Estado Apure
PENSAMIENTOS
Un Ser sin estudio, es un Ser incompleto.
Simón Bolívar
Moral y Luces, son nuestras primeras necesidades.
Simón Bolívar
Este relato Folklórico-Cultural está escrito con sentimiento y pasión, porque cuando hombres y mujeres, sentimos la necesidad de cantarle al terruño, a nuestra tierra, lo debemos hacer con un sentimiento de inspiración.
Cuando decidimos dar a conocer nuestros orígenes, que mantenido por tiempos en el olvido, el autor de este relato "Los Caminos Hateros del ayer…de Hoy ..Y Siempre"; nos recuerda los tiempos pasados y las relaciones que se establecen entre la tierra y el hombre.
Algo debemos aprender de esta pequeña obra, su autor, es el amigo: Ramón A. Ramos Fagundez, hijo de esta tierra apureña, como la gran mayoría de los jóvenes, que habitaron años atrás los pueblos y caseríos más interioranos del Estado Apure.
Dejando huellas de inquietudes y manifestaciones culturales y artísticas, recogidas bajo la idiosincrasia de hombres y mujeres, han sido concebidas estas líneas, dando a conocer, la descripción del paisaje, los elementos del mestizaje, lo religioso y lo popular de nuestros pueblos.
Por este grato trabajo le deseo muchos éxitos al autor, ya que nos lleva por hechos que han contribuido una vez más, al desarrollo socio-cultural de nuestro Estado.
El objetivo primordial es el conocimiento y entendimiento de nuestros orígenes culturales y folklóricos de nuestro terruño llanero.
Desde el origen del hombre en CUNAVICHE se han entrelazado las costumbres y tradiciones que ahora la hemos heredado como legado de nuestro origen, antecedentes pre-colombinos y coloniales.
Refrescando así, las memorias pasadas para poder asentar los conceptos de la historia de este pueblo, que inspira por su naturaleza misma.
Recordando los hechos del pasado y mantenerlos como fuente viva para la cultura, creando sentimientos por esta prodigiosa tierra llanera, San José de Leonisa de Cunaviche.
El Autor
En un amanecer llanero, acompañado del agradable y armonioso canto de la paraulata y el turpial, me encuentro en el punto cardinal limítrofe de los estados Guárico y Apure. Con la mirada al frente del río Apure, donde se ve remontar por sus aguas a las curiaras y toninas, y más allá se divisa la ciudad de San Fernando, a su paso adornada por la lanza heroica del ilustre Pedro Camejo,es donde aquí comienzo a narrar esta singular historia. San Fernando, adornada por un collar de agua, formado
por su caudaloso río bordeando sus riveras y playas de blancas arenas; ciudad de casas coloniales, de techos de palmas unas y otras de techos rojos.Un puerto donde atracan barcos que venían de otros lugares, al lado una casa grande de comercio, llamada "La Casa de los Barbaritos". Su gente, mezcla de razas del indio con conquistador español,
de modales amables e incansables en las faenas, progresistas y luchadores, con mucho arte y folklore, así es esta tierra, donde me encuentro como forastero. Después de saborear sus típicas comidas, al sonar de las cuerdas de un arpa, siento que me abraza la brisa que recorre estas riberas y me dispongo a descansar. De madrugada me despierto con el canto de los gallos y dispuesto a emprender el viaje cabalgando por trochas y senderos, comienzo emocionado mi andar, cargando el bastimento, la capotera y la maleta pa´acampar, enfundando también sobre el lomo del animal, un filoso machete, de esos que llaman "Cola e Gallo", que todo llanero debe cargar. Orgulloso de mi manera de viajar, sobre un caballo zaino, con rasgos de buen andar – obsequio de mi amigo Ricardo Barrios-, allá en su fundación, comienzo la travesía, dispuesto a cabalgar, despidiéndome de amigos y vecinos del lugar, con gran serenidad espiritual, sin miedos ni temores y recordando los buenos consejos de algunos amigos llaneros, – Don Pablo Bolívar, hombre de sabios consejos, conocedor de este llano, de sus belleza, misterios y leyendas; y que Dios lo tenga en la gloria-, porque su paso por estas tierras cristianamente ya se cumplió.Al fino trote de mi caballo, siento una suave brisa que me acaricia y elevando la mirada hacia el horizonte, buscando el camino entre estepas y matorrales, en estas inmensas sabanas y llanuras, voy llegando al poblado de Biruaca, lugar donde se cruzan los caminos. Desviando el rumbo hacia el sur, dirección a San Juan de Payara, dejando la cruz de agua, al rato llego a un lugar llamado La Piedra y me dispongo a descansar. Busco el bastimento y encuentro, carne seca salada, queso y panela dulce, alimentos que se conservan durante la travesía; el agua no me preocupa, a mi paso por los caminos encuentro charcas y lagunas, y desde el camino, a lo lejos se divisan Fundaciones y hatos. Al descanso por lo hermoso y agradable del paisaje típico natural, me llegan al pensamiento muchos recuerdos del pasado, que han ocurrido desde la fundación de esta ciudad de San Fernando de Apure, ciudad pueblerina que ha sufrido a través de los tiempos, los rigores de las guerras, epidemias, robos y saqueos por bandoleros y cuatreros. Contando hechos que pasan de generación en generación y que forman las expresiones de las gentes y costumbres de los pueblos, me contó el amigo Ramón Meló en un lenguaje muy popular, sobre gentes que llegaron a este lugar, remontando en bongos o curiaras este caudaloso río. También de cómo se efectuaban peleas de gallos y del encierro o rodeo de ganado, que se hacía al otro lado del río donde los peligros naturales – caimanes, culebras y los fuertes caudales del agua-. Los hombres se preparaban para cumplir esta difícil faena. Al canto de los gallos anunciando el amanecer, se levanta el cabrestero María de las Nieves (llanero nato y de gran valor) sobre su buey madrinero para cumplir esta ardua labor. Pero también me habló del famoso árbol, el Samán Llorón, del cual antes de comenzar esta travesía, me recordé al pasar donde llaman "La Parada", o casa de zinc, porque más adelante, según narración de este gran amigo, se encontraba anclado por sus raíces apareciendo con una majestuosidad imponente. Allí los viajeros y las gentes del lugar, paraban y descansaban de largas travesías al disfrute de sus sombras y frescura; donde efectuaban trueques, negociaciones y algunas actividades comerciales. Este hombre en su avanzada edad, curtido y envejecido por la cronometría del tiempo, conserva su pensamiento, todos aquellos gratos recuerdos. Anheló que ese gran Samán, al paso del modernismo no borrarán todas aquellas huellas de las muchas historias y leyendas, y lo hubiesen conservado como bastión nacional, ya que abrigó a muchas gentes que fueron los constructores de este pueblo, de sus costumbres y tradiciones. Entrado el medio día y con el radiante sol sobre mis espaldas, siendo guía de mis pasos a través de las sombras, me decido a ajustar la montura sobre el animal y guardando el bastimento, decido ir a conocer las costumbres y gentes de esta tierra llanera. Continuando mi andar, me encuentro con un rodeo de ganado, que vienen arreando unos llaneros entre gritos y algarabías, señalando el camino un toro grande que por estos lados llaman madrinero; los hombres y yo nos saludamos – llevan ese ganado para la venta-. Me preguntaron ¿ a dónde va?, les dije, a Cunaviche, exclamando uno de los llaneros, ¡así que a Cunaviche, le falta mucho camino que andar!. Advirtiéndome sobre las aguas que inundan las sabanas y llanuras porque están minadas de caimanes, babas, caribes y culebras de agua; también de otros peligros, como el de ladrones y cuatreros y pare usted de contar. Al caer la tarde, llego a la población de San Juan, pueblo famoso por tradición desde la entrevista que aquí sostuvieron el General Páez, el Negro Primero y el General Bolívar, nuestro Libertador. Allí, frente a la iglesia me encontré con el Maracó Castillo, lo saludé con un fuerte apretón de mano y me preguntó, ¿pa´dónde va mi amigo Pancho?, Y le dije, pa´Cunaviche. Me ofreció su casa para que descansara y pasara la noche, pero le dije que llevaba prisa y quería llegar al Paso Arauca antes del anochecer; le di las gracias y salí de allí con paso largo y firme. Atravesé el Caño Cotayo y al rato me encontré donde llaman Bucaral, allí se improvisa un puerto a orillas del caño, alineadas en hileras las curiaras y canoas que los llaneros llaman "Fuera de bordas", transportes propios del lugar.Al anochecer, cansado de cabalgar, llegué al destino que me había propuesto, sin antes no dejar pasar por el sendero que lleva a la población de Atamaica y