
Pero para ello debe existir un criterio unificado de que son los Activos Intangibles pues existen disímiles definiciones y criterios. De igual manera se debe unificar la valorización o medición de los mismos.
Los activos intangibles en la contabilidad
Los activos intangibles son una serie de recursos que pertenecen a la organización, pero que no están valorados desde un punto de vista contable. También son activos intangibles las capacidades que se generan en la organización cuando los recursos empiezan a trabajar en grupo.
Definiciones de Activos Intangibles
- Representan agregación de valor a la empresa. Sosa Gómez 2000
- no posee apariencia física, activo identificable
- no están valorados desde un punto de vista contable.
- no tienen soporte físico, compleja su identificación y valoración. Vargas Montoya (2000)
- se sustentan en información, no siempre es codificable, sus derechos de propiedad no siempre están bien definidos. Navas y Guerras (1998),
De acuerdo con lo establecido en el marco conceptual de las Normas Internacionales Contables (NIC), en primer término, se define el concepto de activo intangible como aquel "identificable, de carácter no monetario y sin apariencia física, que se tiene para ser utilizado en la producción o suministro de bienes y servicios, para arrendarlo a terceros o para funciones relacionadas con la administración de la entidad".
Según esta norma, un activo es un recurso a) controlado por la empresa como resultado de sucesos pasados y b) del que se espera obtener, en el futuro beneficios económicos para la entidad (Párr. 3). De igual forma, la norma exige que la empresa reconozca en sus estados financieros el activo intangible al costo, si y solo si: a) es probable que los beneficios económicos futuros, que se han atribuido al mismo, lleguen a la empresa y b) el costo del activo pueda ser medido de forma confiable.
- Primer Criterio Vargas Montoya (2000)
En cuanto a su clasificación, veremos una primera clasificación la cual corresponde a Vargas Montoya (2000), quien separa a los activos intangibles de acuerdo a cuatro criterios, a saber: según su origen, según se puedan o no separar del individuo que los creó, según su defensa legal y según la transparencia de la información sobre la cual se basan los recursos. El autor citado ha construido su clasificación de activos intangibles integrando las aportaciones de diversos autores, agrupándolos siguiendo los cuatro criterios fundamentales de clasificación ya mencionados:
1) Según su origen
2) Separables del Individuo que los creó
3) Defensa Legal
4) Transparencia de la Información
- Segundo Criterio Serrano y Chaparro (2001)
El segundo criterio de clasificación es la que proponen los autores Serrano y Chaparro (2001), según los cuales los activos intangibles se pueden agrupar en activos intangibles de Recursos Humanos, de organización interna y de estructura externa.
1) Activos Intangibles de Recursos Humanos
2) Activos Intangibles de Estructura Interna
3) Activos Intangibles de Estructura Externa
1) Activos Intangibles de Recursos Humanos
- Conocimientos y habilidades de los empleados
- nivel de titulación alcanzada
- las calificaciones profesionales y los conocimientos técnicos
- los años de experiencia profesional
- Índice de Capital Humano
- utilizarse encuestas
- los tests o cuestionarios de evaluación de la personalidad.
2) Activos Intangibles de Estructura Interna
- La organización de los sistemas de información
- Investigación y desarrollo
- número de patentes y su coste de mantenimiento,
- el porcentaje de recursos que destina la empresa a Investigación y Desarrollo (I+D) o su incremento,
3) Activos Intangibles de Estructura Externa
- Activos de mercado (las marcas, el prestigio e imagen de la empresa, denominación social o las franquicias)
- Clientela de la empresa
- índices de satisfacción del consumidor obtenidos a partir de encuestas
- el porcentaje de ingresos
- su fidelidad, satisfacción, importancia o reputación procedentes de clientes antiguos, los clientes que se han perdido.
- Relaciones y alianzas. (los acuerdos de cooperación y alianzas estratégicas, tecnológicas, de producción y comerciales, los proveedores, bancos, políticos, instituciones y accionistas)
Atendiendo a esto, uno de los principales inconvenientes presentados al momento de generar la información financiera sobre los intangibles, es el hecho que la contabilidad se basa en el principio del Costo Histórico, según el cual las transacciones y eventos económicos que ésta cuantifica deben ser registrados de acuerdo a las cantidades de efectivo que se afecten o su equivalente o la estimación razonable que de ellos se haga al momento en que se consideren realizados contablemente.
¿Pero qué ocurre cuando un activo incorpora tanto elementos tangibles como elementos intangibles? La Norma Internacional de Contabilidad NIC 38 establece un test para delimitar entre activos intangibles y materiales: hay que juzgar cuales de dichos elementos (tangibles e intangibles) son más relevantes
Según las Normas Internacionales de Valoración, para calcular el valor justo, o el valor de mercado de cualquier activo, el tasador debe determinar primero su mejor uso (highest and best use). Puesto que los beneficios percibidos de un activo intangible no están cuantitativamente limitados por ningún factor intrínseco tal como sus propiedades físicas o las disposiciones legales aplicables, no es posible determinar el mejor uso de un activo intangible con utilidades únicas generadas por dichos activos.
