Subterráneos de Buenos Aires (Argentina) (página 3)

El Laudo Nº 156/96 MTSS, contiene en primer lugar un preámbulo que explicita los criterios para que una enfermedad ingrese en el listado para que sean determinadas enfermedades profesionales. Estos criterios consideran:

Variabilidad biológica: Permite que no todas las personas expuestas a un mismo riesgo adquieran la enfermedad.

Multicausalidad: Dado que una misma enfermedad puede tener diferentes causas.

Inespecificidad clínica: No existe una correlación directa entre una sintomatología y un determinado trabajo.

Condiciones de exposición: Un mismo agente no puede presentar efectos nocivos diversos según las condiciones de exposición.

Agente: Ya que debe existir un agente en el ambiente laboral cuyas propiedades lo conviertan en dañino para la salud.

Exposición: Debe probarse que dicho agente sea capaz de provocar daño a la salud del trabajador.

Enfermedad: Para lo cual debe existir una enfermedad claramente definida y comprobable.

Relación de causalidad: Debe existir prueba clínica, patológica, experimental o epidemiológica, aislada o concurrente, que permita establecer una relación causa-efecto entre la aparición de los elementos anteriores en el ámbito laboral y una patología determinada.

En el caso del público en general las disposiciones generales o globales no abundan, en detalles técnicos sino que toman en forma amplia el problema de contaminación o molestia, solo algunas establecen niveles máximos y procedimientos de medición. Aparte del artículo 41 de la Constitución Nacional encontramos el Artículo 2618 del Código Civil de la República Argentina, el cual establece que "las molestias que ocasionen el humo, calor, olores, luminosidad, ruidos, vibraciones o daños similares por el ejercicio de daños en inmuebles vecinos no deben exceder la normal tolerancia teniendo en cuenta las condiciones del lugar y aunque mediare autorización administrativa para aquéllas". Si bien no es aplicable directamente al estudio es concebible a los efectos producto del ruido.

En la Ciudad de Buenos Aires encontramos la Ordenanza 39.025/83 denominada Código de Prevención de la Contaminación Ambiental, que en la Sección 5 se refiere específicamente a ruido y vibraciones. El ruido se considera según sean producidos por fuentes fijas o móviles; y aunque no se estipulan sanciones, se delimitan responsabilidades individuales, no colectivas, y por eso solo establece niveles máximos para aquellos ruidos que sean fácilmente atribuibles a una fuente determinada. Para fuentes fijas se estipulan valores máximos en el lugar receptor, mientras que para fuentes móviles se estipulan valores máximos para los ruidos emitidos por vehículos individuales en condiciones de ensayo controladas (Normas IRAM-AITA 9C y 9C1).

Otro estudio:

Existe constancia de otro trabajo de similares características publicado el día trece del mes de septiembre de 2000 por la Técnica Gladys Leiva. El motivo del mismo fue presentar constancia ante el Sr. Juez, en Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Juan Vicente Cataldo, por el Defensor del Pueblo Adjunto de la Ciudad de Buenos Aires, el estudio y los valores registrados. Por lo cual se realizó un estudio de control experimental de nivel de ruidos producido en el servicio de subterráneo de la línea C. A continuación se detalla parcialmente el trabajo realizado.

Las mediciones fueron realizadas utilizando un equipo Q 400 Noise Logging Dosimeter; número de serie AD4010005, cuyo rengo de medición es de 40 a 140 dB.

Tras 20 sondeos en el tramo Retiro-Constitución, entre las 9:51 horas y las 16:33 horas de lo que se deduce que el tiempo total de medición fue de 3:50 horas, con un tiempo total de pausa de 1:08 horas.

Los resultados consideraron como "evento" el número de orden de la muestra y "tiempo" el recorrido de la línea Constitución-Retiro y Retiro-Constitución. Peak Level: pico máximo medido en cada evento. Max Level: nivel sonoro máximo medido en cada evento. Min Level: nivel sonoro mínimo medido en cada evento. Leq: promedio del evento respectivo.