al riachuelo Apure Seco. En Paso Arauca, saludé al amigo Benito y con buen gesto contestó invitándome a pasar a su casa, ofreciéndome de cena, topocho sancochao y coporo frito, acompañado de un aromático cafecito y como descanso una maleta, mi caballo con los peones lo mandó al corral. Disfruté de un buen descanso y al amanecer, me propuse a continuar viaje. Temprano por la mañana, después de abordar la balsa junto con el animal, pasamos al otro lado, atravesando así el caudaloso río Arauca. Después de un saludo a los balseros, bordeando la costa Araucana, a un lado del paisaje sabanero de "mata de los Indios" y los palmaritales del Arauca; asentamiento de la familia Escobar, en su Fundación, Caral-Caral, proseguí mi andar entre caminos y sabanas infinitas, donde la brisa, borra toda huella del caminante y con olor a bosta de ganado, me aproximo a los cañitos, tierra del compadre Fuentes, donde paro a descansar. Hasta donde llega mi vista, divisé a lo lejos a mi amiga Margarita, allá en su fundación, acercándome a su lado, paré en el caño, mi caballo bebió agua y tuve el modo de calmar mi sed y cansancio refrescar. Ella estaba ordeñando a su vaca fundadora de nombre la brisnita, ofreciéndome una totuma de leche fresca y tibia de color natural, como los garceros que miro al pasar. Bebo la refrescante leche y decido buscar camino, levantando el falso de la cerca y así continuar.Ya entrada la tarde, me voy acercando a tierras de Cunaviche, en mi andar paso cerca de Los Médanos, de majestuosa e impresionante belleza, se levantan imponentes como monumentos, queriendo adornar estas inmensidades de sabanas y llanuras y como señalando el camino, tuve por compañeros durante un largo trecho. Ya adentrándome en la llanura, de inmensas tierras del hato La Candelaria o Candelariera – como la llaman vecinos del lugar-, siempre hay historias que contar. Según dicen por allí, que en el hato Los Campos Volantes del lugar, mataban a un hombre por una pluma de garza o marabú de corocora, y eran devorados por culebras y caimanes. Esta es una de las muchas historias del lugar, otra es la que me contó mi amigo Moncho – cunavichero con rasgos propios de su raza india-: el toro negro candelariero, que a la media noche salía a recorrer sabanas y recoger rebaños de ganados, sitiéndose un tropel y levantando una polvareda que duraba hasta el amanecer. Todo esto contribuyó a la riqueza de estas tierras codiciadas por terratenientes y abusadores de poder, donde no se podían ni siquiera contar las cabezas de ganado, por su abundancia.Tierra de sabanas y llanuras de hombres recios que laboran en la diaria faena enlazando orejanos, cachilapos y caballos, trabajos rudos y fuertes que exige el mismo llano. Poniéndose un tiempo de tempestad y nubarrones, me obliga a desmontar del animal, comienza a relampaguear, se aproxima un chubasco como los llaneros lo llaman por aquí; me abrigo con mi chamarra y el sombrero me tuve que ajustar, agobiado por el cansancio me quedé dormido.Al compás del canto del alcarabán y el bullicio nocturnal, una brisa amenazante y fría que por todo el cuerpo me corrió, me hacía temblar de miedo y al rato bajo esa lluvia inclemente comencé a soñar, tal vez una fantasía o una realidad: – oigo una voz y veo una silueta frente a mi, que flotaba en el aire y me decía: Soy la dueña de estas tierras, y temblando de miedo le pregunté, ¿ quién eres? ¡ soy Tanasí!, espíritu maligno de idolatrías, me adueño de las almas de los que andan perdidos por estas sabanas y llanuras, porque soy un alma en pena, le pegué a mi taita en una Semana Santa…Me hago la señal de la Cruz y me pongo a rezar…también se me aparece una bola de fuego, si me llega a tocar libera a un alma en pena y me puede llevar…al momento me despierto y no saliendo de mi asombro, muy asustado comienzo a cabalgar a un trote ligero y sin parar. Pasando por el Perro y las Piñas, sitios que no podía descartar, y sin parar, como de un solo estirón llego a esta población. Algunos lugareños me observan con extrañeza o admiración por ser un forastero, – eso no es raro en esta región-, caminando entre las casas de barro con techos de palmas y otras de mampostería, atravieso la plaza y me dirijo al Jefe Civil para presentarme y comunicarle que he llegado de viaje desde San Fernando en una larga travesía, a esta región que todavía hoy en día está su nombre en discusión; unos dicen que es San Miguel, otros, que es San José de Leonisa de Cunaviche, por lo del asunto de aquel santo prestao a una población cercana para la celebración de las fiestas religiosas en una Semana Santa.De regreso a la plazo amarro el caballo al otro lado de la calle en un botalón, me encuentro con el indio Matías, oriundo del lugar con rasgos de raza bravía, conocer de faenas vaqueras, y lo saludé y me respondió con un gesto muy cortés y preguntó: Don Pancho ¿está usté asustao?…sí, le respondí, viniendo hacia acá pasando por estas tierras candelarieras, se me apareció un espanto y todo por querer conocer de esta tierra sus secretos y leyendas. Don Pancho, eso no es realidad…fue solamente un sueño…eso le ha pasado a muchos lugareños cuando andan de travesías. Esos son fenómenos propios de la naturaleza, cuando sopla fuerte la brisa, ésta arrastra las briznas de paja seca y las envuelve en forma de bola y eso ocurre en la época del verano entre los meses de Septiembre a Abril, cuando es la época más fuerte de calor..esa bola de paja en un ir y venir por las sabanas, por combustión natural, se enciende y se ve rodar por las noches bajo el cenit sabanero….Bueno amigo, si así es la cuestión, me estoy tranquilo y con una gran paz espiritual. El indio se despidió con la amistad del llanero, que todo lo da cuando aprecia de corazón…así es esta tierra que invita a la inspiración de músicos y poetas; está acariciada de una suave brisa mañanera, que sutilmente toca todo mi ser, trayendo consigo desde las lejanías el canto del llanero, que entonan durante el ordeño….
¡Ja-Ja-Ja-Mota-Mota-Mota!Dame una totuma de leche espesa y cremosa que la quiero saborear, para preparar un café con leche y también quesear.Motaaaa…
Con sus dos calles empedradas que terminan al borde de la plaza principal al frente de la Iglesia y al lado de la Comisaría, a lo largo de una de sus calles se encuentra una botica o droguería y más adelante una pulpería. La gente por las mañanas se dedican a sus quehaceres, las mujeres atizan el fogón y los hombres recolectan leña, arrean ganados y elaboran las panelas de papelón, otros preparan las atarrayas y lanzas para pescar.Levantando la mirada hacia el horizonte, poniéndome pensativo y viajando en mi pensamiento, les voy a continuar narrando, lo que desde aquí diviso. Ya sin el noble caballo ni bastimento, ni peligros que afrontar, me remonto a los acontecimientos y hechos del pasado que sucedieron en este lugar, veo el conquistador, diezmando la población, sometiéndola a sus caprichos y afanes de terror, pero somos de raza bravía como nos enseñó el indio Tavacare, cuando se enfrentó en guerra por conseguir la libertad. Tierra de fogonazo independentista de nuestra raza bravía de muchas luchas y batallas por defender lo nuestro. Continuando con este viaje, más allá, delante veo el futuro de esta patria en los caminos que andan, encrucijada donde convergen los caudalosos ríos APURE y META, señalando el caudal del impetuoso río Orinoco. Naciendo así el legendario Cajón del Arauca Apureño, que supo albergar las costumbres y tradiciones del colonizador español.Desde los ancestros indios que recogen la cultura prehispánica hasta nuestros días, ha habido hombres notables que han sabido recoger y cuidar este acervo cultural. Entre bosques y matorrales se encuentra una biblioteca cultural que se ha encargado de divulgar las costumbres y folklores presentando diferentes actos culturales. Pueblos de grandes hombres entendidos en el arte de la música y el canto: joropos, coplas, quirpas, carnaval corrido y galerón; entre estos tenemos el arte del Indio Figuredo cantautor de la pieza "La India María Laya", y Antonio José Torrealba, cantautor de coplas y corridos.
Yo salí de Cunaviche en una tarde callada y bella, cuando el sol va describiendo sus senderos seguido de esta clara luna que alumbra estas llanuras y esteros voy cabalgando mi caballo como buen llanero con el solo pensamiento de decir los quiero.Como mis ojos describieron las tardes de Cunaviche en cada ver soy por eso doy gracias a Dios a estas hermosas llanuras y esteros apureños.
