Edad Antigua: filosofía griega
A. PERIODO COSMOLÓGICO
a) ESCUELA JÓNICA
Con los griegos aparece la idea de naturaleza (physis) a la que se puede atribuir 2 significados:
El conjunto de todas las cosas.
La esencia de las cosas.
Prácticamente todos los filósofos presocráticos coinciden en distinguir en la naturaleza las siguientes ideas:
Es un kosmos, un orden en oposición al caos.
Es dinámica, cambiante, está en continuo movimiento
Presenta unos movimientos intrínsecos, una animación y leyes propias.
La primera escuela presocrática que encontramos es la de los milesios, sobre el s. VI I a. C.; a ellos se debe las primeras identificaciones del arché. Distinguimos:
Tales de Mileto. Sostiene que el arché es el agua, que a través de distintos procesos de condensación y rarificación produce la multiplicidad.
Anaxímenes de Mileto. Identifica el arché con el aire.
Anaximandro de Mileto. Probablemente el menos convencido del carácter racional del conocimiento, identifica el arché con algo indeterminado, al que denomina Apeiron, algo que no podemos entender o conocer.
Entre los siglos VI Va. C. nos encontramos con la figura de Heráclito de Éfeso. Parte del dinamismo y movimiento del Universo, movimiento que, sin embargo, según él, no nos lleva al caos, si no que está sometido a un orden, armonía o ley: la dialéctica. Esta es consecuencia del equilibrio que se produce entre la lucha de contrarios. La dialéctica es pues, según Heráclito, el arché explicativo del Universo, que representó mediante el fuego.
b) ESCUELA PITAGÓRICA
Cronológicamente posterior, s. VI a. C., es la escuela de Pitágoras. En un principio observaron que la realidad tiene un comportamiento matemático: se pueden medir fenómenos, se observan proporciones, etc. Llegan a la conclusión de que el orden del Universo es matemático; y como todo lo matemático puede reducirse a números, llegaron a la conclusión de que el arché de las cosas son los números. Según los pitagóricos los números aparecen en parejas, por lo que afirman que la naturaleza es algo dualista: noche día, macho hembra,… Todo se organiza por parejas, de la que destacan par impar.
c) ESCUELA ELEÁTICA
Parménides de Alea, coetáneo de Heráclito, sostiene, sin embargo, tesis contrarias a las de este. Partiendo de unas afirmaciones a primera vista evidente:
Lo que es, existe
Lo que no es, no existe,
Llega sin embargo a unas conclusiones bastante peculiares:
El movimiento no existe, puesto que es el cambio de una cosa que es a otra que no es, o viceversa.
La diversidad no existe, porque si existiera más de un ser, uno no sería el otro y el otro no sería el primero.
El arché será por lo tanto un ser inmóvil y único; es pues, el único filósofo griego que niega el movimiento.
Sin embargo, hay que explicar un movimiento que parece evidente. Para ello, Parménides dice que existen dos vías de conocimiento: l a vía de los sentidos o la opinión (Doxa) y la vía de la razón o la verdad (Al etheida). Los sentidos nos engañan hasta el punto que nos parece que existe el cambio. Sin embargo, la razón nos puede demostrar que el movimiento es algo imposible. De la unidad no puedes urgir la pluralidad, porque supondría el paso del ser al no ser. A partir de Parménides los filósofos adoptan el pluralismo, es decir, admiten una pluralidad de realidades que existen desde siempre y que por lo tanto son eternas.
d) ESCUELA PLURALISTA
El primer pluralista fue Anaxágoras (s. Va. C.), según el cual la realidad está formada por unas partículas que denominó homeomerías, que traducido literalmente significa todo está en todo y participa de todo.
Para explicar el cambio de estas partículas, el movimiento, nos habla de un nous o entendimiento universal: una realidad espiritual, divina, que imprime el movimiento a estas partículas, provocando su mezcla y la creación de sucesivos y eternos mundos. Empédocles plante a la existencia de cuatro elementos: agua, tierra, fuego y aire, sobre la base de la mezcla de estos cuatro elementos nacen dos principios: el amor (fuerza que une) y el odio (fuerza que separa).
Página siguiente |