Por tanto, es necesario calcular el valor justo de un activo intangible con utilidades únicas en el momento de su reconocimiento, y, si su vida económica es indefinida, habrá que calcular su valor justo anualmente para realizar el test por deterioro del valor. El problema es, como hemos apuntado más arriba, que el tasador sólo podrá estimar un valor de uso (valor subjetivo) y no su valor justo.
Con la contabilidad tradicional, la cual solo mide los activos tangibles y reporta resultados de actuación histórica, es difícil lograr la valoración plena de los intangibles y de tal modo no se puede lograr una visión real del potencial de los ingresos para la empresa.
La administración de los Activos Intangibles es un concepto relevante para la empresa, puesto que busca además de administrarlos, el crecimiento del valor y de los beneficios.
Por tal razón los Activos Intangibles se valorizan en dependencia del interés particular de la empresa o de la información resultante a comunicar, según la mayoría de los investigadores del tema, pero para el tratamiento y valorización de estos activos existen inconvenientes tales como:
- La información financiera dirigida a los usuarios externos del negocio
- La contabilidad no incluye las relaciones ambientales del entorno
- La necesidad de crear o establecer marcas globales para que sus productos puedan competir en el mercado global.
- La comercialización de sus productos o servicios a través de Internet.
- La comunicación de su información financiera.
¿Donde vemos el valor estos activos?
Normas Internacionales Contables (NIC), se define la medición como "el proceso de determinación de los importes monetarios por los que se reconocen y llevan contablemente los elementos de los estados financieros, para su inclusión en el Balance General y Estado de Resultados. Para realizarla es necesario la selección de una base o método particular de medición."
Pero para su medición se debe conocer que medimos, se debe determinar que elementos integran el bien o derecho que se pretende valorizar, en este caso los Activos Intangibles, ya mencionados, es altamente complicada su medición y valoración, pues primeramente es un dilema para toda la humanidad determinar que es un Activo Intangible, y dentro de ellos sus particularidades.
El valor de las empresas no reside en sus propiedades tangibles, sino en los conocimientos técnicos y especializados de su personal e su experiencia en la propiedad intelectual, la finalidad de los clientes? en resumen, en los que se ha venido en llamar Capital Intelectual, concepto que desata el término definido como Gestión del Conocimiento.
Gestión del Conocimiento:
Conjunto de procesos y sistemas que permiten que el Capital Intelectual de una organización aumente de forma significativa, mediante la gestión de sus capacidades de resolución de problemas de forma eficiente, con el objetivo final de generar ventajas competitivas sostenibles en el tiempo.
Una organización centrada en el conocimiento centra sus riquezas en:
- El conocimiento del consumidor.
- El conocimiento de los procesos.
- El conocimiento en la gente (el activo organizacional más evaluable).
- La memoria organizacional.
- Los activos de conocimientos (teniendo en cuenta un viejo adagio que plantea: "lo que ud. puede medir lo puede manejar").
Se estima que la denominada Gestión del Conocimiento, el a función que planifica, coordina y controla los lujos de conocimientos que se producen en a empresa en relación con sus actividades y con su entorno, logrará crear competencias esenciales.
La ventaja competitiva sólo se consigue mediante la inversión de conocimientos nuevos y su generación a partir de Activos Intangibles como la investigación, el desarrollo de habilidades, la formación continua y un creciente dominio en las tecnologías de la información. Demuestra la transición a un mundo en el cual el factor de producción primordial son los conocimientos, por tal razón los estudiosos del tema han definido al Capital Intelectual o las también llamadas fases de la Gestión del conocimiento como:
Para cada categoría han surgido innumerables métodos, índices y criterios para medir dichos recursos pero para que los Activos Intangibles puedan ser medidos deben desaparecer ciertas condiciones que existen en el mundo empresarial.
Inconvenientes para valorar activos intangibles.
- La diferencia entre el Valor Contable y el Valor de Mercado
- El mercado donde se desenvuelven las organizaciones no reúne las características de un mercado de competencia perfecta
- Los principios contables están en amplios procesos de cambio, pero estos no alcanzan la velocidad necesaria en su intento de adaptarse a los del complejo mundo financiero.
- La contabilidad esta siendo influenciada por el entorno y debe responder a las necesidades de información de sus principales usuarios
Por tales razones el autor te convida a reflexionar y se pregunta:
"¿Cuánto vale mi empresa???
Las razones para valorar una empresa son variadas: para tomar decisiones acerca de adquisiciones o ventas de empresas; fusiones; establecimiento de acuerdos de compraventa; capitalización de una empresa; valoración de activos intangibles (fondo de comercio); obtención de líneas de financiación; valoraciones patrimoniales; valoraciones fiscales; compraventa de acciones; herencias; obtención de una "Segunda opinión"; valoración de paquetes accionariales minoritarios y suspensiones de pagos.