En los actuales momentos y por imperante necesidad debíamos de promover aún más lo que en tiempos atrás se pudo haber llamado la conquista del sur, convenciendo al pueblo que allí hay un futuro promisor que nos está esperando y que podemos llevar una vida mejor; alertar al gobierno nacional para que tome interés en este ideal de fundar nuevos pueblos, para asentar nuestra soberanía nacional, estos pueblos deben de nacer por este territorio, ya que línea límite de fronteras. Ya la dilatada travesía que duraba varios días desde San Fernando con toda clase de dificultades, como las que narré al principio, han quedado en el pasado, con la construcción de imponentes puentes en el sitio denominado Caño Bucaral y otro sobre el río Arauca, que lleva por nombre Marisela – en alusión a un personaje de Don Rómulo Gallegos en su novela Doña Bárbara-. Por esta vía el trayecto a recorrer en automóvil, es de escasamente dos horas, disfrutando de hermosos paisajes que le brinda la naturaleza al viajero. Recreándonos al recorrerla en su trayecto, disfrutamos así en este viaje del hermoso paisaje acompañados del grito de los araguatos, del canto del alcarabán, patos guirí y pájaro Baco. En las lagunas cundidas de manglares y de flor de bora, sitio hábitat de los garceros, asemejando un arco iris – por la diversidad de colores de las garzas blancas, las corocoras, el gabán y el garzón. Se observan a las orillas los caimanes, babas y galápagos, es un viaje agradable porque nos invita a estar en comunión con lo espiritual, con lo natural; esta vía ha recibido en todo su trayecto, en la actualidad el nombre de "La Ruta de Gallegos". Pasando un corto trayecto entre paso Arauca y los Cañitos, se encuentra enclavada una estatua de Marisela, como vigilante férreo con vista al horizonte, señalándonos las glorias, grandezas y bellezas de esta llanura inmensa. Ruta transitada durante todo el añoro lugareños vecinos del lugar y por turistas extranjeros que dan a conocer las cosas que están encerradas en el Arcano Arauca Apureño. Más adelante en un sitio conocido como las Piñas, esta carretera recibe el nombre de la "Y" nombre que nace de una troncal que en su trayecto conduce al Capanaparo y Puerto Páez, no sin antes pasar por el sitio, el paso de La Soledad, donde vive el amigo Alvarado, expendedor de combustibles. Allí se improvisa un puerto, donde llegan en canoas gentes del lugar fomentando el intercambio comercial de productos agropecuarios. Aquí este amigo me narró que amaneciendo en estas soledades, cuando apenas el sol comienza a alumbrar, vio venir por estas sabanas y llanuras, jineteando un caballo ruano, una india de rostro juvenil que llevaba por vestimenta su cabello largo negro que apenas le cubría sus redondos y florecientes pechos, tapándole su inocencia la crin del animal, las piernas al descubierto y sus pies sin calzar. Me miró con gran serenidad y yo adivinando su ideal, me comunicó que ayudara a luchar por los derechos y protección de su etnia. Al indio que sigue estando desasistido de toda atención y vaga en estas tierras con todo su acervo cultural de origen prehispánico. Con todas estas vías de comunicación se acentuaron aún más las diversiones, entretenimientos y fiestas.Se celebran las fiestas paganas y religiosas en honor a su Santo Patrono y en el aniversario de la fundación de este pueblo, el día 19 de Marzo y que se han hecho muy populares, frecuentemente por visitantes y vecinos del lugar. Organizadas y ornamentadas por la comunidad y la autoridad civil bajo la dirección de la iglesia mediante el cura párroco; la gente en las visitas de estas celebraciones pueden disfrutar de deliciosos platos de comida típica, palo apique, cachapas, queso de mano, guarapo de papelón y carato de maíz. Las celebraciones en honor al santo, las llaman Fiestas Patronales. Muy popularmente, por tradición preparan para comer todos los invitados del lugar – una ternera o carne asada en vara, muy típica del lugar-. Descuartizada la res la entrelazan en unas varas de palos de dragos, cuajaros o coco e´mono. Estas varas las clavan en la tierra y alrededor le zumban leña y le prenden fuego o candela y lentamente se va asando la carne, adquiriendo un sabor muy peculiar y olor a campo, monte o mastranto; pudiendo ser degustada por invitados y vecinos del lugar, acompañada del típico casabe y animando la fiesta y carne asada, un aguardiente, un arpa y un coplero cantando un joropo recio, describiendo la belleza de este llano.En estas fiestas no podían faltar las diversiones como las peleas de gallos y juegos de azar. Por las tardes florecen muy engalanadas las mangas de colear adornadas de bellas mujeres del lugar, para brindar al hombre coleador – por una buena faena en el arte de tumbar toros -, un galardón: un beso o una cinta lazo que sale del corazón, y así desde antes hasta ahora, mantener este arte y tradición para dejarlo de legado a futuras generaciones.Anunciadas estas tardes de alegrías con los tradicionales fuegos artificiales y el repicar de las campanas de la iglesia, con el retumbar estruendoso de un cohetón, sale el primer toro y todo el mundo dice: ¡ Cacho en la manga, Señores…! comenzando así la diversión, con gran colorido se adornan las mangas de colear, con rosas y corpiños más bellos del lugar, con los que se pueden comparar la hermosura de la mujer llanera tradicional; hombres y caballos los vamos a ver y aplaudir, porque vienen de todos los lugares de la patria, territorio nacional. Del estado Apure y de este grandioso Cajón del Arauca, fina cuna de hombres sabios de este arte y destreza, con mucho elogio los nombre: José Vivas, Rafucho Torres, Arnoldo Ramos…Fonseca y Aguilera, que sin hacer mucho alarde y con gran destreza, demuestran en cada tarde coleaderas, cómo se consigue un triunfo en el arte de toros tumbar; puede ser de alguna manera o muy peculiar de algún coleador, tumbando el animal de las patas trasera o dándole una vuelta entera antes de llegar al tapón. Emocionados comenzando las tardes de toros coleados, le vamos a brindar a todos los coleadores, visitantes y al público en general, un saludo caluroso y amistoso con la figura de la tumbada del toro, en enfilo de lomo que no podía faltar, con esta demostración vamos a recibir y saludar al gran campeón nacional. Adornadas las talanqueras de las mangas de colear por bellas mujeres que quieren ver a coleadores el toro tumbar; dándole al animal de un jalón la vuelta entera, con destreza en estas faenas del arte de colear y así estas tardes alegrar. Combinando este arte, con la música de la región tenemos a nuestros cantautores como el amigo Castillo "El Tigre de la Nietera", interpretando con notas melodiosas un corrido recio, en honor al coleador para que a todos nos embriague la emoción. Llegamos por estos caminos resecos y olvidados a un lugar en el tiempo "El Nuevo Milenio", es hora de defender los derechos y los hechos legendarios del indio y lo nuestro con patriotismo, de algún usurpador. Quisiera seguir narrándoles sobre las historias y casos de este llano, porque ahora es que de aquí en adelante me llegan las memorias que todavía no he contado..la de un general que se convirtió en papá de todos y todos lo llamaban taita… Ya cayendo la tarde, a la media noche sentí un cansancio que no me deja continuar…esperando amanecer, con buen ánimo me levanto y saboreando un trago de café amargo, comienzo a entrar en calor y les digo, "volveremos Cunaviche a la Gran Cadelaria o al Cajón del Arauca Apureño"..a sembrar voluntades y cultivar la tierra bendita de Dios…
Vente mañana bien tempranoa enlazar los caballo que bajan por este atajo que vamos a colear… En las mangas de palos de drago que se encuentran adornadas con rosas y corpiños más bellos del lugar… En las tardes de coleaderas voy a lucir mi destreza en esta faena para ganarme un galardón… Que quede en entre dicho que esto no es un capricho que me lo exige el arte de colear estos bichos…
Saliendo de la fantasía y entrando en las realidades, de un punto cardinal de Venezuela, donde están situadas las tierras llanas inspiración de poetas y escritores, fuente de inspiración de Rómulo Gallegos, recolectando el material y así escribir las obras literarias "Doña Bárbara" y "Cantaclaro", nos hemos acercado sin darnos cuenta – como un ave de rapiña, cuando se lanza sobre una presa-, al nuevo milenio "Siglo XXI",debemos poner en práctica todas las experiencias, nuestros conocimientos y voluntades. Desde el origen de nuestras etnias indígenas, hasta nuestros días, la cultura prehispánica ha sido la simiente de la mezcla de diferentes razas: blancos, mestizos, negros y mulatos; hombres con un solo ideal de democracia, nacionalidad y libertad. Desean el bienestar de la patria. Debemos valorar con sentimiento patriótico y admiración, las luchas por nuestra independencia. El progreso: piden ahora, hombre, mujeres y niños que pueblan este terruño de diez mil kilómetros cuadrados, conformados por fundaciones y hatos, cuna de Don Evaristo Luzardo "El Cunavichero", uno de aquello hombres llaneros, que aún recorren con sus rebaños las extensas sabanas del Cajón de Arauca Apureño. Con un pensamiento y un solo ideal, con el ímpetu de los descendientes del cunavichero, hombre de una raza enérgica y progresista que contribuye a la destrucción de fuerzas retardatarias, lanzándose al progreso y la prosperidad del llano. En estos diez mil kilómetros cuadrados, entre la línea fluvial que va desde el Arauca hasta el Sinaruco, en toda esta inmensidad de llanura, se encuentran grandes hatos, conservando sus antiguos nombres hoy día, donde fluye la prosperidad ganadera. Ofreciéndonos así nada más atractivo, que la cría de novillos y caballos salvajes, y la facilidad con la cual en todo tiempo se pueden conseguir reses para el uso y subsistencia de los habitantes. Eje de tierra impulsadora, no sólo de una comarca, sino de toda una patria "Venezuela", por sus principios culturales, folklores; productivos que han sido factor decisivo de la construcción de un país. Por ahora, tendremos la mirada fija, hacia esta tierra sureña, que con sus sueños y realidades, seguiremos sembrando y cultivando el progreso. Por ser esta región parte salvadora en la solución para el bienestar socioeconómico de la nación. Tierra que la madre naturaleza, nos la obsequió por mandato divino del todopoderoso, prodigiosa y cautivadora, que nos invita a soñar, elogiándola en cantos, expresiones literarias con la prosa o la poesía. Tierra que inspira a hombres y mujeres, por su naturaleza misma, y que les han dedicado canciones, versos y poesías, desde sus orígenes, nuestros ancestros, trataron de descubrir la existencia misma de su naturaleza, con cantos al sol, la luna o el jaguar. Inspiración que tradicionalmente nace con el llanero de aquí, tierra rica en sus costumbres y folklore (joropo, pasaje, quirpa, corridos, coplas), de hombres autóctonos, con ese don natural, como Antoñito "El Becerrero", que supo enaltecer estas sabanas y llanuras, con sus coplas y corridos.
Yo cabalgaba en las pampas a lo lejos se veían bandadas de garzas blancas las corocoritas rojas las corocoritas blancas las corocoritas negras las garzas se espantaban Había patos yaguazos también había guirirí y cantidades de teje y el burrero de aquí.Por eso fue que al regreso Lo encontré bello de veras Ya había llovido dos veces principio de Primavera.
Envolviendo al visitante en el maravilloso mundo de lo imaginario, de la belleza descrita con la palabra de la rima, nos envuelve maravillosamente. De hombres y mujeres, que al prendarse de sus bellezas, inmortalizaron estas llanuras con la metáfora literaria.