Se registraron: niveles máximos que llegan a un valor de 104,6 dB; nivel medio en las mediciones es de 88,95 dB y el pico máximo registrado llegó a 123 dB.

En el mes de febrero de 2000 ya se había iniciado la causa, luego se presentan los resultados antedichos, así, los vecinos afectados a un nivel elevado de ruido generado por el subterráneo, no han recibido respuesta por las autoridades correspondientes. Como consecuencia de dicho estudio se plantea la necesidad de tener un registro del nivel de ruido en forma constante.

Aspectos a considerar en cuanto al ruido son las deficientes características acústicas del ambiente, si bien el ruido de fondo, o sea, el producido por otros vehículos y propios del ambiente sin el tren son poco apreciables, la absorción es escasa, la reflexión por el contrario es importante, ya que los materiales con que fue realizada la construcción del túnel no presentan las características para disminuir los niveles de ruido.

Análisis de resultados:

Lo que es necesario puntualizar son los picos que se presentan a lo largo del recorrido, principalmente en el tramo que va desde la Estación Diagonal Norte a la Estación Lavalle, es el segmento donde se produce una curva importante en el recorrido que se manifiesta en cualquier sentido. En sentido Retiro-Constitución el segmento antedicho tiene un promedio de 94,3 dB, en el sentido contrario el promedio disminuye levemente pero la medición sigue siendo elevada, el promedio es de 92,65 dB.

La frecuencia relativa más alta se registra en el rango de los 85 a los 110 dB. Sobre un total de 365 muestras tomadas en el recorrido Constitución-Retiro 191 correspondieron al rango más alto de dB. Y para el tramo Retiro-Constitución el total de muestras tomadas fue de 450 de las cuales 243 son del mismo rango anterior. En la figura 2 se puede apreciar en forma clara la proporción que corresponde a cada rango establecido.

El monóxido de carbono presenta valores aceptables según los índices recomendados, la estación que presenta claramente mayor concentración es la de Diagonal Norte, la incidencia podría deberse a distintos motivos. En el cuadro que se aprecia el corte transversal de la estación muestra, en comparación con las otras estaciones, que tiene una sección libre de 55,1 m2 lo cual indica que su dimensión es mediana. Pero es de considerar que en superficie es la zona más transitada por automotores y a su vez es una de las estaciones que se encuentran a mayor profundidad de la superficie (14,4 mts).

Conclusión:

Si bien las condiciones en las concentraciones de monóxido de carbono según la metodología utilizada son aceptables la calidad del aire debería ser monitoreada constantemente dada la importancia que este medio de transporte representa en la sociedad. El mismo, es frecuentado por miles de personas en forma diaria y ante un accidente químico o incendio que pueda producirse en alguna estación, cuentan con pocas bocas de ventilación artificial que disperse un foco puntual de contaminación

Los datos registrados con respecto al ruido demuestran que el trabajador está sometido a una mayor exposición que la permitida por la legislación. Se denota a su vez una falta de control e interés por parte de la empresa responsable, así como también, una falta de control por parte del estado aplicando las leyes vigentes. Los empleados y trabajadores independientes que no forman parte de Metrovías reciben una exposición mayor, por lo que es indispensable que reciban la protección adecuada y capacitación para hacer efectivo su uso. Este es el principal punto para evitar la pérdida de audición causada por la exposición prolongada. Hay que destacar la falta de alguna metodología capaz de detectar de manera eficaz y prematura la hipoacusia inducida por el trabajo. Importante es difundir la valoración de la audición, la concientización de la agresión que produce el ruido. Sería aconsejable que el público que utiliza el servicio sea advertido a los niveles que será sometido.

Sería conveniente no solo tomar medidas para reducir o mitigar el problema en el personal de trabajo sino sumar medidas importantes como serían: controlar el ruido en su origen o vías de propagación, comenzando por los lugares en donde se presentan las mayores molestias, realizar cambios en los segmentos de los carriles, que presenten el mayor desgaste en las cabezas de los mismos para lo cual se debe efectuar un estudio más detallado. Llegado el punto en que no sea posible silenciar las maquinas se deber continuar con el tratamiento en las vías de propagación; culminando con las obras de utilización de paneles fonoabsorbentes estudiando y analizando la posibilidad de incorporar nuevamente el balasto, ya que, amortigua los carriles, disminuyendo las vibraciones y el ruido.