Una de las principales metas del administrador financiero es elevar al máximo el valor de las acciones de su empresa. Aunque es difícil vincular un rendimiento monetario a determinados tipos de activos, como a las obras de arte, por ejemplo o a los activos intangibles; la característica fundamental del activo comercial es que produce ingresos. Algunas veces, esta corriente de ingresos es fácil de determinar y medir, como el interés sobre un bono. Otras veces, la corriente atribuible al activo debe estimarse, como es el caso de los proyectos de inversión.
Cualesquiera que sean las dificultades que se encuentren al medir las corrientes de ingresos, es precisamente el ingreso que genera lo que les da su valor.
El Valor de una Empresa puede ser de Mercado y Comercial. El Valor de Mercado de la Empresa es el valor de las acciones de la empresa en el mercado de capitales. Varía diariamente con cada cotización y lo determinan factores como la tasa de rendimiento sobre la inversión, el pago de dividendos, el costo de capital, la estructura de capital, etc. El rango de valores de estas variables lo condicionan elementos externos como el producto, los factores de producción y los mercados financieros.
El valor comercial de un negocio se puede determinar en cualquier situación, pero se hace indispensable en ciertos casos, tales como: ingreso o retiro de socios de entidades no inscritas en la bolsa de valores; en transacciones de compraventa en general; en la evaluación de la gestión de la administración, cuando el objetivo básico de los propietarios es maximizar el valor que la empresa tiene para ellos; en el análisis e interpretación de la situación financiera del negocio, y cuando una empresa analiza el esfuerzo de emprender un negocio.
Para darle el valor a un negocio, se puede recurrir a elementos cuantitativos y cualitativos. Los elementos cuantitativos parten de aquellos cuantificables como son el balance general, el estado de resultados, la información sobre proyección de ingresos y costos, entre otros. La información contable tiene como característica el agrupar cuentas cuyas cifras son una combinación entre el pasado, presente y futuro; por lo tanto, la cantidad que arrojan como resultado no puede ser el valor comercial de la empresa.
El sistema de información contable no dice en realidad cuanto vale un negocio. De aquí que, para determinar el valor de un negocio, se utilice su capacidad de generar beneficios futuros o "Good-Will", adicionalmente de lo que posee en un momento determinado. En otras palabras, un negocio vale por sus activos netos más el valor presente de sus beneficios futuros.
También resulta importante destacar que la cifra obtenida de la valoración del negocio, solo servirá como base de negociación, debido a que existen factores cualitativos que afectan el valor comercial de un negocio, como por ejemplo: riesgos de cambios políticos, económicos, tecnológicos; alteración en los gustos y preferencias del consumidor final de los bienes y servicios que produce la empresa; concentración del conocimiento en la producción o mercadeo del producto en cabeza de alguna persona en particular, la calidad del personal de la organización y cualquier otro fenómeno, que pueden afectar la percepción que del negocio tiene el mercado.
Conclusiones:
Luego de toda esta información brindada sobre los recursos con que se cuenta en una organización, ya sean tangibles o intangibles, se puede concluir que hay un gran dilema en cuanto a la definición de estos recursos intangibles que indudablemente agregan valor a los negocios actualmente.
Además el valor de una organización reside los conocimientos técnicos y especializados de su personal, en su experiencia, en la propiedad intelectual, la fidelidad de los clientes en lo que se denomina Capital Intelectual o Conocimiento.
Es necesario calcular el valor justo de un activo intangible con utilidades únicas en el momento de su reconocimiento. Su valoración es más un arte que una ciencia, y además, supone un estudio interdisciplinario en el que entran en juego el derecho, la economía, las finanzas, la contabilidad y las inversiones.
Cuba comienza a desarrollar un amplio programa de desarrollo intelectual de toda su sociedad por lo que se evidencia un crecimiento en su nivel profesional y de preparación de cada individuo ante cualquier situación contable, financiera o social que suceda en su entorno laboral, por lo que seria imprescindible su estudio y valoración. No dejemos que nos sorprenda, sorprendamos al indiscutible desarrollo que se avecina, estamos preparados y tenemos toda la capacidad intelectual que se necesita para ello.
Bibliografía:
- Revista de Investigación en Gestión de la Innovación y Tecnología_ LA UNIVERSIDAD DEL FUTURO II_ Número 42, mayo-junio 2007_archivos.
- Revista de Investigación en Gestión de la Innovación y Tecnología_ VIGILANCIA TECNOLÓGICA_ Número 17, junio – julio 2003_archivos
- (NIC 38) Activos Intangibles- Monografias_com
- La economía de lo insólito.
Autora:
Lic. Frida Ruso Armada.
FAC. Contabilidad y Finanzas
Universidad de la Habana
Cuba
frida[arroba]fcf.uh.cu
Año 2007
- su carácter internacional o local, liderazgo o cómo está protegida
- el porcentaje de I+D dedicado a investigación básica.
- La creatividad y liderazgo y capacidad de gestión de los directivos
- tiempo que dedican los empleados a la actividad
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