Quisiera componer una cancióna Cunaviche con toda adoración que salga del corazón mucho amor y emoción…
En sus caminos polvorientos cabalgaba mi ilusión siempre ansioso por verte en un futuro mejor. Inmensas sabanas llaneras aquí mis destrezas yo aprendí he tumbao toros cachilapos y domado a caballo cerreros. Soy un llanero de gran esmero con la querencia de mi llano siempre estaré aquí para cuidarte y quererte junto a todos mis hermanos. En las distancias, estando yo ausente relataré de ti de las costumbres y tus gentes y todo el que esté presente se sienta complaciente. Aquí yo nací, me crié y crecía cualquiera le reto a un duelo montando un caballo al pelo y ver quien es más llanero. Sus aguas y caudales recuerdo paseando por los esteros con admiración y respeto los quiero con muchos sentimientos. Pueblo de mujeres bonitas adornadas de mucho colorido les voy a cantar un corrido para describirles estos caminos… Extrañaré el ordeño y la vacada cuando yo me vaya dejaré mis esperanzas para mi regreso linda tierra amada. En los montes de este lado voy arreando una punta de ganado al pasar junto a tu casa canto un joropo, ya estoy enamorado…
En las sabanas del Cajón de Arauca, para preservar y multiplicar las riquezas naturales de esta región, cuenta una leyenda:"…que estas tierras, desde tiempos muy remotos abundaban los araguatos y que un Chamán o hechicero, sacrificó uno de estos animales, de gran tamaño y de una belleza indescriptible, regando su sangre por toda la tierra Araucana, parea propiciar de esta manera la prosperidad de este llano…". En un Samán de impresionante frondosidad, habitaba este hermoso araguato, donde había un corral de encierro de ganado del cual se servían los hombres llanero, cuando traían reses en las vaquerías. Lugar que en esos tiempos, encerraba algún misterio, los llaneros veían pasar un caballo negro al galope y decían, cuando esto sucede, se les hacía muy difícil encerrar el ganado y se hacían de la ayuda de un buey madrinero y con toda esta brega, habían días que no se lograba encerrar ni una sola res. De este árbol, sólo queda hoy día, el recuerdo y un vestigio "el troncón". Estos animales han sido desplazados de esta manera por el hombre, físicamente los han hecho desaparecer, pero todo aquél que transite a cualquier hora por estas sabanas, se les aparece un espíritu al que llaman "El Araguato del Troncón". En la manera de vivir de la gente de este pueblo, se comentan sucesos como este, o el de la bola de fuego; o la del toro candelariero, que se transmiten de generación en generación. Relatando estas historias de diferentes maneras y hasta inventan otras de aparatos y aparecidos, en tierras llaneras de Cunaviche o en los llanos de Portuguesa, con su leyenda de "Florentino y el Diablo", o de alguna parte de este llano, con el relato de la historia del "Silbón". Todo lo sobrenatural, o fantasías que animan estas leyendas, son creadas por la idiosincracia de los habitantes y se conoce como "Folklore" autóctono de esta región; de lo cual el hombre llanero lo convierte en arte, con su canto y poesía, dando a conocer su forma de vivir; constituyendo así los antecedentes originales de la historia popular de esta región. El llanero Gumersindo y yo, veníamos del Capanaparo, rumbo al paso de la Soledad, dispuestos con algunos hombres a recoger un ganado para la capada y buenos caballos, comenzado la vaquería, Gumersindo con caballo "Lucero" y yo, sobre "Fortunato", íbamos siete hombres, cada uno con tres caballos, ésta es una ardua labor de trabajo, no es cualquier tontería. A la hora de merendar teníamos de bastimento, cinco libras de queso e mano y media arroba de panela dulce. Al regreso al hato Mata e´Palo a las puertas del corral y procedimos al encierro del ganado y contamos al ojeo cada animal. Al fin terminó el trabajo de vaquerías, comenzamos la capada y el amanse de los caballos que es otro trabajo de brega. Celebramos esta faena con un gran baile,se hacían presentes los invitados, lindas muchachas llaneras y disfrutamos de un festín, con aguardiente y carne asada. Yo dediqué la mirada en las muchachas que se divertían rebosantes de alegrías, conversé con la india Ulpiana, porque era muy notable entre las damas y de repente mandé a callar el arpa, para dedicarle una canción a objeto de tener unos amoríos y hacerla mi mujer. Así terminó la fiesta, después de saludar, las damas salieron primero y después los caballeros, "así es nuestro llano". Cunaviche fue factor importante en las luchas por la LIBERTAD. Por ser proveedor de caballos y novillos, los cuales sirvieron para transportar los ejércitos y alimentarlos con su carne, durante la guerra de nuestra independencia. En los llanos de Apure, las luchas y batalla quedan en manos del General Páez y sus lanceros, los cuales hicieron retroceder los ejércitos realistas al mando del General Morillo, después que estos cruzaron los caudalosos ríos Apure y Arauca. La señora Doña Dominga Ortíz, esposa del General Páez también contribuye a esta noble causa, y lleva a los pobladores (niños, mujeres y ancianos) hasta las afueras del pueblo, y los esconde entre los bosques y matorrales, para protegerlos de las sangrientas luchas. Al final de la batalla, el General Páez entra al pueblo de Cunaviche victorioso con sus ejércitos de llaneros y lanceros, y todas estas gentes salieron a recibirlos con gran ovación y fue cuando el general Páez, lo apodaron "Taita", que significa en el vocablo popular de la región llanera "el papá de todos". En estas tierras llanas, se extienden inmensas sabanas, donde no existen demarcaciones de caminos, que nos lleven en viaje o travesía a un destino definido, solo a través de todos los tiempos, quedaron tapizados como en alto relieve, las huellas de los cascos de novillos y caballos, en su diario transitar por los pasos ganaderos o caminos hateros. Hoy día a todos los cunavicheros, se nos recuerda estos tiempos, en su diario amanecer, con el repicar de las campanas de las iglesias, que en su típico sonido nos anuncia un nuevo día laborioso, amansando bestias cerreras o herrando novillos. En estas tierra, el origen de este pueblo, ha sido por el mismo don de la naturaleza. El hombre que habita en esta región, el indígena o aborigen; el indio, el que fue menospreciado y arrancado de su medio natural en el que estrechamente estaba relacionado, con su misma existencia. Un mundo natural, que les provee bellos paisajes y abundantes alimentos, acordes con sus destrezas y artificios, cónsonos a la capacidad de su intelecto, en su tiempo y mundo. Indígenas pertenecientes a la etnia de los otomacos, hombres libres, laboriosos, guerreros, con inspiración espiritual de lo sagrado, la idolatría y la hechicería; fueron apartados de ese su ambiente, privándoles de sus costumbres y sus manifestaciones culturales. Por el origen del progreso y la enseñanza de una cultura europea, que lo hemos heredado a través del tiempo y que la llevamos arraigada en nuestra sangre, por concepción de la unión de estos dos orígenes. No busquemos en el ayer u hoy las raíces autóctonos de nuestro acervo cultural, vamos al mañana. ¿Qué haremos para preservarla?, cuando ahora: "El indio, continúan siendo compatriotas desasistidos, que deambulan por estas vastas llanuras, con todo su acervo cultural". Cuando en estos nuevos tiempos, el progreso ha generado nuevas tecnologías muy avanzadas, que en la actualidad, podrían afrontar los pedimentos de esta nueva era por venir, el nuevo milenio… Remontando el río Arauca, en una fuera de borda, junto a unos compañeros para transportar una carga de sal y víveres destinada a las queseras, dirección de los cañitos. Durante el viaje, avanzando un buen trayecto, después de embarcarnos en paso Arauca, en el trayecto sufrimos un percance, escuchamos un ruido estruendoso, habíamos chocado con algo, que no sabíamos que era, aquí son raros estos accidentes; primera vez que esto sucede en tantas veces que he navegado esta agua. Chocamos con un manatí, animal que en estos días es muy raro por estos lados; perdimos el control de la embarcación, sufrimos averías en el timón y el motor. Agarramos los canaletes y remamos hasta tomar nuevamente el rumbo. Este animal, era inmenso de tamaño y con el impacto quedó muy mal herido, tuvimos que lancearlo para terminar de darle muerte; luchando contra la fuerza del agua y la oscuridad de la noche. Sujetándolo con una soga, para que la corriente del cauce del río no lo arrastrara, nos fuimos en esa misma dirección, nos estábamos acercando a un recodo, donde se arremolinan las aguas y sabíamos que la embarcación podía zozobrar, nos cundió el pánico. Necesitábamos ayuda inmediata para alcanzar la costa y poder arrastrar el manatí, tomé una linterna y al instante comencé a enviar señales en todas las direcciones. En las distancias de la costa, se refleja la luz y algunos llaneros las advirtieron y pronto salen en su embarcación al auxilio y ayuda. Tuvimos que amarrar nuestra embarcación a la de ellos, para que nos jalaran al remolque y poco a poco nos fuimos acercando a la orilla, trayendo al arrastre el animal. Nos dispusimos a sacarlo del agua y fue una tarea muy ardua, pues se hizo difícil, por su gran tamaño y peso, nos valimos de un carro tipo Jeep para arrastrarlo y poder sacarlo. Ya fuera, le pudimos calcular su peso, que era aproximadamente de trescientos kilogramos y con la ayuda de todos los presentes, procedimos de inmediato a descuartizarlo, abriéndolo por el lomo con un cuchillo, para de esta manera recoger el aceite o manteca, que la utilizamos para mantener encendidas nuestras lámparas de aceite; proseguimos con el trabajo y comenzamos la separación del cuero, con suma delicadeza para más adelante utilizarlo en la confección de unas campechanas, por ser muy fino. Su carne la repartimos por pedazos a algunas personas que se hacían presentes en el lugar, esto era para esa gente como un día de fiesta, pero para nosotros se hubiera podido convertir en una tragedia. Con tanta incomodidad y la ayuda de un llanero veterano en esta labor, al pasar las horas terminamos de bregar, hasta la media noche y bien cansados nos retiramos a apaciguar nuestro sueño, después de un buen descanso.Al día siguiente, bien temprano seguimos con el trabajo, yo mandé a un peón a llevar la embarcación al paso Arauca, remando para hacerla reparar. Los otros compañeros y yo nos preparamos para llevar la carga de sal y los víveres a las queseras de los cañitos, la cual la cumplimos al término en un jeep que me prestaron, atravesando las sabanas, buscando los trayectos más cortos. Entre los cuatro puntos cardinales,que abrazan y delimitan el territorio nacional, encontramos muy adentro, este pedacito de tierra, que ansiosa late y vibra como si conformara el corazón de la nación. Bañada por grandes torrentes fluviales, que son guía de la prosperidad y la cultura, génesis del pasado y el presente, de grandes luchas y muchos logros. De forma geográfica de planicie, en el que convergen puntos importantes, los límites del sur de este mi país, puntos de resguardo y defensa de nuestra soberanía territorial. Física y espiritualmente, yo Pancho, cabalgaré eternamente por estas pampas y ver con paso sigiloso.A mis compatriotas, no quiero ver este mi pueblo en ruinas, y cuando me despida a la eternidad, dejarlo más bonito y en prosperidad, con mi afán de protegerlo de las devastaciones ambientales, y contribuir a su progreso y acervo histórico cultural, y así pensar en consagrar algo de mi vida, como cualquiera de ustedes que le tenga verdadero amor a esta patria grande de Bolívar.