Modernización de los vagones, ya que gran parte del total de las formaciones de subte supera los veinte años de antigüedad, lo cual produce no solo elevado ruido en el contacto con las vías sino también en la estructura integra del vagón. Las nuevas formaciones incorporadas de origen japonés (denominadas "Nagoya") producen menos ruido de "chirrido" por una mejor adaptación a los perfiles de los rieles.

Generar la conciencia necesaria en cada uno de los pasajeros afectados y los trabajadores expuestos es un buen punto de partida, a partir de entonces pueden hacerse valer los derechos en forma múltiple hasta que se concreten las mejoras y se haga un control periódico de la situación.

Una cuestión importante es que más allá de las mediciones efectuadas es necesario realizar una evaluación del nivel sonoro en forma cotidiana y que la misma sea de conocimiento público a parte de conocer detalladamente la magnitud del problema, el usuario podrá decidir el uso o no del transporte.

Las mediciones hechas en este estudio brindan una información inicial acerca del riesgo auditivo del personal de trabajo y de la exposición que va a sufrir el pasajero.

A partir de nuevas mediciones que sigan demostrando valores excedidos, se obligará al personal al uso de protectores auditivos que deben cumplir junto con una serie de requerimientos básicos como: la atenuación sonora, deben ser confortables, de fácil colocación, deben ser higiénicos, no deben ser tóxicos, tienen que tener cierta durabilidad, un bajo costo inicial y un fácil mantenimiento. Pero no solamente se debe entregar el mismo, sino también, capacitar y educar al trabajador sobre los motivos básicos de su uso y su mantenimiento. Tal actividad pasa a formar parte de un programa que debe ser ejecutado en forma sistemática, cumpliendo cada uno de los objetivos determinados. A su vez, la ley determina cuando deben realizarse los exámenes auditivos; al ingreso, al mes de ingreso, a los seis meses y luego en forma anual. No obstante, la empresa puede establecer su propio seguimiento de estudio auditivo del trabajador en tanto cumpla con la ley, pudiendo considerar las características de cada individuo, su edad u otra particularidad. Otra cuestión importante es respetar el tiempo mínimo de descanso de 16 horas después de haber finalizado la exposición al ruido.

Es de considerable importancia conocer el coeficiente de absorción que tiene la superficie del túnel y la estación. Una vez hechas las mediciones se puede determinar la utilización de otros medios absorbentes. Pudiendo ser materiales porosos o fibrosos, que actúan degradando la energía sonora por roce contra sus fibras o poros. Otro tipo de material de posible uso pueden ser membranas resonantes, que consisten en un panel liviano y flexible cuya función es hacer de obstáculo entre el punto de generación del ruido y el material que refleja la onda, pero el buen funcionamiento se produce sólo en un rango de frecuencias. Un proyecto presentado por el Lic. Juan C. Giménez de Paz propone la utilización de lana de vidrio con protección mecánica y chapa multiperforada cuyas características permitan ajustarlas a las curvas del ámbito y actividad del lugar.

Se pueden considerar estrategias de trabajo en la que se permita o se le de prioridad a trabajadores que presenten dificultades auditivas, de esta manera mejora someramente su desempeño, ya que la recuperación a medida que el tiempo avanza se hace más lenta y dificultosa. Los trabajadores que no estén en condiciones de llevar a cabo su desempeño en el tren deben ser capacitados para que puedan realizar otra actividad en la empresa.

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Anexos:

Ignacio Vega

UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SALTA SUBSEDE GENDARMERÍA NACIONAL

CARRERA: LICENCIATURA EN CIENCIAS DEL AMBIENTE

TESIS DE GRADUACIÓN

Año 2007