I Llegó la hora de despedirme y les dejo este legado de anotaciones de las costumbres de este nuestro llano
II
Cuando ya no esté, ni usted tampoco, la reciban nuestros hijos como patrimonio de todos cuidarlo y protegerlo será su lema.
III
Que Dios les bendiga y con sagre sus pasos por esta tierra.
Sabanas y llanuras de horizontes abiertos, que invitan a viajar, por los caminos ganaderos y oír de sus gentes, relatos, historias y leyendas.
Yo llegué a Cunaviche, me recibieron con cantos y abrazos mis paisanos están contentos por narrar estos hechos y acontecimientos, de este nuestro llano….
TIERRA AMPLIA Y BELLA QUE TE ESPERA
BREVE RESEÑA HISTÓRICA
En la fundación de este poblado acontecen muchos sucesos que culminan con la aceptación por parte de la Real Corona Española. Los capuchinos españoles, se encuentran con nuestros ancestros indígenas y establecen misiones, es esta región entre el río Apure y Meta, cuyos descendientes son mestizados y los puros continúan siendo estos compatriotas miserables y hambrientos, que alucinan y vagan como ánimas en pena por estas sabanas y llanuras, con todo el inolvidable acervo cultural. La etnia "otomaca" de la cual intervienen los "yaruros" y en donde sus juegos culturales también participa la mujer, para así propiciar la pesca y cultos a la madre tierra, a la luna en cantos poéticos y espirituales. Se tiene por referencia que se escoge el día 19 de Marzo, como onomástico del Santo Patrono San José, para su fundación en el año 1777, se le dio el nombre a este vecindario de San José de Leonisa de Cunaviche, su nombre original. Pero algunos pobladores lo llaman o lo apodan San Miguel, porque en una ocasión con motivo de las celebraciones de sus fiestas religiosas, los vecinos del pueblo le quitaron prestado la imagen de San Miguel al pueblo de la Urbana, y luego no se lo devolvieron, por aferrarse a sus milagros. "En estos hermosos paisajes de los llanos venezolanos". El General José Antonio Páez, hace la guerra contra Boves, manteniendo la bandera de la libertad y la independencia. Entrevista con el Libertador: "Me adelanté a su encuentro, acompañado de los principales jefes de mi ejército, apenas me vio a lo lejos, montó inmediatamente a caballo para salir a recibirme". Hallábase Bolívar en los años más floridos de su vida, su estatura sin ser procerosa era suficiente para la talla de un héroe. En el brillo de sus ojos, que eran negros, como mirada de águila. El General Páez, cree ver en aquel hombre, de ojos penetrantes, movimientos nerviosos, una personificación de la ciencia militar y le ofrece el espectáculo de su experiencia en la guerra de los llanos y de su ingenio. "Luchar por la libertad y una patria libre y soberana". Cunaviche, un pueblo que para su conformación geográfica, sufrió penurias y vicisitudes, unidas al conquistador depredador y a la guerra de la independencia, a la distancia, al aislamiento y atraso, causa que han hecho desaparecer caseríos, asentamientos y otros pueblos. Cunaviche se ha negado a esta desaparición, a esta muerte nefasta; por el contrario, nos ha expresado sus ganas de vivir, demostrándonos ahora más que nunca con la búsqueda de su desarrollo y progreso. Dándose cuenta su gente de las grandes riquezas que encierra el Cajón del Arauca Apureño, puede convertirse ahora como antes lo fue, en el proveedor de grandes ingresos fiscales a la nación, como dijo un ilustre de esta patria: "SEMBREMOS EN ESTA TIERRA Y RECOGEREMOS LOS FRUTOS DEL FUTURO" a lo largo y ancho de este territorio se encuentran grandes caudales de agua, ríos y lagunas que pueden ser el futuro factor importante de la economía, por sus reservas de fauna marina se pueden promover la industria del pescado, centros de piscicultura, estudios y proyectos. En épocas del pasado, estos grandes caudales de agua, fueron vías de comunicación con el mundo exterior, esta agua y ríos, desde su desembocadura, eran navegables y remontados pro barcos de grandes calados, trayendo consigo el intercambio comercial e innovaciones en el arte y tecnologías europeas. Al mismo tiempo se llevaban un caudal de riquezas de esta región, cueros, quesos y sebo. De los barcos que transitaban esta agua, hubo uno con el mismo nombre de estas riquezas, El Arauca. También por sus bosques, puede ser proveedor de la madera contribuyente al asentamiento de caseríos y pueblos. Explotados, puede incrementar la industria de la madera, una rearborización planificada y podemos usar los caudales de aguas de aguas o ríos como dicen por allí, los caminos que andan para su transporte. Por designios de Dios, tierra rica en minerales, sal mineral, sulfato ferroso y piedras de azabache que pueden ser utilizadas en la industria. Las grandes extensiones de sus suelos deben ser aprovechadas de una manera técnica, mediante estudios agroindustriales para la siembra y cultivo agrícola en el manejo para la mejora de la ganadería, y de otras especies de la fauna silvestre: el venado, el chigüire, los caimanes, tortugas y babas, futuras fuentes de alimentos. De sus gentes con ese gran calor humano y el sentimiento de amistad que los caracteriza desde sus orígenes, podemos esperar que acoja a visitantes o turistas como siempre y hasta ahora lo ha hecho, y así hacer del turismo una actividad de trabajo que les proporcione una mejor forma de vida. Tierra que ha sido fuente proveedora de alimentos por su gran producción ganadera, leche, queso, éste último codiciado por su típica elaboración propia de esta tierra, por esa causa es conocido aquí y allá por su "queso llanero" o de sincho. El llanero en sus faenas tiene sus formas muy originarias de trabajar generalmente jinetean un caballo con los pies descalzos y sosteniéndose del mismo con el estribo entrelazado en el intermedio de los dedos; igualmente andan descalzos en las sabanas. Hay llaneros duchos en la manera de caminar o transitar por la basta llanura y conocer de este territorio, lo llaman "baquiano", por estos lugares y muchas personas los contratan cuando van de viaje sabana adentro, para así de esta manera no equivocar el camino. Dentro de sus costumbres tiene el hábito de fumar tabaco o masticarlo u optan por el tradicional chimó, según el llanero ésto les hace el día más alegre y placentero, aparte que sirve para alejarles la plaga. Después de una dura faena de trabajos, que comienza en la madrugada y se alarga hasta el atardecer, encendiendo sus lámparas de kerosén, se disponen una recreación sana, agarrando sus cuatros, se disponen a cantar en alusión al mismo llanero o a épocas del pasado. Las mujeres se recogen temprano de sus quehaceres domésticos y se disponen a disfrutar de las melodías que entonan los hombres. En la época de la preñez de las mujeres llaneras, por lo dificultoso de los caminos y las largas distancias, tiene que parir en la casa, ayudadas por otra mujer que recibe el nombre de "comadrona" y en caso de que falte ésta, la ayuda el marido.Durmiendo placenteramente y disfrutando de sus sueños, dentro de un chinchorro o una campechana, hombres y mujeres, son muy hábiles en la elaboración de estos chinchorros y campechanas, fabricándoles de bellos colores y muy adornados. En su forma de vestir, el llanero es muy particular, su vestimenta está conformada generalmente, por un sombrero, una franela y un pantalón arremangado hasta las rodillas y como calzado, las tradicionales alpargatas y un cuchillo o machete enfundado en la cintura. El sombrero aparte de protegerles del sol o la lluvia, lo utilizan como implementos de trabajo en algunas labores.
Con mi sombrero en la mano
Espanto mi caballo para que vaya a sabanear, después de la llegada
de las tardes de colear.
En esta tarde bella sombreada,
Dentro del sombrero te traje, limas y almendrones,para que alegres muchos corazones..
Con el sombrero me tapo del sol y los chaparrones,
para así cuidarme de un resfriado y muchos dolores…
Los niños escasamente tienen alguna infancia, a los 6 ó 7 años comienzan a encargarse de algunas labores del hogar o de la fundación. Estos generalmente alcanzan una instrucción escolar de rendimiento primario. La asistencia a la escuela la hacen recorriendo largas distancias a pie, en burro, caballo o cualquier otro medio de transporte, debido a que la ubicación de la misma en ese lugar específico para que puedan asistir todos los niños de la región. Con la excepción de la escuela que está en el pueblo, los niños no han completado su desarrollo corporal total cuando a los 14 ó 15 años de edad, con gran interés tienen que hacerse cargo del trabajo y responsabilidades dentro de la fundación o hato. El único medio recreacional con que cuentan los niños es ir a los ríos y lagunas a pescar, lanzando peces coporos y bagres. De esta agua deben cuidarse tanto los niños como los adultos, ya que están habitadas por caimanes, babas, culebras y caribes. Respecto a ésto, les voy a contar algo que en estos momentos me llega a la memoria, así como otras muchas historias. Esto no sucedió por estos lugares, pero si en alguna parte de este llano y sabana, donde llaman Paso de Hato…Tres niños fueron a pescar y a divertirse, a bañarse como dicen por aquí, a echarse un chapuzón. Se lanzaron al agua alegremente, al rato uno de los niños se hundió dentro del agua y los otros dos esperando un tiempo prudente y en vista de que no se veía al muchacho por ninguna parte, se salieron del agua y muy asustados se decidieron a ir en busca de ayuda y corriendo hasta llegar a la casa y decirle a sus padres lo sucedido, el padre de estos sin perder tiempo se apresuró y dirigiéndose al lugar acompañado de algunos vecinos se dispusieron a revisar el sitio con mucho cuidado, sin obtener ningún resultado favorable. El padre y estos hombres se alejaron del lugar al día siguiente, el padre se dirige nuevamente a la laguna muy afligido y observa sobre la superficie del agua y no vio nada, ni siquiera algún indicio que le pudiera indicar algo de lo sucedido. Al día siguiente este señor vuelve con insistencia al lugar y por horas se pone a mirar el agua, ésta comienza a burbujear…de repente..el hombre se queda inmóvil y lleno de asombro como espantado actúa de manera rápida con la báscula o escopeta en las manos, se dispone a disparar, se siente un resuello que se oye a la distancia del lugar, trayendo a los vecinos…Atinándole con el plomo sobre la cabeza del animal desmedidamente monstruoso, una culebra de agua, de muchos años, de esas que llaman "Madres Viejas" los que habitan este lugar, esta culebra o madre vieja, o como la llaman, se arrastró al niño hasta el fondo del agua y lo devoró. Los llanos presenta variedad de vegetación, desde arbustos hasta árboles de grandes tamaños como son los Samanes, Apamates, Palmas y otras variedades. De las palmas es esta tierra encontramos la palma de Moriche, de la cual nuestros antepasados naturales (indio) extraían un licor refrescante como un vino, y también harinas e hilos. Esta palma junto con otras variedades de árboles, son utilizados para fabricar enseres como pilones, cucharas, bateas, y hasta fabrican cómodos taburetes. Hay árboles cuya corteza es tan dura, que con demasiada dificultad se les puede hacer penetrar un agujete o clavo. Generalmente de los troncos de estos árboles, el llanero construye las cercas que delimitan sus propiedades y los corrales para el encierro del ganado. Los recortes o desechos de esta madera los utilizan para mantener encendido el fogón, que utilizan las mujeres; desde lo lejos se divisan por el humo que desprende de la combustión. Estos hogares que en este llano se denominan fundaciones o hatos; los cuales se presentan ante el visitante del lugar, con mucha originalidad, por esta tierra tener sus propias formas de vida. El llanero es muy superticioso y cree mucho en lo sobrenatural, razón por la cual se viene creando historias desde sus antepasados, que hasta se han convertido en leyendas. Otra historia que la narró el amigo Fabián Bolívar, dueño de fundos y hatos de Costa de Arauquita: …Cuando yo era trabajador en estas tierras enlazando caballos y cachilapos, en una de esas faenas vaquerías con otros compañeros llaneros, después de una dura tarea de trabajo, se dispusieron a descansar colgando los chinchorros para dormir, cuando al rato uno de los compañeros dirigió la mirada hacia un punto definido del lugar entre árboles y con cara de asombro dijo:…miren esa luz que se encuentra en el suelo a escasos centímetros… ellos respondieron:no, no la vemos…sin embargo, se acercaron al sitio y comentando el asunto concluyeron que se trataba de un botijo o entierro, como se conoce por estos lados.
Pensamos mis compañeros y yo en sacarlo, nos pusimos a hacer un hoyo, al cabo de un rato era una fosa bastante profunda y la luz reapareció nuevamente con bastante intensidad…efectivamente tanteamos con la punta de un machete y se escuchaba sonar algo como una caja de metal. Seguimos hoyando hasta tener de la caja a flor de tierra, pero uno de los compañeros se impacientó y comenzó a contar sobre la repartición de lo encontrado y que sería muy rico y con tanta insistencia hablaba y sostenía esa idea, que de repente la caja de metal se desplomó en la misma fosa y desapareció, convirtiéndose la luz en una llamarada que incendió las sabanas y tuvimos que salir de allí a refugiarnos a orillas del otro lado del río Cunaviche.
Después de algunos años me encontré al amigo Nicolás Gómez y aseguró lo ocurrido, él era uno de esos hombres que andaba en esas vaquerías. Nicolás, hombre llanero práctico y servicial, conocedor de estas llanuras e instruido por don natural en las planas botánicas, eran de sus servicios para curar y mejorar muchas enfermedades. También con cualidades de cantautor y bailador de la música llanera arraigada desde el origen de la etnia del indio, y hasta latente como raíces de la música autóctona y folklore nacional, a nivel universal como nuestro segundo Himno Nacional, como es el Alma Llanera, inspirado en el paisaje natural de las tierras llaneras.
En estos nuevos tiempos, con la construcción de la carretera se acentuó más el comercio y era muy transitada la vía. Aquí yo viví una real experiencia, de un gran susto que un día me llevé.
Eran tiempos de fiesta y parranda, y lo que aquí les cuento es de verdad verdaita: andábamos mi compadre el chino Bernales y yo por diferentes sitios en busca de queso llanero u oro blanco, como algunos llaneros lo llamar por su costoso precio, siempre en el oficio de la compra-venta. En este arte nos pusimos especialistas en la manera de negociar y hasta duchos en la elaboración, pues ya sabíamos cuando era un buen queso o un mal requesón y hasta sin saborearlo, si se trata de una salazón.
En una de esas tantas veces que andábamos por estas tierras llaneras, en alguna negociación, la camioneta se paró y el motor se apagó; la falla no pudimos reparar y así nos llega el anochecer. Mi compadre y yo decidimos continuar el viaje caminando, en realidad faltaba un corto trecho para al pueblo de Cunaviche llegar.
Avanzando poco a poco, bajo un cielo adornado de estrellas y luceros nos pusimos a cantar, de repente oímos unos gritos y unas algarabías espantosas, salían del lado de la vía de unos de los bosques y matorrales que se confundían con las melodías; salimos corriendo, mi compadre con su brinquito muy natural y a mi se me aceleró el corazón. Apresuré el paso y los dos bien asustados al pueblo logramos llegar.
Después de descansar, al rato nos pusimos a comentar acerca de los sucedido con gentes del lugar y algunos dijeron que se trataba de unos zorros sedientos por el implacable calor y otros que fue la aparición de un espanto llamado "El Araguato del Troncón".
A nosotros no solamente nos ha sucedido ésto, muchos viajeros que transitaban esta vía de día y de noche, han relatado este hecho. Como ya es natural, la gente del lugar comenta sin lógica ni razón, que es algo sobrenatural, que se trata de la aparición de un espanto, que por estos sitios se han convertido en una tradición leyenda, de esas que enriquecen el folklore de esta región.
Por estas fantasías y muchas realidades, los invito plancenteramente a conocer y a disfrutar de esta tierra de la zona sur de Venezuela, que todos conocemos como Tierras Llanuras; y ahora los dejo, todo este cuento de muchas verdades y relatos, despidiéndome sinceramente con una hasta luego….Camarita..
Cunaviche centro productor de queso, elaborado a partir de la recolección de la leche, producto que se obtiene a partir del ordeño de las vacas, conocido popularmente como "queso llanero", por su típica elaboración, que no es más que la concentración de la grasa de la leche convertida en una masa pastosa.
En su elaboración se utilizan agregados que le añaden a la leche para separa la grasa y el agua; estos agregados se les llama "cuajo" y son de dos tipos, el cuajo natural y el artificial. El cuajo natural es el que se obtiene mediante el secado del mismo cuajar del aparato digestivo de la vaca, elaborando el queso con este cuajo, es el que podemos llamar propio queso llanero. Cuajo artificial, es el que se obtiene a base de combinaciones de sustancias químicas y que no es el cuajo más apropiado para la elaboración de este gran alimento, ya que puede general a nivel de la persona que le consume, alergias y malestares.
Es muy natural que a lo largo y ancho de este Cajón Araucano y en los lugares muy apartados encontremos este apreciado y gustoso alimento, elaborado en las propias queseras de las fundaciones o hatos.
Aquí se producen grandes cantidades de queso, que cada semana son llevados al consumidor, o bien sea trasladados desde las queseras por vehículos,, caballos o mulas, por canoas o fuera de bordas, esto sucede, así estemos en las épocas de invierno o verano, durante todo el año.
La propiedad del ganado. El Gobierno Nacional ha dictaminado una serie de normativas y no se crea que todas las reses o caballos que se encuentran en estas extensiones de tierra sean mostrencas, para así de esta manera, poder identificar la propiedad. Aunque desde tiempos inmemorables se identificaba a estos animales, bien sea por algunas características o una señal en especial, por el color de su pelaje. Si es un toro lebruno o una vaca barrosa.
Hoy en día, se están utilizando nuevos métodos, aretes, piquetes de oreja o la marca de un hierro, este último es el más usual en esta región de los llanos. Este método consiste en hacer fabricar una forma o figura de hierro que luego con marcas de letras o números los pasan por unas brazas de fuego, hasta ponerlos candentes y se procede a marcar el animal, bien a un lado de la cruz o en los cuartos traseros.
Estos hierros de marcar, tienen una legitimidad a título personal ante la Ley, ya que se procede ante la autoridad a su legalización o empadronamiento. De esta manera, se puede traspasar por la venta, la propiedad de un animal bien sea ganado bovino o caballar y de esta manera identificarlos.
Los ganaderos hemos sufrido las arremetidas constantes en estos últimos tiempos de ladrones y cuatreros que recorren este inmenso territorio, perpetrando el robo de reses y matándolas para vender su carne. Con estas señales de identificación también se ejerce un control más adecuado sobre la movilización de estos animales y poder frenar el plagio y estos continuos robos; que con esfuerzo y capacidad las Fuerzas Armadas Nacionales de Cooperación, combaten estos delitos, no sólo en esta región sino en todo el territorio.
En la venta de estos animales, el valor se cotiza al precio del mercado por kilogramo, influyendo la calidad de la res. Generalmente la transacción comercial del animal, se efectúa de dos manera: en pie (vivo) o en canal (muerto). Esto hace que los precios difieran unos de los otros. Para facilitar estas negociaciones se puede observar en determinados sitios de este llano unos centros de pesas, que modernamente se llaman "Romanas", que sirven para calcular el peso del ganado en arrobas.
Antiguamente toda esta tarea se realizaba al cálculo o al "ojeo" y el promedio de equivocación en la pesada era ínfimo, por lo que hacían llaneros intuitivos en esta labor. Este ganado es muy buscado por su carne y sus derivados "leche", producto de la vaca que se obtiene durante el ordeño, muy alimenticia, rica en minerales, muy necesaria como alimento de la raza humana, porque ayuda al desarrollo corporal.
En base a este derivado de la vaca, se ha fortalecido aún más la producción ganadera, modernizando y tecnificando las fundaciones o hatos. Aplicando técnicas para el manejo de los animales en cuanto al pastoreo en las sabanas y su alimentación. Cambiando viejas estructuras y acentuando así, centros de recrías en esta región uno se especializa en producción de carnes y otros de leche.
En Cajón de Arauca, es gran productor de carne y leche de gran calidad y cantidad que se consume y comercializa a nivel nacional por ser una de las bases de alimento primordial en la dieta y la economía de nosotros los venezolanos.
No solo es apreciada la carne y la leche de estos animales, también sus cueros, que son utilizados por los llaneros para fabricar sus originarias sogas, que las utilizan para enlazar los animales.
Por ser una tierra que difiere de los cambios de su clima, presenta una peculiar y originaria forma de vivir. Aspecto muy singular de esta región. Geográficamente se presenta visualmente con muchos encantos y bellezas naturales. Características estas que influyen directamente en la dieta alimenticia de sus habitantes, de allí nacen sus deliciosos platos típicos y su famosa cocina.
Variedad de quesos y carnes, que preparadas a su sazón natural, obtienen un peculiar y delicioso sabor, que nos invita a degustarlo con placer. Algunos de estos son, el queso de mano llanero, los pisillos de carne de chigüire o babo, el casabe y las deliciosas cachapas.
En algunas fundaciones o hatos, sus propietarios lo han habilitado con instalaciones muy cómodas, para albergar cierta cantidad de personas, facilitando el transporte mediante vehículos acondicionados al terreno y por vía área para aquellas zonas muy distantes e inaccesibles de penetrar.
Construyendo instalaciones apropiadas para la diversión y recreación de niños y adultos, como parques, estanques, churuatas para el descanso, organizando paseos y caminatas a sitios pintorescos y de interés cultural. Sitios históricos o recreacionales, la ruta de Gallegos, o la pesca del "pavón" en el río Cunaviche o un viaje al Capanaparo.
Todas estas peculiaridades, propias de esta tierra la hacen que sea visitada frecuentemente durante todo el año, especialmente en los días de la cuaresma o Semana Santa, por turistas y extranjeros, que dan a conocer las costumbres del llano.
Impulsando el desarrollo del turismo, generando una nueva actividad, que con el tiempo se hará "como quien dice de la casa", y brindará a todo el que pise este hermoso suelo, sus mejores atenciones cordialmente.
Esta población en la estación de lluvias, la remontan grandes embarcaciones, como chalanas, que transportan el ganado a otras ciudades. En esa misma época, se producen las inundaciones por la crecida de los ríos Apure, Arauca, Capanaparo y Sinaruco, cubriendo de agua a esta región formándose en toda su extensión una laguna temporal que dura algunos meses.
Los animales como el caballo, los asnos y las vacas, vagan por las sabanas y no pudiendo alcanzar la altiplanicie o las tierras altas de los llanos perecen en centenares, y se ven las yeguas, burras y vacas seguidas de sus crías, nadar en el día para poder alimentarse con hierbas que mecen en la superficie de las aguas.
En esta situación estos animales son atacados por pirañas (caribes), boas de agua o caimanes y no es raro hallar que estos animales muestren marcas o dentelladas causadas por ataques de esos feroces reptiles acuáticos y feroces carniceros. Los cadáveres de los caballos, mulas y vacas atraen gran cantidad considerable de zamuros, que tienen toda la fachada de un ave gallináceo y que presenta a los pobladores de este llano un gran servicio de saneamiento ambiental.
Corriendo el tiempo de las grandes crecidas, los llaneros las evitan no remontando por el lecho de los ríos con sus canoas o fuera de bordas, sino que atraviesan las sabanas para así llegas a San Rafael de Atamaica o al Capanaparo.
Hay que considerar las prodigiosas fuerzas sobrenaturales en fauna, flora y el hombre llanero para poder sobrevivir a estos efectos de la naturaleza. Al retirarse las aguas y los ríos se vuelven a sus cauces, cubren las sabanas de una hierba floreciente en frescura y verdor y los animales, parecen gozar placenteramente de la vegetación primaveral.
Los Llanos del Cajón de Arauca son famosos por el excesivo clima de verano, mucho calor en la mayor parte del año, este calor aumenta excesivamente en el período de las lluvias.
Animales de clima frío bajo el amenazante calor de los trópicos, originariamente "el caballo", se tornan en estos lugares a estado salvaje, llevando una vida inquieta y trabajosa, por el calor o humedad.
Los animales que circundan estas sabanas buscan para apaciguar su sed, una charca en medio de una tierra polvorienta y reseca, pero también huyen de las aguas y desbordamiento de los ríos, como si estos los atacaran en todas las direcciones y hostigados por tábanos y mosquitos.
De esta manera buscan tierras altas, terraplenes o medanales para afrontar la inclemencia del variable clima de este llano araucano. Las crías del ganado bovino o caballar, se ahogan en todas partes en gran número se cansan fácilmente nadando, se empeñan en seguir a las madres a donde solamente ellas pueden hacer pie en tierra firme.
Repitiéndose estos hechos también por el intenso y fuerte verano, estos animales caminan largas distancias para conseguir agua, algunos no logran llegar y fallecen antes de poder saciar su ansiada sed.
Los animales que sobreviven a la inclemencia de esta tierra y vagan por estas inmesidades se agrupan en manadas. El hombre con su conocimiento y voluntad, las guía y protege, llevándolas a una mansedumbre tal que en ocasiones los caballos y reses se hacen del patio de la casa y sus alrededores.
La fauna silvestre del Cajón de Arauca, se experimenta un placer emocionante al uno descubrirse dentro de este impresionante paraíso, en esta tierra habitada por diversidad de animales silvestres.
Se ven bandadas de aves, de mucho colorido, dibujarse en el firmamento como un arco iris y poco a poco las sabanas se van extendiendo, presentando a su paso charcas y matorrales, acompañada de pequeñas arboledas, habitadas por tigres, venados y chigüires, también de aves acuáticas, garzas, coro-coras y patos güirí.
Se encuentran grandes manadas de chigüires, algunos se encontraban echados en las estepas y otros en las charcas. De repente salieron asustados y corrieron lentamente produciendo un sonido fuerte como un quejido.
Al pasarle muy cerca, tuve cuidado de no molestarle, pues son agresivos, si se ven atacados y con sus dientes pueden desgarrar las piernas de un caballo. Estos animales son muy protegidos por las leyes ambientales, no está permitida su caza o extracción de su hábitat natural.
Se han creado centros de estudios, para conocer las características y sus costumbres, para domesticarlo y fomentar su cría. Por ser carne muy rica en proteínas, se utilizará en el futuro como una fuente proveedora de alimento.
Otros animales que son apreciados por su carne, son los babos. El llanero los puede agarrar en los charcos y lagunas de las sabanas, el cual en su hábitat natural, por ser aguas tranquilas y fuente de su alimentación.
Puede llegar a medir en edad adulta, hasta un metro ochenta centímetros, es el tamaño propicio para su comercialización. Éstas en los actuales momentos vienen a sustituir las pieles del caimán, que por su extinción son difíciles de conseguir.
Es la pesca una forma de vida activa, que por su naturaleza se realiza desde tiempos remotos, desde los orígenes mismos de estos pueblos. Antes de la época prehispánica, los aborígenes de estas costas araucanas practicaban la pesca.
Obteniéndolo para su alimentación, como sostenimiento de la vida. Tierra bañada de ríos y lagunas, fuente de una rica fauna marina, conformada por muchas especies de peces y reptiles acuáticos.
El peligroso caribe, habita en estas aguas; de las cuales el llanero se cuida al navegar en sus embarcaciones, pues son capaces de devorar un hombre o una res en escasos minutos. Entre la variedad de los reptiles acuáticos, sobresalen las boas y culebras, como la anaconda.
Nuestros antepasados, tenían sus formas muy originales de atraparlas flechándolas desde sus curiaras. Originalidad que tradicionalmente, hoy en día la practicamos unida al método de la atarraya o los de palangre.
Por esta abundante variedad de peces, como son: el bagre, la cachama, palometa, coporo y la raya, siendo éstas las más buscadas por su deliciosa carne, se ha hecho de esta actividad un comercio, generando un bienestar social a los habitantes, ofreciéndoles una forma de vivir, al obtener ingresos económicos y contribuyendo de esta manera a la alimentación de otros pueblos.
Este pescado conservado bajo métodos especiales, es trasladado a todos los centros de consumo, poblados a lo largo y ancho del territorio nacional.
Los indígenas de la etnia Otomaca, practicaba ritos y hábitos, desde la esencia de sus orígenes ancestrales.
- La mujer indígena a la media noche, practicaba ritos y cantos a la luna o a los animales salvajes, para desearle a los hombres buenos augurios en las guerras y labores productivas.
Conocían el hábito de fumar, mediante el secado al sol de ciertas hierbas, que puestas en una piedra de forma redonda y plana, semejándose a una vasija, las encendían y mediante un tubo de caña de vera o bambú,
aspiraban el humo, introduciendo la punta del tubo en la nariz.
- El hombre adornaba su cuerpo en su totalidad, con la tintura del árbol del onoto, semejándose al pelaje de una fiera salvaje.
- La carne como fuente de alimento, la obtenían de la caza de animales salvajes, con flechas envenenadas con el curare, que también utilizaban como medicina en las congestiones estomacales, este curare sólo actúa como veneno cuando entra en contacto directo con la sangre.
- La etnia otomaca, practicaban la pictografía, en este territorio, en sitios que ellos consideraban sagrados, desde épocas más antiguas de la creación del planeta. Estos sitios escogidos especialmente para estos ritos, como lo demuestran los grabados pictóricos de las Galeras del Sinaruco, que son las únicas estribaciones medianamente montañosas, que contrastan con lo inmenso del paisaje llanero.
CUNAVICHE
El origen del verdadero hombre llanero de Cunaviche, es concebido por la unión de la etnia de los Otomacos con los primeros españoles que penetraron sus dominios en busca de riquezas y tesoros.
Este hombre conoce la llanura, como la palma de su mano y con facultades que son acordes a su medio ambiente. Enlazar, colear, jinetear caballos y reses, es un vaquero por excelencia.
Guardando en el corazón y el alma el sentimiento del valor y aprecio por la amistad.
Por cobijo tienen el cielo, por luz las estrellas y por suelo, las vastas sabanas y llanuras del Cajón del Arauca Apureño.
A CUNAVICHE
Quisiera componer una canción
a Cunaviche con toda adoración
que me salga del corazón con
Amor y emoción.
En sus caminos polvorientos cabalga
mi ilusión, siempre por verteen el futuro,mejor
Inmensas sabanas llanera, aquí mis
Destrezas yo aprendí, tumbar un toro
Cahilapo o domar un caballo cerrero
pues soy un llanero con gran esmero
con la querencia de mi llano, jinete
en la distancia, siempre relataré de ti
"Cunaviche" de las costumbres y tu gente.
Sabanas y llanuras adornadas
al paso de las bandadas de
garzas blancas, en el infinito
azul del cielo
Reflejándose en las aguas cristalinas
de lagunas y esteros, al
paso floreciendo los blancos lirios
sabaneros, que embellecen lo largo
del camino, en estos pasos ganaderos.
Donde cabalga, la ilusión de conocer
y oír de sus gentes, relatos, misterios
y leyendas.
CASOS DEL LLANO
En los montes y llanuras araucanas
arreando una punta de ganado
se oye el rugir del tigre
y el bullicio del alcaraván.
El llanero lanza un grito altanero
ante tal condición, alejándose la fiera
que al acecho, desespera la ocasión
por una presa ternera o vaca vieja.
De un salto la fiera se escabulla
entre estepas y llanuras, por tanta bulla
el llanero la sigue con valor sigiloso
la enlaza con gran destreza y astucia.
La fiera de un salto, la soga revienta
escapa en veloz carrera y se aleja
infructuosa la cacería refugiándose en madriguera
donde lindos y rayados cachorros esperan.
No anda el llanero al descuido
tigres acechan todos los días
con ansias de hambre desesperada
por conseguir alimentos para sus crías.
FAENA LLANERA
En una tarde de luna llena
la humedad de la brisa pasajera
gotas de aguas, caen anunciando
el nuevo invierno.
El llanero, apacigua en la campechana
el sueño, al lado de un perro dando
vueltas, como vigiando el descanso
de su amo, fiel compañero.
Al silencio de la noche oye
gotas de agua, sobre el techo
del rancho caer al canto de gallos
se anuncia un nuevo amanecer.
Jineteando en su caballo, por chamisales
y charcas a sabana abierta, junta
caballos para la hierra y un rodeo
de ganado para el ordeño.
Cerca del paradero, se confunden
el bramar del ganado, con el ladrar
de los perros y el relinchar
de caballos cerreros.
La mujer atizando el fogón humeando
café amargo para darles a beber,
y al peón en totuma,
con aroma y sabor.
Tumbando un toro grande
jalando por los cachos, al suelo
cae el animal, procede herrar
en el anca o en la cruz.
Al ordeño entonan melodías sabaneras
al compás del trinar de pajarillos
acariciado por la brisa mañanera
en estas inmensas llanuras y esteros.
Repitiendo todos los días, con alegría
estas faenas al amanecer, le exige al
mismo llano, labores y tareas al hombre
oriundo de esta tierra.
Ramón A. Ramos F.
HIMNO DEL ESTADO APURE
CORO
¡Vuelvan Caras! Al grito potente
el poder colonial sucumbió y en las pampas extensas
de Apure se oye el eco vibrar de esta voz.
I
Como el águila cruza el espacio
sin que nadie detenga su vuelo
cruza libre el llanero este suelo
que su lanza y valor libertó
y si ayer a la voz de Bolívar
respondieron los bravos centaruos
ceñiremos de nuevo más lauros
si se alzare un tirano ante nos.
II
Son los timbres de orgullo y de gloria
que ostentamos en nuestras banderas
Mucurita, Yagual, Las Queseras
y otros campos de fama inmortal
y a los nobles y heroicos varones
que de Apure ilustraron la Historia
venerando su augusta memoria
batiremos la palma triunfal.
III
Y hoy unidos con nuestros hermanos
de Orinoco a la Cima del Andes
a la paz que sus frutos expande
sostendrá nuestro altivo valor
y teniendo por norma las leyes
escudados en nuestros derechos
latirán de contento los pechos
a los nombres de Patria y Honor.
AMADEO GARBI
HERNÁNDEZ, Eduardo. Ejidos de CUNAVICHE. Diario "El Universal". Caracas, 1.945.
Junta Pro-Bicentenario de Cunaviche. 1.977.
HUMBOLT, Alejandro. Viaje a las Regiones Equinocciales
del Nuevo Mundo. Tomo III. 1941.
OTRAS FUENTES – CONVERSACIONES
BARRIOS, Ricardo. Caramacate, Edo. Apure, 1.975.
MELO, Ramón. Costa el Negro los Arrieros, Edo. Apure. 1.9995.
CASTILLO, Antonio. (El Tigre de la Nietera). Cunaviche.
Edo. Apure. Barinas, 1.996.
Ciudadanos habitantes (Hombres y Mujeres) del Cajón del
Arauca Apureño. 1.972 – 1.999.
PANCHO PA´ CUNAVICHE
I PARTE
II PARTE
Título:
Los Caminos Hateros del Ayer de Hoy y Siempre
Autor:
Ramón Arnoldo Ramos Fagundez
Nº Permiso Legal
LF0472001900282
I.S.B.N.
980-6037-37-5
Impresión:
Saúl Ely Núñez
San Fernando de Apure
Diagramación y Corrección:
N. Nava Morales
Distribución y Venta:
Urb. Los Samanes Calle Principal Nº 153
Teléfono: (043) 272.33.50
Pipo3515[arroba]hotmail.com
Maracay, Edo. Aragua.
Venezuela.
El origen del verdadero hombre llanero de Cunaviche, es concebido por la unión de la Etnia de los Otomacos con los primeros españoles que penetraron sus dominios en busca de riquezas y tesoros.
Este hombre conoce la llanura, como la palma de su mano y con facultades que son acordes a su medio ambiente. Enlazar, colear, jinetear caballos y reses, es un vaquero por excelencia.
Guardando en el corazón y el alma el sentimiento, del valor y aprecio de la amistad.
Por cobijo tienen el cielo, por luz las estrellas y por suelo, las bastas llanuras del Cajón del Arauca Apureño.
Ahora llegaron los nuevos caminos, el viejo estilo de vida tendrá que cambiar. El llanero refleja "la tristeza en sus ojos", esperando que por estos modernos caminos logren progresar, sin cambiar la nobleza del alma.
Atrás han quedado, las experiencias y destrezas que le ha prodigado la llanura. En los viejos caminos del hato, recordarán y personificarán los tiempos del ayer y tendrán que adaptarse a los nuevos cambios de hoy y siempre, a través de las largas historias por venir en estas llanuras venezolanas.
A DIOS CON FERVOR
A las bastas llanuras del Cajón del Arauca Apureño, con inspiración a hombres y mujeres…que hoy, con su manifestación tan popular contribuyeron de alguna manera a la realización de este relato.
A mi familia, amigos y al Llanero en especial, con cariño y respeto.
RAMÓN ARNOLDO RAMOS FAGUNDEZ
San Fernando de Apure, Edo. Apure, Venezuela.